Y así fue que llegué a casa después de acompañar a Carmen a ver esos nuevos proveedores, leí un poco antes de cenar, y después lo de siempre, esperar que todos vayan a la cama, y por último ver que todo estaba en condiciones para poder pasar a echarme ese polvo prometido por la abuela, fuí a mi habitación me desvestí, quede solo con mi calzoncillo, entreabrí la puerta mire si todo estaba tranquilo y me mandé a la habitación de la abuela Clara, entré , estaba el velador prendido, y en la cama me esperaba mi amante incestuosa, boca abajo, desnuda, con la sábana cubriendola de la cintura para abajo, nene como te haces desear, sabes cuanto hace que te espero, si , le dije, estaba esperando que todo estuviera tranquilo para venir, bueno apuráte dijo , tirando la sábana a un costado, preparame bien el culo para comerme esa poronga que estoy esperando desde la tarde, sin necesidad de que lo repitiera me tiré a su lado, comenzando a abrirle las nalgas con mis manos, hasta que su agujero quedó expuesto ante mis ojos , lo besé suavemente, intercalando los besos con mordidas tenues en los interiores de sus cachetes, guacho eso ¿donde lo aprendiste?, núnca me lo habías hecho, shh! calláte putita , que en este culo mando yo, y hago lo que quiero, le dije y comencé a mojarle el orificio anal con mi lengua, ante lo cual abrió sus esfinteres, haciendo que mi lengua se introdujera todo lo posible en su interior, si así movela y dilatáme el conducto para ponerme crema y que me entre lo más profundo que puedas, seguí unos momentos más, hasta que saqué la lengua, me incorporé y saqué mis calzoncillos, en ese momento la abuela estiró la mano dandome una crema que tenía preparada en la mesa de luz para que la lubricara antes de cogerle el orto, la agarré , me ubiqué detrás de ella, ,e hice poner una almohada abajo para tener su cola más alta y poder penetrarla mejor, destapé la crema y me detuve, la deje a un costado y pensé ¿quería que le rompiese el culo?, se lo voy a romper, agarré otra almohada y se la acerqué a la boca, Clara si te duele mordé esto pero no grites, ja,ja,ja, se rió, así que me vá a doler, no m hagás reir, por las dudas te aviso, me reacomodé detrás suyo, la hice que abriera bien los cantos y le mentí, voy a ponerte la crema, con mi mano derecha guié mi poronga re dura por lo que iba a hacer, mi mano izquierda la apoyé en el nacimiento de su raya, acerqué mi pija a su orto y empujé de un saque, mi garcha mojada por sus propios jugos patinó dentro del estrecho conducto anal de la abuela, quien esbozó un comienzo de grito que enseguida acalló mordiendo la almohada, mordía con tanta fuerza ante cada embestida mía dentro de su culo que la almohada terminó rota, casi igual que su orto, que si bien otras veces yo había visitado, esta vez me pareció más cerrado y apretado, dándome la sensación de haber metido mi miembro dentro de un guante de seda, cuando la saqué y me tiré a su lado, pasandole mi brazo por su cintura, de su culo empezó a derramarse parte de la leche que le había desagotado en su interior, turro hoy si que me garchasre bien el culo, te juro que me duele, pero me dejaste llena, me alegro le dije mientras le comía la boca con un beso de lengua apasionado, después a boca de jarro le pregunté ¿que paso entre Carmen y mamá?, porque hoy me dijo cuando veniamos en el auto que algún día me contaría, mira nene yo no sé que paso entre ellas, solo sé que eran muy amigas, salían siempre juntas, hasta que un día dejaron de verse de golpe, yo creo que por algún muchacho, y siempre tuve la impresión que tu viejo se la había garchado, cuando ya estaba de novio con tu madre, pero núnca logré saberlo, así que ahora te toca a vos descubrirlo, ahora andá lavate y andá a dormir, que más tarde cuando se me pase este dolor en el orto voy yo a lavarme, y a ponerme hielo en el culo.
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