Todo empezó estando de guardia, era cambio de turno y ella entraba, yo estaba por salir cansado, molesto y re dormido ya que laburo 12 hs de noche, lo único que pensaba era en el culo enorme y las tetas gigantes de la encargada de la mañana y en irme a la mierda, cuando estaba por juntar mis cosas entra una morocha mucha bola no di de lo dormido que estaba pero cuando mire bien porque estaba pidiendo ayuda para hacer el nudo de la corbata dije naaa era una morochita, flaquita, pelo largo hasta la cintura, medio tetona y una cinturita que ya con verla te la imaginabas en 4 porque aún teniendo el uniforme del laburo se le notaba esa colita redonda y chiquita que tiene. Todo empezó ahi, cruzamos algunos comentarios, chistes pero nada más que eso, yo me tenía que ir después recibí la noticia que no tenía que ir más a ese lugar donde estaba ella, así que me alejaron de la morocha, pasaron días, meses y no supe nada hasta que me volvieron a cambiar y me la cruce en otro objetivo, esta vez era fijo, ella iba a ser mi relevo, íbamos a pasar más tiempo juntos que de costumbre, pudimos conversar más y conocernos un poco mejor, aunque yo solo pensaba en cojerla como un desesperado, ella siempre simpática, buena onda, por momentos pervertida, tiraba palos, hablaba de sexo todo el tiempo, aveces no usaba corpiño y se me acercaba diciéndome "ay hoy me olvidé de ponerme corpiño se me marcan mucho los pezones" o sino y me mostraba la tanga se puso en el día o como se le estaban marcando los abdominales de la gimnasia que hacía, entraba al vestuario mientras yo me cambiaba y me relojeaba el bulto, se ponía en tanga delante mío y yo con unas ganas de romperle ese orto,se hacía la boluda y sabía que me calentaba, hasta que ya no disimulaba nada al sentarse al lado mío me decía "mira como se te marca el bulto" seguido de una apoyada de mano bien suave sobre mi pija, yo ya no sabía cómo sostener esto, siempre le advertía que le iba a dar tremenda garchada aunque siempre sonaba como en broma pero yo sé lo decía en serio y como sabía ella que yo estaba en pareja con una compañera despues de tanto calentarme me decía "no podemos hacer nada porque estás y con mi compañera" hasta que un día me cansé de mirar y pase a la acción, nuevamente se metió al vestuario a cambiarse junto conmigo, solo que esta vez no se esperaba que yo reaccionaria, se quedó con una tanguita chiquita, negra, que sobresaltada perfectamente ese culito chiquito y redondito y una vez más sin corpiño, ella se puso de espaldas y solo me mostraba el culo ni bien me baje el pantalón veo que mira de reojo, en ese instante no dudé y la agarre de la cintura y la acerque a mi, a que sienta como me ponía de dura la pija mostrándome el orto cómo lo hacía. Empecé a comerle la boca mientras le apoyaba toda la verga bien dura y que la sienta, agarró su mano y hago que la toque y le digo ves lo que haces cada vez que te cambias en frente mío, le manoseo todas las tetas y la doy vuelta, me la empiezo a comer de frente, empiezo a tocarle la conchita y a chuparle las hermosas tetas sin piedad, quería bajarle la tanga de una pero empezó a decirme que tenía miedo de hacerlo en el vestuario ya que las cámaras enfocaron que entramos juntos, iba a ser muy obvio así que le dije no importa sentí un poquito mi pija dura dentro de tu conchita y si te da para probar de nuevo la hacemos mejor en un telo, me dice bueno un cortito por lo menos sin duda le digo por supuesto! Le corrí la tanguita y le empecé a meter la cabeza, la moto mojadicima, no daba más ella y obviamente yo tmp, tantos días de calentarnos y no hacer nada nos llevó a esto, ella no podía no gemir la sentía muy dura me decía le encantó mi pija desde un principio y a mi todo de ella no aguante y le baje toda la tanga y la empecé a cojer contra la pared, le daba muy profundo para que la sienta y ella intentaba no gemir pero se la escuchaba igual, se mordía la mano y al mismo tiempo me decía que le encantaba, yo le preguntaba te gusta mi pija mamita, la sentís, te gusta así de dura putita y ella respondía junto con un gemido SII siii no aguanto mucho que me terminó mojando toda la pija y yo no quería acabar quería seguir disfrutando de esa concha pero me gano el tiempo y caí en la realidad tuve que acabar en seguida por nuestro trabajo, al rato de acabar me dice quiero de nuevo pero en un lugar más tranquila obviamente accedí rápidamente se vistió y salió y al rato salí yo, por suerte nadie salía ni entraba al edificio, ambos safamos, contentos por la cojidita que nos pegamos y a la vez perseguidos por si alguien escucho los gemidos y los choques contra ese culo cuando le daba duro, solo el pensarlo nos reíamos, así fue como empezó todo, polvos en la mañana en el vestuario o en las oficinas en los sillones, en las mesas, en las sillas, en el baño, chupadas de pija en el vestuario, coladas de dedos y pajas en el hall de entrada, sumado a cada tanto que la llevaba al telo o me invitaba a su casa. Así empezó una historia de compañerismo lamentablemente no tengo fotos de ella, ni vídeos ya que es muy reservada pero muy puta jajaja alcance nada más a sacarle fotos a una tanga que tenía puesta un día de los tantos polvos que le di en el vestuario. Esta historia es real aunque actualmente dejamos un poco eso cada tanto está la idea de irnos al telo, espero que les haya gustado mi relato, a quien no le pasó no? Jajaj pasa en todos los laburos solo sumó una historia más a las tantas que debe haber. Saludos
5 comentarios - Compañera nueva