Mi esposa, chica trans y yo
Un día Debora llegó eufórica, en el último tiempo, había empezado a cogerme con un cinturón de strap, no solía aguantar mucho, acababa enseguida, ella me llamaba colita sensible. Ese día me dijo que en la carrera de administración donde daba clases, había conocido a una chica trans que era realmente deliciosa, hacía dos meses que se conocían, no me había dicho nada porque quería estar segura. Ella lo había hecho con ella, le había hecho bien el orto, y no sabes las cantidades de leche que me echo, encima sigue recaliente después que acaba, tiene 22 añitos nada más, una cara de ángel, ojos celestes, teñida de rubia, una delicia, te va a encantar. Me contó que se puso prótesis en tetas y culos, pero que no usa hormonas femeninas, le encanta dar por culo y tiene miedo de perder algo de su potencia, es una fiera, no sabes como acaba. Me dijo que a partir de tener pechos y el culo tan lindo, ha podido acceder a montones de hombres que no le hubieran dado bola, en una relación, pero la ven así y se vuelven locos. Obviamente que le conté de nuestros juegos, es la candidata ideal, mañana sábado vamos a ir a cenar, vamos a depilarte piernas y cola... tenes que estar linda...Yo estaba nervioso no sabía que decir, fuimos a depilarnos, sentía mi piel resuave después de depilarme, en casa nos bañamos juntos, Debora me eligió una tanga re chica, se me metía bien en el culo, nunca había salido a la calle con tanga, además compramos un pantalón especial para la ocasión, era de mujer claro y se me metía dentro del culo, estaba super excitado, cuando la vi en el restaurante no lo podía creer, parecía una chica, de rasgos finos, ojos claros, la salude con un beso y me regalo una hermosa sonrisa, Debora también le dio un beso pero se dieron un pico. Enseguida Debora me dijo,
-Anda hasta el baño, move bien el culito... creo que a nuestra amiga le va a encantar...
Aunque me costaba creerlo realmente camine más sensualmente, casi femeninamente, cuando volví las dos estaban sonrientes. Debora habló
-A nuestra amiga le encanta lo que vio... dice que la cena se le va a hacer larguísima... ya quiere comer el postre...
-Pobre se puso colorado... -dijo Celeste, tenía una voz bastante sensual, no sabía si la exageraba o era natural.- la verdad que me encantas... desde que lo deje a mi novio que busco alguien así... como vos... casado... sin problemas... con lugar para hacerlo... y con ese alma de perrita puta...
-No le hables así que se calienta enseguida... yo le digo colita sensible... enseguida acaba... cuando se le estimula la cola... o le hablo de lo putita que es...
Cenamos, tomamos vino, la charla fue fantástica, se notaba alguien que a pesar de sólo tener 22 años, era muy confiado en si mismo y seguro de lo que quería. En el auto yo fui manejando, ellas iban apretando atrás. Cuando entramos en casa, Debora me sacó el pantalón, me moría de vergüenza y calentura. me hicieron desfilar un rato, ellas estaban sentadas con un vaso de ron con cola en las manos. Celeste habló, con voz sensual, profunda
-Basta de juegos... arrodillate con el cuerpo en el sillón... mostranos bien ese culito precioso que tenes...
Me acomode en el sillón como celeste me dijo, Debora miraba divertida
-Que culito divino tenes perrita... movelo para mi... calentame... dale perrita...
Me moría de vergüenza y a la vez movía la cola sensualmente, Celeste seguía con el vestido puesto, saco sus tetas sobre el escote, y me las dio a chupar, nos besamos profundamente mientras nos acariciábamos, me hizo poner de pie nos besamos, los dos nos tocábamos el culo, ella tomo mi mano derecha y la llevo a su pija, estaba redura y era regrande, la había soltado, pensaba como hacía para tenerla así y que no le molestara, era una cosa realmente impresionante, con esa voz de hembrita me hablaba al oido.
-Acariciala bien... en un ratito la vas a sentir toda adentro... y te va a encantar perrita... Debora me contó que te viene cogiendo con el strap hace rato... y que esta muy feliz de haberme encontrado... no sabes lo que me gustas... tu culo me calienta a full... -decía mientras lo apretaba y jugaba con sus dedos en la puerta de mi culito- Hoy no me la vas a chupar... no me parece bien llenarte la boquita de leche el primer día... seria un poco fuerte para vos... pero la colita te va a quedar rebosante... -se acercó a mi oído- te voy a hablar así... para que no te de vergüenza sabes... es tu primera vez... ponete arrodilladita en el sillón perrita... te voy a recoger preciosa... -sentía el corazón latir a dos mil por segundo, Debora le dijo que me pusiera un forro, que le iba a manchar todo el sillón, seguro no iba a aguantar mucho. sino aguantaba con el strap, con semejante verga no iba a durar nada.
me acomode, ella se acomodo encima mio, me acariciaba suavemente toda la espalda, la cola, me hablaba al oído,
-Me volves loquita... no sabes lo que me cuesta no apurarme voy a tener que pajearme... sino, no voy a durar nada... y ese va a ser el mejor lubricante... eh perrita... -por respuesta solo gemía y me sentía excitadísimo y avergonzado.
La sentí arrodillarse detrás de mi, me corrió la tanga a un lado y sentí su lengua chupando mi culito, también jugaba con sus dedos, Debora se sentó a mi lado, me daba vergüenza hablar, pero le dije
-No aguanto... voy a llegar...
Debora sonrió y le dijo
-Te dije que tiene la colita sensible... no le gustan los muchachos... pero a nosotras no nos niega nada...
Celeste siguió jugando con sus dedos y lengua, acabe gimiendo.
-Si perrita... que delicia que sos... creo que me voy a olvidar enseguida de mi novio anterior... no creí que iba a encontrar una perrita tan caliente tan rápido...
Movía mis caderas mientras acababa, Celeste se puso de pie, le dijo a Debora que podíamos tomar algo para descansar un rato, ella se sentó, Debora fue a buscar las cervezas, ella seguía con los pechos afuera, se levanto el vestido y sacó su pija sobre el tanga, era una herramienta regrandre, a diferencia de la mía, empezaba con un cabeza chica y se iba haciendo cada vez mas gruesa, yo alternaba entre mirar esa cara de ángel, con esos ojos celestes, teñida de rubia, esas gomazas y semejante chipote.
Cuando vino Debora y lo vio
-Me puedo comer eso un ratito...
-No amorcito... estoy muy caliente... le voy a acabar en la puerta del culito a la perrita y ahí se la voy a meter... le va a encantar...
-Que perversa que sos...
-Pero mira como le empieza a crecer a la perrita... se muere de ganas de probar... acomódate perrita... no puedo esperar mas...
Me acomode de nuevo en el sillón, Debora volvió a ponerme un forro... y me besó se arrodillo al lado mío y me besaba. Sentí que Celeste me bajaba la tanga dejándola entre mis muslos, se dio dos sacudidas y sentí algo tibio en la puerta de mi culo, estaba acabando, su pija entro bien dura, mientras sentía como largaba semen,
-Viste que linda sensación perrita... es lo bueno de ser jovencita... acabar y seguir bien dura... -se quedo con sus pechos apoyados sobre mi espalda, me acariciaba la cola su pija estaba toda adentro mio. Giro la cabeza y se besó con Debora,
-Gracias amiga... es un regalo del cielo... -se incorporo un poco y empezó a cogerme, yo trataba de no quejarme pero era imposible, me agarraba fuerte de la cintura y de a ratos me daba fuertes cachetazos en el culo que me sacaban un quejido.-
Hoy no vas a hablar porque te da vergüenza... otro día que te coja a solas.. vas a poder expresarte tranquila perrita... te da vergüenza delante de tu esposa... -yo escondí la cabeza contra el sofá.
-Pobre perrita... -dijo Debora- le da vergüenza... seguro que esta cerca de llegar de nuevo... eh cerda...? -me dio un fuerte cachetazo en el culo- te pregunte algo perrita...
-Si mi amor... estoy cerca...
-Llega si queres perrita... pero yo voy a seguir gozando tu culazo sabes... me encanta como me apretas la pija... se nota que te gusta eh...
Solo gemí, me agarro fuerte de los pelos, levantándome la cabeza, yo tenia la boca abierta.
-Tenes la boca abierta porque te gustaría tener otra verga en la boca... es típico de las perritas reprimidas como vos... llega putita dale... no te aguantes mas...
-Si... si... llego... aaaahhh... que delicia... -dije y movía el culo cogiéndome lo mas que podía con semejante verga. Celeste se acercó a mi boca y me besó metiéndome profundamente la lengua. Siguió dándome bien duro
-Este es mi culito... y te voy a dar toda la lechita perrita... no aguanto mas... que delicia de culo... -se quedo quieto- movete y mostrale a Debora como sabes conseguir lo que queres dale... -Debora sonreía caliente mordiéndose el labio inferior, yo movía el culo y trataba de apretarle la pija, me agarro de la cintura y me cogió bien duro.
-ay si!!!!... llego perrita si!!!!... tomala toda en la colita... mi lechita toda para vos... putita linda... - y se desparramo sobre mi espalda, su pija no perdía del todo la dureza la fue sacando igual de a poco,
-Empuja mi lechita para afuera dale... ,me salieron como peditos, mientras salia la leche, me moría de vergüenza, metí la cabeza abajo del almohadón...
-Cuanta leche que sale... eso que es la segunda corrida... le da vergüenza pobre cerdita... -dijo Debora- Cada vez que salga con un macho... que es día por medio casi... quiero que vengas a casa... asi se va soltando la putita...
-Si quiero que sea mi perrita... no me gusta andar con muchos a la vez... creo que encontré una putita que tiene mucho para dar... y cuando estemos solitos va a soltar la lengua también... eso me calienta mas todavía...
-Me muero por verlo... -Dijo Debora
-En poco tiempo va a estar re desinhibida... y mas delante tuyo... va a ser nuestra perrita para lo que queramos... -se besaron y Debora fue a comerle la pija, se la chupaba como ella solo sabe hacerlo, cuando Celeste estaba por llegar la agarro fuerte de la nuca.
-Traga todo puerca... que sos tan puta como tu perra... -Debora se pajeaba y acabo mientras tragaba la leche de Celeste. Descansamos, charlamos un rato, ellas se fueron a bañar juntas, Celeste me besó, me dijo.
-Debi me dio una llave de la casa... cuando ella no venga... voy a venir yo... espero que sea seguido... porque con mis 22 añitos... necesito mucho sexo... y mas con una putita como vos... -me beso metiéndome lengua, mi pija estaba morcillona.
El día siguiente cenamos con Debora, sin demasiados comentarios, no tuvimos relaciones, ella no quiso, quería que estuviera bien caliente. A la mañana en el desayuno me dijo
-Yo lo veo a Martín... y voy a ser su putita... como siempre... y voy a jugar sus juegos y sus caprichos... y vos vas a ser la perrita de Celeste... le pase tu celular... quiere que la esperes en la cocina... con una tanga puesta... un delantal y preparando la cena... ella va a traer el vino... te va a avisar cinco minutos antes de llegar porque quiere encontrarte cocinando... dice que la calientan las putas en la cocina...
Ni que decir que estaba al repalo, todo el día se me hizo larguísimo, ni pensaba en Debora, el giro de la situación me superaba, una pendeja trans de 22 años se estaba apoderando de mi voluntad a base de pura calentura.
Me puse a preparar la cena, de a ratos lograba bajar un poco mi erección, pero casi todo el tiempo estaba al repalo, cerca de las ocho y media sonó mi celular, msj de Celeste, estoy en cinco... te quiero en la cocina... Escuché la puerta que se abría, no me animé a mirar sentí su presencia en la puerta de la cocina
-No me vas a saludar...?
Me acerqué y nos besamos apasionadamente
-Te queda muy linda esa tanga... te hace bien perrita... la elegiste vos...
yo me di vuelta hacia la cocina y seguí cocinando, sin contestarle, miré de reojo, celeste se había sacado el vestido y la tanga, quedó con los zapatos de taco puestos y el sujetador y camino lentamente hacia mí.
Cuando estaba atrás mió, me agarró fuerte desde atras apoyandome su pija durisima en el culo y los pechos en la espalda, yo instintivamente tiré mi culo hacia atrás buscando el contacto y también mi pecho.
-Hoy no está tu esposa... tu cuerpo pide mi poronga a gritos... así que trata de no hacerte la sensible perrita... porque una sola pregunta que no me contestes... te vas a hacer la pajita sabes...
-Si... -y me quede dudando como llamarla.
-Si que...
-Si señora...
-No me gusta señora... tengo solo 22... y vos andas alrededor de los treinta... -tomó mi mano y la llevó a su miembro.- sentí lo dura que esta te gusta...
-Si...
-Si que...?
-Ama?
Se separó un poco y me dio un fuerte cachetazo en el culo.
-Muy bien perrita... anda para la cama... sacate el delantal... ponete un forro para no ensuciarle la cama a tu esposa... poné un toallón también... para cuando saques mi leche puta... que va a ser un montón... sabes putita...?
-Si ama...
-Se te va soltando la lengua... muy bien... me excito más cuando las putas hablan y piden lo que quieren... y me dicen lo que les gusta... tenes ganas de que te deje la colita bien llena... eh?
-Me muero de ganas ama... estuve todo el día caliente... esperando que venga...
-Me encanta putita...
-Pero estoy muy cerca de llegar...
-Yo también... igual que el otro día... te voy a acabar en la puertita de la colita y te la voy a meter acabando sabés...
-Ama si me sigue hablando voy a acabar de solo pensar en lo que me va a hacer...
Sonrió con esa cara angelical su pija daba saltos en el aire
-Anda a la cama... bajate la tanga entre los muslos y move la colita... ahora voy... pone una almohada abajo de tu pelvis...
-No aguanto ama...
Se tiró sobre mí, sentí un primero chorro en la puerta de mi culito y su pija entrando mientras latía y escupía leche, grité mi orgasmo.
-soy tu puta ama... llename bien la cola... que lindo que sigas con la pija durita... cogeme mucho por favor...
Me agarró de los pelos y me besó, yo aunque no lo podía creer no perdía mi erección.
-Querés cambiar el forrito...?
-Sigo duro ama...
-Vas a terminar siendo una perrita cualquiera... en cualquier momento vas a empezar a mirar los bultos de los muchachos...
-No me gustan los hombres...
-Pero esta verga que tenes en el culo te encanta eh...?
-Si ama soy tu puta...
Se acomodó para que me pusiera en cuatro patas, se quedó quieta
-Move el culito... coge un poquito vos... dale...
Movía el culo para los dos lados, me clavaba bien contra ella y la sacaba casi hasta la puerta para volver a clavarme.
-Tu culo me vuelve loco... y lo putita que sos... falta que te tomes mi leche todavía... pero tenemos tiempo... no me puedo resistir a llenarte el culo de nuevo... sabés...?
-Lo siento por su dureza ama...
-Te gusta...
-Usted me gusta...
-Que bueno... sabés que soy caprichosa no...?
-Me imagino...
-Agarrá el telefono y llamala a tu esposa...
-Está en la cocina...
Se salió de mí,
-Trata que no salga nada de lechita y andá a buscarlo...
Cuando volví, me hizo volver a acostarme como al principio, me había sacado la tanga.
-Ponete la tanga de nuevo...
La corrió a un costado y me penetró despacio, disfrutando de meterla lento y siguió con un rítmico mete y saca lento pausado, iba hasta fuera y volvía...
-Llamala a Debi... ponelo en altavoz... quiero escuchar...
No atendió, se salió de encima mio y fue a buscar su celular.
-Hola... -se escuchó la voz de Debora, ella se acomodó mientras me la metía.
-Podes hablar...
-Ahora sí... justo Martín me estaba haciendo la cola... y cuando vio que era mi marido que llamaba se calentó más y me llenó la colita de leche...
-Que bueno... tu marido la tiene llena y esta por recibir una descarga de nuevo... estás con Martín..?
-Si..
-Ponelo en altavoz así escuchan...
Me moría de verguenza, pero más caliente me sentía.
-Ahora te voy a llenar la colita de nuevo perrita... mientras te escuchan tu esposa y Martín... así que gemi con gusto...
-Si me encanta como me partís el culo... quiero que me llenes de lechita... mucha...
-Muy bien putita... y vos vas a llegar de nuevo...?
-Estoy cerquita...
-Avisame... quiero llenarte la colita cuando llegués...
-ay... siii!!!! llename el culo...!!!
-Si tomala toda perrita... move el culito dale... ni te acordaste de tu esposa eh puta... ves una verga y te volves loca...
-Si soy tu putita...
Contale a tu esposa y a Martín que sentís...
-Que la tenes dura todavía... y que me encanta como me coges... soy tu perrita...
-Que más...
-Que voy a hacer todo lo que vos me digas...
En ese momento me la fue sacando... seguía dura...
-Empuja mi lechita como el otro día...
-En solo un día la volviste re putita... -dijo Debora.
-Es re putita... te dije que esta reprimida nada más...
Sentí la leche salir, y un par de peditos salieron, los escuche reir a Debora y a Martín. Celeste cortó el celular, junto un poco de leche de la que salía y volvió a metermela
-Como me calienta que seas tan puta...
-Me duele un poco el culo ama... necesito descansar...
-Y que hago yo con esta dureza eh...?
-Te hago una pajita...
-No soy una pajera...
-Sino la querés en la cola te vas a tomar todo lo que te de... como hizo la puta de tu señora... que también va a ser mi puta... más que de ese Martín... Te gustaría que fuera mi puta...?
-Si ama... me encantaría...
-Y que me las re garche a las dos...?
-Si ama... me duele ama...
-Y entonces...
-Salga por favor... -sentí que se le ponía más duro cuando le pedía por favor.
-Me calienta más cuando las putitas piden algo y no están del todo convencidas...
-Te vas a tomar la leche...?
-No se ama... está toda sucia...
-Hoy por ser la primera vez... me puedo ir a lavar...
-Bueno ama... como usted diga...
-Vamos al baño... mejor que la laves vos...
Nos comimos las bocas un largo rato le chupe las tetas camino al baño, mi pija estaba morcillona, después de dos orgasmos no podía reaccionar. Le lavé la pija con mucho cuidado.
-Ponete en cuatro y chupala... acercame el culito que quiero jugar con el... -me metía los dedos y me excitaba.
-Más despacio... no tengo apuro en llegar... me gusta como la chupas... tragala un poco más... aguantala ahí... siiii... que rico... juga con tu lengua... alrededor del glande... siii... que rico...
Después con las dos manos me tomó la cabeza y empezo a cogerme la boca, estuvo un rato y cuando acababa me apretó fuerte desde la nuca.
-Tragá todo... no quiero que desperdicies ni una gota perra... -trague como pude, el sabor era amargo, pero al tragar directo no lo sentí demasiado.
-Muy bien perrita... -me ayudo a pararme y nos besamos. Después nos sentamos a cenar, así como estabamos era tarde.
-Como te sentís...
-Me duele un poco el culo...
-No me digas así que me caliento de nuevo... tratá de hablar de otras cosas... mirá que cuatro polvos suele ser mi media... día por medio... como te sentís entonces...
-Bien ama... muy bien...
-Ponete unos zapatos de tacón... y vení a servirme el vino... ponete alguna tanga de tu señora...
Los zapatos eran todos muy chicos, encontré unos que eran un poco más grandes, me puse una tanga de Debora y fui a la cocina. No lo podía creer pero mi pija estaba dura de nuevo. Caminé a la cocina, no quería que ella viera mi erección pero era imposible.
-Parece que vos también estas calentita...
-Un poco...
-Vení a servirme vino... y quedate parada al lado mio... -Me paré como toda una putita a su lado, tratando que mi culo se viera en su mejor forma.
-Si me querés calentar lo estás logrando...
No dije nada, no me había preguntado.
-Querés que te coja de nuevo...
-Me duele un poco la colita ama...
-La colita... y con voz de puta... -se puso de pie y me inclinó sobre la mesa, corrió la tanga a un costado y sentí otra vez esa dureza que me invadía. Mientras me cogía me pajeaba- me vas a dar la lechita que te quede perrita eh...
-Si ama toda para vos...
-Me duele la colita... alma de puta tenes... y vas a tirar tu leche al suelo y después vas a limpiar bien... putita...
-Si ama... tu puta...
Estuvo un largo rato cogiendome, de a ratos me daba duros cachetazos o me giraba la cabeza tomandome fuerte del pelo y me metía la lengua bien profundo.
-Estoy cerca ama...
Aceleró su cogida...
-Llega cuando quieras y avisame...
-llego ama... aaaaayyyy siiiiiiiii!!!!
Sentí como su pija explotaba de nuevo, me di cuenta por como me clavó pero no senti su descarga, los restos de mi leche cayeron al piso.
Ella se fue a duchar, se vistió y me dijo que era tarde que se tenía que ir
-Decile a Debora, que tuviste tres orgasmos..., seguro se va a poner un poco celosa..., mejor esa va a ser mi próxima putita...
Un día Debora llegó eufórica, en el último tiempo, había empezado a cogerme con un cinturón de strap, no solía aguantar mucho, acababa enseguida, ella me llamaba colita sensible. Ese día me dijo que en la carrera de administración donde daba clases, había conocido a una chica trans que era realmente deliciosa, hacía dos meses que se conocían, no me había dicho nada porque quería estar segura. Ella lo había hecho con ella, le había hecho bien el orto, y no sabes las cantidades de leche que me echo, encima sigue recaliente después que acaba, tiene 22 añitos nada más, una cara de ángel, ojos celestes, teñida de rubia, una delicia, te va a encantar. Me contó que se puso prótesis en tetas y culos, pero que no usa hormonas femeninas, le encanta dar por culo y tiene miedo de perder algo de su potencia, es una fiera, no sabes como acaba. Me dijo que a partir de tener pechos y el culo tan lindo, ha podido acceder a montones de hombres que no le hubieran dado bola, en una relación, pero la ven así y se vuelven locos. Obviamente que le conté de nuestros juegos, es la candidata ideal, mañana sábado vamos a ir a cenar, vamos a depilarte piernas y cola... tenes que estar linda...Yo estaba nervioso no sabía que decir, fuimos a depilarnos, sentía mi piel resuave después de depilarme, en casa nos bañamos juntos, Debora me eligió una tanga re chica, se me metía bien en el culo, nunca había salido a la calle con tanga, además compramos un pantalón especial para la ocasión, era de mujer claro y se me metía dentro del culo, estaba super excitado, cuando la vi en el restaurante no lo podía creer, parecía una chica, de rasgos finos, ojos claros, la salude con un beso y me regalo una hermosa sonrisa, Debora también le dio un beso pero se dieron un pico. Enseguida Debora me dijo,
-Anda hasta el baño, move bien el culito... creo que a nuestra amiga le va a encantar...
Aunque me costaba creerlo realmente camine más sensualmente, casi femeninamente, cuando volví las dos estaban sonrientes. Debora habló
-A nuestra amiga le encanta lo que vio... dice que la cena se le va a hacer larguísima... ya quiere comer el postre...
-Pobre se puso colorado... -dijo Celeste, tenía una voz bastante sensual, no sabía si la exageraba o era natural.- la verdad que me encantas... desde que lo deje a mi novio que busco alguien así... como vos... casado... sin problemas... con lugar para hacerlo... y con ese alma de perrita puta...
-No le hables así que se calienta enseguida... yo le digo colita sensible... enseguida acaba... cuando se le estimula la cola... o le hablo de lo putita que es...
Cenamos, tomamos vino, la charla fue fantástica, se notaba alguien que a pesar de sólo tener 22 años, era muy confiado en si mismo y seguro de lo que quería. En el auto yo fui manejando, ellas iban apretando atrás. Cuando entramos en casa, Debora me sacó el pantalón, me moría de vergüenza y calentura. me hicieron desfilar un rato, ellas estaban sentadas con un vaso de ron con cola en las manos. Celeste habló, con voz sensual, profunda
-Basta de juegos... arrodillate con el cuerpo en el sillón... mostranos bien ese culito precioso que tenes...
Me acomode en el sillón como celeste me dijo, Debora miraba divertida
-Que culito divino tenes perrita... movelo para mi... calentame... dale perrita...
Me moría de vergüenza y a la vez movía la cola sensualmente, Celeste seguía con el vestido puesto, saco sus tetas sobre el escote, y me las dio a chupar, nos besamos profundamente mientras nos acariciábamos, me hizo poner de pie nos besamos, los dos nos tocábamos el culo, ella tomo mi mano derecha y la llevo a su pija, estaba redura y era regrande, la había soltado, pensaba como hacía para tenerla así y que no le molestara, era una cosa realmente impresionante, con esa voz de hembrita me hablaba al oido.
-Acariciala bien... en un ratito la vas a sentir toda adentro... y te va a encantar perrita... Debora me contó que te viene cogiendo con el strap hace rato... y que esta muy feliz de haberme encontrado... no sabes lo que me gustas... tu culo me calienta a full... -decía mientras lo apretaba y jugaba con sus dedos en la puerta de mi culito- Hoy no me la vas a chupar... no me parece bien llenarte la boquita de leche el primer día... seria un poco fuerte para vos... pero la colita te va a quedar rebosante... -se acercó a mi oído- te voy a hablar así... para que no te de vergüenza sabes... es tu primera vez... ponete arrodilladita en el sillón perrita... te voy a recoger preciosa... -sentía el corazón latir a dos mil por segundo, Debora le dijo que me pusiera un forro, que le iba a manchar todo el sillón, seguro no iba a aguantar mucho. sino aguantaba con el strap, con semejante verga no iba a durar nada.
me acomode, ella se acomodo encima mio, me acariciaba suavemente toda la espalda, la cola, me hablaba al oído,
-Me volves loquita... no sabes lo que me cuesta no apurarme voy a tener que pajearme... sino, no voy a durar nada... y ese va a ser el mejor lubricante... eh perrita... -por respuesta solo gemía y me sentía excitadísimo y avergonzado.
La sentí arrodillarse detrás de mi, me corrió la tanga a un lado y sentí su lengua chupando mi culito, también jugaba con sus dedos, Debora se sentó a mi lado, me daba vergüenza hablar, pero le dije
-No aguanto... voy a llegar...
Debora sonrió y le dijo
-Te dije que tiene la colita sensible... no le gustan los muchachos... pero a nosotras no nos niega nada...
Celeste siguió jugando con sus dedos y lengua, acabe gimiendo.
-Si perrita... que delicia que sos... creo que me voy a olvidar enseguida de mi novio anterior... no creí que iba a encontrar una perrita tan caliente tan rápido...
Movía mis caderas mientras acababa, Celeste se puso de pie, le dijo a Debora que podíamos tomar algo para descansar un rato, ella se sentó, Debora fue a buscar las cervezas, ella seguía con los pechos afuera, se levanto el vestido y sacó su pija sobre el tanga, era una herramienta regrandre, a diferencia de la mía, empezaba con un cabeza chica y se iba haciendo cada vez mas gruesa, yo alternaba entre mirar esa cara de ángel, con esos ojos celestes, teñida de rubia, esas gomazas y semejante chipote.
Cuando vino Debora y lo vio
-Me puedo comer eso un ratito...
-No amorcito... estoy muy caliente... le voy a acabar en la puerta del culito a la perrita y ahí se la voy a meter... le va a encantar...
-Que perversa que sos...
-Pero mira como le empieza a crecer a la perrita... se muere de ganas de probar... acomódate perrita... no puedo esperar mas...
Me acomode de nuevo en el sillón, Debora volvió a ponerme un forro... y me besó se arrodillo al lado mío y me besaba. Sentí que Celeste me bajaba la tanga dejándola entre mis muslos, se dio dos sacudidas y sentí algo tibio en la puerta de mi culo, estaba acabando, su pija entro bien dura, mientras sentía como largaba semen,
-Viste que linda sensación perrita... es lo bueno de ser jovencita... acabar y seguir bien dura... -se quedo con sus pechos apoyados sobre mi espalda, me acariciaba la cola su pija estaba toda adentro mio. Giro la cabeza y se besó con Debora,
-Gracias amiga... es un regalo del cielo... -se incorporo un poco y empezó a cogerme, yo trataba de no quejarme pero era imposible, me agarraba fuerte de la cintura y de a ratos me daba fuertes cachetazos en el culo que me sacaban un quejido.-
Hoy no vas a hablar porque te da vergüenza... otro día que te coja a solas.. vas a poder expresarte tranquila perrita... te da vergüenza delante de tu esposa... -yo escondí la cabeza contra el sofá.
-Pobre perrita... -dijo Debora- le da vergüenza... seguro que esta cerca de llegar de nuevo... eh cerda...? -me dio un fuerte cachetazo en el culo- te pregunte algo perrita...
-Si mi amor... estoy cerca...
-Llega si queres perrita... pero yo voy a seguir gozando tu culazo sabes... me encanta como me apretas la pija... se nota que te gusta eh...
Solo gemí, me agarro fuerte de los pelos, levantándome la cabeza, yo tenia la boca abierta.
-Tenes la boca abierta porque te gustaría tener otra verga en la boca... es típico de las perritas reprimidas como vos... llega putita dale... no te aguantes mas...
-Si... si... llego... aaaahhh... que delicia... -dije y movía el culo cogiéndome lo mas que podía con semejante verga. Celeste se acercó a mi boca y me besó metiéndome profundamente la lengua. Siguió dándome bien duro
-Este es mi culito... y te voy a dar toda la lechita perrita... no aguanto mas... que delicia de culo... -se quedo quieto- movete y mostrale a Debora como sabes conseguir lo que queres dale... -Debora sonreía caliente mordiéndose el labio inferior, yo movía el culo y trataba de apretarle la pija, me agarro de la cintura y me cogió bien duro.
-ay si!!!!... llego perrita si!!!!... tomala toda en la colita... mi lechita toda para vos... putita linda... - y se desparramo sobre mi espalda, su pija no perdía del todo la dureza la fue sacando igual de a poco,
-Empuja mi lechita para afuera dale... ,me salieron como peditos, mientras salia la leche, me moría de vergüenza, metí la cabeza abajo del almohadón...
-Cuanta leche que sale... eso que es la segunda corrida... le da vergüenza pobre cerdita... -dijo Debora- Cada vez que salga con un macho... que es día por medio casi... quiero que vengas a casa... asi se va soltando la putita...
-Si quiero que sea mi perrita... no me gusta andar con muchos a la vez... creo que encontré una putita que tiene mucho para dar... y cuando estemos solitos va a soltar la lengua también... eso me calienta mas todavía...
-Me muero por verlo... -Dijo Debora
-En poco tiempo va a estar re desinhibida... y mas delante tuyo... va a ser nuestra perrita para lo que queramos... -se besaron y Debora fue a comerle la pija, se la chupaba como ella solo sabe hacerlo, cuando Celeste estaba por llegar la agarro fuerte de la nuca.
-Traga todo puerca... que sos tan puta como tu perra... -Debora se pajeaba y acabo mientras tragaba la leche de Celeste. Descansamos, charlamos un rato, ellas se fueron a bañar juntas, Celeste me besó, me dijo.
-Debi me dio una llave de la casa... cuando ella no venga... voy a venir yo... espero que sea seguido... porque con mis 22 añitos... necesito mucho sexo... y mas con una putita como vos... -me beso metiéndome lengua, mi pija estaba morcillona.
El día siguiente cenamos con Debora, sin demasiados comentarios, no tuvimos relaciones, ella no quiso, quería que estuviera bien caliente. A la mañana en el desayuno me dijo
-Yo lo veo a Martín... y voy a ser su putita... como siempre... y voy a jugar sus juegos y sus caprichos... y vos vas a ser la perrita de Celeste... le pase tu celular... quiere que la esperes en la cocina... con una tanga puesta... un delantal y preparando la cena... ella va a traer el vino... te va a avisar cinco minutos antes de llegar porque quiere encontrarte cocinando... dice que la calientan las putas en la cocina...
Ni que decir que estaba al repalo, todo el día se me hizo larguísimo, ni pensaba en Debora, el giro de la situación me superaba, una pendeja trans de 22 años se estaba apoderando de mi voluntad a base de pura calentura.
Me puse a preparar la cena, de a ratos lograba bajar un poco mi erección, pero casi todo el tiempo estaba al repalo, cerca de las ocho y media sonó mi celular, msj de Celeste, estoy en cinco... te quiero en la cocina... Escuché la puerta que se abría, no me animé a mirar sentí su presencia en la puerta de la cocina
-No me vas a saludar...?
Me acerqué y nos besamos apasionadamente
-Te queda muy linda esa tanga... te hace bien perrita... la elegiste vos...
yo me di vuelta hacia la cocina y seguí cocinando, sin contestarle, miré de reojo, celeste se había sacado el vestido y la tanga, quedó con los zapatos de taco puestos y el sujetador y camino lentamente hacia mí.
Cuando estaba atrás mió, me agarró fuerte desde atras apoyandome su pija durisima en el culo y los pechos en la espalda, yo instintivamente tiré mi culo hacia atrás buscando el contacto y también mi pecho.
-Hoy no está tu esposa... tu cuerpo pide mi poronga a gritos... así que trata de no hacerte la sensible perrita... porque una sola pregunta que no me contestes... te vas a hacer la pajita sabes...
-Si... -y me quede dudando como llamarla.
-Si que...
-Si señora...
-No me gusta señora... tengo solo 22... y vos andas alrededor de los treinta... -tomó mi mano y la llevó a su miembro.- sentí lo dura que esta te gusta...
-Si...
-Si que...?
-Ama?
Se separó un poco y me dio un fuerte cachetazo en el culo.
-Muy bien perrita... anda para la cama... sacate el delantal... ponete un forro para no ensuciarle la cama a tu esposa... poné un toallón también... para cuando saques mi leche puta... que va a ser un montón... sabes putita...?
-Si ama...
-Se te va soltando la lengua... muy bien... me excito más cuando las putas hablan y piden lo que quieren... y me dicen lo que les gusta... tenes ganas de que te deje la colita bien llena... eh?
-Me muero de ganas ama... estuve todo el día caliente... esperando que venga...
-Me encanta putita...
-Pero estoy muy cerca de llegar...
-Yo también... igual que el otro día... te voy a acabar en la puertita de la colita y te la voy a meter acabando sabés...
-Ama si me sigue hablando voy a acabar de solo pensar en lo que me va a hacer...
Sonrió con esa cara angelical su pija daba saltos en el aire
-Anda a la cama... bajate la tanga entre los muslos y move la colita... ahora voy... pone una almohada abajo de tu pelvis...
-No aguanto ama...
Se tiró sobre mí, sentí un primero chorro en la puerta de mi culito y su pija entrando mientras latía y escupía leche, grité mi orgasmo.
-soy tu puta ama... llename bien la cola... que lindo que sigas con la pija durita... cogeme mucho por favor...
Me agarró de los pelos y me besó, yo aunque no lo podía creer no perdía mi erección.
-Querés cambiar el forrito...?
-Sigo duro ama...
-Vas a terminar siendo una perrita cualquiera... en cualquier momento vas a empezar a mirar los bultos de los muchachos...
-No me gustan los hombres...
-Pero esta verga que tenes en el culo te encanta eh...?
-Si ama soy tu puta...
Se acomodó para que me pusiera en cuatro patas, se quedó quieta
-Move el culito... coge un poquito vos... dale...
Movía el culo para los dos lados, me clavaba bien contra ella y la sacaba casi hasta la puerta para volver a clavarme.
-Tu culo me vuelve loco... y lo putita que sos... falta que te tomes mi leche todavía... pero tenemos tiempo... no me puedo resistir a llenarte el culo de nuevo... sabés...?
-Lo siento por su dureza ama...
-Te gusta...
-Usted me gusta...
-Que bueno... sabés que soy caprichosa no...?
-Me imagino...
-Agarrá el telefono y llamala a tu esposa...
-Está en la cocina...
Se salió de mí,
-Trata que no salga nada de lechita y andá a buscarlo...
Cuando volví, me hizo volver a acostarme como al principio, me había sacado la tanga.
-Ponete la tanga de nuevo...
La corrió a un costado y me penetró despacio, disfrutando de meterla lento y siguió con un rítmico mete y saca lento pausado, iba hasta fuera y volvía...
-Llamala a Debi... ponelo en altavoz... quiero escuchar...
No atendió, se salió de encima mio y fue a buscar su celular.
-Hola... -se escuchó la voz de Debora, ella se acomodó mientras me la metía.
-Podes hablar...
-Ahora sí... justo Martín me estaba haciendo la cola... y cuando vio que era mi marido que llamaba se calentó más y me llenó la colita de leche...
-Que bueno... tu marido la tiene llena y esta por recibir una descarga de nuevo... estás con Martín..?
-Si..
-Ponelo en altavoz así escuchan...
Me moría de verguenza, pero más caliente me sentía.
-Ahora te voy a llenar la colita de nuevo perrita... mientras te escuchan tu esposa y Martín... así que gemi con gusto...
-Si me encanta como me partís el culo... quiero que me llenes de lechita... mucha...
-Muy bien putita... y vos vas a llegar de nuevo...?
-Estoy cerquita...
-Avisame... quiero llenarte la colita cuando llegués...
-ay... siii!!!! llename el culo...!!!
-Si tomala toda perrita... move el culito dale... ni te acordaste de tu esposa eh puta... ves una verga y te volves loca...
-Si soy tu putita...
Contale a tu esposa y a Martín que sentís...
-Que la tenes dura todavía... y que me encanta como me coges... soy tu perrita...
-Que más...
-Que voy a hacer todo lo que vos me digas...
En ese momento me la fue sacando... seguía dura...
-Empuja mi lechita como el otro día...
-En solo un día la volviste re putita... -dijo Debora.
-Es re putita... te dije que esta reprimida nada más...
Sentí la leche salir, y un par de peditos salieron, los escuche reir a Debora y a Martín. Celeste cortó el celular, junto un poco de leche de la que salía y volvió a metermela
-Como me calienta que seas tan puta...
-Me duele un poco el culo ama... necesito descansar...
-Y que hago yo con esta dureza eh...?
-Te hago una pajita...
-No soy una pajera...
-Sino la querés en la cola te vas a tomar todo lo que te de... como hizo la puta de tu señora... que también va a ser mi puta... más que de ese Martín... Te gustaría que fuera mi puta...?
-Si ama... me encantaría...
-Y que me las re garche a las dos...?
-Si ama... me duele ama...
-Y entonces...
-Salga por favor... -sentí que se le ponía más duro cuando le pedía por favor.
-Me calienta más cuando las putitas piden algo y no están del todo convencidas...
-Te vas a tomar la leche...?
-No se ama... está toda sucia...
-Hoy por ser la primera vez... me puedo ir a lavar...
-Bueno ama... como usted diga...
-Vamos al baño... mejor que la laves vos...
Nos comimos las bocas un largo rato le chupe las tetas camino al baño, mi pija estaba morcillona, después de dos orgasmos no podía reaccionar. Le lavé la pija con mucho cuidado.
-Ponete en cuatro y chupala... acercame el culito que quiero jugar con el... -me metía los dedos y me excitaba.
-Más despacio... no tengo apuro en llegar... me gusta como la chupas... tragala un poco más... aguantala ahí... siiii... que rico... juga con tu lengua... alrededor del glande... siii... que rico...
Después con las dos manos me tomó la cabeza y empezo a cogerme la boca, estuvo un rato y cuando acababa me apretó fuerte desde la nuca.
-Tragá todo... no quiero que desperdicies ni una gota perra... -trague como pude, el sabor era amargo, pero al tragar directo no lo sentí demasiado.
-Muy bien perrita... -me ayudo a pararme y nos besamos. Después nos sentamos a cenar, así como estabamos era tarde.
-Como te sentís...
-Me duele un poco el culo...
-No me digas así que me caliento de nuevo... tratá de hablar de otras cosas... mirá que cuatro polvos suele ser mi media... día por medio... como te sentís entonces...
-Bien ama... muy bien...
-Ponete unos zapatos de tacón... y vení a servirme el vino... ponete alguna tanga de tu señora...
Los zapatos eran todos muy chicos, encontré unos que eran un poco más grandes, me puse una tanga de Debora y fui a la cocina. No lo podía creer pero mi pija estaba dura de nuevo. Caminé a la cocina, no quería que ella viera mi erección pero era imposible.
-Parece que vos también estas calentita...
-Un poco...
-Vení a servirme vino... y quedate parada al lado mio... -Me paré como toda una putita a su lado, tratando que mi culo se viera en su mejor forma.
-Si me querés calentar lo estás logrando...
No dije nada, no me había preguntado.
-Querés que te coja de nuevo...
-Me duele un poco la colita ama...
-La colita... y con voz de puta... -se puso de pie y me inclinó sobre la mesa, corrió la tanga a un costado y sentí otra vez esa dureza que me invadía. Mientras me cogía me pajeaba- me vas a dar la lechita que te quede perrita eh...
-Si ama toda para vos...
-Me duele la colita... alma de puta tenes... y vas a tirar tu leche al suelo y después vas a limpiar bien... putita...
-Si ama... tu puta...
Estuvo un largo rato cogiendome, de a ratos me daba duros cachetazos o me giraba la cabeza tomandome fuerte del pelo y me metía la lengua bien profundo.
-Estoy cerca ama...
Aceleró su cogida...
-Llega cuando quieras y avisame...
-llego ama... aaaaayyyy siiiiiiiii!!!!
Sentí como su pija explotaba de nuevo, me di cuenta por como me clavó pero no senti su descarga, los restos de mi leche cayeron al piso.
Ella se fue a duchar, se vistió y me dijo que era tarde que se tenía que ir
-Decile a Debora, que tuviste tres orgasmos..., seguro se va a poner un poco celosa..., mejor esa va a ser mi próxima putita...
0 comentarios - Mi esposa, chica trans y yo...