El finde de ski (swinger y algo +)

Hola!!

Como andan??? Hoy les voy a contar un suceso muy importante en mi vida que pasó hace algunos meses.

Les cuento para contextualizar que mi marido y yo somos swinger y Vero y Andres son una pareja swinger con la que compartimos encuentros sexuales y una hermosa amistad.

Este invierno, Vero, Andrés, Ale y yo decidimos ir a pasar un fin de semana a un centro de ski. Fuimos onda amigos, sin intenciones concretas de hacer algo sexual. Ademas, reservamos una habitación para cuatro en un hostel por estar cortos de presupuesto, asi que el lugar tampoco se prestaba para algo asi. La onda era muy tranquila, esquiar, reírnos, comer y pasar un buen rato entre amigos. Con todo ese panorama, mayor fue la sorpresa cuando las situaciones no planeadas ni pensadas comenzaron a suceder.

El sábado a la noche, después de un largo y cansador dia de ski, Vero y yo estábamos en la habitación poniéndonos el pijama y preparando todo para ir dormir.

Al ratito llegan los chicos…. Como había poco lugar porque la pieza era bastante chica, yo me acosté en la cama pero sin intenciones de dormirme, sobre todo porque estaban todos levantados y dando vueltas. Vero se me acerca y dice “–me haces un lugarcito?” Y se acuesta al lado mio, en la cama de abajo de una de las cuchetas. Tenia cara de picarona y yo me mataba pensando que tramaba. No demora 3 segundos en empezar a comerme la boca. Reconozco que me agarró por sorpresa, pero que sorpresa mas bienvenida!!! Nos dimos muchos besos pero yo comenzaba a tener algunas dudas; tenia temores sobre lo que estuviesen pensando lo chicos. Se suponía que este viaje no era con intenciones sexuales pero obviamente las cosas que estaban pasando iban a llevar a eso. Mientras yo seguía enredada con Vero; manos mias y suyas por aca y por alla. De a poco nos fuimos sacando la poca ropa que teníamos puesta. No tardamos en quedar las dos apenas con la bombacha puesta, ya que como íbamos a dormir, no llevábamos corpiño ninguna de las dos. Cuando vi sus hermosas tetas se las empecé a chupar como loca. Juro que sueño con asfixiarme en ellas, algo muy factible debido a su tamaño. Se las besé mucho, las chupé, las toqué con ganas. Y ella hacia lo mismo conmigo, nos alternábamos.

Cuando levanto la mirada para ver a Ale y Andrés, estaban los dos, desorbitados, pajeandose. Andrés estaba en la parte de debajo de la cucheta de al lado y Ale parado al lado de la puerta.
Con Vero recorrimos la una a la otra cada parte de nuestro cuerpo, no sabiamos qué mas hacer, asi que lo que me quedaba por hacer era ir a su parte de abajo. Yo moría de deseo, estaba muy caliente y totalmente abocada a ella, a los chicos ni los miré. Me estaba dando cuenta en ese momento de lo que se estaba por venir, algo que ya había pensando varias veces antes; un pensamiento recurrente que siempre terminaba sin respuesta.
Nunca antes con Vero habíamos hecho algo tan fuerte. En otras ocasiones, nos habíamos hecho mimitos, besitos, nos chupamos un poco las tetas, pero nunca nada mas con ninguna otra mujer. El miedo me acompañaba a cada segundo, pero no me impedia hacer nada. Le saqué la colaless y comencé a acariciarle la concha con mis dedos… Estaba muy mojada, lo que estaba pasando realmente le gustaba mucho. La toqué mucho y le metí algunos dedos, ella gemia. Mientras, seguía dándole besos en el cuello, en el pecho y en la panza y sin darme cuenta estaba bajando con mis labios, hasta que finalmente, cuando llegué a su pubis, me frené en seco para pensar por un segundo. Tenía mi cara a 10 centímetros de su hermosa concha y mi cabeza solo tuvo una respuesta “hacelooooo!!”. Y me abalancé con mi boca sobre esa hermosa concha. Todo el asco que alguna vez había imaginado sentir había desaparecido con el exquisito sabor de sus fluidos y los arpegios que salían de su garganta…. Yo no se qué sintió realmente, pero me demostró que le gustaba muchísimo. Se la chupé suave, despacio, con ganas, en círculos, metí mi lengua en su vagina, le froté el clítoris, traté de que no se me escape nada, y pensé, “yo soy mujer!, yo se como como se hace!”, pero asi todo me sentía una inexperta sin saber como seguir. Me frenó ella, me dijo que estaba por acabar y que no quería aun.

Los roles se invirtieron y fue ella quien me la chupó a mi, impulsada por su marido. Era la primera vez que lo hacia y tenia muchísimas dudas, se notó al principio. Me gustó muchísimo como lo hizo, pero lo mas lindo, era mirar hacia mi con concha y verla a ella, tan hermosa, con sus suaves labios y su largo pelo castaño, dándome tanto placer.

Luego de varios minutos de sexo oral, ella paró, nos dimos algunos besos con nuestros maridos y yo retomé su concha… Ella estaba acostada boca arriba en la cama y yo estaba en cuatro, con mi colita y mis rodillas al final de la cama. Ale era quien más cerca estaba, no perdió tiempo y empezó a cojerme por atrás, pero por la concha. Yo estaba pasada de sensaciones, por una lado me estaba comiendo una riquísima concha y por otro me estaban metiendo una pija, nunca me había pasado algo asi. Sentia electricidad en mi cerebro…

Al rato, cortamos con eso, y Vero y yo fuimos a hacer algo que nos gusta mucho y que ya habíamos hecho otra vez. Entre las dos le chupamos la pija a Ale. Primero en la boca de una, después en la boca de otra, después un beso entre nosotras, y después se la chupamos entre las dos, y asi sucesivamente. En esto tampoco somos una expertas, hacemos lo mejor posible. Sabemos que lo mas lindo es lo que ellos ven, miran y se encuentran a dos minas que les gustan mucho comiéndose con furia su pija. Despues de un rato con Ale, hicimos lo mismo con Andrés.

Vero y Andrés empiezan a coger. Vero está en el piso en cuatro y Andrés también, de rodillas en el piso y le da por atrás. Ale y yo estábamos en el piso también, en un colchón que tiramos, él estaba boca arriba y yo encima de él. Yo me movía y no sabía a quién mirar.... Miraba un poco a Ale aunque en realidad me moría de ganas de mirar a Vero y Andrés coger, era la primera vez que los veía coger y me calentaban mucho ellos dos juntos.
De repente Vero dice “métemela por el orto”. Yo abrí los ojos como huevo frito. Es infernal escuchar algo asi. Andrés se pone en situación y comienza con el trabajo bastante agil. Vero empieza a poner caritas raras, primero de duda y luego de dolor. “Ay me duele” le dice. A mi me agarró como un instinto sobreprotector. Ellos se conocen super bien y no me podía meter, pero me enojaba que Andrés le hiciera doler. Lo miré enojada, él me miró también pero ni bola que me pasó. Me indignaba. A Vero le habrá dolido por unos dos interminables minutos hasta que empezó a disfrutar y a gemir de placer… bah.. lo que la habitación nos permitia. No olviden que detrás de la puerta había un clima familiar. En un lugar mas comodo, al menos yo, le hubiera dado mas rienda suelta a los gritos y gemidos de placer. Mientras tanto, yo seguia cogiendo con mi marido, saltaba encima de él. Él también alternaba entre mirarme a mi y miralos a ellos. Cuando ya estaba cansada, yo pasé a estar boca arriba y el encima mio . Esa pose me quedaba mucho mejor para ver las caras de lujuria de Vero y Andrés. Me calentaba muchísimo verlos coger, exacerbaba mi deseo de que Ale me coja duro.

Luego Andrés se sentó en la cama y Vero se sentó encima suyo y seguían cogiendo por el orto pero ahora Vero era la que se movia encima de él. Ella expresa haber acabado y eso activó las ganas de acabar de Andrés. Cuando Ale ve que Andrés estar por acabar en las tetas de Vero, le dan ganas de acabar también y terminan los dos acabando arriba de las tetas de sus respectivas esposas.

Nos miramos, nos reimos y no lo podíamos creer. Despues me quedé pensando si alguien planeó minimamente todo eso y creo que la única puedo haber sido Vero. Se que Ale no tenia ni idea y Andrés intuyo que tampoco…

Bueno. Ese dia entonces, cogi con mi marido en presencia de otra pareja por primera vez (por las otras veces intercambiamos, o sea, yo cojo con otro hombre y mi marido con otra mujer), toqué y chupé concha por primera vez y vi coger a mis queridos amigos por primera vez. De mas está decir, que la experiencia lésbica fue lo mas movilizador de todo. Vero es la primera mujer con la que yo hice algo, y cada pasito que di fue bastante fuerte. Para una mujer como yo, que tengo muchos años de considerarme 100% heterosexual es realmente muy fuerte.


Los invito a todos a vivir la vida intensamente. A veces me emociono cuando pienso en lo que pasó y se me viene por un instante a la cabeza la idea de morir sin haber hecho lo que hice y me angustio mucho. Y pienso también, porqué me demoré tanto tiempo en vivir esto, pero bueno, la vida me llevo por este camino en este momento y no antes. Anímense a todo y no tengan miedo. Yo tenia una vida sexualmente buena, pero monótona, y un dia, todo se revolucionó y me empecé a llenar de experiencias nuevas. Tengo la suerte de que mi marido me acompaña en todo esto. Fortalezcan la comunicación en la pareja. Cuenten sus fantasias. No tengan miedo.

Espero que les haya gustado!!!!