A veces, escuchamos a una mujer pronunciar lasmismas palabras que recorren tu mente e invocan imágenes de placeres que yapasaron.
"Me encamo con mi hermano porque mehace bien sentir su píja dura dentro de mí", incluso ahora que escriboestas palabras, me siento mojado y anhelo ponérsela hasta el fondo a ellaencima de mío.
Sexo, y me refiero a sexo realmente bueno,lo mejor que puedes experimentar, no tiene relación de parentezco, estas sonsolo barreras y mitos para limitar el miedo y cuando nombro esos límites,quiero decir, cuando una chica, quiere sentir a un hombre dentro ella,únicamente por placer sexual, ¿a quién elegir cuando su familia está a sualrededor?
Cuantos hombres entre nosotros han visto auna hermana, a una madre, a una tía o prima, desnudas y te excitas. Y habiendorobado una mirada furtiva sobre sus pechos abultados y el trasero, se voltearon yse alejaron diciendo: 'No puedo', porque tu pija es adorable. Tu la quieres yesa es la verdadera biología del asunto, la madre naturaleza se extendería laspiernas, como lo hice cuando mi hermana vino a llamar esa mañana, y me despertéal encontrarla de pie junto a mi cama, masturbándome, con su concha empapada acentímetros de mi cara, ¿qué tan diferente se sentía ella, cuando el glande sehumedeció con mi saliva y él bombeó su leche fraternal en su boca?
"Me encamo con mi hermano porque mehace bien sentir su píja dura dentro de mí", incluso ahora que escriboestas palabras, me siento mojado y anhelo ponérsela hasta el fondo a ellaencima de mío.
Sexo, y me refiero a sexo realmente bueno,lo mejor que puedes experimentar, no tiene relación de parentezco, estas sonsolo barreras y mitos para limitar el miedo y cuando nombro esos límites,quiero decir, cuando una chica, quiere sentir a un hombre dentro ella,únicamente por placer sexual, ¿a quién elegir cuando su familia está a sualrededor?
Cuantos hombres entre nosotros han visto auna hermana, a una madre, a una tía o prima, desnudas y te excitas. Y habiendorobado una mirada furtiva sobre sus pechos abultados y el trasero, se voltearon yse alejaron diciendo: 'No puedo', porque tu pija es adorable. Tu la quieres yesa es la verdadera biología del asunto, la madre naturaleza se extendería laspiernas, como lo hice cuando mi hermana vino a llamar esa mañana, y me despertéal encontrarla de pie junto a mi cama, masturbándome, con su concha empapada acentímetros de mi cara, ¿qué tan diferente se sentía ella, cuando el glande sehumedeció con mi saliva y él bombeó su leche fraternal en su boca?
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