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Compendio II
😃
“¡Vamos, Mari, habla con tu marido! Yo no lo traje solo para trabajar. También necesito un “gallito pisador”, que me ordene la oficina…”
¡Me daba tanta risa cuando me lo decía su antigua compañera de trabajo!
Porque yo no se lo creía…
Pero después, me convenció que era cierto.
😆
Hacía mucho tiempo que quería hacerme amiga de la mamá de Bastían, el otro hijo que tiene mi marido (Que como sabrán, antes era su compañera de trabajo y ahora, es su jefa directa).
Como se tomó el post-natal hasta Mayo, (por algo así como “vacaciones acumuladas” de un montón de años) aprovechamos bastante de conversar y de darle consejos de cómo cuidar a su bebe, cuando la iba a visitar.
😊
Siempre ha sido lindísima…
Tiene como la misma edad de mi esposo (o sea, unos 33 o 34 años), pero súper bien llevados y es más alta que yo.
Su trasero siempre ha sido bien bonito, con unas piernas largas tremendas y ahora, tras su embarazo, sus pechos, que antes eran bien, bien bonitos, ahora también se le han puesto inmensos, un poquito más chiquititos que los míos.
Y bueno, su carita es de lo más sensual también: unos labios jugosos, de esos que pueden chupar bastante y con pasión; una naricita coqueta y unos ojitos negros súper vivos, como aceitunas, que cuando usa sus lentes, la hacen ver tremendamente seria y yo creo que lo que la hace ver más rica todavía es su pelito corto y negro, bien ejecutivo, porque le da como un aire de mujer súper estricta…
😆
Yo sé que entre ella y mi esposo, todavía hay algo, por la forma en que se sonríen, se miran y conversan.
O sea, claro que en todo este tiempo que se han vuelto a reencontrar no ha pasado nada (el último revolcón que se pegó con mi marido fue hace poquito más de un año y gracias a eso, nació Bastían) y verlo a él, en esa actitud de papá tan responsable, preocupado y atento, la sigue prendiendo…
A lo mejor, cuando ella vuelva a trabajar, pasa algo…
😏
Pero como les decía, ella me explicó su teoría…
XD
“Mira, Mari. Tu marido es ahora como el “Chico lindo del curso”, ¿Te acuerdas? Ese, que la mitad de las chiquillas se morían de salir con él y con el que todas soñaban que lo llevaran a la fiesta de graduación.
En mi oficina, no es distinto, aunque tenemos mujeres casadas, solteras, comprometidas o divorciadas… y tú también sabes cómo somos las mujeres y lo mucho que nos gusta ganarnos la atención y cómo competimos por ella. Tu marido es guapo, simpático, inteligente y un excelente padre y durante este tiempo que lleva trabajando, las ha motivado de a poco.”
Yo obvio que al principio, me reí, pero cuando vi los documentos, le empecé a creer de a poco.
“Mira por favor la hoja de asistencia. Desde que llegó, los atrasos bajaron una enormidad y eso no es nada, porque antes, tardábamos 2 semanas en lanzar un proyecto y ahora, estamos mandando casi uno a la semana.”
XD
“¡A lo mejor, ni siquiera van a intentar algo! Pero me gustaría ver qué pasa, si lo ven sexualmente más activo, ¿Entiendes?”
Y esa tarde, lo quisiera o no, se los terminaría mostrando…
XD
<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3<3
Volviendo de las ramas…
💕
Yo flotaba como una nube…
Porque sé que el repechaje con mi marido es de esos que llegan a sacar fuego…
😈
Es que les digo, haciendo el amor, es largo y eficiente…
Pero cuando él anda con toda la calentura…
😲
Me llevó de la mano y me tiró en el sillón con violencia.
Luego saltó encima de mí y empezó a comerme los labios de una manera increíble.
Sus besitos eran fuertes, que me apretaban los labios y su lengua andaba deseosa y jugosita…
Todavía me cuesta entenderlo, porque él me ve todos los días y dormimos juntos… pero para nada se cansa de mí.
😍
Sus manos corrían por mis pechos, amasándolos, tirándolos, mordisqueándolos, haciéndome babear…
Y qué les digo de su cosota, que me martillaba desesperado por entrar entre mis piernas…
😫 😖 😫 😖
No les voy a negar que estaba gozando un montón con su ataque…
Pero él estaba tan descontrolado, que me sacó al vuelo mi camisa, sin preocuparse de botones ni nada…
Y mi falda, la fue doblando bastante para arriba, dejando ver mis calzones a medio mundo y todavía con su enorme cosota, azotándome con insistencia…
Y qué les digo de sus besos, que eran unos tremendos chupones que me querían comer los labios…
“¡Ay, mi amor! ¡Eres tan linda!” me decía bien despacito, susurrándome al oído.
😫 😫 😫
Me arrastraba su enorme cosota entre las piernas y yo, más prendida que…
No sé.
Pero que quería que me la clavara, era todo un hecho.
“¡Nooo! ¡Es que usted no me puede hacer esto! ¿No ve que soy su secretaria?” le respondí yo, con mi vocecita coqueta otra vez…
🤤 🤤
Y él se prendió más, todavía…
Hizo uso de su técnica secreta, de hacerme el quite al calzoncito y me la empezó encajar desesperado…
😫 😖 😫 😖
Me acuerdo que me dolía un montón, porque es mucha carne para mi conchita y la fuerza era tremendísima…
“Ahhh… no siga… uhhhhh… por favor… ¿No ve… que soy casada?” le pregunté a mi marido...
XD
Y ahí, alcanzó fase 3…
😵 😲 😵 😲
La metía de golpe y de lleno y me sacaba, como siempre, lucecitas de colores…
Es que mi marido igual tiene unos problemas de autoestima y la idea que una mujer casada o pololeando lo prefiera a él, le sigue prendiendo un montón…
“¡Qué rico, Marisol!... ¡Qué rico!... ¿Te gusta la mía?... ¿Es mejor que la de tu marido?” me preguntaba.
😩 😲 😩 😲
“¡Noo!... ¡Duele mucho!... él es más suavecito… ayyy… ¡Por faaavor, pareee!...”
(Claro, eso sí, que se lo decía con las piernas envueltas sobre sus piernas y besándolo como una verdadera loca y forzándolo para apretujarlo más con mis pechos… XD)
Él empujaba más y más a gusto y yo sentía que no paraba de acabar y acabar…
Era tremendamente rico…
“¡Sí, paapito! ¡Sí, Paaapito! ¡Sigue! ¡Sigue!” le decía yo, dejando salir el complejo de Edipo que tengo con él…
😩 😖 😩 😖
“¡Nooo, por faaavooor!... ¡No se corra adentro!... ¿Quéee pasa siiiii me preñaaaa?... ¡Por faaavor!... ¡Por favooor!... ¡Pareee! … ¡Paaree!” le gritoneaba fuerte al oído, cuando me golpeaba la matriz…
Y él, volvió a subir de nivel, tipo súper sayayin legendario…
😵 😲 😵 😲
Me golpeaba tan adentro, que me sacudía entera y yo tenía que morderme los labios, para no gritar demasiado…
(Aunque el ruido y lo que estábamos haciendo igual se escuchaba…)
Cuando me la enterraba más a fondo, sentía que casi me molía…
😂
Y bueno, que me moría de placer también…
XD
😩 😖 😩 😖
Ya le faltaba poco.
Lo sentía…
Yo tenía esa como picazón en el cuerpo, deseando que me acabara...
Y lo miraba a él, que estaba casi listo…
Lo besé y su lengua se enterró hasta el fondo de mi garganta…
¡Y me soltó esa tremenda inundación…!
💦 💦 💦 💦
Sentía mi vientre llenarse e hincharse de su lechecita tibia y ese beso era más largo y más potente que todos los otros besos que cualquier otro hombre me pudiese haber dado.
😚 😙 😘 😍
Quedé relajadísima y marcando ocupado, mientras él todavía me seguía besando.
“¡Ay, Marisol! Sé que te parecerá tonto y es físicamente imposible… pero me encantaría poder vivir dentro tuyo…” dijo mi querido esposo, con esos ojos que simplemente amo…
😍 😍 😍
Lo amo, incluso cuando me dice tonterías…
Y de verdad que lo entendía y quería quedarme todo el tiempo con él…
Pero por primera vez, fui yo la que mantuvo los pies sobre la tierra.
😕
“Mi amor, a mí también me gustaría quedarme contigo adentro más ratito… pero ¿No dijiste que aquí trabajan hasta las 4?”
“Sí, es verdad.” Respondió él, más desganado.
😓
“¿Y no tenemos que ir a buscar también a las pequeñas?”
Él, como que puso una carita más adorable todavía, algo así de ¿Cómo era posible que se olvidara de nuestras hijas?…
“Sí, tienes toda la razón…”
😰
“¿Y no me dijiste que viniera, porque íbamos a comprar un auto?” le pregunté, disfrutando de su carita…
Entonces, él me miró con una cara más bromista y me acarició el pelo…
“¡Ay, ruiseñor! Si hoy me lo pides, te compro un auto, un cohete o hasta un avión, con tal de complacerte…”
😂
Me dio tanta risa y nos tuvimos que despegar un poquito a la fuerza.
Habíamos durado poquito (un poquito menos de media hora) y obvio que los 2 queríamos más, pero no podíamos.
😞
Su cosita se veía todavía gruesa y bien hinchada, así que de forma cariñosa, se la besé y me la pasé por la carita, para que no se deprimiera…
“¡Descuida, mi amor! A la noche, tú sabes que te recompenso…” le dije yo.
😋 😋 😋
Y aquí viene la parte chistosa, por la que empecé con lo que me dijo la mamá de Bastían.
Resulta que la oficina de mi esposo tiene unas ventanas de vidrio por el lado de su puerta, de esas que son como medio transparentes, pero que si uno intenta mirar, no ve nada.
Bueno, cuando yo entré, solamente se colaba la luz y debajo de la puerta, por esa como rendija chiquitita, solamente se veía la luz de afuera…
😏 😏 😏
Pues bueno, cuando me paré y empecé a caminar hacia la puerta, todo eso estaba oscuro, como si hubiese alguien por el otro lado…
Y como mi marido se estaba arreglando y yo me iba a lavar un poco, empecé a zapatear más fuerte mis “Toc, toc” de mis zapatitos, para que se dieran cuenta que salía.
En serio, no tardaron más de 5 segundos en desaparecer y como les dije, cuando se movieron de las ventanas, igual me asustó, porque no pensé que tuviéramos tantos metiches…
😈 😈 😈
La cosa fue que afuera, aparte de las 3 secretarias, habían otras 3 o 4 que se estaban haciendo las locas, conversando con ellas, mirando súper atentas para la puerta…
“¿Gloria?” llamé, sonriente, pero piola a su secretaria.
😬
Ella estaba toda colorada cuando me atendió.
“Mi marido le pidió si me podía llevar al baño…”
😳 😳 😳
Claro, ella no pudo resistirse a mirar cómo mi marido se cubría ese traserito estupendo que tiene y yo me hice la que no me di cuenta…
Pasamos por el pasillo de la oficina grande y más “suricatas” me miraban cómo me iba arreglando un poco la ropa y la falda, hasta que en una de esas, Gloria se me queda mirando…
“Disculpe… tiene una…” me dice, haciendo un gesto en la mejilla.
😰
Me toco y tengo un poquito de caldito de mi marido.
Bien coqueta, me lo unté con la punta del dedo y me lo comí…
Ella quedó plop, al verme tan putita y comiéndomela sin decir nada…
😏
“¡Pobrecita! Ojalá le toque luego a ella comerla…” pensé cuando lo hacía…
Entré al baño y me arreglé la ropa. Me lavé un poquito la cara, me arreglé el pelo (¡Mi marido me dejó bien chascona y ni supe del cole con el que me sujetaba el pelo! XD) y me traté de sacar la mayor cantidad de arrugas.
De limpiarme abajo, ni loca…
(¿Acaso no hay algo más rico para una putita que ir chorreando los juguitos de su chico, mientras camina? 😉 )
Y volví para su oficina. Él estaba en la puerta…
“¡Buenas noticias, mi amor! ¡Llamé a la guardería y todavía nos están esperando con las pequeñas!” me dijo él, con su sonrisita dulce…
Y yo, de puro sacapicas, me afirmé de su deliciosa cintura, dándole un feroz beso, para después agarrarlo de ese firmecito trasero y hacerlo que me tocara con su durito paquete, solamente para calentar más a las secretarias que nos veían…
😈 😈 😈
Y bueno, cuando nos íbamos, me sentí súper contenta que la oficina de mi esposo fuera “tan trabajadoras” y que “tantas mujeres se quedaran haciendo horas extras…”
Pero yo creo que lo que más me alegraba de todo era ver sus tremendas caras de sorpresa, al ver cómo me llevaba muy acaramelada al “Chico más guapo del curso” y le daba cuantos besos y agarrones podía… XD
😉
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3 comentarios - En su oficina… (III y final)
😍 O sea, lo siento en mi corazón. Lo conozco tan bien y lo he visto tanto tiempo que sé que no me miente y por eso, lo amo y lo amo y no paro de amarle. 😉 saludos.