...Detras de mi sonrisa, se escondían muchísimos nervios, considero que por mi carácter y aspecto físico siempre tuve mas suerte de la que merecí, pero esta vez era diferente. La enfermera tenia todo, actitud, físico y ganas.
- Muero de ganas de tener esas tetas. Le dije de manera tonta y canchera.
Para mi sorpresa y miedo, ella no dudo en hacer, se acerco y se arrodillo en el mismo movimiento, me desabrocho el jean y empezó a chuparme la pija sin preocuparse por el lugar, adentro de una oficina que en cualquier momento podía entrar cualquiera, hasta su jefa. Ese desinterés me super calentó, me puso la verga re al palo y yo también entre en un estado de desinterés, solamente podía ver y sentir esa boca comiéndose con ganas la cabeza, solo la cabeza. Sabia que hacer y lo hacia de maravillas, con movimientos muy suaves de la lengua rodeaba todo lo que podía, mientras con su mano de pajeaba ella, todo coordinado, parecía que su boca y su mano se habían puesto de acuerdo en que hacer. Un par de veces me puse nervioso por ruidos, y ella lo noto.
- No te preocupes, si nos ven y nos echan, te dejo acabarme en la boca así no te pones triste. Me dijo.
Sinceramente, no me importo nada mas, ella se sonreía y se podía ver el disfrute que le generaba saber que tenia el control, no le costo nada hacerme acabar, obvio que ni le avise y a ella no le importo. En el momento que acabe dentro de su boca cerro los ojos de una forma tan placentera, la muy puta estaba esperando eso, no podía creerlo.
Ella espero a que se me baje la erección para dejar de chuparmela, se para, y mientras se baja los pantalones me dice:
- Abrochate, que me vas a chupar el culo mientras me pajeo. La concha me la vas a limpiar con la lengua, estamos?
Tenia ganas de casarme ya con esa mina, que haga lo que quiera conmigo. Se dio vuelta y se acomodo contra un escritorio dejando el culo tremendo, chiquito, bien carnoso, blanco, bien parado. Ni lo dude y me arrodille atrás de ella, teniendo el culo a la altura de mi cara, y se lo empece a chupar, se lo abría con las manos y trataba de meterle la lengua lo mas profundo que podía, me calentaba muchísimo ver que con una mano se tapaba la boca y con la otra se pajeaba. Se le vencían las piernas, se daba duro ella, por un momento con mis manos sentí que la sostenía del culo, estaba totalmente entregada, se moría por acabar y fue así hasta que...acabo. Pude notarlo por el tremendo gemido que pego y...sobretodo...por la forma en que la conchita se le mojo, era una imagen tremenda.
- Dale nene, limpiamela, serví para algo. Me decía mientras con sus dedos se abría esperando a que se la "limpie" como ella demandaba. Obvio, obedecí , era muy linda, totalmente depilada, chiquita, muy blanca, igual que su culo.
Ya sin hablarnos, nos acomodamos la ropa, había que volver careta al laburo, agarra sus cosas y antes de irse me pregunta si a la salida tenia algo que hacer y si vivía lejos.
- Nada, y vivo acá nomas, por?. Le dije.
- Por que no puede pasar de hoy, me tenes que cojer, y yo cumplir lo que quiero, que es tener tu pija entre las tetas.
Eso sera...en la 3er y ultima parte...
- Muero de ganas de tener esas tetas. Le dije de manera tonta y canchera.
Para mi sorpresa y miedo, ella no dudo en hacer, se acerco y se arrodillo en el mismo movimiento, me desabrocho el jean y empezó a chuparme la pija sin preocuparse por el lugar, adentro de una oficina que en cualquier momento podía entrar cualquiera, hasta su jefa. Ese desinterés me super calentó, me puso la verga re al palo y yo también entre en un estado de desinterés, solamente podía ver y sentir esa boca comiéndose con ganas la cabeza, solo la cabeza. Sabia que hacer y lo hacia de maravillas, con movimientos muy suaves de la lengua rodeaba todo lo que podía, mientras con su mano de pajeaba ella, todo coordinado, parecía que su boca y su mano se habían puesto de acuerdo en que hacer. Un par de veces me puse nervioso por ruidos, y ella lo noto.
- No te preocupes, si nos ven y nos echan, te dejo acabarme en la boca así no te pones triste. Me dijo.
Sinceramente, no me importo nada mas, ella se sonreía y se podía ver el disfrute que le generaba saber que tenia el control, no le costo nada hacerme acabar, obvio que ni le avise y a ella no le importo. En el momento que acabe dentro de su boca cerro los ojos de una forma tan placentera, la muy puta estaba esperando eso, no podía creerlo.
Ella espero a que se me baje la erección para dejar de chuparmela, se para, y mientras se baja los pantalones me dice:
- Abrochate, que me vas a chupar el culo mientras me pajeo. La concha me la vas a limpiar con la lengua, estamos?
Tenia ganas de casarme ya con esa mina, que haga lo que quiera conmigo. Se dio vuelta y se acomodo contra un escritorio dejando el culo tremendo, chiquito, bien carnoso, blanco, bien parado. Ni lo dude y me arrodille atrás de ella, teniendo el culo a la altura de mi cara, y se lo empece a chupar, se lo abría con las manos y trataba de meterle la lengua lo mas profundo que podía, me calentaba muchísimo ver que con una mano se tapaba la boca y con la otra se pajeaba. Se le vencían las piernas, se daba duro ella, por un momento con mis manos sentí que la sostenía del culo, estaba totalmente entregada, se moría por acabar y fue así hasta que...acabo. Pude notarlo por el tremendo gemido que pego y...sobretodo...por la forma en que la conchita se le mojo, era una imagen tremenda.
- Dale nene, limpiamela, serví para algo. Me decía mientras con sus dedos se abría esperando a que se la "limpie" como ella demandaba. Obvio, obedecí , era muy linda, totalmente depilada, chiquita, muy blanca, igual que su culo.
Ya sin hablarnos, nos acomodamos la ropa, había que volver careta al laburo, agarra sus cosas y antes de irse me pregunta si a la salida tenia algo que hacer y si vivía lejos.
- Nada, y vivo acá nomas, por?. Le dije.
- Por que no puede pasar de hoy, me tenes que cojer, y yo cumplir lo que quiero, que es tener tu pija entre las tetas.
Eso sera...en la 3er y ultima parte...
2 comentarios - La enfermera (parte 2)