Nunca había estado con una puta, o sea, no de las que cobran..Tenía 24 años, hacia casi 5 meses que no cogía y por culpa de mi trabajo no tenía tiempo ni de salir a buscar alguna chica, trabajaba de lunes a sábado y hasta muy tarde asi que esa temporada era complicada..
Un viernes, terminamos de trabajar muy tarde y justo era día de cobro, para mi sorpresa, me pagaron un extra con el que no contaba asi que lo primero que pensé fue en darme el gusto de probar una puta, ya que casi todos mis amigos me habian contado que habían ido a saunas y cabarets, yo a mis 24 años todavía no sabía lo que era eso.
Me fui a San Miguel, cualquiera que sea de esa zona sabe que en Ruta 8 habia unos cuantos cabarets, ahora ya no existen pero en ésa época habia por lo menos 5, yendo desde el Camino del Buen Aire hasta el cruce de R8 y 197.
Estaba decidido, me fui al Japonés, un cabaret bastante conocido para los de la zona, para mi era toda una novedad, nunca había entrado.
Música a todo volumen, humo,y esas tipicas luces "violeteras" que hacen que la ropa de color blanco parezca flourecente..
Con todos los nervios y asombrado por las hermosas mujeres que había, me senté en una mesa, como era de esperar, se acercó una chica, estaba en ropa interior, blanca, que con la luz violeta se veia desde lejos. Se acercó, me saludó y yo todo nervioso solo atiné a preguntar cuanto costaba echar un polvo.
Los nervios me podían, hacía cási 5 meses que no cogía, como dije antes asi que estaba mas caliente y nervioso que un pibe de 15 años que va a coger por primera vez.
Arreglamos el precio, me dio la mano y me llevó a las habitaciones, si es que se podían llamar así ya que eran unas precarias divisiones con puerta, todo surrealista. Le pagué a un viejo en una ventanilla y nos metimos en ese cuartito.
La chica era rubiecita, me dijo que era brasileña pero tenia acento paraguayo, muy linda, bajita con lindo culo y buenas tetas.
Todo nervioso me desnudé y ella se dió cuenta de lo nervioso que estaba, me pidio que le hiciera masajes, yo estaba nervioso pero no borracho, le dije que no me chamuyara que no me iba a pasar el tiempo haciendole masajes para que despues me tuviese que ir sin coger.
Ella se empezó a reír y con voz muy simpática me dijo- "Papito, si yo no te echo de acá, no te echa nadie"..
No me tranquilizó mucho su respuesta pero como fue tan simpática empecé a hacerle masajes, me puse sobre ella, apoyandole las bolas en la raya del culo, cosa que le hizo gracia, la verdad que tenia una piel muy suave y blanca.. No tenia muchas ganas de hacerle masajes pero me esmeré, sin saber mucho sobre masajes, lo hice lo mejor que pude..
Ella se dió vuelta y me dijo -Gracias, ahora hay premio para vos por la buena onda.
Me hizo acostar y con el condon en la mano me dijo -Normalmente la chupo con preservativo pero vos te portaste bien asi que relajate.
Me empezó a chupar la pija como nunca me la habían chupado, yo estaba nervioso pensando en que no se me iba a parar pero el efecto fue inmediato, a la tercera chupada la tenía dura como una estaca.
Estaba disfrutando como nunca, sinceramente no esperaba algo asi. En un momento ella me puso el preservativo y me preguntó como quería hacerlo, le dije que se acostara y poniendome encima, le metí la pija dura en esa conchita rosada y carnosa que tenía.
Por fin estaba cogiendo despues de 5 meses, ella me rodeó el cuello con los brazos y levantando las piernas hizo que mi pija entrara mas adentro, me empecé a mover, el condon me quitaba sensibilidad asi que tardé muchisimo en acabar, ella, como buena puta, simulaba disfrutar aunque creo que con los pijazos que le estaba metiendo tendría que ser una momia para no sentir aunque sea un poquito de placer.
Obviamente ella quería despacharme rápido, asi que empezó a mover la pelvis tambien, acercó su cara a mi oído y empezó a decirme que la cogiera mas fuerte, que queria sentirme acabando dentro de ella, eso obviamente me calentó mucho mas asi que me enderecé un poco y la puse con las piernas en mis hombros para empezar a cogerla como un bestia, entre la media luz y la posición, podía ver mi pija envuelta en el forro, entrando y saliendo de su concha depilada.
Me costaba mucho acabar, mas fuerte le daba, mas caliente estaba y mas me costaba hasta que la miro a la cara, ella estaba con los ojos cerrados mordiendose el labio inferior.. fue suficiente, empecé a bombear mas fuerte todavia y quedandome quieto acabé como nunca.. la pija me dolía de lo dura que estaba, ella metió la mano y agarrandome la pija por la base para que no se saliera el forro me dijo que la sacara.. me quitó el forro, me limpió la pija con una toallita humeda... y ahi termino mi primera vez con una puta..
Un viernes, terminamos de trabajar muy tarde y justo era día de cobro, para mi sorpresa, me pagaron un extra con el que no contaba asi que lo primero que pensé fue en darme el gusto de probar una puta, ya que casi todos mis amigos me habian contado que habían ido a saunas y cabarets, yo a mis 24 años todavía no sabía lo que era eso.
Me fui a San Miguel, cualquiera que sea de esa zona sabe que en Ruta 8 habia unos cuantos cabarets, ahora ya no existen pero en ésa época habia por lo menos 5, yendo desde el Camino del Buen Aire hasta el cruce de R8 y 197.
Estaba decidido, me fui al Japonés, un cabaret bastante conocido para los de la zona, para mi era toda una novedad, nunca había entrado.
Música a todo volumen, humo,y esas tipicas luces "violeteras" que hacen que la ropa de color blanco parezca flourecente..
Con todos los nervios y asombrado por las hermosas mujeres que había, me senté en una mesa, como era de esperar, se acercó una chica, estaba en ropa interior, blanca, que con la luz violeta se veia desde lejos. Se acercó, me saludó y yo todo nervioso solo atiné a preguntar cuanto costaba echar un polvo.
Los nervios me podían, hacía cási 5 meses que no cogía, como dije antes asi que estaba mas caliente y nervioso que un pibe de 15 años que va a coger por primera vez.
Arreglamos el precio, me dio la mano y me llevó a las habitaciones, si es que se podían llamar así ya que eran unas precarias divisiones con puerta, todo surrealista. Le pagué a un viejo en una ventanilla y nos metimos en ese cuartito.
La chica era rubiecita, me dijo que era brasileña pero tenia acento paraguayo, muy linda, bajita con lindo culo y buenas tetas.
Todo nervioso me desnudé y ella se dió cuenta de lo nervioso que estaba, me pidio que le hiciera masajes, yo estaba nervioso pero no borracho, le dije que no me chamuyara que no me iba a pasar el tiempo haciendole masajes para que despues me tuviese que ir sin coger.
Ella se empezó a reír y con voz muy simpática me dijo- "Papito, si yo no te echo de acá, no te echa nadie"..
No me tranquilizó mucho su respuesta pero como fue tan simpática empecé a hacerle masajes, me puse sobre ella, apoyandole las bolas en la raya del culo, cosa que le hizo gracia, la verdad que tenia una piel muy suave y blanca.. No tenia muchas ganas de hacerle masajes pero me esmeré, sin saber mucho sobre masajes, lo hice lo mejor que pude..
Ella se dió vuelta y me dijo -Gracias, ahora hay premio para vos por la buena onda.
Me hizo acostar y con el condon en la mano me dijo -Normalmente la chupo con preservativo pero vos te portaste bien asi que relajate.
Me empezó a chupar la pija como nunca me la habían chupado, yo estaba nervioso pensando en que no se me iba a parar pero el efecto fue inmediato, a la tercera chupada la tenía dura como una estaca.
Estaba disfrutando como nunca, sinceramente no esperaba algo asi. En un momento ella me puso el preservativo y me preguntó como quería hacerlo, le dije que se acostara y poniendome encima, le metí la pija dura en esa conchita rosada y carnosa que tenía.
Por fin estaba cogiendo despues de 5 meses, ella me rodeó el cuello con los brazos y levantando las piernas hizo que mi pija entrara mas adentro, me empecé a mover, el condon me quitaba sensibilidad asi que tardé muchisimo en acabar, ella, como buena puta, simulaba disfrutar aunque creo que con los pijazos que le estaba metiendo tendría que ser una momia para no sentir aunque sea un poquito de placer.
Obviamente ella quería despacharme rápido, asi que empezó a mover la pelvis tambien, acercó su cara a mi oído y empezó a decirme que la cogiera mas fuerte, que queria sentirme acabando dentro de ella, eso obviamente me calentó mucho mas asi que me enderecé un poco y la puse con las piernas en mis hombros para empezar a cogerla como un bestia, entre la media luz y la posición, podía ver mi pija envuelta en el forro, entrando y saliendo de su concha depilada.
Me costaba mucho acabar, mas fuerte le daba, mas caliente estaba y mas me costaba hasta que la miro a la cara, ella estaba con los ojos cerrados mordiendose el labio inferior.. fue suficiente, empecé a bombear mas fuerte todavia y quedandome quieto acabé como nunca.. la pija me dolía de lo dura que estaba, ella metió la mano y agarrandome la pija por la base para que no se saliera el forro me dijo que la sacara.. me quitó el forro, me limpió la pija con una toallita humeda... y ahi termino mi primera vez con una puta..
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