Hola, nuevamente quiero agradecer los comentarios, puntos y elogios de mis relatos.
Continúo describiendo como transcurrió mi vida sexual luego de mi separación y a partir de conocer a Zoe gracias a Fernando.
A diferencia de mi ex mujer, a Zoe le fascina que me guste la verga. La excita, le provoca mucho morbo, y le divierte gastarme y bromear al respecto.
Nuestra relación es bastante abierta, no convivimos, y tenemos libertad para coger con quien queramos, sin tener que rendir cuentas sobre eso. Y los dos compartimos el morbo en juegos como el cukold, intercambios y bisexualidad.
Por lo general nos cuidamos bastante, en el sentido de coger con forro con otras personas, salvo un par de excepciones. Cualquiera que disfruta de ser cornudo sabe del morbo que da ver a su pareja con la concha o el culo llenos de leche de otro macho, pero tampoco es cuestión de vivir jugando a la ruleta rusa. Lo mismo para los que disfrutamos de una buena verga y de que nos acaben adentro.
Volviendo a los juegos con Zoe, paso a describir algunos. Por ejemplo, a veces viene directo de coger con algún macho sin decirme nada. La muy puta llega sin bañarse, con la misma lencería, y por lo general, con leche seca en parte de la cara, cuello y tetas….
Obviamente, ni bien la saludo con un beso, me doy cuenta de la baranda a leche que tiene encima, y ella me mira divertida. Como imaginarán, la calentura me sube de golpe, así que vamos derecho a lacama donde la desvisto dejándola sólo con la lencería y mientras le chupo laconcha me va relatando detalladamente la cogida que le acaban de dar.
Después se sienta sobre mi pija y me cabalga mientras le voy lamiendo muy lentamente las tetas, el cuello y la cara. Por logeneral nos hechamos unos polvos largos y apasionados.
Otras veces invitamos a otros machos para que nos cojan. A veces a los dos y otras veces a uno o a otro. También invitamos mujeres.
Un juego que nos encanta es sorprender a algunos tipos en lugares públicos, como bares o boliches, para que se la cojana ella. Tipos que no son del ambiente de intercambios.
Por ejemplo, una vez estábamos en un bar, y había un flaco que no paraba de mirar a Zoe. Ella me comentó que el tipo legustaba, así que nos fuimos acercando de a poco hasta quedar al lado y buscamos una excusa boluda para empezar a conversar.
Zoe estaba abrazada a mi cuello y no perdía oportunidad de histeriquear al flaco, que se ponía nervioso pero se notaba que le encantaba el histeriqueo.
Después de un par de cervezas, Zoe fue al baño (para que yo avanzara con el juego) y me quedé hablando con este flaco que se llamaba Marcelo. Para dirigir la conversación hice un comentario sobre lo "aparato" que es Zoe; él se enganchó también diciendo que era divertida, que tenía suerte de estar con una chica así, y ese tipo de cosas.
Cuando le pregunté si le parecía atractiva, se quedó medio cortado, se puso colorado, tomó un trago de cerveza y me dijo tímidamente que si, como tratando de entender a donde apuntaba mi pregunta. Ahí traté de ayudarlo un poco, y le dije que éramos una pareja abierta, que nos gusta incorporar gente a nuestra intimidad, y directamente le pregunte si le gustaría cogerla.
El tipo me quedó mirando, como tratando de descubrir si le hablaba enserio, tal es así que, para tranquilizarlo, le aclaré que hablaba en serio, que se sintiera en confianza de responder.
“Obvio que me la cogería” me respondió, y siguió con mil preguntas sobre si no me daba celos, si realmente me gustaba que se la coja otro, y todas las preguntas que hacen los tipos que no entienden mucho que algunos nos guste que se cojan a nuestras parejas.
Estábamos en plena conversación cuando llegó Zoe del baño y me comió la boca con un beso descarado, claramente para calentara Marcelo. “Sabés que a Marcelo también le encantaría comerte la boca”, le dije a Zoe…. Automáticamente me miró con una sonrisita pícara y lo empezó a besar pegando todo su cuerpo al del flaco.
Marcelo, se prendió al toque, sin poder creerlo que estaba pasando. Era muy cómico ver las caras de asombro de más de uno que estaba alrededor, al ver que Zoe nos transaba a los dos.
Para hacerla más corta, nos fuimos del bar en mi auto. Como suele pasar en estos casos, ellos fueron sentados atrás, comiéndosela boca, manoseándose, y Zoe terminó chupándole la verga hasta llegar a mi casa.
La chupada de pija de Zoe duró hasta que paré el auto en el garaje y les abrí la puerta trasera. No les puedo explicarla cara de asombro del flaco cuando le pregunto a Zoe si estaba rico lo que se estaba comiendo, y ella se levanta con la cara toda babeada y mojada del líquido pre seminal, me da un beso de lengua, y me dice “mirá que rica que está”.
“¿Qué, también te gusta la pija?” mepregunta Marcelo sin poder creerlo.
“Sí, me encanta”, le respondo exagerando a propósito la naturalidad en la respuesta. “Pero no te preocupes, sólo lo hago con gente a la que le guste esta onda. Acá no vas a tener que hacer nada que note gusta”, le dije para tranquilizarlo.
Entramos a mi casa, serví tres wiskys y fuimos derecho a mi habitación. Ahí me recosté a un costado de la cama y los dejé hacer a ellos, disfrutando el espectáculo.
Tanto a Zoe como a mí nos encanta“perturbar”(sanamente) a los tipos que no conocen mucho del tema, exagerando la naturalidad con que ella se ofrece delante mío, y mi predisposición para entregarla y ayudar en todo al corneador de turno. A diferencia de otras relaciones con cuernos, el control lo tenemos Zoe y yo. En ningún momento se trata de ponerme deliberadamente en un lugar de sumisión, si no que actúo más como un cornudo colaborativo, complaciente de la puta de mi amorcito.
Muchos tipos se asustan de entrada cuando se enteran deque me gusta la pija, aclarando que son re machos, y que ellos no quieren saber nada con ese tipo de “mariconadas”, pero la gran mayoría terminan pidiéndome que les chupe la pija, sobre todo cuando se sienten alentados por Zoe que siempre lo pide.
Es muy curioso hasta donde llegan los prejuicios, porque consideran que tocar o chupar una pija es de putos, pero que te la chupe un macho, no ¡Jaja!
Para resumir lo que pasó con Marcelo, les cuento que le pegó flor de cogida a mi linda Zoe, con empomada de orto incluida, y toda mi asistencia como cornudo en estos casos, consistente en chupar cada tanto la pija del macho, guiarla hasta los agujeros de mi linda novia, y alentarlos para que gocen como marranos delante mío.
El polvo terminó con la carita y las tetas de Zoe llenas de leche de Marcelo, continuando con un beso apasionado entre ella y yo, lamiendo y saboreando la leche recién salida de la verga de Marcelo, y por ultimo dejándole la pija reluciente entre los dos.
Ni bien se fue Marcelo nos pegamos una garchada de novela, ya que mi verga estaba que explotaba después de ver la cogida que le acababan de dar a mi amorcito.
Espero que les haya gustado el relato sobre nuestras primeras andanzas con Zoe. Más adelante se vienen otros relatos sobre mis cuernos y también de mis cogidas con machos, sin mi amorcito presente.
Gracias nuevamente a todos los seguidores de estas historias por sus comentarios.
Continúo describiendo como transcurrió mi vida sexual luego de mi separación y a partir de conocer a Zoe gracias a Fernando.
A diferencia de mi ex mujer, a Zoe le fascina que me guste la verga. La excita, le provoca mucho morbo, y le divierte gastarme y bromear al respecto.
Nuestra relación es bastante abierta, no convivimos, y tenemos libertad para coger con quien queramos, sin tener que rendir cuentas sobre eso. Y los dos compartimos el morbo en juegos como el cukold, intercambios y bisexualidad.
Por lo general nos cuidamos bastante, en el sentido de coger con forro con otras personas, salvo un par de excepciones. Cualquiera que disfruta de ser cornudo sabe del morbo que da ver a su pareja con la concha o el culo llenos de leche de otro macho, pero tampoco es cuestión de vivir jugando a la ruleta rusa. Lo mismo para los que disfrutamos de una buena verga y de que nos acaben adentro.
Volviendo a los juegos con Zoe, paso a describir algunos. Por ejemplo, a veces viene directo de coger con algún macho sin decirme nada. La muy puta llega sin bañarse, con la misma lencería, y por lo general, con leche seca en parte de la cara, cuello y tetas….
Obviamente, ni bien la saludo con un beso, me doy cuenta de la baranda a leche que tiene encima, y ella me mira divertida. Como imaginarán, la calentura me sube de golpe, así que vamos derecho a lacama donde la desvisto dejándola sólo con la lencería y mientras le chupo laconcha me va relatando detalladamente la cogida que le acaban de dar.
Después se sienta sobre mi pija y me cabalga mientras le voy lamiendo muy lentamente las tetas, el cuello y la cara. Por logeneral nos hechamos unos polvos largos y apasionados.
Otras veces invitamos a otros machos para que nos cojan. A veces a los dos y otras veces a uno o a otro. También invitamos mujeres.
Un juego que nos encanta es sorprender a algunos tipos en lugares públicos, como bares o boliches, para que se la cojana ella. Tipos que no son del ambiente de intercambios.
Por ejemplo, una vez estábamos en un bar, y había un flaco que no paraba de mirar a Zoe. Ella me comentó que el tipo legustaba, así que nos fuimos acercando de a poco hasta quedar al lado y buscamos una excusa boluda para empezar a conversar.
Zoe estaba abrazada a mi cuello y no perdía oportunidad de histeriquear al flaco, que se ponía nervioso pero se notaba que le encantaba el histeriqueo.
Después de un par de cervezas, Zoe fue al baño (para que yo avanzara con el juego) y me quedé hablando con este flaco que se llamaba Marcelo. Para dirigir la conversación hice un comentario sobre lo "aparato" que es Zoe; él se enganchó también diciendo que era divertida, que tenía suerte de estar con una chica así, y ese tipo de cosas.
Cuando le pregunté si le parecía atractiva, se quedó medio cortado, se puso colorado, tomó un trago de cerveza y me dijo tímidamente que si, como tratando de entender a donde apuntaba mi pregunta. Ahí traté de ayudarlo un poco, y le dije que éramos una pareja abierta, que nos gusta incorporar gente a nuestra intimidad, y directamente le pregunte si le gustaría cogerla.
El tipo me quedó mirando, como tratando de descubrir si le hablaba enserio, tal es así que, para tranquilizarlo, le aclaré que hablaba en serio, que se sintiera en confianza de responder.
“Obvio que me la cogería” me respondió, y siguió con mil preguntas sobre si no me daba celos, si realmente me gustaba que se la coja otro, y todas las preguntas que hacen los tipos que no entienden mucho que algunos nos guste que se cojan a nuestras parejas.
Estábamos en plena conversación cuando llegó Zoe del baño y me comió la boca con un beso descarado, claramente para calentara Marcelo. “Sabés que a Marcelo también le encantaría comerte la boca”, le dije a Zoe…. Automáticamente me miró con una sonrisita pícara y lo empezó a besar pegando todo su cuerpo al del flaco.
Marcelo, se prendió al toque, sin poder creerlo que estaba pasando. Era muy cómico ver las caras de asombro de más de uno que estaba alrededor, al ver que Zoe nos transaba a los dos.
Para hacerla más corta, nos fuimos del bar en mi auto. Como suele pasar en estos casos, ellos fueron sentados atrás, comiéndosela boca, manoseándose, y Zoe terminó chupándole la verga hasta llegar a mi casa.
La chupada de pija de Zoe duró hasta que paré el auto en el garaje y les abrí la puerta trasera. No les puedo explicarla cara de asombro del flaco cuando le pregunto a Zoe si estaba rico lo que se estaba comiendo, y ella se levanta con la cara toda babeada y mojada del líquido pre seminal, me da un beso de lengua, y me dice “mirá que rica que está”.
“¿Qué, también te gusta la pija?” mepregunta Marcelo sin poder creerlo.
“Sí, me encanta”, le respondo exagerando a propósito la naturalidad en la respuesta. “Pero no te preocupes, sólo lo hago con gente a la que le guste esta onda. Acá no vas a tener que hacer nada que note gusta”, le dije para tranquilizarlo.
Entramos a mi casa, serví tres wiskys y fuimos derecho a mi habitación. Ahí me recosté a un costado de la cama y los dejé hacer a ellos, disfrutando el espectáculo.
Tanto a Zoe como a mí nos encanta“perturbar”(sanamente) a los tipos que no conocen mucho del tema, exagerando la naturalidad con que ella se ofrece delante mío, y mi predisposición para entregarla y ayudar en todo al corneador de turno. A diferencia de otras relaciones con cuernos, el control lo tenemos Zoe y yo. En ningún momento se trata de ponerme deliberadamente en un lugar de sumisión, si no que actúo más como un cornudo colaborativo, complaciente de la puta de mi amorcito.
Muchos tipos se asustan de entrada cuando se enteran deque me gusta la pija, aclarando que son re machos, y que ellos no quieren saber nada con ese tipo de “mariconadas”, pero la gran mayoría terminan pidiéndome que les chupe la pija, sobre todo cuando se sienten alentados por Zoe que siempre lo pide.
Es muy curioso hasta donde llegan los prejuicios, porque consideran que tocar o chupar una pija es de putos, pero que te la chupe un macho, no ¡Jaja!
Para resumir lo que pasó con Marcelo, les cuento que le pegó flor de cogida a mi linda Zoe, con empomada de orto incluida, y toda mi asistencia como cornudo en estos casos, consistente en chupar cada tanto la pija del macho, guiarla hasta los agujeros de mi linda novia, y alentarlos para que gocen como marranos delante mío.
El polvo terminó con la carita y las tetas de Zoe llenas de leche de Marcelo, continuando con un beso apasionado entre ella y yo, lamiendo y saboreando la leche recién salida de la verga de Marcelo, y por ultimo dejándole la pija reluciente entre los dos.
Ni bien se fue Marcelo nos pegamos una garchada de novela, ya que mi verga estaba que explotaba después de ver la cogida que le acababan de dar a mi amorcito.
Espero que les haya gustado el relato sobre nuestras primeras andanzas con Zoe. Más adelante se vienen otros relatos sobre mis cuernos y también de mis cogidas con machos, sin mi amorcito presente.
Gracias nuevamente a todos los seguidores de estas historias por sus comentarios.
5 comentarios - Cuernos y más