Estaba tomando unos mates y mirando videos porno en la compu, cuando tocaron el timbre,
era Porota que tenia mal semblante, ´ Que te pasa Poro, que tenés esa cara?´, le pregunté.
´ Hace un mes que no cojo, Martita, no tenés a alguno de tus muchachos para mandarme ?´,
la hice pasar, pensé a quien podia llamar, mire la lista de contactos del celu, y llamé a Matias.
que esta todo el dia al pedo, no trabaja, ni estudia, quedo en venir a casa en diez minutos.
LLegó puntual, estaba vestido con una bermuda de jean y una musculosa, ´ yo me las empomo
a las dos, pero quiero un regalito´, dijo con cara de piedra, le ofrecí una docena de empanadas
de carne que habia hecho al mediodia, ´ Me estas cargando Martita, algo mas groso quiero ´,
contesto, le ofrecimos darle efectivo, pero se ofendió, ´ Plata ?, de que me están tomando,
de prostituto ?, yo no cobro plata, quiero un buen regalo, no se, un par de zapatillas, un celular,
etc´, dijo sin vueltas, le ofreci plata para que se comprara zapatillas, pero se volvio a ofender,
dijo que plata no, entonces agarre, me arrodille, le baje los pantalones y le dije:´ Matias, te voy
a hacer un buen pete, despues vemos el tema del regalo´, le empecé a chupar la puntita, a mi
me encanta jugar con la lengua, se la pasaba de arriba a abajo como si fuera una brocha de
pintar, enseguida se prendio Porota que le chupo los huevos, era una delicia chupar semejante
verga junto con mi amiga, la tenia bien durita, pero Matias pensaba en otra cosa, prendió un
pucho mientras se la estabamos mamando y dijo: ´Me gustaria una licuadora, porque ahora
esta haciendo calorcito, y me da para tomar unos licuados de banana con leche´, hice una
pausa en el pete y le dije que le iba a comprar una licuadora, Porota chupaba como loca y yo
estaba mas que excitada, a pesar de que Matias lo hacia en forma mecánica, fumaba y pensa-
ba en lo que podia sacarnos, ´ dame la lechita´, dijo Porota que estaba como loca y Matias
cumplio la órden, eyaculo un chorro gigante de leche que nos baño la cara, ni se inmuto.
´ Si quieren que las coja, primero la licuadora´, dijo friamente, asi que no tuvimos mas remedio
que vestirnos e ir hasta Coto, para satisfacer el capricho de Matias, al final le compramos una
multiprocesadora, pero el queria mas, y yo queria volver a casa para que nos coja, al final tuvi-
mos que comprarle dos kilos de carne, tres paquetes de papa fritas, dos gaseosas grandes y
por supuesto la multiprocesadora, volvimos a casa y nos garcho como nunca, primero nos
chupo la conchita a las dos, nos penetro por la vagina y yo le pedi que me haga el orto, ´ Si
querés el orto, haceme otro regalo´, le dije que se estaba abusando, que ya era demasiado
Porota se puso mal y le dijo que se estaba pasando de caradura y que nos hiciera la cola sin
protestar, que ya le habiamos hecho bastantes regalos, ´ Quiero una docena de facturas y le
hago la cola a las dos, no pido demasiado´, nos dijo y tenia razón, me vesti y fuí a la panaderia
de la esquina a comprar las facturas, nos puso en cuatro, una al lado de la otra, y se morfaba
las facturas mientras nos garchaba, acabo dos veces y nosotras disfrutamos como loca, cuando
se fue, lo acompañe hasta la puerta y me dijo : ´ Gracias Martita, pero me molesto que me
hayas ofrecido dinero en efectivo, yo no soy ningún prostituto, no te confundas´, le di un piquito
y se fue
era Porota que tenia mal semblante, ´ Que te pasa Poro, que tenés esa cara?´, le pregunté.
´ Hace un mes que no cojo, Martita, no tenés a alguno de tus muchachos para mandarme ?´,
la hice pasar, pensé a quien podia llamar, mire la lista de contactos del celu, y llamé a Matias.
que esta todo el dia al pedo, no trabaja, ni estudia, quedo en venir a casa en diez minutos.
LLegó puntual, estaba vestido con una bermuda de jean y una musculosa, ´ yo me las empomo
a las dos, pero quiero un regalito´, dijo con cara de piedra, le ofrecí una docena de empanadas
de carne que habia hecho al mediodia, ´ Me estas cargando Martita, algo mas groso quiero ´,
contesto, le ofrecimos darle efectivo, pero se ofendió, ´ Plata ?, de que me están tomando,
de prostituto ?, yo no cobro plata, quiero un buen regalo, no se, un par de zapatillas, un celular,
etc´, dijo sin vueltas, le ofreci plata para que se comprara zapatillas, pero se volvio a ofender,
dijo que plata no, entonces agarre, me arrodille, le baje los pantalones y le dije:´ Matias, te voy
a hacer un buen pete, despues vemos el tema del regalo´, le empecé a chupar la puntita, a mi
me encanta jugar con la lengua, se la pasaba de arriba a abajo como si fuera una brocha de
pintar, enseguida se prendio Porota que le chupo los huevos, era una delicia chupar semejante
verga junto con mi amiga, la tenia bien durita, pero Matias pensaba en otra cosa, prendió un
pucho mientras se la estabamos mamando y dijo: ´Me gustaria una licuadora, porque ahora
esta haciendo calorcito, y me da para tomar unos licuados de banana con leche´, hice una
pausa en el pete y le dije que le iba a comprar una licuadora, Porota chupaba como loca y yo
estaba mas que excitada, a pesar de que Matias lo hacia en forma mecánica, fumaba y pensa-
ba en lo que podia sacarnos, ´ dame la lechita´, dijo Porota que estaba como loca y Matias
cumplio la órden, eyaculo un chorro gigante de leche que nos baño la cara, ni se inmuto.
´ Si quieren que las coja, primero la licuadora´, dijo friamente, asi que no tuvimos mas remedio
que vestirnos e ir hasta Coto, para satisfacer el capricho de Matias, al final le compramos una
multiprocesadora, pero el queria mas, y yo queria volver a casa para que nos coja, al final tuvi-
mos que comprarle dos kilos de carne, tres paquetes de papa fritas, dos gaseosas grandes y
por supuesto la multiprocesadora, volvimos a casa y nos garcho como nunca, primero nos
chupo la conchita a las dos, nos penetro por la vagina y yo le pedi que me haga el orto, ´ Si
querés el orto, haceme otro regalo´, le dije que se estaba abusando, que ya era demasiado
Porota se puso mal y le dijo que se estaba pasando de caradura y que nos hiciera la cola sin
protestar, que ya le habiamos hecho bastantes regalos, ´ Quiero una docena de facturas y le
hago la cola a las dos, no pido demasiado´, nos dijo y tenia razón, me vesti y fuí a la panaderia
de la esquina a comprar las facturas, nos puso en cuatro, una al lado de la otra, y se morfaba
las facturas mientras nos garchaba, acabo dos veces y nosotras disfrutamos como loca, cuando
se fue, lo acompañe hasta la puerta y me dijo : ´ Gracias Martita, pero me molesto que me
hayas ofrecido dinero en efectivo, yo no soy ningún prostituto, no te confundas´, le di un piquito
y se fue
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