Más historias de mujerespelirrojas, amigas y supercalientes. María Clara, ustedes saben, es amiga deMaría Teresa y la quiere tanto que siempre la llama para que la gordota le décon todo su poderío. Algo parecido con Susy Guerrero, la doctora de Tere, aquien se empomó varias veces. Pero ahora tiene una nueva amiga y pareja desexo. Porque Ana María no sólo vive de su vecina Estela.
María Teresa siempre le cuenta atodas de su vida. Y parece que en el finde largo, le contó a Ana María de MaríaClara. La delgada morocha, con un sandwich en la mano, le empezó a pregunntarde Clarita más y más. Teresa le contó y repreguntó por qué tanta curiosidad, yAna dijo que nunca la había conocido y quería saber de ella, como si fuera unacelebridad. En realidad, quería conocerla para ciertas cosas, pero no le dijonada a Teresa, que igual le dio el mail de Clara para que le escribiera y talvez arreglara algo. Ana le mandó y María Clara le respondió con onda, muy bien,encantada de conocerla. Ana siguió y le dijo de comer con ella, y Clara lainvitó de una a su casa, así como así. "Sí, mi amor, encantada de conocerte,venite y te convido con algo y charlamos", dijo Clara. Ana María leofreció llevarle algo ella, arreglaron y nomás, el miércoles pasado, fue a lacasa de María Clara acá en Carapachay, recordemos cerca de María Teresa.
Se ve que Clara se quedóexcitadita e intuyó lo de la otra, y resolvió llamar a María Teresa y pedirleprestado su conjunto de ropa de cuero, ya que ella no suele usar. Tere seextrañó y la otra le explicó, y entonces la gordota chocha dijo sí, contenta delo que supuestamente iba a hacer su amiga. Fue, merendó con ella el martes y lellevó su campera y pollera de cuero negra. María Clara se la probó, quedóencantada, se lo pagó a Teresa con un besote largo en la boca, y al díasiguiente, excitada, le mandó un Whatsapp a Ana María diciéndole mimosona quela esperaba con todo ordenadito y linda. "Sí, dulce, ponete elegante queyo también me voy a poner linda, así nos conocemos hermosas", comentabaAna con otro Whatsapp de voz muy caliente. Nomás, Ana María fue de tapado largomarrón, tacos, muy maquillada y de rico y fuerte perfume,cartera fina y conpaquete con fiambre para el almuerzo. Desde ya la mujer llevaba su carteróncargado de todo tipo de artillería, desde juguetes hasta látigo, cordón paraatar a su nueva amiga, cremita, lubricante, polvillo estimulante, todo. MaríaClara, por su parte, se vistió nomás con la ropa de cuero negra, medias negras,tacos altos, se maquilló y perfumó fuerte, se puso mucha joya y hasta se colocócremita para las manos.
Y cuando sonó su timbre, casi sehace encima la bombacha al ver que era Ana. María Clara abrió, la vio y saludóa Ana María y ambas se abrazaron y besaron normal pero ya medio mimosonas."Mi amooor, qué linda que estás, toda de cuero, mirala vos quécoqueta", fue el comentario de Ana María, que se volvió loca al ver lavestimenta de María Clara, aparte viendo que la otra se dio cuenta de lo queAna quería. Ana preparó el fiambre en bandejas, acomodó todo y al rato, las dosmujeres se conocieron como querían mientras degustaban sandwiches de fiambrecon mayonesa, que Ana preparaba gentil a su nueva amiga. Las dos muy dulces,amables, con ganas pero aún no se desbocaban, se reían y charlaban animadas,sandwich en la mano. Luego María Clara le convidó postre con dulce de leche aAna, ésta le agradeció de forma demasiado cariñosa, abrazándola fuerte y largorato. Clara intuyó que la otra venía a darle, comió con ella pegadita, le dijoun par de cosas lindas, gracias, sos re dulce, vos también, esto, lo otro.Tanto, que terminaron en que Ana no resistió, la tomó suave de la pera y le dioa María Clara un beso en su boca roja con brillo. y María Clara, chocha, se lodevolvió.
Y ésa fue la mecha que encendióla bomba. Las dos se besaron más, mimos, cosas dulces, más mimos, ma´s besos."Mmm, mi amor, cómo me gustan tus besos", decía caliente María Clara."¿Te gustan mi amor? ahí te doy otro", decía Ana y le daba buenbesote. La siguieron un rato más, y de pronto explotaron: Ana María la agarróde un brazo, la llevó excitada y furiosa a una pieza, María Clara se dejóarrastrar, y cuando estuvieron adentro, se fue todo a la concha de su putamadre. Ana María la aplastó contra la pared, María Clara gustó, pidió besos, laotra le dio y la manoseó, empezaron a jadear, Ana le dijo que quería conocerla bieny le fue sacando ropa, Clara le contestó que le gustaba, todo que le gustaba.Al fin, ambas en corpiño y bombacha, Ana María explotó más al ver el conjuntitode su mujer, la volvió a aplastar, se quitó todo en segundos, Clara se hizoencima al verla en bolas, Ana vio que se mojaba y le exigió sacarse la ropa.María Clara se quitó suave el corpiño, le puso sus lindas tetas en la cara, Anase las apretujó loca mientras abría su cartera lista para hacerle de todo. Ynomás, María Clara se sacó su bombacha y exclamó jadeando "reventame Ana,dame con todo".
Y Ana la reventó, pero reventó enserio. Primero la volvió a aplastar contra la pared, manoseó y le besó todo,Clara volvió a largar flujo, Ana sacó el cordón, le dijo cosas puercas y trasdarle con un látigo, la ató a una silla reclinable, la abrió de piernas, agarrócrema de su cartera, le pasó despacito para que Clara siguiera en llamas. Ana María terminó, guardó lacrema, le dijo "cerrá los ojitos" y cuando Clara obedeció, la mujerle metió un grueso y larguísimo juguete de plástico en su vagina. María Claragritó de placer y Ana María le dio con ése, otro más, otro y al final le frotócon un pene de plástico, duro y parejo, sostenido y con furia, hasta que ambasexplotaron de flujo y orgasmo como un trueno. Pero ahín o terminó Ana María,que siguió dándole con el látigo, Clara encantada, y la violó atada por cola, ambasvías y le dio su flujo para que tragara, y la otra chocha tragó. Ana la desató,le dio látigo, la tiró en la cama, la abrió y tras zambullirse, completamenteestimulada, la volvió a coger con plástico, pene, cuchillo de untar, le metiódedos, vagina, cola, ambas vías, todo. Luego de parada, luego la llevó asídesnuda a la cocina y tras encremarla de nuevo le dio ahí. Y mientras le dabalátigo y la amenazaba para excitarla más, se la cogió en el baño, de nuevo en lapieza y luego la empomó contra la puerta de la heladera, haciéndola largarflujo a chorros. María Clara disfrutó loca de amor y placer la furia,alienación, potencia y salvajismo de Ana María, que no sólo la cogió sino quele pasó manos, lengua, boca y dedos por donde se le cantó, aparte de decirle detodo.
Tipo cinco ambas terminaronexhaustas pero chochas. Y tras largo besote, se lavaron y vistieron, MaríaClara con ropa más normal, y la convidó a Ana María con merienda, café conleche, tostadas, queso y mermelada, y las dos cerraron con merienda a los mimosy besos limpios. María Clara le agradeció a Ana la cogida, aquélla haberlaconocido. Un gusto, se dijeron, y tras nuevo besote Ana María se fue chocha asu casa, mientras Clara se quedó chocha en la suya, con una nueva experiencia conmujeres inolvidable. Vale la pena conocer una nueva amiga, si te coge tan bien.
María Teresa siempre le cuenta atodas de su vida. Y parece que en el finde largo, le contó a Ana María de MaríaClara. La delgada morocha, con un sandwich en la mano, le empezó a pregunntarde Clarita más y más. Teresa le contó y repreguntó por qué tanta curiosidad, yAna dijo que nunca la había conocido y quería saber de ella, como si fuera unacelebridad. En realidad, quería conocerla para ciertas cosas, pero no le dijonada a Teresa, que igual le dio el mail de Clara para que le escribiera y talvez arreglara algo. Ana le mandó y María Clara le respondió con onda, muy bien,encantada de conocerla. Ana siguió y le dijo de comer con ella, y Clara lainvitó de una a su casa, así como así. "Sí, mi amor, encantada de conocerte,venite y te convido con algo y charlamos", dijo Clara. Ana María leofreció llevarle algo ella, arreglaron y nomás, el miércoles pasado, fue a lacasa de María Clara acá en Carapachay, recordemos cerca de María Teresa.
Se ve que Clara se quedóexcitadita e intuyó lo de la otra, y resolvió llamar a María Teresa y pedirleprestado su conjunto de ropa de cuero, ya que ella no suele usar. Tere seextrañó y la otra le explicó, y entonces la gordota chocha dijo sí, contenta delo que supuestamente iba a hacer su amiga. Fue, merendó con ella el martes y lellevó su campera y pollera de cuero negra. María Clara se la probó, quedóencantada, se lo pagó a Teresa con un besote largo en la boca, y al díasiguiente, excitada, le mandó un Whatsapp a Ana María diciéndole mimosona quela esperaba con todo ordenadito y linda. "Sí, dulce, ponete elegante queyo también me voy a poner linda, así nos conocemos hermosas", comentabaAna con otro Whatsapp de voz muy caliente. Nomás, Ana María fue de tapado largomarrón, tacos, muy maquillada y de rico y fuerte perfume,cartera fina y conpaquete con fiambre para el almuerzo. Desde ya la mujer llevaba su carteróncargado de todo tipo de artillería, desde juguetes hasta látigo, cordón paraatar a su nueva amiga, cremita, lubricante, polvillo estimulante, todo. MaríaClara, por su parte, se vistió nomás con la ropa de cuero negra, medias negras,tacos altos, se maquilló y perfumó fuerte, se puso mucha joya y hasta se colocócremita para las manos.
Y cuando sonó su timbre, casi sehace encima la bombacha al ver que era Ana. María Clara abrió, la vio y saludóa Ana María y ambas se abrazaron y besaron normal pero ya medio mimosonas."Mi amooor, qué linda que estás, toda de cuero, mirala vos quécoqueta", fue el comentario de Ana María, que se volvió loca al ver lavestimenta de María Clara, aparte viendo que la otra se dio cuenta de lo queAna quería. Ana preparó el fiambre en bandejas, acomodó todo y al rato, las dosmujeres se conocieron como querían mientras degustaban sandwiches de fiambrecon mayonesa, que Ana preparaba gentil a su nueva amiga. Las dos muy dulces,amables, con ganas pero aún no se desbocaban, se reían y charlaban animadas,sandwich en la mano. Luego María Clara le convidó postre con dulce de leche aAna, ésta le agradeció de forma demasiado cariñosa, abrazándola fuerte y largorato. Clara intuyó que la otra venía a darle, comió con ella pegadita, le dijoun par de cosas lindas, gracias, sos re dulce, vos también, esto, lo otro.Tanto, que terminaron en que Ana no resistió, la tomó suave de la pera y le dioa María Clara un beso en su boca roja con brillo. y María Clara, chocha, se lodevolvió.
Y ésa fue la mecha que encendióla bomba. Las dos se besaron más, mimos, cosas dulces, más mimos, ma´s besos."Mmm, mi amor, cómo me gustan tus besos", decía caliente María Clara."¿Te gustan mi amor? ahí te doy otro", decía Ana y le daba buenbesote. La siguieron un rato más, y de pronto explotaron: Ana María la agarróde un brazo, la llevó excitada y furiosa a una pieza, María Clara se dejóarrastrar, y cuando estuvieron adentro, se fue todo a la concha de su putamadre. Ana María la aplastó contra la pared, María Clara gustó, pidió besos, laotra le dio y la manoseó, empezaron a jadear, Ana le dijo que quería conocerla bieny le fue sacando ropa, Clara le contestó que le gustaba, todo que le gustaba.Al fin, ambas en corpiño y bombacha, Ana María explotó más al ver el conjuntitode su mujer, la volvió a aplastar, se quitó todo en segundos, Clara se hizoencima al verla en bolas, Ana vio que se mojaba y le exigió sacarse la ropa.María Clara se quitó suave el corpiño, le puso sus lindas tetas en la cara, Anase las apretujó loca mientras abría su cartera lista para hacerle de todo. Ynomás, María Clara se sacó su bombacha y exclamó jadeando "reventame Ana,dame con todo".
Y Ana la reventó, pero reventó enserio. Primero la volvió a aplastar contra la pared, manoseó y le besó todo,Clara volvió a largar flujo, Ana sacó el cordón, le dijo cosas puercas y trasdarle con un látigo, la ató a una silla reclinable, la abrió de piernas, agarrócrema de su cartera, le pasó despacito para que Clara siguiera en llamas. Ana María terminó, guardó lacrema, le dijo "cerrá los ojitos" y cuando Clara obedeció, la mujerle metió un grueso y larguísimo juguete de plástico en su vagina. María Claragritó de placer y Ana María le dio con ése, otro más, otro y al final le frotócon un pene de plástico, duro y parejo, sostenido y con furia, hasta que ambasexplotaron de flujo y orgasmo como un trueno. Pero ahín o terminó Ana María,que siguió dándole con el látigo, Clara encantada, y la violó atada por cola, ambasvías y le dio su flujo para que tragara, y la otra chocha tragó. Ana la desató,le dio látigo, la tiró en la cama, la abrió y tras zambullirse, completamenteestimulada, la volvió a coger con plástico, pene, cuchillo de untar, le metiódedos, vagina, cola, ambas vías, todo. Luego de parada, luego la llevó asídesnuda a la cocina y tras encremarla de nuevo le dio ahí. Y mientras le dabalátigo y la amenazaba para excitarla más, se la cogió en el baño, de nuevo en lapieza y luego la empomó contra la puerta de la heladera, haciéndola largarflujo a chorros. María Clara disfrutó loca de amor y placer la furia,alienación, potencia y salvajismo de Ana María, que no sólo la cogió sino quele pasó manos, lengua, boca y dedos por donde se le cantó, aparte de decirle detodo.
Tipo cinco ambas terminaronexhaustas pero chochas. Y tras largo besote, se lavaron y vistieron, MaríaClara con ropa más normal, y la convidó a Ana María con merienda, café conleche, tostadas, queso y mermelada, y las dos cerraron con merienda a los mimosy besos limpios. María Clara le agradeció a Ana la cogida, aquélla haberlaconocido. Un gusto, se dijeron, y tras nuevo besote Ana María se fue chocha asu casa, mientras Clara se quedó chocha en la suya, con una nueva experiencia conmujeres inolvidable. Vale la pena conocer una nueva amiga, si te coge tan bien.
0 comentarios - Ana María conoció y le dio bien a María Clara