Exhibiendo a Barbara 2.docx
B: Métemelo aquí mismo, no aguanto más, me traes mojada desde que me hiciste cambiarme, me hiciste mojar mientras me exhibes a las demás personas, me haces mojar tocándome y dejándome sentirte en mi culo como te siento ahora.
R: Lo hare, solo que no ahora, aun no estas como quiero tenerte.
2da Parte
Tenía muchas ganas de cogérmela allí mismo, sin embargo, me excitaba seguir en el juego, juego que sin saber ella ya había aceptado y estaba participando sin poner complicaciones.
Cuando los ojos por fin se adaptaron a aquella oscuridad todo fue un poco más claro, frente a nosotros había una pareja teniendo sexo, el hombre estaba sentado mientras que la mujer estaba sobre él, pero viendo fijamente como recorría el cuerpo de Barbara de arriba abajo y dejaba cada vez más descubierta su piel.
R: Tenemos público. Me parece que estas calentando a alguien más aparte de mí.
B: Seguramente cualquiera de los hombres que quieres que me vea.
R: Es una mujer.
En ese momento Barbara abrió los ojos, me vio y sonrió sorprendida, cuando pudo ver vio a la mujer cabalgando sobre el hombre que estaba en el mueble, y sonrieron juntas.
B: Quizás eres tú la que la está calentando.
R: Veamos, pero no dejes de mirarla.
Subí más su vestido, su sexo quedo descubierto, metí primero un dedo que la hizo gemir, besaba su cuello y la agarraba con fuerza por las caderas para pegarla más a mí, sentía su culo muy pegado a mi mientras se movía de un lado a otro, a veces cerraba los ojos
R: No cierres los ojos, sigue viéndola.
B: Me cuesta mantener los ojos abiertos.
Metí un segundo dedo y al mismo tiempo saqué uno de sus senos del vestido.
B: Cógeme!!!
R: Disfruta
En ese momento pude ver como la mujer la veía y se relamía los labios, le excitaba ver a Barbara le pregunté.
R: Te excita ver como se la están cogiendo mientras te toco?
B: Si y quiero que me cojas tu también.
R: Sonríele, mírala pícaramente, podrías lanzarle un beso.
La cara de Barbara fue diferente, al principio lo dudo, pero sabía que esa noche todo estaba permitido, así fue que lo hizo y en ese momento la mujer le hizo el gesto de que se acercara con sus dedos, saqué mis dedos de Barbara y los metí en su boca.
R: Muéstrale lo rico que sabes.
Barbara sin dudarlo dio unos pasos y se acercó a la mujer, se apoyó de las piernas del hombre que se estaba cogiendo aquella mujer y se inclinó hacia adelante para darse un beso, justo detrás de ella iba yo, viendo cómo se besaban y mordiendo la espalda de Barbara, deje de morderla me puse detrás de ella y levante todo su vestido, de un solo golpe se lo metí hasta el fondo, Barbara no lo esperaba, su gemido se escuchó en todo el lugar, la mujer me vio y sonrió mientras agarraba a Barbara por la cara y se hacia el beso cada vez más intenso, yo la tomaba por las caderas se lo metía y sacaba con fuerza, sus nalgas pegaban en mis piernas y se mezclaba el sonido con los gemidos de aquella habitación, la sujete de los brazos quedando completamente en el aire mientras la mujer la sujetaba del pecho sin dejar de verla y besarla, no paso mucho rato hasta que sentí los gritos de Barbara y como su cuca me apretaba, señal de que había tenido un orgasmo, sus piernas comenzaron a temblar y buscó sentarse en el mueble, a un lado de aquella mujer.
B: No puedo mantenerme de pie, pero ahora te toca a ti, acércate y dame tu leche.
R: No, aun no, todavía quedan muchas cosas por hacer.
Salimos de aquel lugar, me dijo que nunca había besado a una mujer pero que no le importó que estaba muy excitada y ni siquiera lo pensó, pasamos nuevamente a la barra del local donde tomamos unos tragos más hasta cerca de la media noche.
R: ¡Vámonos!
B: ¿Y a qué lugar me vas a llevar ahora?
R: ¿Tienes miedo de donde te pueda llevar?
B: Después de lo que ha pasado esta noche no.
R: Entonces vámonos que quedan muchas cosas por hacer.
Salimos de aquel local y nos subimos al auto, el Hotel que había reservado quedaba retirado por lo que mientras manejaba estuvimos hablando de lo que había sucedido, me confesó que nunca había hecho absolutamente nada con una mujer, pero que en el local incluso se llegó a imaginar completamente desnuda pegaba a aquella mujer.
R: Eso debiste haberlo dicho antes, quizás se imaginaba lo mismo y hubiese querido venir con nosotros.
B: ¡Tu feliz de tener un trio con 2 mujeres!
R: Y si estaban tan calientes como estaban ustedes mucho más!!, por cierto, vamos a un lugar un poco retirado, busca en la bolsa que está en el asiento de atrás que hay algo para ti.
B: Mmmm pero esta noche está llena de sorpresas.
Lo decía mientras sacaba un plug anal.
B: ¿Esto es lo que voy a usar cuando lleguemos al lugar que me llevas?
R: No, eso es lo que vas a usar ahorita.
Encendí la luz interna del auto para que se pudiese ver hacia adentro en medio de la autopista y con mi mano libre saque uno de sus pechos y comencé a pellizcar y jalar un poco sus pezones, metía dos dedos en su boca y ella los chupaba como si estuviese dándome una mamada, metí mi mano bajo su vestido y comencé a masturbarla, mojaba mis dedos con mi boca y tocaba su clítoris y su culo, aunque ya para ese momento ella estaba muy mojada.
R: Quiero que te pongas ahora ese plug anal ahora.
Barbara se subió un poco el vestido y se lo iba a meter hasta que la detuve.
R: La luz esta encendida para que todo el que pase a nuestro lado pueda ver ese rico culo que tienes, así que, coloca tus brazos en el espaldar del asiento e inclina tu culo para que el que pase pueda verte.
Barbara hizo lo que le pedí, mientras lo iba metiendo algunos autos pasaron a nuestro lado y la vieron metiéndose poco a poco el plug, el saber que estaba siendo observada la excitaba aún más, al igual que a mí. Cuando terminó de metérselo se sentó nuevamente en el asiento y no decía nada, solo me veía, como pude logré verla y extendí mi mano para verificar que estuviese todo adentro, ella apenas sintió mi mano comenzó a mover sus caderas como pidiéndome más.
R: ¡Muy bien! Así me gusta, que seas mi puta obediente.
Pasó un poco rato más hasta que llegamos a la entrada del hotel, era uno de estos hoteles donde entras con el auto y lo estacionas justo frente a la puerta de la habitación.
Luego de estacionar el auto, la vi y la agarre por la parte de atrás de la cabeza, haciendo un poco de fuerza y metiendo mis dedos en su cabello.
R: Ya llegamos, aquí es probable que ya no te vea nadie, aunque, quizás alguna cámara por seguridad, realmente no lo sé, pero si hay alguna deberías darle una alegría a esa persona que la está viendo, por eso cuando bajes del auto vas a hacerlo desnuda, quítate el vestido acá adentro, de todas formas, no lo vas a necesitar más.
Barbara hizo lo que le dije, se quitó el vestido de la manera más sexy que pudo dentro del auto, pero antes de bajar me mostró el vestido.
B: ¿Ves eso brillante que tiene el vestido por adentro?, es lo excitada que me tienes.
R: Y eso que esto es solo el comienzo.
Muchas gracias las visitas y el tiempo de leer mis relatos, quizás son un poco largos, pero me gusta ser bastante detallista y especifico en las cosas como sucedieron, agradecería sus comentarios y sugerencias.
La tercera parte será la última!
Gracias!
B: Métemelo aquí mismo, no aguanto más, me traes mojada desde que me hiciste cambiarme, me hiciste mojar mientras me exhibes a las demás personas, me haces mojar tocándome y dejándome sentirte en mi culo como te siento ahora.
R: Lo hare, solo que no ahora, aun no estas como quiero tenerte.
2da Parte
Tenía muchas ganas de cogérmela allí mismo, sin embargo, me excitaba seguir en el juego, juego que sin saber ella ya había aceptado y estaba participando sin poner complicaciones.
Cuando los ojos por fin se adaptaron a aquella oscuridad todo fue un poco más claro, frente a nosotros había una pareja teniendo sexo, el hombre estaba sentado mientras que la mujer estaba sobre él, pero viendo fijamente como recorría el cuerpo de Barbara de arriba abajo y dejaba cada vez más descubierta su piel.
R: Tenemos público. Me parece que estas calentando a alguien más aparte de mí.
B: Seguramente cualquiera de los hombres que quieres que me vea.
R: Es una mujer.
En ese momento Barbara abrió los ojos, me vio y sonrió sorprendida, cuando pudo ver vio a la mujer cabalgando sobre el hombre que estaba en el mueble, y sonrieron juntas.
B: Quizás eres tú la que la está calentando.
R: Veamos, pero no dejes de mirarla.
Subí más su vestido, su sexo quedo descubierto, metí primero un dedo que la hizo gemir, besaba su cuello y la agarraba con fuerza por las caderas para pegarla más a mí, sentía su culo muy pegado a mi mientras se movía de un lado a otro, a veces cerraba los ojos
R: No cierres los ojos, sigue viéndola.
B: Me cuesta mantener los ojos abiertos.
Metí un segundo dedo y al mismo tiempo saqué uno de sus senos del vestido.
B: Cógeme!!!
R: Disfruta
En ese momento pude ver como la mujer la veía y se relamía los labios, le excitaba ver a Barbara le pregunté.
R: Te excita ver como se la están cogiendo mientras te toco?
B: Si y quiero que me cojas tu también.
R: Sonríele, mírala pícaramente, podrías lanzarle un beso.
La cara de Barbara fue diferente, al principio lo dudo, pero sabía que esa noche todo estaba permitido, así fue que lo hizo y en ese momento la mujer le hizo el gesto de que se acercara con sus dedos, saqué mis dedos de Barbara y los metí en su boca.
R: Muéstrale lo rico que sabes.
Barbara sin dudarlo dio unos pasos y se acercó a la mujer, se apoyó de las piernas del hombre que se estaba cogiendo aquella mujer y se inclinó hacia adelante para darse un beso, justo detrás de ella iba yo, viendo cómo se besaban y mordiendo la espalda de Barbara, deje de morderla me puse detrás de ella y levante todo su vestido, de un solo golpe se lo metí hasta el fondo, Barbara no lo esperaba, su gemido se escuchó en todo el lugar, la mujer me vio y sonrió mientras agarraba a Barbara por la cara y se hacia el beso cada vez más intenso, yo la tomaba por las caderas se lo metía y sacaba con fuerza, sus nalgas pegaban en mis piernas y se mezclaba el sonido con los gemidos de aquella habitación, la sujete de los brazos quedando completamente en el aire mientras la mujer la sujetaba del pecho sin dejar de verla y besarla, no paso mucho rato hasta que sentí los gritos de Barbara y como su cuca me apretaba, señal de que había tenido un orgasmo, sus piernas comenzaron a temblar y buscó sentarse en el mueble, a un lado de aquella mujer.
B: No puedo mantenerme de pie, pero ahora te toca a ti, acércate y dame tu leche.
R: No, aun no, todavía quedan muchas cosas por hacer.
Salimos de aquel lugar, me dijo que nunca había besado a una mujer pero que no le importó que estaba muy excitada y ni siquiera lo pensó, pasamos nuevamente a la barra del local donde tomamos unos tragos más hasta cerca de la media noche.
R: ¡Vámonos!
B: ¿Y a qué lugar me vas a llevar ahora?
R: ¿Tienes miedo de donde te pueda llevar?
B: Después de lo que ha pasado esta noche no.
R: Entonces vámonos que quedan muchas cosas por hacer.
Salimos de aquel local y nos subimos al auto, el Hotel que había reservado quedaba retirado por lo que mientras manejaba estuvimos hablando de lo que había sucedido, me confesó que nunca había hecho absolutamente nada con una mujer, pero que en el local incluso se llegó a imaginar completamente desnuda pegaba a aquella mujer.
R: Eso debiste haberlo dicho antes, quizás se imaginaba lo mismo y hubiese querido venir con nosotros.
B: ¡Tu feliz de tener un trio con 2 mujeres!
R: Y si estaban tan calientes como estaban ustedes mucho más!!, por cierto, vamos a un lugar un poco retirado, busca en la bolsa que está en el asiento de atrás que hay algo para ti.
B: Mmmm pero esta noche está llena de sorpresas.
Lo decía mientras sacaba un plug anal.
B: ¿Esto es lo que voy a usar cuando lleguemos al lugar que me llevas?
R: No, eso es lo que vas a usar ahorita.
Encendí la luz interna del auto para que se pudiese ver hacia adentro en medio de la autopista y con mi mano libre saque uno de sus pechos y comencé a pellizcar y jalar un poco sus pezones, metía dos dedos en su boca y ella los chupaba como si estuviese dándome una mamada, metí mi mano bajo su vestido y comencé a masturbarla, mojaba mis dedos con mi boca y tocaba su clítoris y su culo, aunque ya para ese momento ella estaba muy mojada.
R: Quiero que te pongas ahora ese plug anal ahora.
Barbara se subió un poco el vestido y se lo iba a meter hasta que la detuve.
R: La luz esta encendida para que todo el que pase a nuestro lado pueda ver ese rico culo que tienes, así que, coloca tus brazos en el espaldar del asiento e inclina tu culo para que el que pase pueda verte.
Barbara hizo lo que le pedí, mientras lo iba metiendo algunos autos pasaron a nuestro lado y la vieron metiéndose poco a poco el plug, el saber que estaba siendo observada la excitaba aún más, al igual que a mí. Cuando terminó de metérselo se sentó nuevamente en el asiento y no decía nada, solo me veía, como pude logré verla y extendí mi mano para verificar que estuviese todo adentro, ella apenas sintió mi mano comenzó a mover sus caderas como pidiéndome más.
R: ¡Muy bien! Así me gusta, que seas mi puta obediente.
Pasó un poco rato más hasta que llegamos a la entrada del hotel, era uno de estos hoteles donde entras con el auto y lo estacionas justo frente a la puerta de la habitación.
Luego de estacionar el auto, la vi y la agarre por la parte de atrás de la cabeza, haciendo un poco de fuerza y metiendo mis dedos en su cabello.
R: Ya llegamos, aquí es probable que ya no te vea nadie, aunque, quizás alguna cámara por seguridad, realmente no lo sé, pero si hay alguna deberías darle una alegría a esa persona que la está viendo, por eso cuando bajes del auto vas a hacerlo desnuda, quítate el vestido acá adentro, de todas formas, no lo vas a necesitar más.
Barbara hizo lo que le dije, se quitó el vestido de la manera más sexy que pudo dentro del auto, pero antes de bajar me mostró el vestido.
B: ¿Ves eso brillante que tiene el vestido por adentro?, es lo excitada que me tienes.
R: Y eso que esto es solo el comienzo.
Muchas gracias las visitas y el tiempo de leer mis relatos, quizás son un poco largos, pero me gusta ser bastante detallista y especifico en las cosas como sucedieron, agradecería sus comentarios y sugerencias.
La tercera parte será la última!
Gracias!
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