Como siempre este relato es absolutamente real.
Si bien siempre me gustaron las mujeres, hace un tiempo empecé a sentir curiosidad sobre como sería manosear otra pija o hasta chuparla. Siempre veía videos de chicas chupando y me volvía loco hasta que un día empecé a fantasear con estar del otro lado, ser el que estaba arrodillado.
Hace poco tiempo hablé con un poringuero por acá que en su post mostraba una linda pija, muy parecida a la mia. Acordamos un día algo rápido y llegué a la casa, me abrió la puerta y me senté en el sillón de su casa. Enseguida se bajó el pantalón dejando a la vista el boxer, empecé a tocarlo así por arriba y ví lo dura que estaba. No tardé ni un minuto en sacarla y empecé a pajearlo, mientras que él hacía lo mismo conmigo. Me paré, juntamos las pijas y era una sensación rarísima, por momentos dudaba de lo que estaba haciendo pero a los dos segundos se la estaba pajeando como loco. En un momento no aguanté más la calentura y le dije "la quiero probar" Ahí nomás bajé y me apoyé la pija en los labios, estaba durísima, calentita.. Le pasé la lengua y en menos de un minuto estaba metiendomela en la boca. La chupé así un rato, la cabeza, los huevos, le pasaba le lengua por toda la verga y el me pedía que me la trague toda. Una sensación super rara pero a la vez excitante. El también me la chupó un rato y al poco tiempo recostado se empezó a tocar más fuerte y acabó leche por todos lados. Le toqué la pija toda enlechada un poco más y acabé también sobre su verga.
La verdad es que no me animé a probar la leche por una cuestión de cuidarme un poco pero ganas no me faltaron.
Así sin más, me despedí y me fui pensando en que acababa de chuparle la pija a otro hombre.
Si bien siempre me gustaron las mujeres, hace un tiempo empecé a sentir curiosidad sobre como sería manosear otra pija o hasta chuparla. Siempre veía videos de chicas chupando y me volvía loco hasta que un día empecé a fantasear con estar del otro lado, ser el que estaba arrodillado.
Hace poco tiempo hablé con un poringuero por acá que en su post mostraba una linda pija, muy parecida a la mia. Acordamos un día algo rápido y llegué a la casa, me abrió la puerta y me senté en el sillón de su casa. Enseguida se bajó el pantalón dejando a la vista el boxer, empecé a tocarlo así por arriba y ví lo dura que estaba. No tardé ni un minuto en sacarla y empecé a pajearlo, mientras que él hacía lo mismo conmigo. Me paré, juntamos las pijas y era una sensación rarísima, por momentos dudaba de lo que estaba haciendo pero a los dos segundos se la estaba pajeando como loco. En un momento no aguanté más la calentura y le dije "la quiero probar" Ahí nomás bajé y me apoyé la pija en los labios, estaba durísima, calentita.. Le pasé la lengua y en menos de un minuto estaba metiendomela en la boca. La chupé así un rato, la cabeza, los huevos, le pasaba le lengua por toda la verga y el me pedía que me la trague toda. Una sensación super rara pero a la vez excitante. El también me la chupó un rato y al poco tiempo recostado se empezó a tocar más fuerte y acabó leche por todos lados. Le toqué la pija toda enlechada un poco más y acabé también sobre su verga.
La verdad es que no me animé a probar la leche por una cuestión de cuidarme un poco pero ganas no me faltaron.
Así sin más, me despedí y me fui pensando en que acababa de chuparle la pija a otro hombre.
17 comentarios - Hice un pete
Uno se siente más completo si prueba de todo!
Y nadie mejor para chuparla que el que sabe como le gusta que se la chupen!