Nadie sabe muy bien, instantes antes de eyacular, para dónde va a salir el lechazo.
A veces te la vienen mamando rico y - aunque explotás por dentro - lo único que sale afuera es una wasca espesa que parece escaparse sin muchas ganas de la punta de tu agotada verga.
Otras, te cortan la paja unos segundos antes y acabás a chorro de todas formas.
No está del todo claro qué es lo que hace que en un momento te salte y en otro salga lento o que la consistencia en algunas ocasiones más densa y en otras más aguada.
Muchos dicen que depende del tipo de estímulo que te están dando, de tu frecuencia sexual y tus periodos de abstinencia, de la cantidad de líquido que tomaste horas antes de acabar, etc. Todas estas teorías están muy bien, pero nadie puede decirnos a ciencia cierta en qué dirección va a salir la leche, con qué potencia y cuál va a ser su consistencia cuando llega el momento de la verdad.
No saber cuál será el destino final de nuestra semilla puede resultar muy estresante.
Por eso algunos apuntan...
otros lo dejan volar...
y, algunos más osados, directamente se la tiran arriba.
Si tenés suerte, te dejan acabar adentro y te podés olvidar del tema.
A veces te la vienen mamando rico y - aunque explotás por dentro - lo único que sale afuera es una wasca espesa que parece escaparse sin muchas ganas de la punta de tu agotada verga.
Otras, te cortan la paja unos segundos antes y acabás a chorro de todas formas.
No está del todo claro qué es lo que hace que en un momento te salte y en otro salga lento o que la consistencia en algunas ocasiones más densa y en otras más aguada.
Muchos dicen que depende del tipo de estímulo que te están dando, de tu frecuencia sexual y tus periodos de abstinencia, de la cantidad de líquido que tomaste horas antes de acabar, etc. Todas estas teorías están muy bien, pero nadie puede decirnos a ciencia cierta en qué dirección va a salir la leche, con qué potencia y cuál va a ser su consistencia cuando llega el momento de la verdad.
No saber cuál será el destino final de nuestra semilla puede resultar muy estresante.
Por eso algunos apuntan...
otros lo dejan volar...
y, algunos más osados, directamente se la tiran arriba.
Si tenés suerte, te dejan acabar adentro y te podés olvidar del tema.
3 comentarios - Cuidado con el lechazo: es muy impredecible
A mi me llenaron la conchi de leche a full...