Y todo por esas inaguantables ganas de orinar.

Bienvenidos al post!!!!!

Es tarde. Salgo de mi trabajo a las apuradas. Debería haber orinado antes de salir. Mi mujer me espera en el auto. Debemos ir a buscar a nuestros hijos que se estuvieron haciendo tarea en sus compañeros de escuela y luego se quedaron a jugar.

Llegamos, nos atiende el padre de los compañeros de nuestros hijos, Marcos. Muy cordial nos invita a pasar. Nosotros nos disculpamos y le comentamos que no queremos molestar y pedimos disculpas por la tardanza. Comenzamos a charlar en el hall de entrada, sale Sara, la madre. Nos Saludamos. Sara siempre fue una mujer muy linda, llamativa. Delgada, con pocos pechos, pero unas caderas y un culo hermoso, siempre recontra marcados en sus leggins.

Hace mucho tiempo que no nos veíamos y la charla se hace extensa. Mi mirada disimulada no deja de admirar a Sara. Veo sus pequeños pechos debajo de su remera. Noto que esta sin sostén pues sus pezones comienzan a marcarse en la tela. Esa visión me excita, a su vez que comienzo a tener deseos de orinar, pues con todo el apuro, no lo hice en el trabajo.

Pido disculpas y les solicito el baño. Marcos, muy amable, me indica por donde y le pide a Sara que verifique que no falten toallas en el baño y sigue conversando con mi mujer.
Veo las nalgas duras de Sara como se mueven rápidas para dejar el baño en condiciones. Espero quince segundos y emprendo para el baño, mientras dejo detrás a Marcos y mi mujer en su faena coloquial.

Sin darme cuenta me encuentro con Sara queriendo salir del baño, interrumpiéndole el paso. Sonriendo le digo “¿bailamos?”. Ella me sonríe y me sigue el juego, “como no señor”. Me toma de la mano, acerca su cuerpo y simula una danza. Esto me provoca una erección inmediata lo cual ella nota con su cuerpo. Nos miramos fijo, muy fijo, y no puedo evitar besarla.

Al sentir que no me rechaza sino que, al contrario, lo recibe y me brinda su lengua hermosa, mis labios se apoderan de ella. Nos abrazamos, nos palpamos sin control. La empujo hacia el interior del baño mientras ella me toma de las nalgas y me empuja contra ella. Nos besamos incontrolablemente. Su mano busca mi pija por debajo del pantalón y lo soba gozando con el hallazgo prominente.

Cierro la puerta del baño, doy vuelta a Sara, ella se apoya contra la pared. Bajo sus leggins y cola les salvajemente. Admiro por un momento esa cola hermosa que se me ofrece.

Bajo mi pantalón. Mi verga esta al palo. Abro sus nalgas y apoyo mi glande en sus labios vaginales. Ella abre un poco sus piernas, solo un poco, pues sus leggins se lo impiden. Pujo y penetro levemente su carne sin humedad aun. Suelta un gritito diminuto, entre miedo a que la escuchen y placer.

Vuelvo a pujar. Mi carne se abre paso entre su carne. Vuelvo a pujar. Toda mi verga esta en ella ahora. Ella me muestra su cara de gozo acomoda su cuerpo con mi pija adentro. La tomo bien de las caderas mientras bombeo mi vara en su vagina. Ella se muerde los labios con cada embestida. Temo que nos puedan escuchar. Mis manos buscan sus tetitas y encuentran unos pezones duros, erizados, los cuales mis dedos acarician y moldean a su antojo. Ella alza sus manos, endereza su cuerpo y me toma del cuello mientras sentimos nuestra conexión profunda.

De repente, nos damos cuenta de lo que estamos haciendo y que nos pueden descubrir. Nos vestimos como podemos. Ella acomodando como puede sus cabellos y yo tratando de guardar mi verga aun parada dentro de mi pantalón. Sale ella primero mientras se sigue acomodando. Yo recuerdo que había ido al baño a orinar. Quiero intentarlo pero mi pene erguido no me da la posibilidad. Desisto de la idea. Trato de borrar las imágenes que circundan en mi mente para poder calmar la erección. Salgo como puedo del baño. Veo que Sara ya está con ellos en charla amena. Pido disculpas por la tardanza. Marco me ve algo colorado. Vuelvo a pedir disculpas y me escudo en que estoy algo indispuesto. Sara me mira furtiva y me desea que pronto me mejore. Nos saludamos, los niños vienen corriendo desde el jardín, detrás de la casa. Emprendemos viaje a casa. Mi mujer me mira cachonda mientras me soba la entrepierna. Se ve que la conversación con Marcos la excito.

Esta noche tendremos sexo pensando en extraños. Yo solo pienso en llegar a casa soportando las ganas orinar.

Espero les haya gustado!!!

Gracias por pasar!!!!!!!!!!