You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Cuando conocí a Gon

Como corresponde, primero quiero agradecer los mensajes, puntos y comentarios que siempre alientan a una a seguir contando un pedacito de su vida para poder generarles un poco o bastante de ese morbo que yo sentí en su momento.
Disfruto muchísimo de charlar con ustedes y de conocer sus fantasías y porqué no, su vida también!
Ahora sí, a lo que vinimos...

Me faltaba una parte muy importante de mi vida, me faltaba presentar la persona que amo. Es momento de que presente a Gon, mi novio desde hace casi 3 años ya.

Había cortado con mi novia después de una relación de 2 años, distintas circunstancias nos separaron y meses después de estar con alguna que otra chica de vez en cuando no sucedió nada más interesante.
Un día me pasó de ir a una fiesta por Belgrano de esas en donde la casa va a ser demolida y se descontrola todo bastante. Era verano, bastante caluroso y pensé en ir muy cómoda y fresquita, a veces esa intención nos hace ir bastante trolas vestidas jajaja pero no era mi intención inicial. Una amiga me prestó un monito negro sueltito(para los que no saben que es, es un enterito tipo shorcito que llega hasta arriba), muy cortito sinceramente porque ella era más petiza, por lo que me quedaba media cola afuera y tenía un escote significante con dos tiritas en los hombros, unos zapatitos arena y la boca bien roja pintadita.
Así fui, cuando me ví al espejo me gusté, eso me trajo cierta sensación y ganas de que esa noche algo pase, obvio no siempre una logra lo que quiere cuando busca en mi rubro, pero iba a intentarlo. Ya había dejado atrás esa chica tímida para encarar a otra mujer, ahora me animaba y las encaraba, elogiaba,etc.

Llegada a la fiesta con algunas amigas, empecé a tomar y bailar con mucha euforia, el buen clima y el descontrol de la noche se prestaba para eso. Me pasé mirando por sobre mi hombro si alguna chica aparentaba ser tortita o no, pero no encontraba alguna que aparente o me mire de más. Un poco ésa desilusión me fue apagando, así que me dediqué a reirme y tomar con mis amigas. Obvio fue pasando la noche y los chicos nos rodearon, ellas encontraron lo que buscaban y yo seguía ahí, sin nada, sólo bastante borrachita.

Entre unas de mis idas y vueltas a la barra para busar algo para tomar, con la fiesta bastante transcurrida, serían las 4am casi, me topé con un chico como otros, lindo vestidito, pantalón azul oscuro, camisa a cuadros de colores y el pelo medio revuelto cortito. Me lo choqué sin querer en mis ganas de conseguir alcohol, así que le sonreí y le pedí disculpas, eso le dió pie a hablarme pero de manera amena. Le conté que mis amigas se habían conseguido chongos y que yo era la solterona de la fiesta casi, pero que no estaba interesada en buscar uno. Estuvimos charlando sobre lo que estudiábamos y sobre boludeces varias, habíamos estado poco más de una hora y el sol empezó a querer salir, me dí cuenta de lo extenso que se había hecho y me dije a mí misma, porqué no?, el chico me parecía lindo y no tenía ganas de irme con las manos vacías, el haber tomado tanto creo que me dió la voluntad de estar con un chico y me lancé a comerle la boca, sí, yo a él, (es al día de hoy que lo gasto con éso).
Una vez hecho éso ya me había regalado creo yo, en el instante me arrepentí, pero era tarde. Estuvimos chapando un rato largo, él tocándome todo lo que podía y yo me empezaba a calentar bastante, no podía disimularlo y se me escapaban algunos gemiditos en su oído y me iba dejando de a poco seguir tocando y tocando.

Él se dió cuenta lo predispuesta que estaba, me dijo de irnos, ya no tenía nada que perder yo tampoco así que le dije que sí, en el peor de los casos hacía mucho que no sentía a un hombre.
Mientras el sol empezaba a salir, yo le mandaba un mensaje a mi mamá que esa noche dormía en lo de una amiga, y nosotros yendo para el telo. Yo estaba en silencio, sorprendida de mi misma y expectante sobre lo que iba a pasar.

Cuando llegamos nos hicimos algunos chistes y entramos entre risas, poco me duraron, al segundo me comió la boca contra la primer pared que hubo. Me empecé a calentar muchísimo, me dejé tocar todo y le fui poniendo caritas de puta para él, me gustaba verlo caliente de esa forma. De manera descontrolada me sacó el mono tirándolo para abajo y quedé en tanguita, corpiño (ambos negros) y zapatos. Ahí algo cambió, me dió la vuelta y me dejó con las tetas contra la pared, me empezó a manosear por todas partes y me fue recorriendo a besos la espalda y el cuello, me tenía agarrada del pelo y mis gemidos se chocaban contra la pared. Me fui mojando de una manera increíble, él se dió cuenta entre sus toqueteos al llegar a mi tanguita, lo escuché decirme por primera vez "putita", me había mojado y éso le encantó. Me tironeó la tanga para abajo, me la sacó y me la llevó a la boca. No puedo explicarles tal sensación, sentía mi tanguita mojada conta mi lengua y labios, los gemidos eran prisioneros de mi propia tanga. Todavía mantenía el corpiño y los zapatos, no iban a durar mucho, entre sus besos en la espalda me desabrochó el primero y me dejó en tetas, ahí me dió la vuelta, sacó la tanga de mi boca y volvió a chaparme.
Yo no reaccionaba, él seguía con toda su ropa, apenas me dejaba moverme, me había arrinconado y yo no había podido ni conocer la habitación. Seguimos tranzando un rato largo conmigo así, realmente temblaba de calentura yo, todo se había dado de una forma que no imaginé. Sin reaccionar, él se empezó a desabrochar el cinturón, eso me hizo avivarme y le empecé a desabrochar la camisa. Ahora era más justo, él estaba en boxers y por primera vez pude sentirlo, contra mi pancita sentí algo bastante grande, me sorprendí y bajé la mano casi desesperada. Tenía un pijón, pero muy grande, me mojé como si hubiera deseado algo así siempre, no sé en qué tipo de trance entré, pero me arrodillé de golpe a chupárselo, le bajé el bóxer muriendo de ganas de tenerle frente a mi carita.
Lo saqué y era una cosa impresionante, me encantaba, lo empecé a pajear y lo miraba con amor, apenas lo pude disfrutar que él me tiró de los pelos y me dejó en el piso. Creía por mi inexperiencia reciente haber hecho algo mal, pero no, simplemente disfrutó de hacer eso él, me dijo que antes de seguir quería verme tocarme. Se sentó en el sillóncito cercano y me dejó en el piso sola, sobre esa alfombra sucia, no podía creerlo, lejos de ofenderme o rechazar la propuesta, abrí las piernas y lo dejé ver como me tocaba, no sacaba los ojos de su pija, me quería ganar probarla.

Mojé mis dedos con mi boca y empecé a recorrerme el cuerpo suave con los dedos, primero las lolas, después fui bajando por la pancita dulcemente hasta llegar abajo, me empecé a tocar la conchita con mucho cariño, pero sin penetrar. Sincermanete la primer parte de lubricarme fue innecesaria, estaba completamente mojada, nunca imaginé estar así tan pronto. Para cuando reaccioné, estaba colandome varios deditos y gimiendo cual prostituta, me había olvidado de la existencia de él, pero no de su pija, nunca la dejé de mirar. Al contrario de sentirme avergonzada, el recordar que me estaba mirando y apenas acariciando esa pija hermosa me calentó más, me empecé a acabar, su indiferencia me hizo sentir usada pero super caliente, le regalé un orgasmo sin que me toque él, sólo mirandome.

Como si de un premio se tratase, se levantó, caminó hasta mí, me ayudó a levantarme y me sonrió. Me acercó la pija a mi boca y arrodillada como estaba se la empecé a chupar. Iba de a poquito disfrutando con mi lengua de cada cm de pija que me daba, trataba de tragarla toda pero no podía, sentía como los labios le apretaban la verga y su carita de placer me hizo volver a tocarme mientras lo peteaba. Fui recorriendo la cabecita, el tronco y las bolas con mucha suavidad, quería realmente disfrutar ese momento. Ahí me dí cuenta que yo no era la que controlaba la situación, sino él, me agarró de los pelos y me alejó unos centímetros de su pija, haciéndome desearla, yo intentaba como una puta de tocarsela con la puntita de mi lengua pero no llegaba. Otra vez me sonrió, me volvió a decir "putita" pero acompañado de un "qué linda te ves haciendo éso", él me usaba y yo no sólo me dejaba, me encantaba.
De golpe me metió la pija con mucha violencia en la boquita, me hizo petearlo hasta atragantarme, poco le importaba el hecho que tenga que respirar, me dejaba toser un poco y volvía a meterme la pija en la garganta. Me caían hilitos de baba por su pija y mis labios, me lloraban los ojos y me empecé a tocar con más vehemencia. Me descontroló la situación y lo empecé a petear más fuerte, me la tragaba yo solita. Me la sacó de la boca y se fue a la cama. Me dejó ahí arrodillada y hecha un desastre.
Fui hacia él, traté de darle un beso pero él me tironeó del pelo otra vez, me volvió a decir "puta" y me exigió que me ponga en 4 para él, no dudé ni un segundo y le dí lo que me pedía. Me rodeó por atrás y fue a comerme la conchita, estaba muy mojada, éso se notó que le encantó por sus gemidos al chuparmela. Literal me la estaba comiendo, me daba chirlos en la cola de vez en cuando y yo no podía dejar de gemir. Me terminé desplomando sobre la cama, él nunca frenó, me hizo volver a acabar, empecé a gritar que por favor me dé su pija, que me rompa, no me importaba NADA.
Me volteó y quedando frente a mí, me empezó a enterrar su verga, si bien me la pasé tocándome y estaba super lubricada, él me fue abriendo como primeriza, me estremesía con cada empujón de él. Su suavidad duró muy pocas embestidas, porque a los pocos minutos me empezó a coger con fuerza y apretarme las tetas. Era un juguete yo, la poca fuerza que me quedaba era para gritar, cuando lograba si la voz no se me entrecortaba. Me acabé por 3ra vez, y su pija no dejaba de entrarme y salir.
Tenerlo encima era letal, me cogió a su gusto y placer. Cuando empecé a ver que se iba a acabar, le pedí por favor que sea en mi boquita, su sonrisa lo dijo todo, a las pocas embestidas me puso con la carita al borde de la cama y me hizo chupársela. Mis flujos se mezclaban con su chota caliente y su sabor a látex por el forro, después de unos segundos de pajearlo y chupársela, me llenó la boquita de leche, me la tragué, le sonreí yo a él y me quedé dormida.
Me despertó cambiándose al ratito, era tarde y ya nos teníamos que ir. Nunca me sentí tan puta, nunca me había pasado de disfrutar tanto con un hombre y tampoco de que alguien me entienda como lo hizo él de manera tan rápida. Cambiamos nuestros números y acá estamos, 3 años después.

Espero que hayan disfrutado!
Obvioo que si me dejan puntos me van a hacer más feliz aún!
Besitooosss!!

6 comentarios - Cuando conocí a Gon

juanjitox027 +1
Fue raro jaja tuvo momentos de tratarte dulcemente y también como si fueras una muñequita de su colección la verdad que estuvo muy bueno dejo los puntos y gracias por otra experiencia compartida espero leerte pronto en el inbox lu besotes
LuyGonza
Graciass! 🙂
rogelio2013 +1
Buenisimo como siempre genia!!! cada dia admiro mas a mi idolo
LuyGonza
Jajaja que tontoooo, graciasss nene!!
elmasmaza +1
muy buen relato muy caliente
amigolo +1
Excelente relato. Muy excitante, nos dejaste recalientes. Van 10+ y te invitamos a pasar por nuestros posts para saber tu opinión sobre nosotros. Besitos.