Las Tetas De Mi Hermana, Mi Obseción Capitulo 1

En cada relato hay una parte narrativa que cuenta la historia de los protagonistas y una segunda parte que es una entrevista; un dialogo entre PATRI, una de las protagonistas y alguien que puede ser cualquiera que el lector imagine. Puede ser un psicólogo; puede ser su conciencia; puede ser un amigo mayor que conoció en algún lugar; como dije, por ahora, queda en la imaginación del lector.

Se dio cuenta que me ponía como loco cuando andaba sin corpiño. La posibilidad de verle el pezón me enloquecía y yo también notaba que ella se calentaba sabiendo que en un descuido su pezón quedaría al aire.
Mi hermana se llama PATRICIA y tiene dos años más que yo, en distintos relatos ella será una adolescente dos años más que yo; en otros será una apetecible joven y en otros será una sexópata adulta y siempre yo con dos años menos estaré rondando a su alrededor embobado por sus tetas, por sus tetas y por como ella sabe ponerse para que yo no salga de mi estupidez y sigas tras sus pasos atontado
PATRI tiene unas tetas perfectas, siempre las tuvo, fueron perfectas cuando su adolescencia; perfectas en su juventud; perfectas e ideales en su cuerpo; bajito de 1 metro 64, de piernas firmes de deportista; de colita redonda y parada, perfectas con su pelo morocho y corto; corte ideal a su nariz pecosa y respingada y ojos negros; sí tiene defectos, sus orejas, no son grandes sino paradas; ella las odia.
Las tetas de mi hermana ya en su adolescencia eran más grandes que las de mi madre y más duras, por su puesto, para ese entonces nuestra madre; Marcela Mascanfroni; profe de educación física; tenía 40 años y yo… yo dos menos que mi hermana.
La situación la mayoría de las veces era la misma. Ella llegaba a donde yo estaba; sea estudiando o en la cocina o viendo la tele y se me cruzaba; se mostraba, ella sabía que me calentaba, entonces se agachaba y dejaba ver un poco sus tetas... solo un poco... el canalillo o los bordes y así empezaba el juego... si andaba con un top suelto se agachaba dándome la espalda para que le observe la panza y donde nacen sus tetas; si andaba de musculosa se movía para que las tetas se asomaran un poco por los costados; eso me enloquecía y si llevaba una remera escotada se agachaba como para recoger cualquier cosa del piso o de una mesa. Y así empezaba el juego; me ponía nervioso, excitado, cazador, en guardia, pero sobre todo buscón... buscaba y buscaba ese momento glorioso en el que podía verle el pezón y ella se daba cuenta, ¡claro que se daba cuenta! y eso la calentaba, pero era más delicada y sensual, ella era sexi en sus movimientos yo torpe y caliente; horas me pasaba bailoteando a su alrededor buscando cosas o haciendo cosas sin sentido solo para ver... y hasta que por fin ahí se mostraba, apenas, rosados, preciosos, me hubiese gustado pellizcarlos, pasarle la punta de mis dedos, morderlos, pasarles la lengua, pero no, solo pensaba en captar ese instante, la foto, el descubrirlo. Se mostraban hermosos coronando esas tetas perfectas duras firmes; y en ese juego de mostrar y esconder los descubría erectos, PATRI, ¡tenía los pezones parados!, estaba excitada, lo notaba cuando se daba ese juego. y todo acababa en el baño con una tremenda paja, o en mi pieza sacudiéndome la verga con los ojos cerrados recordando esas tetas duras de adolescente de pezones parados, esas dos tetas firmes que no se movían sino que temblaban en cada salto, cada paso. Eso sucedía en mi adolescencia, el juego de volverme loco... y cuando ella estaba caliente, casi siempre en verano se me aparecía sin corpiño y con una camisa a la que se le traslucía las tetas...¡¡¡ se le veía todo!!! ¡Me quería morir! entraba en estado de lujuria, me transpiraban las manos y era todo ver, observar desesperado y de manera disimulada para que no lo notara sin pensar que se mostraba así para provocarme, de eso me di cuenta cuando yo ya era más grande, en ese momento no lo advertía, ella estaba en su despertar sexual y yo recién descubría la paja... PATRI me lleva dos años de edad y además las mujeres siempre están un paso adelante.
Recuerdo la primera vez cuando vi esas tetas firmes, se habían desarrollado de una manera fenomenal; eran perfectas, medianas tirando a grande; súper duras hasta el dolor, me lo conto, me dijo después de este episodio que les voy a contar "tengo las tetas tan duras que me duelen" y los pezones hinchados, sin punta, sus pezones en ese entonces eran todo una sola cosa, la aureola y la punta se formaban como una hinchazón, que coronando la teta se apreciaba perverso en el cuerpo de una adolescente. .. ¡PATRI se partía de buena!
Como les decía aquella primera vez yo ya me había acostado. Mi pieza está ubicada frente al baño. Parado desde la puerta a mi derecha está el inodoro, al frente la bañera y a mi izquierda el lavado y el espejo.
PATRI había salido con un amiguito nuevo; un noviecito, nuestros padres la habían dejado salir con la condición de que regresara temprano. A las dos de la mañana. A esa hora llego e ingreso a casa sigilosamente, yo estaba en mi pieza con la puerta abierta, ya había apagado la luz, hasta un instante antes había estado en la pc, cuando escucho que avisa a nuestros padres de su llegada y entra al baño. Levanto la cabeza y alcanzó a ver cuándo cierra la puerta; me quedo mirando y observo un haz de luz que se filtra por la cerradura. Fue como un hechizo que hizo que me sentara en la cama, sigilosamente me pongo de costado semi parado y como un sonámbulo empiezo avanzar hacia la puerta, la habitación de mis padres está al otro lado, lejos, me sentía seguro pero mi corazón parecía se me iba a salir por la boca, daba pasos lentos y temblaba y esa luz que me llamaba, me agache y puse el ojo en la cerradura, no fue mucho lo que podía ver, nada sensual... mi hermana sentada en el inodoro (la veía de perfil), la minifalda a los tobillos, la tanga y sus piernas blancas flexionadas... separe la cabeza de la puerta, mire mi Cama por si tenía que escapar y volví a la acción. PATRI se empezaba a acomodar la ropa, se puso de pie, esperaba ver algo de su pelvis, algunos pelitos pero no, todo fue muy rápido... esto fue todo pensé... se puso de pie frente al espejo... se apoyó con ambas manos en el lavado, acerco su cara al espejo... abrió sus ojos... se alejó... llevaba minifalda a cuadros y un top blanco con los hombros descubiertos que le hacía unas tetas hermosas... de pronto se acerca al espejo, yo en cuclillas suavemente acomodo mi posición. .. Se acerca mucho pensé... cuando de pronto besa al espejo... se besa... con los ojos cerrados y se acerca pero esta vez suavemente saca su lengua y la pasa al espejo como si lamiera los labios de otra mujer, muy suave, se retira y empieza a pasar sus dedos por los hombros y juega con la costura del top y lo empieza a bajar suavemente, mi corazón que ya había olvidado empieza a latir de nuevo y esos dedos largos que suavemente bajan el top empiezan a acariciar la parte de arriba de sus pechos que empieza n a asomarse y baja lentamente y de a poquito y pienso que hasta ahí va a llegar y que los latidos de mi corazón van a ser escuchado... y de un solo movimiento baja el top hasta la cintura y saltan esas dos tetas duras con sus pezones hinchado y tiemblan imponentes ante mis ojos... que espectáculo tremendo se me presentaba de manera impensada. Mi verga estaba tan dura pero tan dura que no recuerdo haberla vuelto tener de esa manera... y ella soltó su Top ... y empezó a subir sus manos desde la base de sus pechos y extendiendo el dedo indicie de cada mano comenzó acariciarse haciendo círculos alrededor de sus pezones, note su respiración agitada, note que estaba descubriendo las primeras sensaciones del sexo, mientras continuaba jugando con sus dedos y sus pezones levantaba la cabeza mirando el techo con los ojos cerrados, luego bajo la vista, se miró desnuda hasta la cintura frente al espejo y con cara de zorra junto saliva en su boca y dejo caer en un hilo un escupitajo sobre cada teta y con la palma de sus manos desparramo la saliva dejando esos senos duros y calientes brillantes como si estuvieran bañados en aceite... semejante imagen colosal de mi hermana escupiendo y sobándose las tetas con cara de zorra marcaria mi vida para siempre... después... mucho tiempo después entendí que en ese instante se estaba gestando en mi la transformación de un voyeur y a partir de ahí esas tetas duras hasta el dolor de pezones hinchados y ensalivadas serían mi enfermiza obsesión.
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-Ok Patri, contame.
-¿Qué es lo que quiere que le cuente?
- ¿Cómo estás?
- Rara
- ¿Por qué?
- No sé, tengo un sentimiento de culpa y a la vez de curiosidad y por momento siento como que he realizado una travesura y luego vuelven las culpas...
-para tu tranquilidad es un sentimiento de adolescente que tímidamente comienza a descubrir en un cuerpo de niño un joven que crece. Pero sigo sin entender.
-usted dijo un cuerpo que crece... lo ciento en mis pechos como que no son míos pero a la vez me gustan pero son grandes y a la vez me dan por momento seguridad.
-¿por eso no has hablado con tus padres de tus sentimientos?
- no... Ellos son muy abiertos, pero no le voy a contar que me calienta tocarme las tetas…el otro día... en el baño...
- ¿Que paso en el baño?
- había llegado de una de mis primeras salidas, regrese temprano, había estado en la puerta de casa con Pedro, un amigo, que me gustaría sea mi novio, pero recién estamos saliendo.
-¿y?
- y nada, nos dimos besos, en la puerta del garaje, no deje que me toque, pero si sentí su bulto, su pene erecto, me asusto un poco y puse freno a su avance. Le di un beso rápido y entre corriendo. Salude a mis padres para que sepan a qué hora llegue y entre al baño; CHOLO dormía, sí, creo que dormía, estaba todo apagado.
Cuando estaba en el baño, haciendo pis, me sentía encendida, como te dije. Me acerque al espejo, me vi sexi, note la punta del lavado en mi pubis, levante la punta de mis pies y presione mi clítoris en el lavado, me éxito muchísimo, yo nunca me masturbe, solo he soñado sueños eróticos, sexis, he amanecido mojada, me separe del lavado y mire mis pechos, tengo una colita durita pero lo mejor que tengo son mis tetas; mis amigos mueren por ellas, siempre me lo dicen, y he observado a CHOLO que siempre me mira…
-¿tu hermano te mira?
-¡sí! A veces me pone incomoda, a veces no, me divierte.
-¿te divierte? Si me gusta, me gusta cómo se pone en calentón jijiji.
–y ¿qué paso en el baño?
-me guste frente al espejo, me excite rozando el clítoris con el lavado, y baje mi top, y mire pis tetas, con mis pezones hinchados, y me acaricie apenas, y una corriente eléctrica recorrió mi columna y me moje, me moje mucho… mucho… y me sentí bien atorranta, bien puta mirándome al espejo acariciando mis pechos y los humedecí con mi saliva y me sentí muy sexy y fui al armario a buscar una toalla, la puse en el piso y me acosté… acaricie la punta del clítoris con la punta de mis dedos y toque mis labios vaginales que estaban babosos y muy humedecidos y mis dedos solos resbalaban hacia adentro y temblaba, temblaba a punto de llegar al orgasmo; orgasmos que hasta entonces jamás había tenido…. Y ahí…
- ¿ahí? ¿Qué paso?
- me detuve, sentí miedo… me detuve.

FIN