Habías salido del trabajo caminando por Montevideo hacia Santa Fe para ver unos locales de ropa, mientras caminabas se te vino a la mente mi nombre, mi imagen, seguramente por las calles en las que ibas.
Al pensar en mi, se te vinieron recuerdos de todo tipo, cosas buenas y malas, pero sobre todo nuestra inevitable piel, chispa, tensión sexual, se te vinieron imágenes, empezaste a sentir una electricidad en el cuerpo, estabas excitandote, algo que pudiste comprobar al notar como se mojaba tu tanguita...
cuando de repente, sentiste una mano tocándote la cola por atrás, en un principio sentiste miedo, pero la forma en la que estabas siendo manoseada te termino gustando bastante, sin darte vuelta ya que te atraía y excitaba el juego, quizas pensando que podia ser un conocido, seguiste caminando haciendo notar que te dejabas tocar...
Doblaste por santa fe hacia la bond street, no habia mucha gente en la calle, sentías muy cerca la presencia de ese hombre que te venía manoseando, en un momento esa mano paso de la cola a la conchita, ese roce produjo que cierres ojos y que ese hombre se percate de lo húmeda que estabas, seguias sin darte vuelta, tu cabeza iba mil, una mezcla de miedo y excitacion.
Bajaste las dos escaleras de la bond, sabiendo que no iba a haber nadie abajo, y cruzando el límite del miedo debido a lo calentita que estabas.
Te detuviste a mirar una vidriera de un local cerrado, que tenia unos piercings, cuando sentis que ese hombre se acercaba desde atras apoyandote algo muy duro en tu colita, entre tus cachetes, te estremeció y lejos de correrte tiraste la colita para atras para sentir en plenitud la dureza de esa pija, que estaba grande, ancha y muy cabezona, que buscaba abrirte los cachetes y que tu colita la sienta bien en toda su dimensión...
En esa misma posición, tiraste tu mano para atras para poder tantear la realidad del tamaño y dureza de esa pija, la agarraste fuerte, la apretaste, la recorriste toda, tanteando los huevos y masajeandolos, para luego subir a la cabeza y ver lo ancha y gorda que era, la soltaste , te escupiste la mano, y volviste a buscar esa pija que te pudo, que te descoloco, y empezaste a pajearla muy suavemente en toda su dimensión...
Seguiste pajeando ese hombre durante un rato mas, cuando notaste que su dureza era extrema, querías sentir esa pija, ya sea en la boquita o en la conchita, pero tu cuerpo te lo pedia, la necesitabas ya, vos sabes que te pones irresistible a esas pijas, grandes, anchas, cabezonas, y sin mirar quien era te corriste la tanguita, y diste lugar a que empieza a rozar la cabeza de la pija en tu conchita que estaba a esta altura empapada, el garrote de esa pija rozandote y empezando a meter la cabecita mientras vos te arqueabas para atras para sentirla toda, querias que entre hasta el fondo, ya habías perdido toda capacidad de razonamiento y solo afloraba el placer por la sentir esa pija...
Tu calentura aumentaba cada vez mas, cada vez mas mojada, y la pija entraba salía con mayor intensidad, bien profundo, salía y volvía la embestida con todo, algunos miraban desde lejos, sin acercarse pero se notaba es sus caras la calentura de lo que estaban viendo, el deseo que tenían, incluso las ganas de participar de esa sesión de sexo, en plena galería, tanto hombres como mujeres, hasta en un momento giraste tu cabeza y pudiste ver a un chico con un importante bulto que se marcaba en el jean, y se tocaba por encima, pero no se animó a sumarse, se retiro, dejándote disfrutar de esa brutal pija que te taladraba sin descanso, y a esta altura vos ya ni pensabas quien podia estar cojiendote, sino en esa terrible pija que no querias parar de disfrutar...
hasta que un ruido te alertó, salieron 4 hombres más de un deposito de american tattoo que esta ahí abajo y te vieron ahí contra la vidriera con la conchita abierta, todos se volvieron loco, fueron y te empezaron a manosear, eran musculosos algunos y tatuados, te calento mucho la situación, les dijiste a todos que paren, pero era imposible que no te hagan nada, así que les ofrecíste algo, que hicieran una ronda a tu alrededor y te muestren las pijas que tenían cada uno, los 4 aceptaron, vos te arrodillaste entre todos y no podías creer las 5 pijas hermosas que tenías para vos, se te hacía agua la boca, te debutiste a observarlas primero...
Sabiendo como sos no pudiste resistirte a semejantes pijas y se la empezaste a chupar rato a cada uno, mientras que con tus manos los pajeabas, tenías 5 pijas muy grandes y ricas a tu alrededor, una mas hermosa que la otra, chupabas un poco a cada una, todo era muy excitante, hasta que uno te agarró la cabeza y te metió su pija en la boquita para llenartela de lechita, una vez que acabó, el se corrió y yo vos bien putita te tragaste todo su semen, te sacaste la remera y la tiraste sobre el escalon, menos mal que lo hiciste porque el segundo te tiró la leche en la espalda, el tercero acabó sobre tu carita manchandote toda, al cuarto se la chupaste bien fuerte hasta que te llenó de leche la boca, el último, que era el té había seguido y manoseado toda, junto toda la lechita de tu espalda y la de tu cara y te la metió en la boca, después metió su pija en tu boquita y se pajeaba mientras vos le chupabas la cabeza, y le tocabas los huevos, hasta que te exploto toda la boquita de leche, cantidad salio, y la fuiste tragando, ahi te dijste cuenta que era un gusto conocido, levantaste la cabeza, me miraste, me guiñaste el ojo, te ayude a limpiarte y nos fuimos de la mano...
Al pensar en mi, se te vinieron recuerdos de todo tipo, cosas buenas y malas, pero sobre todo nuestra inevitable piel, chispa, tensión sexual, se te vinieron imágenes, empezaste a sentir una electricidad en el cuerpo, estabas excitandote, algo que pudiste comprobar al notar como se mojaba tu tanguita...
cuando de repente, sentiste una mano tocándote la cola por atrás, en un principio sentiste miedo, pero la forma en la que estabas siendo manoseada te termino gustando bastante, sin darte vuelta ya que te atraía y excitaba el juego, quizas pensando que podia ser un conocido, seguiste caminando haciendo notar que te dejabas tocar...
Doblaste por santa fe hacia la bond street, no habia mucha gente en la calle, sentías muy cerca la presencia de ese hombre que te venía manoseando, en un momento esa mano paso de la cola a la conchita, ese roce produjo que cierres ojos y que ese hombre se percate de lo húmeda que estabas, seguias sin darte vuelta, tu cabeza iba mil, una mezcla de miedo y excitacion.
Bajaste las dos escaleras de la bond, sabiendo que no iba a haber nadie abajo, y cruzando el límite del miedo debido a lo calentita que estabas.
Te detuviste a mirar una vidriera de un local cerrado, que tenia unos piercings, cuando sentis que ese hombre se acercaba desde atras apoyandote algo muy duro en tu colita, entre tus cachetes, te estremeció y lejos de correrte tiraste la colita para atras para sentir en plenitud la dureza de esa pija, que estaba grande, ancha y muy cabezona, que buscaba abrirte los cachetes y que tu colita la sienta bien en toda su dimensión...
En esa misma posición, tiraste tu mano para atras para poder tantear la realidad del tamaño y dureza de esa pija, la agarraste fuerte, la apretaste, la recorriste toda, tanteando los huevos y masajeandolos, para luego subir a la cabeza y ver lo ancha y gorda que era, la soltaste , te escupiste la mano, y volviste a buscar esa pija que te pudo, que te descoloco, y empezaste a pajearla muy suavemente en toda su dimensión...
Seguiste pajeando ese hombre durante un rato mas, cuando notaste que su dureza era extrema, querías sentir esa pija, ya sea en la boquita o en la conchita, pero tu cuerpo te lo pedia, la necesitabas ya, vos sabes que te pones irresistible a esas pijas, grandes, anchas, cabezonas, y sin mirar quien era te corriste la tanguita, y diste lugar a que empieza a rozar la cabeza de la pija en tu conchita que estaba a esta altura empapada, el garrote de esa pija rozandote y empezando a meter la cabecita mientras vos te arqueabas para atras para sentirla toda, querias que entre hasta el fondo, ya habías perdido toda capacidad de razonamiento y solo afloraba el placer por la sentir esa pija...
Tu calentura aumentaba cada vez mas, cada vez mas mojada, y la pija entraba salía con mayor intensidad, bien profundo, salía y volvía la embestida con todo, algunos miraban desde lejos, sin acercarse pero se notaba es sus caras la calentura de lo que estaban viendo, el deseo que tenían, incluso las ganas de participar de esa sesión de sexo, en plena galería, tanto hombres como mujeres, hasta en un momento giraste tu cabeza y pudiste ver a un chico con un importante bulto que se marcaba en el jean, y se tocaba por encima, pero no se animó a sumarse, se retiro, dejándote disfrutar de esa brutal pija que te taladraba sin descanso, y a esta altura vos ya ni pensabas quien podia estar cojiendote, sino en esa terrible pija que no querias parar de disfrutar...
hasta que un ruido te alertó, salieron 4 hombres más de un deposito de american tattoo que esta ahí abajo y te vieron ahí contra la vidriera con la conchita abierta, todos se volvieron loco, fueron y te empezaron a manosear, eran musculosos algunos y tatuados, te calento mucho la situación, les dijiste a todos que paren, pero era imposible que no te hagan nada, así que les ofrecíste algo, que hicieran una ronda a tu alrededor y te muestren las pijas que tenían cada uno, los 4 aceptaron, vos te arrodillaste entre todos y no podías creer las 5 pijas hermosas que tenías para vos, se te hacía agua la boca, te debutiste a observarlas primero...
Sabiendo como sos no pudiste resistirte a semejantes pijas y se la empezaste a chupar rato a cada uno, mientras que con tus manos los pajeabas, tenías 5 pijas muy grandes y ricas a tu alrededor, una mas hermosa que la otra, chupabas un poco a cada una, todo era muy excitante, hasta que uno te agarró la cabeza y te metió su pija en la boquita para llenartela de lechita, una vez que acabó, el se corrió y yo vos bien putita te tragaste todo su semen, te sacaste la remera y la tiraste sobre el escalon, menos mal que lo hiciste porque el segundo te tiró la leche en la espalda, el tercero acabó sobre tu carita manchandote toda, al cuarto se la chupaste bien fuerte hasta que te llenó de leche la boca, el último, que era el té había seguido y manoseado toda, junto toda la lechita de tu espalda y la de tu cara y te la metió en la boca, después metió su pija en tu boquita y se pajeaba mientras vos le chupabas la cabeza, y le tocabas los huevos, hasta que te exploto toda la boquita de leche, cantidad salio, y la fuiste tragando, ahi te dijste cuenta que era un gusto conocido, levantaste la cabeza, me miraste, me guiñaste el ojo, te ayude a limpiarte y nos fuimos de la mano...
0 comentarios - Empezó con una jugando y termino con 5 pijas!