La habia conocido en el hospital, una kinesiologa hermosa! poco a poco nos fuimos haciendo mas cercanos al punto de aprovechar habitaciones vacias en el internado y escabullirnos a tener una dosis de sexo fuerte, para aliviar la tensión.
Sali del hospital temprano del tranajo aquel dia y le escribi a Juliette, la invite a pasar por casa una vez que termine con sus pacientes. Por suerte me dijo que si, asi que no veia las horas de verla llegar. Para matar el tiempo, coloque una hamaca entre los postes de la galeria y con el tibio sol de otoño me dispuse a leer hasta que llegase aquella fogosa mujer.
Los minutos fueron pasando como asi tambien las paginas de aquel libro, una brisa fresca empezo a correr lo que me hizo acurrucarme un poco y algo de sueño empece a sentir. Con los ojos entreabiertos sentí la bocina de su camioneta. Por fin habia llegado! Juliette era hija de franceses, de tez blanca como la nieve, ojos celestes que te desnudan con cada mirada, de pezones como fresas y una jugosa conchita que puede saciar la sed ninfómana de cualquiera que se animara a provocarla.
Inmediatamente fui hasta el porton a abrirle para que metiese su camioneta y al pasar a mi lado, una sonrisa sexy acompañada de un guiño de ojo, hacia que mis ratones empezaran a quemarme la cabeza.
Bajó de la camioneta con un sobretodo negro que hacia resaltar sus ojos delineados y sus carnosos labios maquillados de un color lila muy sugestivo. Nos dimos un simple beso y pasamos adentro de casa, el sol ya empezaba a perderse entre los cerros y el frio se hacia notar. En el living estaba la calefaccion prendida y sin perder tiempo le invite algo para tomar, fui hasta la heladera y al darme vuelta con una botella en la mano, la vi con el sobretodo desprendido y trabado en sus codos, sonriendome con perversidad, luciendo un divino conjunto de encaje que hacia juego con su labial.
De enmediato, me abalance hacia ella, con un fuego interno que me quemaba desde los pies, nos fundimos en un beso en el que perdimos la nacion del tiempo, mientras nuestras manos empezaron a exploear el cuerpo del otro.
Subitamente me empujó, apartandome de ella y se dispuso a sacar mi verga dura y venosa. Succionaba la cabeza de mi chota con voracidad y vehemencia, lamia el tronco de arriba a bajo para luego tragarsela entera. Me pajeaba con una locura que se me hacia dificil no acabar. Mientras seguia masturbamdome se colaba cuatro dedos y el sonido de su concha mojada me hacia alucinar de placer. En un momento observé esa mirada pervertida en su rostro y poco a poco acerco su mano a mi culo, sin preguntarme y sin dejar de pajaearme, empezó a introducir un dedo por él, cuando pudo meterlo entero masajeó mi prostata y a los pocos segundos una descarga alucinante de leche espesa y tibia brotaba de mi pija hacia su boca. No dejo caer ni una minima gota, se la tomó entera, volviendose a poner de pie me miro y con una voz muy sexy me dijo al oido "tenia tanta sed corazón".
No podia creer lo que habia pasado, Juliette era una demonia sexual, y estaba dispuesto a quemarme en su fuego.
A pesar de la increíble cantidad de leche que habia acabado, mi pija seguia dura. El corazon bombeaba lujuria y sin mediar palabras le arranque de un tiron el corpiño, dejando al descubierto unos pezones extramadamente excitados y sencibles, mi lengua pasaba por toda su areola y succionaba sus tetas lo que probocaba los gemidos mas estimulantes que pude haber escuchado, me sacaba de la boca esos sabrosos pechos mientras los soplaba para que la diferencia de temperatura los pongan aun mas duros. No quise dejar a su conchita sin diversión, me dirigí a la heladera y volvi con un pepino, una mueca mordiendose el labio fue suficiente para saber que lo deseaba. Nos acomodamos en el sofá y mientras retomaba el juego entre mi lengua y sus tetas, fui penetrandos su humeda concha con el pepino, "aaayy que ricura" se escucho en la casa mientras jadeaba como un hembra en celo a medida que la penetraba. Era tanta la calentura en su cuerpo que sola empezó a masajearse el clitoris, cada vez mas rapido, los gemidos hacian evidente la llegada de su orgasmo, lo que no pude prevenir fue el squirt que nos empapó! "Que rica puta que sos!" Dije mientras dirijia mi cabeza a esa entrepierna, el fuego me habia consumido, ni hice el intento en bajarle la tanga, simplemente la deje hecha jirones y me dispuse a penetrar su vagina con mi lengua, y con mi mano le indique que continuara con los masajes a su clitoris. En unos segundos los dos estabamos sumergidos en perversión y locura. Con la otra mano libre que me quedaba empece a meterle un dedo en su culo, poco a poco entraba y salia a gusto y piaccere, fue en ese instante en donde, entre jadeos me ordenó que le metiera otro dedo mas, lentamente fui dilantando esa hermoso y escrecho culo y en cuanto los dos estuvieron enteramente dentro de ella, otro orgasmo a chorros dijo presente, con mi fantasia cumplida le dije "yo tmb estaba sediento".
Desnudos y lujuriosos nos fuimos hasta mi habitacion, previamente pasamos por la cocina, en donde con los antebrazos apoyados sobre la mesada y en punta de pie, me decia "violame pervertido", me puse de rodillas abriendo sus nalgas con mis manos, lamia sus labios que aun goteaban hasta la entrada de su culito rosado y dilatado, a lo que ella acotaba "mira como me lo dejaste, me desvirgaste la colita corazon", cada palabra aumentaba mi calentura. Sin esperar mas, nos fuimos hasta la cama y sin muchos rodeos la puse en 4, ese culito entreabierto me tento y se la meti sin bacilar, Juli arqueo su espalda cual gata y mi mano agarro un buen mechon de cabello para empezar a taladrarla, cada envestida era motivo de un grito "si.... violame, rico!" Al mismo tiempo que mi verga entraba y salia de ese delicioso culito, ella metia sus 4 dedos en su conchita, y esta vez era la cama la que quedaba empapada.
"Me la vas a meter por la concha o busco el pepino" me dijo mientras me invitaba a recostarme en la cama, una vez acostado, se monto sobre mi pija y empezo a mover las caderas a un ritmo suave pero fuerte y profundo, tanto asi que la cama se separaba cada vez mas de la pared y la punta de mi pija golpeaba el cuello de su utero. El movimiento de sus pechos era hipnótico, se los masajeaba, se acomodaba el pelo y seguia tocandose, ante sus movimientos, otro ataque de perversion me invadia.
De un solo movimiento la tumbe en la cama, me acomodo y puse sus piernas sobre mis hombros, movimientos rapidos y duros chocaban contra sus muslos, por ratos abria sus piernas y una de mis manos ahorcaba levemente a la puta mas rica con la que habia tenido sexo. Se la saque y la acomode de costado, me coloque detras de ella y volvi a penetrarla, sus piernas cerradas hacian mas estrecha su conchita y asi mas sabrosa cada penetracion, poco a poco pude percibir como su vagina se contraia apretando mi verga dentro de ella, "me.... estoy... por ....venir otra vez... ahh ahhh..." la voz se le entrecortaba. Mientras un largo grito retumbaba en la habitacion, senti que me venia, la saque y solo bastaron un par de pajeadas para llenarle las tetas el cuello y el abdomen de mi semen.
Agotado me deje caer sobre la cama y pude contemplar como se exparcia con ambas manos mi leche x todo el cuerpo... una fue para su boca y otra para dentro de su vagina... y entonces fue ese momento en el que escuché algo extraño, un largo BOCINAZO, estaba confundido, mi mano refrego firmemente mi cara y detras del porton la vi a ella detras del volante de la camioneta, comprendí que mientras lei me habia quedado profundamente dormido, sonriendo me levante apurado de la hamaca, pensando en todas las ideas que me habia dado aquel hermoso sueño...
Sali del hospital temprano del tranajo aquel dia y le escribi a Juliette, la invite a pasar por casa una vez que termine con sus pacientes. Por suerte me dijo que si, asi que no veia las horas de verla llegar. Para matar el tiempo, coloque una hamaca entre los postes de la galeria y con el tibio sol de otoño me dispuse a leer hasta que llegase aquella fogosa mujer.
Los minutos fueron pasando como asi tambien las paginas de aquel libro, una brisa fresca empezo a correr lo que me hizo acurrucarme un poco y algo de sueño empece a sentir. Con los ojos entreabiertos sentí la bocina de su camioneta. Por fin habia llegado! Juliette era hija de franceses, de tez blanca como la nieve, ojos celestes que te desnudan con cada mirada, de pezones como fresas y una jugosa conchita que puede saciar la sed ninfómana de cualquiera que se animara a provocarla.
Inmediatamente fui hasta el porton a abrirle para que metiese su camioneta y al pasar a mi lado, una sonrisa sexy acompañada de un guiño de ojo, hacia que mis ratones empezaran a quemarme la cabeza.
Bajó de la camioneta con un sobretodo negro que hacia resaltar sus ojos delineados y sus carnosos labios maquillados de un color lila muy sugestivo. Nos dimos un simple beso y pasamos adentro de casa, el sol ya empezaba a perderse entre los cerros y el frio se hacia notar. En el living estaba la calefaccion prendida y sin perder tiempo le invite algo para tomar, fui hasta la heladera y al darme vuelta con una botella en la mano, la vi con el sobretodo desprendido y trabado en sus codos, sonriendome con perversidad, luciendo un divino conjunto de encaje que hacia juego con su labial.
De enmediato, me abalance hacia ella, con un fuego interno que me quemaba desde los pies, nos fundimos en un beso en el que perdimos la nacion del tiempo, mientras nuestras manos empezaron a exploear el cuerpo del otro.
Subitamente me empujó, apartandome de ella y se dispuso a sacar mi verga dura y venosa. Succionaba la cabeza de mi chota con voracidad y vehemencia, lamia el tronco de arriba a bajo para luego tragarsela entera. Me pajeaba con una locura que se me hacia dificil no acabar. Mientras seguia masturbamdome se colaba cuatro dedos y el sonido de su concha mojada me hacia alucinar de placer. En un momento observé esa mirada pervertida en su rostro y poco a poco acerco su mano a mi culo, sin preguntarme y sin dejar de pajaearme, empezó a introducir un dedo por él, cuando pudo meterlo entero masajeó mi prostata y a los pocos segundos una descarga alucinante de leche espesa y tibia brotaba de mi pija hacia su boca. No dejo caer ni una minima gota, se la tomó entera, volviendose a poner de pie me miro y con una voz muy sexy me dijo al oido "tenia tanta sed corazón".
No podia creer lo que habia pasado, Juliette era una demonia sexual, y estaba dispuesto a quemarme en su fuego.
A pesar de la increíble cantidad de leche que habia acabado, mi pija seguia dura. El corazon bombeaba lujuria y sin mediar palabras le arranque de un tiron el corpiño, dejando al descubierto unos pezones extramadamente excitados y sencibles, mi lengua pasaba por toda su areola y succionaba sus tetas lo que probocaba los gemidos mas estimulantes que pude haber escuchado, me sacaba de la boca esos sabrosos pechos mientras los soplaba para que la diferencia de temperatura los pongan aun mas duros. No quise dejar a su conchita sin diversión, me dirigí a la heladera y volvi con un pepino, una mueca mordiendose el labio fue suficiente para saber que lo deseaba. Nos acomodamos en el sofá y mientras retomaba el juego entre mi lengua y sus tetas, fui penetrandos su humeda concha con el pepino, "aaayy que ricura" se escucho en la casa mientras jadeaba como un hembra en celo a medida que la penetraba. Era tanta la calentura en su cuerpo que sola empezó a masajearse el clitoris, cada vez mas rapido, los gemidos hacian evidente la llegada de su orgasmo, lo que no pude prevenir fue el squirt que nos empapó! "Que rica puta que sos!" Dije mientras dirijia mi cabeza a esa entrepierna, el fuego me habia consumido, ni hice el intento en bajarle la tanga, simplemente la deje hecha jirones y me dispuse a penetrar su vagina con mi lengua, y con mi mano le indique que continuara con los masajes a su clitoris. En unos segundos los dos estabamos sumergidos en perversión y locura. Con la otra mano libre que me quedaba empece a meterle un dedo en su culo, poco a poco entraba y salia a gusto y piaccere, fue en ese instante en donde, entre jadeos me ordenó que le metiera otro dedo mas, lentamente fui dilantando esa hermoso y escrecho culo y en cuanto los dos estuvieron enteramente dentro de ella, otro orgasmo a chorros dijo presente, con mi fantasia cumplida le dije "yo tmb estaba sediento".
Desnudos y lujuriosos nos fuimos hasta mi habitacion, previamente pasamos por la cocina, en donde con los antebrazos apoyados sobre la mesada y en punta de pie, me decia "violame pervertido", me puse de rodillas abriendo sus nalgas con mis manos, lamia sus labios que aun goteaban hasta la entrada de su culito rosado y dilatado, a lo que ella acotaba "mira como me lo dejaste, me desvirgaste la colita corazon", cada palabra aumentaba mi calentura. Sin esperar mas, nos fuimos hasta la cama y sin muchos rodeos la puse en 4, ese culito entreabierto me tento y se la meti sin bacilar, Juli arqueo su espalda cual gata y mi mano agarro un buen mechon de cabello para empezar a taladrarla, cada envestida era motivo de un grito "si.... violame, rico!" Al mismo tiempo que mi verga entraba y salia de ese delicioso culito, ella metia sus 4 dedos en su conchita, y esta vez era la cama la que quedaba empapada.
"Me la vas a meter por la concha o busco el pepino" me dijo mientras me invitaba a recostarme en la cama, una vez acostado, se monto sobre mi pija y empezo a mover las caderas a un ritmo suave pero fuerte y profundo, tanto asi que la cama se separaba cada vez mas de la pared y la punta de mi pija golpeaba el cuello de su utero. El movimiento de sus pechos era hipnótico, se los masajeaba, se acomodaba el pelo y seguia tocandose, ante sus movimientos, otro ataque de perversion me invadia.
De un solo movimiento la tumbe en la cama, me acomodo y puse sus piernas sobre mis hombros, movimientos rapidos y duros chocaban contra sus muslos, por ratos abria sus piernas y una de mis manos ahorcaba levemente a la puta mas rica con la que habia tenido sexo. Se la saque y la acomode de costado, me coloque detras de ella y volvi a penetrarla, sus piernas cerradas hacian mas estrecha su conchita y asi mas sabrosa cada penetracion, poco a poco pude percibir como su vagina se contraia apretando mi verga dentro de ella, "me.... estoy... por ....venir otra vez... ahh ahhh..." la voz se le entrecortaba. Mientras un largo grito retumbaba en la habitacion, senti que me venia, la saque y solo bastaron un par de pajeadas para llenarle las tetas el cuello y el abdomen de mi semen.
Agotado me deje caer sobre la cama y pude contemplar como se exparcia con ambas manos mi leche x todo el cuerpo... una fue para su boca y otra para dentro de su vagina... y entonces fue ese momento en el que escuché algo extraño, un largo BOCINAZO, estaba confundido, mi mano refrego firmemente mi cara y detras del porton la vi a ella detras del volante de la camioneta, comprendí que mientras lei me habia quedado profundamente dormido, sonriendo me levante apurado de la hamaca, pensando en todas las ideas que me habia dado aquel hermoso sueño...
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