Enmi departamento de veraneo allá en Mardel no suelo andar mucho con los vecinos, pero estavez lo hice y valió la pena. Con frecuencia, cuando salía me encontraba con Eli,una linda y rubia mujer que vivía ahí en el pizo, de unos 55 y parece separada,que me saludaba y me acompañaba a la playa a la mañana y en algún otro momento. Ytal onda pegamos que la divina me convidó a comer en su lugarcito un martes porla noche. Yo ya venía, imaginen, tentadito de verla en malla y encremadita enla playa, así que me excité y tras bañarme me puse abundante perfume fuerte, mevestí muy bien de saco, camisa, pantalón fino y zapatos, demasiado lindo parasólo una cena con una vecina. Pero estuve joya, porque cuando Eli me abrió y merecibió la vi espectacular, remera blanca sin mangas, pollera amplia blancafina y tacos, muy maquillada y de exquisito perfume. La dulce mujer mebesuqueó, me dejó todo pintado, me limpió y tras elogiarme por mi pinta mesentó en el comedor con todo preparadito. La noté muy dulce, tal vez demasiado.Y encima cuando dijo: "Estás muy lindo Diegui, bueno, vos sos muylindo". Yo dije: ésta se copó de mi pinta o quiere algo más. Mejor, porqueyo estaba que volaba apenas verla. Nomás Eli me preparó y convidó sandwiches defiambre y queso roquefort, espectaculares, y encima con huevo, que me encanta yayuda a mi rendimiento, y por supuesto la mayonesa. Así que excitado por ella yla cena, comí y la pasé genial en noche preciosa en lo de la marplatense, loque después me contó. Curioso como soy, le pregunté primero liviano, que sinació acá, que qué onda la gente, los alfajores, todo. Mientras ella me hacíaun sandwich de jamón y queso con mucho huevo gordo, me contaba de su vida, quese separó, que sus hijas, que esto, lo otro. Aproveché, mirá si me iba aquedar, y le alabé qué bien su maquillaje, y le pregunté si usaba cuero, dóndecompró, si tacos, y como la rubia me respondía re onda que sí y con detalles,seguí y qué usaba para dormir. Ahí se extrañó pero me contó, aproveché y ledije de quedarme a dormir ahí. Y eli dijo sííí, así, de re onda. Yo estaba porexplotar, más cuando luego de unos mimos levantó todo y me trajo un par dealfajores de Mardel.
Ycómo resistir, rubia, maquillada, madura, cariñosa, fiambre, huevo, postre,intimidades, dormir. Tras el postre y un rato ahí, Eli me llevó a una piezapara que me desvistiera y acostara. Le pedí zorro que me ayudara a sacarme laropa, mirá qué grandullón, y la tipa, que yo empezaba a sospechar, no sólo mefue sacando sino que me acariciaba. Dale que te dale, me fui calentando, noresistí y exploté. Apenas me quedé en calzón, la agarré y le di un beso en lacara mientras le bajaba la pollera. La mujer se quitó nomás la pollera, la tiróal suelo y me llevó a su pieza. Ah, quería coger la marplatense.
Yasí fue nomás. Eli jugueteó, me mimó, nos besamos, acariciamos, fuimos subiendode temperatura, y qué te digo cuando la vecinita mía se quitó el corpiño y pelótremendas tetas, me le fui encima, la aplasté contra un placard y las apretujé,besé y chupé nloquecido. Eli me acarició mi torso desnudo, se me paró la pijotay le pedí jadeando que me sacara el calzón. La mujer me lo sacó, me alabóexcitada mi penacho y al fin, Eli se sacó su fina bombacha. Y me le zambullíencima y la penetré con violencia y furia por su vagina. Gracias al huevo, que comíbastante con el fiambre, el pene estaba firme, grueso y durísimo, así que le dicon todo, excitado por lo provocativa, la cena, su aroma, todo. Ah, ah, ah, ahy ah, cabé: eyaculé impresionante semen en la vagina de Eli, que pegó lindoalarido y largó su flujo en violento orgasmo. Enloquecido, parecía drogado, lasujeté, la retorcí, la di vuelta con fuerza, la puse abajo y la cogí por la cola,inundándola de semen hasta rabiar. Jadeos, grité de placer, ella también, melamió y tragó mi semen, le pasé el penacho y Eli excitada lo mimó y besó, me lopreparó bien y se la di de nuevo por su vagina. Pero tal fue la acciónvigorizante del huevo que le di seis veces más. Vagina, cola, ambas vías, semena torrentes en su cara, boca, pelo y manos, Eli tragó, lamió, me dio suflujo,lo tragué y la rematé con otro por vagina y espeso semen.
Tanexcitado quedé con la mujer local que arreglé para otra noche antes de volver,y de lo caliente le pedí cremita y una bombacha suya. Fui a mi cuarto, me pusela bombacha en lugar de mi calzón que ella me guardó, me pasé crema y, qué lesparece, mientras Eli dormía llenita de semen y en fino camisón, yo me di contodo y volví a acabar semen en las sábanas de la cama de invitados. Casi mequedo sin leche para la próxima. Pero bueno, cuando el huevo y las mujeresllaman, cómo decir que no.
Ycómo resistir, rubia, maquillada, madura, cariñosa, fiambre, huevo, postre,intimidades, dormir. Tras el postre y un rato ahí, Eli me llevó a una piezapara que me desvistiera y acostara. Le pedí zorro que me ayudara a sacarme laropa, mirá qué grandullón, y la tipa, que yo empezaba a sospechar, no sólo mefue sacando sino que me acariciaba. Dale que te dale, me fui calentando, noresistí y exploté. Apenas me quedé en calzón, la agarré y le di un beso en lacara mientras le bajaba la pollera. La mujer se quitó nomás la pollera, la tiróal suelo y me llevó a su pieza. Ah, quería coger la marplatense.
Yasí fue nomás. Eli jugueteó, me mimó, nos besamos, acariciamos, fuimos subiendode temperatura, y qué te digo cuando la vecinita mía se quitó el corpiño y pelótremendas tetas, me le fui encima, la aplasté contra un placard y las apretujé,besé y chupé nloquecido. Eli me acarició mi torso desnudo, se me paró la pijotay le pedí jadeando que me sacara el calzón. La mujer me lo sacó, me alabóexcitada mi penacho y al fin, Eli se sacó su fina bombacha. Y me le zambullíencima y la penetré con violencia y furia por su vagina. Gracias al huevo, que comíbastante con el fiambre, el pene estaba firme, grueso y durísimo, así que le dicon todo, excitado por lo provocativa, la cena, su aroma, todo. Ah, ah, ah, ahy ah, cabé: eyaculé impresionante semen en la vagina de Eli, que pegó lindoalarido y largó su flujo en violento orgasmo. Enloquecido, parecía drogado, lasujeté, la retorcí, la di vuelta con fuerza, la puse abajo y la cogí por la cola,inundándola de semen hasta rabiar. Jadeos, grité de placer, ella también, melamió y tragó mi semen, le pasé el penacho y Eli excitada lo mimó y besó, me lopreparó bien y se la di de nuevo por su vagina. Pero tal fue la acciónvigorizante del huevo que le di seis veces más. Vagina, cola, ambas vías, semena torrentes en su cara, boca, pelo y manos, Eli tragó, lamió, me dio suflujo,lo tragué y la rematé con otro por vagina y espeso semen.
Tanexcitado quedé con la mujer local que arreglé para otra noche antes de volver,y de lo caliente le pedí cremita y una bombacha suya. Fui a mi cuarto, me pusela bombacha en lugar de mi calzón que ella me guardó, me pasé crema y, qué lesparece, mientras Eli dormía llenita de semen y en fino camisón, yo me di contodo y volví a acabar semen en las sábanas de la cama de invitados. Casi mequedo sin leche para la próxima. Pero bueno, cuando el huevo y las mujeresllaman, cómo decir que no.
2 comentarios - Sandwichitos con huevo y sexo con marplatense