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Compendio II
]Tengo que admitir que mi marido podría hacer lo que quisiera conmigo.
😅
Y no es malo.
Pero lo que digo yo es que él me puede convencer a todo súper fácil y yo le hago caso.
XD
Para que me entiendan, él no es un mandón conmigo.
Pero cuando hago algo que no le gusta, él me trata de convencer y yo siempre termino obedeciendo.
😆
Pero nunca me siento mal o pasada a llevar.
Siempre me deja con la opción de que me salga con la mía…
😈
Y encuentro que es mucho mejor que mi papá, que nos obligaba a mí, a mis hermanas y a mi mamá para que le hiciéramos caso a gritos.
Y lo que era más terrible todavía, que teníamos que hacer sí o sí las cosas a su manera.
:(
😟
En cambio, mi marido es así hasta con las pequeñas.
Y cómo será que lo quieren, que aunque no le gusten las cosas que él les pide (comer verduras, lavarse los dientes y cosas así), igual le obedecen, porque él también les hace caso con las cosas que ellas les piden.
😆
Pero bueno, al grano…
XD
Estaba yo en mis 7 meses, hinchada y aburrida y no sé por qué, pero mi Alicia mágica me hizo sentirme fea en mi embarazo.
La cosa fue que me quise hacer un tatuaje chiquitito, con forma de mariposa, como las que nuestras peques dibujan tanto y busqué un lugar limpio y certificado y todas esas cosas que sé que él se fija, para que se quedara tranquilo y yo me pudiera hacer mi tatuaje.
Pero se lo dije y él me puso “esa cara”…
😰
“Es que te va a quedar feo…”
“No, no me va a quedar feo.”
“Es que te vas a ver mal…”
😂
¡Y claro! Yo andaba en esos días súper sensible, que por casi todo me ponía a llorar…
😭
“¡Perdóname!... es que así, te encuentro muy elegante.”
😳
Y lógico que cuando él me dice esas cosas, yo quedo plop, porque obvio que él es el único que me ha dicho que me veo elegante.
Así que yo estaba colorada, colorada, hasta las orejas…
😊
“Si va a ser uno chiquitito… en mi hombro… ¡Piensa que me va a quedar como un lunar sexy!” le dije para convencerlo.
Y él me miró de esa forma seria y pensadora, que tanto me encanta y me respondió…
“¡Pero si tienes 14 lunares sexys!”
😮😳 😮
Y me lo dice de esa forma que no sé si creerle o no.
“¿Te los muestro?” y me pide que me de vuelta.
😕
Yo, o sea, igual le obedecí, porque le conozco súper bien y sé que él y como mi pequeña señorita también lo hace, cuenta cosas, como las baldosas, los pasos que damos hasta el ascensor y cosas así.
Pero es que en 4 años de casados, a mí nunca se me ha ocurrido contar sus lunares.
¡Y me besó súper suavecito mi hombro derecho!
😮 😂
¡Me dio risa, porque me pasó su lengua alocada!
“Ahí, tienes un puntito…” me dijo, dándome un chupetón medio mordisqueado, pero súper rico.
Después, fue bajando y me dio unos chupones por la cintura, haciéndome sentir mis lunares cariñosamente…
Pero entonces, llegó a mi trasero…
😲 😲 😲
“¡Aquí, tienes uno muy bonito y sexy, que parece chispa de chocolate!”
Y ¡Zas! Que me da un mordisco…
😫😫 😫
O sea, él siempre me muerde esa parte del trasero.
Pero nunca pensé que fuera porque tengo un lunar ahí.
Y o sea, está bien, tengo un buen trasero…
😊
Pero eso hace que mi colita se empiece a excitar y pensar en lo rico que es cuando me mete su lindo chorizo rosado y me lo estira y perfora…
:P
Así que ya no estaba tan preocupada por el tatuaje.
Pero él es lindo y me ama.
Y si me dijo que me iba a mostrar mis lunares, lo iba a hacer y no solo para excitarme.
😍 😆
Me lamió mi muslo derecho súper dulce.
Sonará medio raro, pero fue como una babosa tibia haciéndome cariñito y yo, ya estaba empezándome a mojar heavy por mi conchita.
😵 😲
Entonces, me pidió que me diera vuelta…
¡Y me miró con esos ojitos que tanto, tanto, tanto me encantan!
😍 😍
De esa forma tierna y calientita…
Como cuando solamente éramos buenos amigos y me hacía clases…
Y me hizo un cariñito en mejilla derecha.
😊 😭
Yo sentía agua en mi pecho y mis ojitos, muy mojados.
Porque muchos me han dicho que tengo lindos ojos y un buen trasero…
Pero solamente él se ha fijado en ese lunar tan chiquitito que tengo en la mejilla y que se esconde cuando sonrío.
(Aparte de también, ser el único que me dice que soy elegante…XD)
😍 😍
“El siguiente, lo tienes en tu pecho izquierdo…” me dijo él, todo colorado.
“Ok…” le respondí yo, recontra nerviosa.
😳 😳
Es que díganme ustedes cómo se sentirían, si la persona que más quieres, más amas en todo el universo y espacio sideral, te dice que te va a besar la parte que más le gusta de ti a esa persona.
😩 😲
Y es que mis pechitos estaban parados, con mis frutillitas duras como diamantes y apuntando al cielo, llenas de lechecita de mamá, para que papá se pusiera a besarlas sin atendérmelas…
😣 😣 😣
Y él, enterrando su carita entre todo mi pecho, con mi corazoncito latiendo a mil por hora y haciéndome un cariñito para mover mi carne y pasarme la lengua que me volvía loca…
😫 😖
¡Qué cosa más loca!
Y luego bajó más, a mi cintura y me lamió por los costados de mi bebita, mientras que yo tenía que morderme la mano, de lo hinchada, parada y terriblemente apetitosa cosota de mi marido…
:P 😛 :P
Y entonces, me remató, diciendo…
“El último lunar lo tienes aquí, en tu muslo izquierdo…”
¡Y fue asombroso!
😵 😲
¡Me lamió tan rico y tan cerca de mi conchita!
Yo babeaba, temblaba y me sentía a punto de explotar de gozo…
Y cuando me atendió la conchita, subí al cielo y toqué ángeles…
😫 😖
Lo sentía lamerme los pliegues y chuparme, chuparme, chuparme, que me volvía loca…
Esa satisfacción tremenda de enterrar la cara de tu mejor amigo en lo más intimo y profundo que tienes y no querer soltarlo…
Y que él no quiera soltarse tampoco, no tiene precio…
😩 😖
Pero eso era solamente la apertura.
Porque él también sigue siendo un hombre y tiene necesidades.
Pero también, sigue siendo mi mejor amigo, que todavía se preocupa mucho por mí.
Así que luego de enterrarla solamente un poquito, me miró a los ojos y me ayudó a ponerme encima.
😊 😊
Es que a los 2 nos preocupaba que no fuéramos a lastimar a nuestra Alicia.
Y me miró con esos ojitos lindos, tan tiernos, tan comprensivos que él tiene y me dijo…
“Si te quieres hacer un tatuaje, estaré de acuerdo. Tu cuerpo es mi cuerpo y el mío, es tuyo también. Pero yo me enamoré de este cuerpo fino y elegante y a este cuerpo, le pedí que fuera mi esposa y me imaginé llegar a viejo junto a él. Pero si no quieres, sabré entenderte…”
😭 😂
Y diciendo nada más, nos empezamos a amar tiernamente.
Sentirlo hincharme, romperme, hacerme sentir llena…
Eso necesitaba yo de él.
😩 😖
Y hacerme sentir linda, incluso cuando yo misma no me sentía así.
Que me amara tan rico, tan tierno y tan dulcecito, como él siempre ha sido conmigo.
Eso era lo que necesitaba.
Y sentir su respeto en su forma de tocarme, de mirarme, de hacerme sentir querida, es lo que me mueve cada día.
😫 😖
Y pienso que la forma de hacer el amor esos días era tan recontra rica…
Porque él respetaba más mis pechos.
Y mi barriga no me dejaba acercarme tanto a él y sus ricos labios.
Y la forma de meterse en mí y salirse, me volvía archi recontra loca.
Porque su enormidad se sentía más gigante, poderosa y caliente dentro de todo mi ser.
Y cuando yo sentía que me vibraban los ojos y que no podía aguantar mi gozo sin aullar como una sirena, que sentí su bálsamo adentro de mí.
💦💦 💦 💦
Fue perfecto.
Maravilloso.
Me hizo sentir mujer entera y plena.
Los ojos me palpitaban y babeaba sin parar, pero él me acariciaba a mi Alicia mágica con sus manitas tiernas.
Nos miramos y sin decirnos palabras, nos dijimos que nos amábamos.
Y nos acostamos lado a lado, para poder besarnos como tanto, tanto, necesitábamos.
😆 😆
Y esa es la historia de cómo no me hice mi tatuaje…
Y de cómo él me convence siempre, para ver las cosas a su manera.
😉
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2 comentarios - Como un lunar sexy en el hombro…