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Servida en bandeja

Abro la puerta que da al pasillo y te estremecés al sentir el frío recorrer tu piel apenas cubierta por ese conjunto de encaje transparente negro que tan bien te queda y el antifaz ciego que no te permite ver a dónde te llevo. El edificio tiene esas escaleras espaciosas de pocos escalones con un gran descanso en cada piso, te llevo al cuarto. La mayoría toma el ascensor, por lo que nadie debería vernos, aún así, el riesgo está y eso es lo que te altera. Te reís nerviosa y excitada, te encanta dejarte llevar. Tomo las esposas y aprisionó tus manos a las escaleras para que quedes de frente a quien abra la puerta. Me paro delante de la puerta y te recorro con la fusta dándote pequeñas palmaditas en cada sector de tu piel que lo va pidiendo, aquél que se estremece emanando excitación. Te acaricio con la palma de la mano, con las yemas de los dedos, te beso el cuello, las clavículas, las costillas, el vientre, las caderas, las piernas separándolas y sigo hasta los pies y vuelvo cuesta arriba. Subo por tus piernas besándote y apretándote fuerte, despacio, acariciándote sutilmente, imperceptiblemente, haciéndote desear el contacto pleno y vuelvo a apretarte fuerte, despacio.

Escucho tus suspiros, tus suaves y tímidos gemidos. Me detengo en tu entrepierna a hacerte desear mi lengua, a sentir tu fragancia, a suspirarte y soplarte intermitentemente mientras te contorsionas toda suplicando por más. Y con una pluma te roso desde la cintura hacia tu centro de placer, siento como te corre la electricidad por el cuerpo y llevo la pluma hacia atrás tuyo, reís de placer mientras veo como te mojás. Corro la pluma y por unos segundos cargados de lujuria no sentís nada hasta que te aprieto repentinamente ese botoncito que te encanta al ritmo que tirás la cola para atrás para sentirlo más y paso mi lengua por tu néctar logrando un riquísimo orgasmo sonoro.


Pero esto recién empieza, todavía tenés puesto ese conjunto que te queda divino. Y vine bien preparado. Ahora que te tengo bien calentita y super entregada, te libero una mano solo para poder darte vuelta, y te vuelvo a esposar. Si alguien abriese la puerta en este momento se encontraría con su fantasía hecha realidad: tremenda morocha de espaldas, sacando la cola para afuera con esa tanga negra que deja poco para la imaginación, notablemente caliente, abierta de piernas y deseosa de pija. ¡Qué espectáculo! No pierdo el tiempo en sacarte fotos porque todo está siendo grabado.

Te bajo la tanga, te paso la lengua un poquito por allá, un poquito por acá. Meto mi pulgar en tu concha mientras te preparo la cola con la lengua, hago círculos, gemís. Saco el pulgar para darle lugar al plug de mando remoto. Me odias. Se que no es el juguete que más te gusta, decís que es trampa, que querés una de verdad. No te hago caso, sin sacarte la lengua, le doy play al plug por unos segundos para que tiembles toda. ¡Qué rico escucharte gemir y suplicar que siga, que siga, que no lo pare! Ya con la cola bien lubricada, te apoyo la punta de la pija, empujo un poquito y me quedo quieto. Sabés que de a poquito entraría muy bien y te movés hacia mi para concretarlo. Pero no te lo permito, de una arremeto contra vos, una estocada violenta y bruta, que te duele y te hace ver las estrellas a la vez. Salgo. Lagrimeas y puteas de excitación y bronca. Querés más yayaya pero es mi juego y vas a tener que esperar.



Servida en bandeja



Escuchamos la puerta del vecino que se abre, te desesperás, liberame. No, no, acá te dejo. Quizás, ni viene para la escalera, shh. Te subo la tanga, dejo el control remoto del plug sobresaliendo de tu tanga y me voy al piso de arriba para poder espiar.

Se abre la puerta y te encuentran entregadísima. Transpirás de los nervios y de las miles de cosas que suceden en tu cabeza. Aún así no emitís sonido. La contemplación se te hace eterna hasta que sentís que remueven el control de tu tanga, tragás y le dan play... temblás, temblás, no lo paran, cambian de velocidad, gemís, querés saber quién es, seguís temblando y... pausa. Respirás agitada, te bajan y sacan la bombacha, vos ayudás sacando la cola más para afuera si eso es posible. De rodillas te chupan la concha y el culo que te viene muy bien después del dolor que te hice sentir. Es un alivio hermoso. Alternadamente le da play a las distintas velocidades del plug y te relajás. No podés pensar pero te imaginás que es nuestro vecino aunque no sentís su barba. Lo cuál no es raro, siempre es muy prolijo y se afeita a menudo. Acabas sutilmente pero querés  que te dé uno más fuerte y se lo pedís: dame más, dame más. Se para, desabrocha su pantalón, se toca suavemente. Deseas escucharlo, que te pegue un poco, que te agarre con fuerza y te la ponga sin miramientos. Tu mente está en cualquier lado. Te mueve para que te pares derecha, te besa con sus finos labios, sentís tu sabor en su lengua. Te calentás más. Te mete los dedos en la concha y lo hace maravillosamente. Mientras se siguen besando te saca un orgasmo mayor y se va!!!

Te preguntás porqué carajo no te la puso, cómo pudo dejarte así de caliente. Te imaginás puteándolo la próxima vez que lo veas por forro, escracharlo de pito corto y puto con el resto de la vecinas. En ese momento bajo, veo tu cara de bronca y te digo: ¿y preciosa? Te gustó la vecina, ¿no? Se ve que la re disfrutaste. Se te desconfigura el seño, tu reacción es espléndida, veo la sorpresa, cómo te sonrojás y maquinás. Digo lo que estás pensando: la pibita te dejó re caliente y no lo vas a querer admitir ni para vos misma, por eso estás como un tomate, ahora te picó la curiosidad, querés más pero conociéndote, lo vas a reprimir. No te preocupes, ya va a haber oportunidad, sentencio. Ahora, sacame esa colita para afuera de nuevo que no terminé con ella.

Otro plug más, uno mucho más controversial que una vez viste que había comprado pero nunca supiste cuándo lo íbamos a usar. Es de acero y está bien frío por lo que lo rechazás, te calmo, te toco un poco la concha, te movés a la par mio y me ayudás a que te entre bien adentro y rápido cuando sentís las plumas de la cola de zorra rozarte las rodillas...

caliente

5 comentarios - Servida en bandeja

seven04 +1
Exquisito. Lo necesitaba para el coffe break!
Mephisto19
Así es lindo tomarse un break, ¿no? 😉 jajajajaja
amigolo +1
Muy bueno. Van 10+.
Mephisto19
Me alegro. ¡Gracias!
caroaltamira +1
Por éste ya había pasado Mephisto... me encantó!
Mephisto19
¡Muchas gracias, Caro!