Hola! les traigo una nueva entrega de esta saga que por si no sabían, involucra incesto con juegos de diverso tipo 😃 Matías, a punto de viajar con sus primos a Misiones para celebrar año nuevo (y algo más) deberá debatir si incluir a su hermana Florencia o no, en este inesperado círculo de incesto.
Por un lado el lazo sanguíneo con ella es muy fuerte, por el otro, tras tener relaciones con dos primas, Julieta y Mónica ¿Que tanta diferencia podía haber? ¿Podría Flor seducirse a entrar en ese submundo o se escandalizaría y le haría la cruz a su hermano? ¡Vamos a averiguarlo!
Como es costumbre, imágenes a modo de ayuda visual, o incentivo, para que imaginemos a los personajes de cierta forma, aunque recuerden, tienen total libertad de imaginárselos como quieran 😛
Estoy seguro que a los que quieren "acción" rápida se les va a hacer largo el desarollo (Flor es un personaje nuevo, y no es fácil contar si se termina curtiendo al hermano o no, al menos no es mi estilo ir tan rápido a los bifes) Si están ansiosos, vayan a la imagen dentro del texto que es donde la cosa pasa de cuarta a sexta.
En este episodio además de conocer a Flor, quédense hasta el final que les esperan nuevos y atractivos personajes :D:D:D ahora sí, que lo disfruten!!
Personajes
Julieta... no se llamaría jugando con su primita si ella no estuviera 😛
Florencia, hermana de Matías
Y la presentación de Carolina (Ya van a ver que pito toca :P)
Ahora si, arrancamos por fin...
Matías no sabía como ocurriría, pero tampoco supo en su momento que ocurrirían cosas con su prima, con la amiga de su prima, y hasta su madre… así que de la mano de Julieta, todo podía pasar, y se dejó llevar por ella a una nueva aventura.
Por suerte la tarea de pervertir a Flor pasó a manos de Juli, que como una en una misión contrarreloj se la pasaba al lado de ella para llenarle la cabecita de a poco, con comentarios e ideas muy picantes. La abrazaba muy pegote, le besaba el rosto, le halagaba los cabellos negros, las pequitas, los ojazos azules… como si hubiera sido cinco años menor y fuese la típica niñita molesta.
- Veo que me extrañaron he, tengo que venir más seguido.
- Por supuesto Flor, te extrañamos mucho.- Poniendo su manos sobre la de ella y regalándole una sonrisa que no supo si le salió pervertida, pero pretendía ser amistosa.
- Mmm me tenés que decir tu secreto, para que te crezcan tan ricas las tetas.- Y Julieta se las masajeó levemente, en un toqueteo más pícaro que pervertido.
- Bueno, después te paso mi receta… para boluda, mi hermano mira ¿No me vas a cuidar vos de esta pervertida?
- No la hagas sentir incómoda a Flor, que no está acostumbrada a que la manoseen.
- ¿Cómo que no? ¿Me vas a decir que no hay un hombre que le de vida a estos chopes?
Todos rieron, ambos sabían que estaba soltera. Para Matías no todo era perversión, también había sano reencuentro, anécdotas, recuerdos y risas clásicas de las que hay entre hermanos que siempre se llevaron bien, sin embargo, un mensaje tempranero de Mónica los energizó como para volverse locos…
“Estuve convenciendo a varios, tenemos nuevos miembros y un jueguito preparado. Ustedes convenzan a Flor de unirse, porfis”
Matías, que lo leyó mientras compartía una ronda de mates a la mañana con bizcochitos de grasa, volcó el mate.
- Si serás boludo hermano, siempre igual vos.
- No te distraigas Mati, deja el celular ¿O pasa algo?
- Nada, mensajes del laburo, pero nada importante Juli.- Florencia, ni tonta ni lerda, captó la química entre ellos al instante. Ese tonito de voz, esa chispa en la mirada, ese toqueteo en su hombro.
- Jamás creí que ustedes dos se podrían llevar tan bien. La adoptaste como a una hija Mati.
Julieta se le abrazó cariñosa y le besó la comisura de los labios de manera peligrosa.
- Bueno, me sobraba espacio, ya está en edad de independizarse, además casi no estoy acá. Me hace un favor. Bla, bla, bla… la verdad es que nos llevamos bien.
- Para un cachito ¿Qué es tan gracioso prima?
Mientras las conversaciones y los mates seguían, la máquina está ganando inercia gracias a Mónica y su dominio de las redes. Para una mujer de sus atributos y actitud no había imposibles le confirmaba a cada minuto quienes se unirían a una nueva experiencia que estaba planeando.
- Tengo una idea ¿Querés salir a correr Flor? Aprovechemos el día lindo. Mientras que Mati limpie todo y prepare las cosas.
- Dale, sin ofender, pero huele raro. Ventila mientras no estemos Mati.
- Claro, ustedes se divierten, yo limpio, y encima me echan en cara el olor jaja. Rajen mejor-
Riendo con ganas- Vayan con cuidado.
En sus adentros sabía que ese olor “raro” eran manchas de semen en la alfombra y el sillón que al no limpiar inmediatamente (por no encontrarlas, mucha veces cuando la leche salta, y los hombres me darán la razón, algunas gotas se teletransportan quién sabe a dónde). Pobre Flor, pensó, había caído en un nido de víboras, por decirlo de alguna forma. ¿Cómo reaccionaría cuando descubra que dormían juntos? ¿Y si veía la infinidad de juegos y juguetes sexuales en los armarios?
- Vos dejámela a mí, le voy a sacar la putita que todas llevamos dentro.- Le susurró mientras Florencia se cambiaba en el baño. – Lo que menos vamos a hacer es correr.
- ¿Qué tanto le vas a decir?
- Le voy a contar que en la fiesta va a pasar “algo distinto” pero lo nuestro lo va a descubrir por “accidente”
Una de las últimas costumbres de Julieta era salir a correr, lo hacía muy seguido. En cambio conocía a Flor y era muy remolona, para nada amiga del ejercicio. De seguro era la excusa perfecta para hablar, para poner en claro ciertos temas…
- Prima, me queda muy apretado, voy a parecer un matambre.- Como Florencia no había traído ropa cómoda para esa clase de actividad, Juli le prestó una calza que le quedaba como una segunda piel, y una musculosa holgada sobre un top que le juntaba las gomas como si fueran dos mitades de sandía listas a servirse.
- No digas pavadas, estás hecha una divina, los tipos van a caer como moscas con esas gomas.- Definitivamente a Juli se le estaba pasando la mano, se la comía con la mirada.
Ella, Santino y hasta Mónica lo estaban presionando para que pase “algo” con su hermana, así como él había pervertido a Juli y Santi, como una venganza pasiva, silenciosa, que no estaban en ningún contrato pero por códigos (como si hubiera códigos en esta historia) debía llevar a cabo.
- No le hagas caso Flor, vayan a tomar aire, no necesariamente van a correr una maratón.
- Lo mío va a ser alevoso, las tetas me van a repiquetear como dos campanas, van a hacer tulún tulún…
- Bueno, no pudo hablar en nombre de todos los hombres, pero es verdad, ponete una camperita arriba porque vas a distraer a los conductores y hacer un caos.- Flor lo miró sorprendida, él no era de dar halagos tan descarados antes, sin dudas la chica estaba empezando a notar “el cambio” Todas eran muestras, por ahora sutiles, de que se había adentrado en un mundo nuevo…
- Gracias, voy a tratar de no quemar la ciudad, chau.- Y Flor le besó la mejilla antes de partir.
Matías quedó a solas, aunque era un decir, el chat de whatsapp estaba que ardía. Mientras armaba su bolso, revisaba el auto, y ordenaba el departamento antes de partir (saldrían a la mañana siguiente) observaba las personas que se sumaban a jugar un nuevo juego…
- Lo que puede un buen par de tetas he… al final no hay con qué darle, no importa que seamos familia, unas buenas tetas lo pueden todo.- Dijo a solas al ver los familiares que jugarían el misterioso juego, que por motivos favorables al suspenso, no mencionaremos aún.
Al grupo Juli subió una foto que lo desconcertó. La muy atrevida le sacó una foto al traserillo ajustado de Florencia mientras compraba una gaseosa en un kiosco a escondidas, y ella, en perspectiva, hacía un gesto obsceno con la lengua. Preguntaba “¿Se nos unirá?” con una carita alocada.
Sorprendido por lo atrevida que se había vuelto su prima, Mónica la reprimió junto a otros en el grupo porqué no debía ser tan mandada. Santino en cambio le mandó un msj por su cuenta de whatspapp particular.
"Vos me descociste a mi hermana de todos lados, espero que no te moleste si te hago lo mismo he… a no quejarse :P:P:P "
Aunque acompañaba todo de caritas amistosas, era una sentencia de venganza. El guachó quería lo suyo, y en la verdad, tenía razón. Las vio llegar al rato antes de que pudiera contestar, todas traspiradas y jocosas después de almorzar. Habían corrido más de la cuenta, quedando agitadas y hambrientas. Juli no perdió el tiempo y volvió a remarcar las miradas masculinas sobre Florencia.
- Nadie puede evitar mirar tal escultura, perdóname que te lo diga…
- ¿Y vos hermanito? – Le preguntó algo subida de tono ¿Acaso le había contado todo?- ¿Vos podes evitar mirar?
- No me hagas decir una locura…- Y se levantó a prepararles la comida, o mejor dicho, recalentar el rejunte que quedó en la semana. No iban a comprar comida sabiendo que estaban por irse.
- Hermano, no me evites… ¿Cuándo me lo pensabas decir?
Flor se apoyó contra la heladera, escrutándolo con la mirada. Matías tragó saliva. Por más que la aceptación de Mónica había aliviado la mochila, seguía viviendo en un gran pecado.
- ¿Cuándo me pensabas decir que cocinabas muy bien? Le dije a Juli que compráramos algo en el camino y me dice “Noooo boluda, si Mati cocino unas tiras de vació riquísimas” Te lo tenías guardado he, en tu puta vida cocinaste algo.
- Bueno Flor, siempre fui una caja de sorpresas.- Expresó en chiste.
- Y las sorpresas que te guardarás…
En eso llegó Julieta, que se le abrazó mientras esperaba a que la bandeja con la carne se caliente en el horno. Flor los miró de manera sospechosa. Algo le decía que la gran “revelación” para ella se caía de madura, no pasaría una noche sin saber que entre los primos pasaba algo indecente.
Por suerte todo transcurrió con suma normalidad hasta la noche. Matías sin embargo, se preguntaba si el Matías normal era el que hablaba de su trabajo, las películas que vio y hacía chistes malos, o el verdadero Matías era el que por las noches le comía el culo a la prima como un poseso. Sea uno u otro, el Mati que consideraba normal disfruto de la charla y calidez familiar de su hermana toda la tarde sin un ápice de perversión. Tuvo el momento de paz que necesitaba antes de sumergirse de lleno en la indecencia.
Juli se fue a bañar y los dejó a solas, con el calor de verano, el ventilador a tope, los snacks que aumentaban la temperatura…
- Estas cosas son muy dañinas cuando hace calor ¿Comprar fruta vos ni ahí, no?
- Tengo estomago de sapo, trago lo que venga y no me pasa nada.
- ¿Lo que sea, he?- Parecía que Flor preparaba algo importante que decir.
- Quiero que me digas la verdad Mati, es algo raro lo que voy a decir, pero cambiaste mucho desde que vivís solo ¿Qué pasa? ¿Te sacaste la lotería y no me contaste? No puede ser que no te hayas quejado de nada desde que llegué. Antes te la pasabas a las puteadas.
- Si, en realidad no, pero me pasó algo bueno que es como sacarse la lotería. Digamos que cambiar de ambiente me sentó de lujo.
- Antes también estabas bien, tampoco te mudaste a un palacio. ¿No me vas a decir más?-
Tomando un puñado de snacks triangulares de queso.
- Prefiero que lo descubras vos, linda. Vas a descubrir cosas nuevas que por lo menos a mí, me hicieron muy feliz.
- Me das miedo, hermano.
- No estoy metido en drogas, ni mate a nadie he, somos adultos, te puedo asegurar que no es para temer…
- No lo dije por eso. Me dijiste linda.- Y le golpeó el mentón amistosa.- Creo que ya se por donde viene la mano.- Y le guiñó un ojo, ese gesto no dejaba muchas dudas. Debía intuirlo.
La tensión del momento a solas la rompió Juli, llamando a Matías a entrar al baño porque se olvidó el shampoo en el botiquín y no quería salir mojada.
- ¿No me llama a mí que soy mujer?
- Es confianzuda, deja que yo voy. - …- Metiéndose el hombre entre el vapor.- Si serás boludita he, acá lo tenés.
Le manoteó el embase, lo tiró por ahí, y lo abrazó para comerle la boca, el verdadero motivo del llamado. Una mañana y tarde sin sus besos, sin una ronda cariñosa de sexo oral, o aunque sea un abrazo muy caliente le parecía mucho. Sintió en esos labios fogosos el placer que le daba saber que Flor estaba en la sala, quizás escuchando el silencio, o los ruidosos chupones que le daba a esos labios juveniles, sus brazos le recorrieron la espalda mojada bajando hacia sus manzanitas tan lisas y preciosas… lo que no sabía, era que Flor estaba atrás de ellos.
Ella los empujó desde atrás, Matías fue a parar con ropa y todo en la bañera enganchado en la cortina de baño como un pez en una red. Ambas chicas rieron como locas, aunque Juli no se lo esperaba. Mati observó todo desde abajo, empapándose la ropa y el pelo con la lluvia, shockeado por la broma pesada hasta que reaccionó…
- ¿Así tratas a tu hermano? ¡Vení para acá pendeja maleducada!
La manoteó a Flor desde abajo pasando su brazo por entre las piernas y la tiró contra él para que se empape por la ducha. Juli los miraba deleitándose con el espectáculo, Flor quería librarse dejándolo sordo con sus chillidos, pero esos brazos la atrapaban para que se mojara toda, manoseándole el vientre, las tetas… hasta que se la pegó a él como quien no quiere la cosa, y en un segundo de silencio y quietud Matias la besó.
- Que tiernos, no paren por favor.- Susurró Juli desnudita como dios la trajo al mundo frente a los hermanos. Él estaba demasiado concentrado en el sabor de esa boca, su piel siendo rociada por el agua caliente, sus manos acariciando la espalda de su hermana de una forma que jamás pensó que haría.
Flor sumisa, se dejaba besar como una amante inexperta, con cierta timidez le exploraba la boca al hermano mayor, aunque los ojitos cerrados, la respiración y las manos ubicadas en el cuerpo del hombre, indicaban que estaba explorando con placer, no estaba horrorizada ni mucho menos.
Juli no pudo esperar más sin hacer nada, se arrodilló entre ellos y se unió al besó. Sí, los tres, sin despegarse, se comieron, chuparon, y lengüetearon los labios. Las manos de Juli los tomaron de las cabezas para que se mantuvieran unidas a ese beso incestuoso y lésbico que duro unos prodigiosos minutos.
- No puedo pasar de 1 a mil en un segundo. Para prima…- Le paró el carro a Juli que le había metido una mano en el pantalón.
- Bueno, Flor dejemos a Julieta terminar de bañarse de una vez, tiene los dedos más arrugados que mi abuela.
No supo cómo, pero salieron de la situación de la mejor manera posible. Con muchas risas, diálogos, chistes. Flor naturalizó la cuestión con las palabras justas, no era la mente cerrada o santurrona que su hermano creía que sería ante esas situaciones. No preguntaba, no necesitaba hablar al respecto, simplemente besó a su hermano y prima en la ducha y continuó con su vida, deseosa de lo que le depararían ahora que sabía cómo venían las cosas.
Recién en la cena Flor sintió la necesidad de contextualizar la situación en palabras claras, en definitiva, empezó a preguntar.
- ¿Hace cuanto que… empezaron con este jueguito?
- Desde que estrene departamento. Hacía rato que teníamos algo así como una tensión que romper…
- El pervertido es él, que me confesó que tenía ratones conmigo, su primita pequeña jaja
- ¿Al menos tenías 18 no?
- Si…- Contestó Matías pero Julieta rió. El hombre prefirió comer con una sonrisita.- Que bueno que seas de mente abierta Florencia, porqué en la fiesta de fin de año Mónica tiene algo planeado.
- ¿Me estás diciendo que la prima Moni…?
- Sí, Moni y mi hermano Santi lo saben. Es una larga historia, pero Santi se nos coló en una salida y se enteró. Al final le gustó la idea. Hace poco Mati se mandó un cagadón y Mónica se enteró de todo. Al final, también le gustó la idea. Ahora que te enteraste vos ¿Qué te parece la idea?
Flor se llenó la boca de fideos e hizo un gesto de tibia aprobación.
- Me gusto la idea.
- Nadie te va a obligar a nada, ni vas a tener que pasar de 1 a mil como dijiste.
- Es muy simple hermano, una parte de mi es temerosa, no quiere saber nada, y la otra quiere probar experiencias nuevas. Todavía no decidí a cual parte darle el control de todo. Pero algo es seguro, yo voy a todo o nada. O me uno por completo o me aparto de la situación.
Ambos prefirieron dejarla comer en paz. Esa escena de la ducha había sido bastante más de lo que esperaba de su hermana Flor. Por suerte los planes de Julieta no concluyeron y para antes de dormir, cuando se aparecieron en el living con ropas de cama, (por el calor, Flor ni se había cambado las ropas mojadas) vino con una idea prometedora.
- Deja tu computadora, tengo una idea primo.- Se inclinó con una remerita roñosa que no le había visto nunca, muy holgada que le llegaba al ombligo. Abajo solo tenía una bombachita común y en las piernas las medias rayadas de siempre. Hasta Flor la fichó y la miró con descaro. Ella por su parte tenía un pantalón de gimnasia ajustado y una musculosa común.
- ¿Qué tenes en mente?
- Algo que jugaba con mis amigas… fa, hace cuanto que no las veo, estoy re cortada con ellas. – Se ensimismó por unos segundos- En fin… omegle.
- ¿Omegle?- Preguntó Flor.
- Es un sitió de videoconferencia al azar, como una ruleta rusa de gente. Dónde el 90% son tipos jalándose el ganso.
- ¿Y para qué queremos ver eso?
- No seas tímida Flopi, sentate…- Y la puso en el medio, mientras que a los lados, se acomodaron tanto ella como él.- Vamos a buscar a una pareja de lo que sea, y si nos dan bola, empezamos algún juego de prendas, o hacemos algo divertido, lo que pinte.
- Me gusta, me gusta. No sé porque nunca se me ocurrió Juli.- No se lo vio venir.
Con el plan nocturno en marcha, empezaron a gatillar la barra para ir pasando a personas que estaban masturbándose. Muchas soltaban el ganso para escribir, pero Juli los pasaba, también a los que mediante gestos pedían que no los pasaran. Lamentablemente, cuando encontraban grupos de amigas o mixtos para jugar acordes, no siempre había suerte. Ya sea por diferencias idiomáticas o desinterés, les pasaban. Juli era muy selectiva, como si contara con un sexto sentido, tenía la mira puesta en otros como ellos y no descansaría hasta encontrarlos.
- Vas a tener que conformarte con sos pendejitos pajeros Juli, dejá.
Por fin tras media hora de chillidos de Flor cada vez que salía una poronga en primera plana, encontraron a un trío muy disparejo, como ellos. Julieta “teclado salvaje” se presentó, les hizo unas preguntas y propuso el juego al toque, activó el micrófono, del otro lado igual y tras dialogar como por diez minutos, aceptaron.
- Veni primo, se llaman Carolina, Arturo, y un amigo de Arturo, Fabián. Son de Córdoba. Quieren jugar.- Del otro lado, los recibieron con un saludo una chica de pelo castaño enrulado, muy bonita, y un vestido aniñado, un chico de pelo rubio con un manojo de rastas atadas (parecido al de Verano del 98, una serie argenta) y su amigo de contextura deportiva, flaco, alto y medio narigón. Parecían divertidos, pero para Matías no se animarían a mucho, no daban el perfil de traviesos. Estaban en una habitación aniñada empapelada de rosa, con peluches en repisas y platos con estampados colgados. ¿Serían legales? A Matías se le hacía más difícil saberlo con esos jóvenes de entonces.
- ¿Entonces son todos primos ustedes? Él es mi hermano y su amigo, están a punto de ir a Mardel, por eso me lo estoy bancando acá, de inquilino…
- Que linda presentación he, una simpática tu hermana Artu.
- Sí Caro, ellos son hermanos, y mis primos. ¿Entendes? ¿Quieren empezar ya? – La rubia estaba muy ansiosa.
- A ver si entendí ¿Preguntan de lo que sea?
- No se valen preguntas muy cientifiquoides, tienen que ser contestables.
- Si acertamos la respuesta, preguntamos nosotros, sino ¿Sale prenda? ¿Entre primos y hermanos quieren jugar a eso? Dijeron que las prendas podían ser zarpadas.
- Dale, es re divertido, es de esas cosas que de decir no, se arrepienten de acá a la tumba.- Habló convincente la rubia. De otro lado, tras cuchichear por unos minutos (el hombre flaco desconfiaba por tener novia) aceptaron y quedaron en tirar la primera pregunta.
- ¿Preguntas de lo que sea?- Al asentir las mujeres a Fabián arrancó con una preguntó que creyó, sería matadora- Bueno, con esta las mato, espero que no sepan de fútbol ¿Cuántos torneos locales tiene Racing Club?
Gracias a Flor, que sabía bastante de fútbol, con Mati coincidieron, arriesgaron y acertaron. No valía buscar material para preguntar en libros ni las respuestas en internet. Debía ser todo sumamente espontáneo.
-Ahora nos toca a nosotros… ¿Cuántos Oscar ganó Leonardo DiCaprio?- Del otro lado rieron, Florencia se había apresurado, era una pregunta muy fácil. Caro dijo confiada que uno solo.
Así siguieron tirándose preguntas, como tanteando el terreno, sin animarse ni un grupo u otro a hacer preguntas comprometidas. Matías les sacó el perfil a los chicos rápido. El morocho preguntaba de deportes, la chica de cantantes del momento y el de rastas, bueno, no sabía si estaba fumado o qué, pero salía con cualquier cosa, precisamente tenía que preguntar él…
- Hay siete moscas en la mesa, y aplastas dos ¿Cuántas quedan?
Julieta se apuró y la boluda dijo de una que quedaban cinco. Del otro lado rieron, era una pregunta engañosa. El hippie le explicó que las otras cinco se iban volando, solo quedaban en la mesa las dos aplastadas.
- Bueno, dejen de reírse malos, tiren una prenda.
- Y una buena he, que me estoy aburriendo.- Picaneó Florencia.
- Esa remerita toda agujereada, sacátela si te animas, claro. – Le sugirió el morochito simpático, a ver si accedía.
- Pidan otra cosa, Juli no se puso corpiñ…- Flor quedó boquiabierta. Julieta se libró de la remera sin chistar liberando esos preciosos pechitos blancos ante los incrédulos muchachos.- Okey, esto va en serio. Muy enserio.
- Si siguen jugando van a ver mucho más, pero tienen que animarse ustedes también, he.- Sugirió lujuriosa. Del otro lado, como los varones eran mayoría, estaban entregadísimos. Carolina no tanto, pero tampoco dejaba ver nada que anticipara una retirada.- Siguen ustedes, el que pregunta y gana sigue.
- Para mí no son primos, hizo topless como si estuviera en el patio de su casa.- Se sorprendió Carolina.- Son novios seguro y nos vendieron gato por liebre.
- Te aseguro que somos primos, Julieta es así, lanzada como ella sola, libertina, no tiene ataduras, yo recién ahora me estoy acostumbrando.
- ¿Y si seguimos chicas? Después nos analizamos.- Apuró Fabián.
El hippie Salió con otra de las suyas.
- ¿Los veganos usan condones de látex?
- Que pregunta de mierrrrrrda- Exclamo Juli. Mati estaba perdido, pero fue Flor quien arriesgó.
Debía mejorar la comunicación de su equipo y pensar las respuestas, porqué erró.
- Calculo que sí, si no se los comen…
- Falso- Contestó Arturo- Tienen caseína, un producto que viene de la leche, algunos no los usan.
- Con razón hay tantos- Reflexiono Flor intentando suavizar la situación, ya se veía como blanco de esas mentes pervertidas, sin embargo, Carolina tomó las riendas.
- Ustedes babosos ya se están ahogando en baba por esas tetas, ahora me toca a mí. Quiero que Matías se saque la remera, que muestre carne…- Interceptó la joven antes que se lancen como barracudas por más carne femenina.
Entre risas, Mati se mostró sorprendido y complacido, al parecer la rutina le había dado frutos y quedaban mujeres que apreciaban el trabajo muscular, o al menos, querían verlo. Julieta lo miro risueña, estaba gozando ese nuevo jueguillo.
- ¿Y bien? ¿Seguimos?- Carolina le levantó el pulgar y le guiñó un ojo- Puede preguntar otro he. Tus preguntas son letales, Arturo.
- No, dejen a Artu que de tanto porro le salen unas cosas re locas.- Y el trió detrás de la pantalla rió como loco. Eran pibes piolas, se notaba, Matías se preguntaban hasta dónde llegarían con el juego… si tan solo tuvieran una chance se la devolverían. Su equipo perdía 2 a 0, dos en cuero, y del otro lado, invictos.
- ¿En qué lugar el jueves esta antes que el miércoles?- Antes de que maldiga al hippie por sus ocurrencias, les tapó las bocas a sus compañeras para que antes de que arriesguen, piensen una respuesta. Debían tranquilizarse y pensar o quedaría en bolas muy rápido como tres pelotudos.
Del otro lado reían triunfales mientras el tiempo corría, ya estaban por dárselas por perdida. Matías se rebanaba los sesos para encontrar la respuesta, y le cayó la ficha.
- ¡En el diccionario!- Ambas lo vitorearon, el juego ahora estaba en sus manos.
- Ahora los matamos jaja pensa una buena Mati, dale. – Le alentó su “primanovia”.
- Yo tengo una buena también he…
- Preguntó, después vos Flor… - Ya tenía una pregunta relacionada con su trabajo - ¿Cómo se llama la disposición de letras en los teclados que todos usamos?- Obviamente, los fusiló. Tras tres minutos Caro expresó su derrota.
- Se llama QWERTY, tomaron el nombre de las primeras letras de izquierda a derecha.- Tras varias risas de nerviosismo del otro trío, el suyo pensó una buena prenda con sus cofrades.
- ¿Sabes que el otro día lo leí en face pero me olvide?- Se sorprendió Arturo.
- A llorar a los caños.- Se mofó Julie- En vez de carne, queremos ver acción… como mínimo, un beso francés entre Caro y Arturo.
- ¿¡Qué!? ¡Qué pervertidos! Si saben que somos hermanos ¿Qué locura es esa?- El hippie decía “woa” una y otra vez, haciéndose el aturdido. Ambos estaban colorados como un tomate… por suerte, Florencia se redimió de su anterior error y emendó la situación.
- ¿Qué es un buen beso entre hermanos hoy en día? ¡Vamos!- Flor lo tomó de cuello para estamparle un beso breve pero con todos los tintes que un beso debe tener para ser bueno.
- Ustedes no son hermanos, seguro, manga de perverts…
- La cuestión… chicos, es que mis pechos son poca cosa, pueden ver mucho más, si se animan y seguimos jugando.- Y Juli le manoseó las tetas a Flor.- ¡Pero tiene que seguir! ¡Vamos!
Caro y Arturo cedieron a la presión, y se enfrentaron entre risas nerviosas y mejillas que parecían abofeteadas. La presión no venía de su equipo, sinó de Fabián, que insistía en que un beso “no era nada” que debían “animarse” El hijo de puta no daba más de ver tetas y argollas ajenas del otro lado de la pantalla y nunca les perdonaría perder el juego, la experiencia de sus vidas.
De a poquito, las bocas se acercaron, Carolina y su rosto angelical se relajó y se unió en labios con el rostro nervioso de Arturo, y por unos instantes, sus bocas se movieron pegadas esbozando pasión, el tiempo se detuvo y la noche se volvió silencio mientras los hermanos hicieron lo que jamás creyeron que harían. Hasta que no pudieron más y se separaron entre risas, se les estaba yendo la mano y lo notaron. Arturo no parecía tan contrariado, tenía una sonrisa pícara igualita a la del joker.
- Pensá en la venganza Caro, en la venganza…- Le susurró Fabián al oído.
- Cállate baboso, con lo de esta noche tenés la cuca asegurada de por vida.
Lamentablemente, el otro grupo no era para nada lerdo y acertaron la siguiente pregunta suya (¿Qué se invento antes, la máquina de escribir o la ametralladora?) ahora estaban en manos de Arturo y sus peculiares preguntas.
- ¿Porqué los buceadores se tiran de espaldas? - Fue otro knock-out. Los minutos pasaron y el hippie se cansó de esperar- ¡Porque si se tiran de frente se dan con el tubo de oxígeno en la nuca!
- ¿En serio es por eso? Para mi es mentira.- Pensó Flor.
- Sí, tan mentira como que ustedes son familia, vamos.- Le reprochó Caro.
Los cibernautas rieron con ganas ¿De dónde habían salido? Les estaban dando una paliza, Juli lo miró sorprendida, pensaba ver un show pero lo darían ellos. Estaban a su merced como un cacho de carne tirado a una perrera.
Los cuchicheos cesaron y Carolina dio el veredicto. Querían verle el miembro a Matías, ni más ni menos, o sino ella no seguía jugando.
- Mirá la carita de ángel, resulto bien putona he…- Reconoció. La chica le sonrió de forma socarrona.
- ¿No están acelerando demasiado? Una cosa es besar a mi hermano, pero verle la pija es otra.
- Déjalos Flor, déjalos, que Mati lo haga, ya nos va a tocar. Estos nenes saben jugar, seguro.- Era extraño verla hablar con las gomas al aire, como una vedetonga cualquiera. Dale mostrá Mati. Demostrales de qué está hecha nuestra familia.
Flor se llevó las manos a la cara, Juli estaba en su salsa, Carolina miraba inquieta, quería parecer superada, pero sabía que estaba a punto presenciar algo fuerte. Por fin, se abrió la bragueta, y bajando el slip desde adentro, soltó la polla y las pelotas para dejarlas colgando ahí, semierecta, de pie a un lado de su hermana, que le miró el miembro, lo miró a él, y rio a carcajadas para no llorar.
- ¿Estás bien Flopi? Es una pija, no te horrorices.
- Para vos es común vérsela Sati por lo visto, pero hoy me entero de tu relación con mi hermano, la relación que tiene con Moni, lo besé, y encima, le veo el pedazo. Es todo un tema prima.
- Bueno, después te toca a vos, este juego es así Flor, no te escandalices. ¿Contenta mi amor?
¿La puedo guardar o te la sigo meneando?- Pregunto cansino sin dejar de enseñar su orgullo.
- No, no, nada de guardar, dejátela afuera.
- Que puta resultó tu hermanita Arturo…- Lo cargó su amigo y recibió un golpe de puño de ella en el hombro. El juego prosiguió con dos miembros desvestidos. La balanza debía inclinarse.
Por suerte, Flor inclinó la balanza al poco tiempo, haciendo una pregunta que ninguno del otro lado respondió. ¿En qué país libró Napoleón su última batalla? Aunque Arturo sabía que era en un lugar llamado Waterloo, no supo que estaba en Bélgica. Bendita Flor y sus finales de historia, que aprobó antes de venir y tenía frescos en la memoria.
- Bien, perfecto, ahora nos toca a nosotros. – Brevemente, las chicas llegaron a un acuerdo y fueron a por la carne. Querían vérsela a Arturo, que no se la vio venir.
- Después, por favor, le pedimos que se saque algo a Caro. Porqué no tenía en mente ver pija toda la noche.
- Te la bancas hermano, Juli está con las tetas al aire y ni se queja, bien que te gusta verla así pervertido.- Le recriminó jocosa Flor. Del otro lado no hubo ni discusión. Carolina se dio vuelta, haciéndose la consternada y se re notaba que tenía las re ganas de verle la verga al hermano. A Fabián le chupaba un huevo, quería ver tetas, culo, concha y haría lo posible por quedarse hasta el final.
- Perdón hermana, pero si el otro caballero lo hizo sin chistar… ya vendrán tiempos mejores.- Y rebeló su arma. Tanto Juli como Flor fueron gentiles y lo vitorearon, así como exclamaron palabras de aliento ante una polla bastante gorda, que por el vello púbico, las damas no podían apreciar muy bien.
Caro, vamos, animate y aunque sea mirale la pija a tu hermano, que no se sienta menos- Le hostigó Julieta.
- No te conozco, pero voy a encontrarte, y voy a matarte Julieta.- imitando la clásica escena de Liam Neeson. A Matías empezaba a encantarle esa guchina.
Criticar y describir pijas no era su campo, pero se sintió bien al saber que ese día, no era superado abrumadoramente como cuando Santino estaba presente. Arturo tenía “lo suyo” en grosor, pero era corta como un dedo gordo, nada que su falo depilado y bien atendido envidiara.
Las preguntas eran cada vez más boludas y desesperadas, antes de que ocurriera algo interesante, contestaban cinco cada uno. Sin dudas estaban sin ideas, habían quemado todas las genialidades y el deseo a la carne les sucumbía a la sinapsis neuronal. Sin embargo, Matías estaba acostumbrado a llevar los juegos al final, sin perder del todo la razón.
- ¿Había dinosaurios marinos?
Cayeron en su trampa, al unísono dieron el afirmativo y ya estaban formulando una nueva pregunta cuando Mati les informó la verdad.
- No había dinosaurios marinos, eran todos terrestres. Les dejo googlear si quieren pero esos que ustedes creen dinosaurios, eran reptiles.
- No, confiamos, caímos en tu trampa- Reconocía Carolina. – Era muy fácil, pensé que debía tener trampita.
- Bueno corazón, que linda actitud la tuya, porqué te voy a pedir algo a vos, quiero que imites a mi prima, y dejés esos pechos que tan bien te cubrís al aire.
- Me la veía venir, duré bastante así. – La carita de Ángel ni se molestaba. Sin darle bola al hermano (nerviosísimo, no sabía si actuar normal o expresar su consternación) Al final, tanto Arturo como Fabián se quedaron pegados a la cámara cuando se dejó caer el vestido floreado cubriéndose con las manos, hasta que las soltó para revelar sus tetas con sus respectivos pezones en punta orgulloso de estar en el foco de atención colectivo.
- Muy, pero muy, pero muy complacido Caro, preciosas.- Juli le pegó un coscorrón.
- No te pases de listo, he. Tus tetas son las mías.
- Son todas preciosas, las de ella también, no te me pongas celosa amor.- Admirando esas tetas bien redonditas con unos pezones tipo copito acaramelados. Daban ganas de lamer la pantalla, se veían muy ricas incluso a la distancia.
Las preguntas siguieron, aunque lo gracioso era ver lo nerviosa que estaba Caro ante su situación. No estaba acostumbrada a putanear así, encima, Fabián quiso estirarse para tomar agua y le rozó un pezón, lo que provocó su furia.
- Fue sin querer, enserio, mira si me voy a hacer el loco enfrente de tu hermano.
- Por favor, les recuerdo que hicimos una pregunta ¿Dónde nació Huck Jackman?- La primera pregunta formulada por Juli, fanática del actor.
- ¿Estados Unidos?
Juli imitó el sonido de un timbrazo de eliminación. Era australiano, y ahora el equipo de enfrente estaba en desventaja.
- Vos venís invicto alto, te toca a vos. Mostrá paquete, dale.
- Bueno, ya saben, lo siento, perdón, no era mi intención… - Dijo rapidito y desinteresado- No quiero ser menos, en fin. Más vale que ustedes dos muestren más he…
Dejó al descubierto una manguera larga como él, muy venosa y fina, casi una cuerda. Flor no daba más, le faltaba el aire, y Juli aplaudía e hinchaba por Racing. Estaban re locas.
- Bueno, orden en la sala, tres pijas al aire y las perdí por completo. Bueno, me toca, y pregunto. ¿Qué animal camina en 4 patas al principio del día, en dos por…
- ¡El hombre boludo! ¡La respuesta es el hombre! – Matías no estaba tan seguro de una pregunta tan conocida por el mito de la esfinge, pero también pensaba que para no hacer decaer los ánimos del resto, debían ganar algo.
Como en una mesa redonda de caballeros, Arturo y Fabián dejaron afuera a una molesta Caro mientras decidían la siguiente movida.
- Bueno, vamos por todo, te queremos ver como dios te trajo al mundo Juli. Apostamos por vos rubia porque te animas seguro.
- Pensé que te destetaban.- Le susurró a Flor la rubia- Bueno, a pedido de mi hinchada, empecemos, pero antes…
Julieta acomodó la cámara para que la enfoque solo a ella, y como una bailarina exótica, se despojo de sus prendas con mucha sensualidad, y por prendas, me refiero a zapatillas y medias, la ropa interior, lo único que le quedaba, la fue bajando de a poco y de espaldas.
Entre un silencio de tumba, en el que la sangre empezaba a bullir en esas pijas voyeuristas, la colita de Juli quedó pelada, cómo dios la trajo al mundo, y se inclino para que vieran sus orificios. La muy putona disfrutaba de eso como nunca, ser devorada por esos hipnotizados jóvenes, con sus ojos clavados en su vagina angelical y su ano.
- ¿Los complací chicos?- Preguntó con la cabeza boca abajo entre las rodillas, de espaldas como toda una contorsionista.
- Espera, que los voy a ayudar.- Matías se levantó con la cámara y estiro el cable para que vieran en primer plano la vagina de Juli, con cada parte perfectamente reconocible, el clítoris respingón, y los labios que al ser separados revelaron su excitante humedad, que como losa de lujo embaldosaban la ardiente cavidad. Se sintió como un proxeneta enseñando a su mejor nena.
- ¿Se vio bien chicos?
Ellos no contestaron, ya estaban manoseándose las pijas, paradas al mango. Juli se sentó como si fuera el día más normal en la Tierra. Arturo estaba tan cebadísimo que se la cascaba mirándole las tetas a la hermana y estaba ni se cubría. Caro estaba paralizada, como si hubiera visto su vida pasar frente a sus ojos.
- Pregunten; porque sino apago la cámara y nos vamos coger. Se lo pierden todo.- Amenazó la blonda. La amenaza de dejar el juego los hizo reaccionar.
- ¿Es la araña un insecto? – Soltó el muy bruto de Fabián. Era demasiado fácil cuando Matías contestó, Caro los reprimió a ambos.
- Vaya, vaya, están en mis manos. Veamos, Así como quedó mi primita, te quiero ver a vos Caro, preciosa.
- ¡No es justo! ¡Están todos contra mí! Manga de pajeros, estos pibes son re tarados.- Exclamó nerviosa, y por primera vez, pensaron que los dejaba en banda.
- No te enojes, vas a pasarla bien igual, en unos segundos, los nervios se te van y te olvidas que estas en bolas. Consejo de mujer a mujer.
- Esto queda entre nosotros, y entre ustedes, es una experiencia más, vamos ¿Vas a negar que esto no es excitante? Y te lo dice alguien que conoció el incesto hoy.- Ayudó oportuna Flor.
- Con una condición. Los quiero conocer algún día he.
- Por supuesto Carolina, es un trato, vamos, no seas tímida, mostrá tu belleza natural.
- En que lio me metí, dios.- Sin embargo, tras una pausa en la que su hermano y amigo prefirieron hacer silencio, la jovencita resolvió positivamente.
Haciendo un poco de sana trampa, Carolina se subió el vestido para tenerlo recogido hasta la cintura. Reveló así unas braguitas muy inocentes, color azul, con voladitos delicados que no ajustaban mucho, sin dudas tenían “jodidos” los elásticos. Estaba trasparentada como una hoja de calcar debido al flujo de su excitación. Se había corrido como una monja en un burdel y le daba vergüencita admitirlo.
De a poco, fue bajando la prenda de espaldas, mientras los hombres, al palo, le sostenían el vestido para que no cayera.
Una colita preciosa, pulposa y trigueña fue revelada ante la cámara, y tuvo la delicadeza de mantenerla así, quietita para que propios y ajenos la admirasen, y hasta las abrió un poquito.
Luego se dio vuelta como tortilla y mostró su coñito al natural, totalmente al natural, con bellos castaños como su pelo en abundancia, de un encanto único que solo las peluditas tenían. Tuvo que ayudarse don dos deditos tímidos para enseñarle la vulva empapada de entre la maraña, sin embargo, ese gesto fue demasiado para quienes la acompañaban.
- Como me gustaría estar ahí, y darme un buen chapuzón de lengua en esa zanjita empapada…- Avivó el fuego Matías.
La calentura fue demasiado para esos pibes. Mientras enseñaba el coñito Fabián sin decir palabras se le prendió a una teta como un mejillón al casco de un barco. Abajo, Arturo se arrodilló mirando a su hermana a los ojos, e interno sus labios en esa vagina velluda para cerrar los ojos extasiados de placer, devorarse esa vulva que su hermana le entregaba gustosa.
-Misión cumplida Mati, veni, sentate acá.- Julieta lo invitó a sentarse en el lugar de Flor, el centro, y se arrodilló para dejarlo disfrutar del espectáculo que la vida y la pantalla le ofrecían.
- ¿Chupaste una pija antes Flor? – Preguntó en un susurró desde abajo, mientras se refregaba el tronco por toda la cara, impregnándose de su olor, de la textura grasienta que tanto le gustaba.
- Algunas pocas ¿Me enseñas?
- Por supuesto.- Y como si Mati no estuviera y fuera un simple muñeco, empezaron las lecciones de sexo oral arrodilladas una a cada lado
- En el porno es común que escupan antes, pero a Mati le gusta más que te ensalives bien la boca, como si fueras a escupir, te la humedeces bien, pasas la baba de un cachete a otro y le colocas el forro de baba.
Sin saber si mirar el otro lado o el suyo, tenía una sonrisa de oreja a oreja por la felación de su prima, que envolvió el glande en su boca repleta de baba, y fue bajando para chorreársela por todo el tronco, hasta la base. Mantuvo el falo cubierto por varios segundos y empezó a subir sorbiendo toda la baba.
- Te entró toda Juli, sos una profesional.
- Ahora vos, hace lo mismo, llénate la boca de baba, y se la desparramas despacito mientras bajas.
- ¿Me dejas Mati? ¿Puedo mamártela hermano?- Regalándole una mirada de amor con esos ojazos azules.
- Lo que vos quieras, sos mi invitada.- Y quedó con los ojos en blanco al ver su falo perderse en esa boca más prohibida que ninguna. Al sentir esas mejillas por dentro con su ariete, que se la estaba dejando brillante como un tubo de neón. Mientras Juli se ocupaba de sus pelotas con el cariño que la caracterizaba, succionando la pielcita colgante como si sacara algo de ello.
Flor probó imitar a su prima en el buceo profundo y a pesar de las arcadas logró tragarla y seguir con la degustación de pija. Juli le recomendaba qué hacer para que el glande no le dé arcadas.
Del otro lado, como él, Caro era atacado por dos bocas en su sexo, había levantado la pierna como una contorsionista mientras Arturo y Fabián probaban su néctar vaginal.
- ¿Me escuchan todavía pibes? Les doy un consejo, a la mujer se la comparte como a un bombón dos corazones. Un lado para cada uno, no se van a arrepentir.
Y como había hecho él y Santino en la película porno con Juli, Arturo le hizo caso. Su amigo Fabi no dejaba la concha como si se hubiera quedado pegado, entonces el hermano se fue atrás.
Mati vio extasiado como cada uno en su lado atacaba el orificio que le toco, incluso Arturo, sin ningún recato, le abría las nalguitas para hundir sus labios en el ojo negro de su hermana y refregarse la boca con lo prohibido, Cami como una tontita repetía “el culo no, el culo no, no me chupes el culo…” pero se dejaba de tal forma que se sacó el vestido para abrirse las nalguitas con las manos, y teniéndolas bien abiertas, como una invitación, le permitió a su hermano llegar bien adentro de su ano con su lengua. Toda una histeriqueda, decía que el culo no, pero le abría las nalgas para hacerle el anilingus fácil al hermano.
- ¿Tge gzztha lo ggg vzzes? – Preguntó Juli con la boca llenas de bolas, y la carita ensalivada. Toda la baba que Flor dejaba caer con la felación frenética le caía a ella sin importarle.
- Es un sueño, y lo mejor, es que hicimos algo bueno por los demás. Liberamos a esas almas en pena de su encierro rutinario…
- ¿Y a mí hermano? ¿Me vas a liberar? ¿Me alcanza esto para pagar la membrecía?
Florencia se retiró el pantalón y ropa interior para sentarse sobre él con una concita gordita y depilada que era un canto a la vida. Se la refregó por la cabeza para humedecerle con un flujo ardiente como el aceite, que chorreaba como miel. Sintió la dureza del clítoris rozando el orifico de su uretra y luego a suya.
- Si así estas por fuera Flor, no me quiero imaginar adentro. Sentate hermanita, la membrecía es una sentada.
Del otro lado de la pantalla, ahora Carolina se turnaba para lustrar con su boquita el sable del hermano y su amigo, unas boqueadas a uno, y luego a otro sin discriminar. Muy cerquita a la cámara, lengüeteaba ambas pijas como si fueran paletas y las tragaba de vez en cuando.
- ¿Estás lista Flor?- Ella se le siguió frotando hasta que levantó una patita para que sea penetrada, y mientras se besaban como un preso y su puta, le perforó la vulva.
¡Qué estrechita! Parecía que ni siquiera se había colado los dedos. Ella marcaba el ritmo, tragando con la concha el pene cada vez más rápido. Estaba tan caliente que ardía, le hinchaba las venas de tan jugoso coño familiar que su glande miraba de adentro.
- Ahh ahhh ahhh ahhh ahaha ahaha… Mmmm sí, que buena pija hermano.- Gozaba como una loquita Flor, sin dudas no estaba en sus planes poner sus pies en la silla para dejarse caer y subir, caer y subir, caer y subir sobre el tronco de Matías.- ¿Porqué no me invitaste antes puto?
- No pensé que te gustaría una verga familiar.
- Así es, cojan como conejos, cojan los hermanos que sinó se los cojen los de afuera…- Juli se acercó con la webcam engolosinada para que del otro lado vieran la penetración desde atrás, captando bien como entraba y salía el miembro de esa concha húmeda como una segunda boca.
- Que precioso culito tenés prima- Reconoció desde abajo, cansada de estar fuera de escena. O mejor dicho, en las bolas de Matías.- ¿Me dejas comértelo?
- ¿Qué? ¡Sos una morbosa nena!- Despegándose de los labios de su hermano.- ¿En serio querés poner tu boca en… ¡Ohhh joder!
Cualquier respuesta para Juli, cuando se le ponía una idea era un sí rotundo. Mati le indicó a su sister que se quedara quieta para que Julieta pueda chupar el culo bien, ahora sería él quien pasaría a activo desde abajo.
- Dejame ayudarla un poquito.- Y le abrió las nalgas de par en par para que su prima hundiera su boca lo más posible.- ¿Te gusta la sensación de mi pija y su lengua en tu cuerpo?
- Dios, esa lengua hurgándome ahí… es insano.- Decía insano, pero lo gozaba como una putita con los ojitos dados vuelta y los labios temblorosos.
Y se puso más insano, cuando empezó a cogerla de parado sosteniéndola bien del culo mientras abajo Juli, hacía lo que le gustaba, la exploración que últimamente la tenía en vilo: la degustación anal. Quería entender porqué a los hombres les gustaba tanto atacar esa zona a lengüetazos, y para entenderlo debía practicarlo.
Flor era otro tipo de mujer, con otro cuerpo, otras cachas. En definitiva era pesada, y mal acostumbrado a Julieta que era una casi una muñequita de trapo, prefirió correrse rápido antes de terminar despatarrado contra ella en el suelo.
- Me vengo Flor, me vengo…
- Mhahaa hahaha ahhaha ahaaha hahaha tambi… én yo, yo también…- Expresó babeando cómo rabiosa.
Avisaron por cortesía mientras sentía gatillar el semen una y otra vez en el interior edulcorado de su hermana. Abajo Juli recibía gustosa las gotitas de flujo y chele que le caían. El crimen estaba perpetrado, las víctimas consumadas y la escena, totalmente repleta de evidencia. Al salir la pija dejó caer una gota blanca bien cargada en la boca de su prima.
Volvieron a la silla agotados de tanto placer, con su hermana abrazada a él y la vagina chorreando leche como una sache reventado.
En Córdoba también terminaban su función de Calígula. Ambos hombres se habían acabado en el rostro de la chica, que bastante bien, resistía un caudal doble de semen recorriéndole la frente, salpicando sus carrillos redondos y cayendo hasta sus pechos ensalivados. Como una bedette a punto de salir de gira, se pasaba las pijitas gomosas y cansadas por los labios como si se estuviera pintando la boca con ellas. Arturo le quitaba le leche de los ojos para que pudiera abrirlos de nuevo.
- Increíble, te coji y ni siquiera tuve el decoro de verte las tetas Flor. – Masajeándoselas por arriba de la remera, única prenda sobreviviente de la masacre de prendas.
- Guarda algo para después campeón.- Se les abrazó Juli con aliento a baño público.- ¿O porqué no van a la camita, a aprovechar el segundo aire?
- No quiero que pierdas contacto de nuestros amigos ¿Sí? Mantenelos entretenidos y después vení con nosotros que para mi princesa siempre hay premio.
- Claro mi amor- Regalándole un beso de amante- No los voy a perder, ustedes vayan, pásenla lindo…
- Son un amor, con razón Moni, Santi, todos les permiten esto, son re tiernos. – Y se despidió de Juli de un pico. Esta fue a la cocina y regresó con un enorme y poroso pepino.
- ¿Están listos para un segundo round chicos?
Mientras él cargó a Flor una vez más y se la llevó al colchón como si fueran recién casados para hacer rechinar bien esos resortes. Una silla no era el lugar más cómodo para la fornicación.
- ¿Te quedaste con ganas de verme las tetas?- Y sobre él, bien en papel de hembra alfa, se sacó la remera para rebelar terribles gomas que le llegaban casi al ombligo, tan preciosas y esponjosas como un hombre podría desear…
- Dios, me muero y revivo con semejantes tetas, una y otra y otra y otra vez…
Y asi, con Julieta gimiendo en la otra sala acompañada de otros gemidos… y él, enfundando de baba esas tetas familiares… la noche más perfecta de su vida prosiguió a un ritmo que ya era imposible diferenciar el sueño de lo real. El problema, era que Matías no sabía en qué momento había dejado de vivir para experimentar en un limbo de lujuria sus fantasías más obscenas…
El despertador a las doce lo sacó de sus dilemas existenciales. Nada era fantasía, el aliento de Julieta de un lado y de Flor al orto, contra su cuerpo, era lo más real del mundo. Y tenían un viaje por delante.
Que noche, pensó sentado contra la ventana mientras Flo roncaba y Juli se desperezaba. Los recuerdos llegaban a su mente y se reordenaban. Como una resaca de lujuria y sexo, le costó recodar que luego de recibir una prodigiosa turca de Florencia, llegó Julieta triunfante, para decirle que Carolina y su grupo le dieron los datos y querían conocerse. Flor le pasó el timón a su prima y comandó el barco que era Matías, cabalgándolo como ella sabía mientras su hermana se posicionaba bien apoyada con su concha contra su boca.
- Va a costar superar lo de anoche. ¿Cuántas veces te corriste Mati?- Le preguntó en un susurro apenas audible abrazada a su espalda.
- Tres en ella, dos en vos. Igual no es cuestión de veces, para mí fue un delirio por los otros chicos, por como los corrompimos.
- Me voló la cabeza verlos así, yo estaba fuera de control debo admitir.
- Al final, no me siento tan enfermo ¿Sabes? Si esos pibes que parecían unos santos desataron un infierno entre ellos, quizás no se trate tanto de perversión como creía, sino de recibir los estímulos adecuados en el momento indicado, y el incesto germina solo, como una mala hierba incontrolable.
- Después de tanto tiempo, de tantas fechorías, seguís buscándole una razón a la sinrazón de todo esto. – Y le envolvió la boca con la suya. Las mañanas siempre despertaban la ternura en ella.- Deja de pensar un poquito, disfruta el momento.
- ¿Te parece que no lo estoy disfrutando?- Devolviéndole el cariñito. Ella se estiró para tomar los lentes de la mesita de luz y Matías fue a bañarse. – A las dos le dije a Moni que pasaba, no llegamos ni a palos, más con lo tronco que es Florencia, decile que a las tres pasamos.
- Eso si esta remolona se despierta- Y Juli la movió pero la morocha siguió durmiendo como un tronco.
- Dejala, fue toda una noche nueva para ella. Prepara todo corazón, me ducho y desayunamos.- Y se dejó perder por el agua caliente golpeando su sien, dejó la mente en blanco para limpiarla, aclararla ante tanta cosa rara por no decir negra que estaba viviendo.
Y lo que estaba por venir. Por suerte, a eso de las dos y cuarenta ya estaban esperando a que Mónica bajara del departamento con Santino. Lo más difícil fue mantener a Flor despierta y que juntara sus cosas y comiera algo, lo bueno del verano, era que los bolsos aparatosos podían suplantarse con una modesta mochila, y ninguna tardó en hacer “las valijas” El viaje sería largo, estaban mal dormidos, pero igual, había mucha buena onda en el aire.
- ¡Estás enorme yegua! ¡Hace cuanto no te veía!- Abrazó Moni a Flor que estaba más en la almohada que dejó que allí, apretujada contra el auto. – nos tenías abandonados…
Luego la saludo Santino en un abrazo más compinche, sin tanto calor, pero en un segundo que duró el abrazó, le guiñó el ojo a él como diciendo “ahora me toca a mí”
Sin más preámbulos, Matías preguntó si tenían todo y al responderle que sí, arrancaron nomás hacia la fiesta de fin de año, en lo de Román, en Misiones. Con Juli a su lado de acompañante (ese lugar no se lo sacaba ni dios) y Flor, Moni y Santi atrás. Aunque acordaron cambiar de posiciones o parar a estirar las gambas cada tanto. La idea era pasar a buscar a Agustín un primo, de pasada, pero como no entraba una aguja en el auto, debía irse en colectivo.
- Pobre Agus, me va a re putear, pero bhue, él tiene plata.- Dijo Florencia, la única que veía a Agustín de Capital seguido.
Flor se despabiló con el viaje, la música a poco volumen (para que pudieran conversar sin gritar) y el interrogatorio de Moni. Todo en mode “normal” ya que no daba tocar asuntos turbios tan temprano. Les contó todas las buenas nuevas de su vida y Mónica también, y Santi, perdido en el celular como siempre, no tardó en percatarse de algo peculiar.
- ¿Quiénes son Carolina Machada y Arturo Machada? Están en el chat y ni los conocemos, re infiltrados.
- Cuando pasemos Entre Ríos, ponele, te cuento hermano.- Le contestó Juli, con unas sonrisita cómplice.
- ¿Pero están invitados o algo? Esa Carolina esta re buena…
- A Román no le va a importar poner dos platos más en la mesa…- Reconoció Julieta mientras Florencia y Mónica estaban en otra mostrándose fotos de otras vacaciones.
Mati y Juli rieron, todavía quedaban montones de kilómetros como para explicar la mina de oro en bruto que Julieta había encontrado en omegle, ya quedaba tiempo para decirse todo, ponerse al día de todo, y quizás, hasta para alguna que otra sorpresa más.
GRACIAS POR LEER! Espero que les haya gustado ;););) si les gustó no se olviden de puntuar o comentar. Acepto sujerencias, ideas, aunque ya se como va a seguir todo esto. (Digamos que el viaje va a ser muy largo y van a tener que buscar con que entretenerse)
Los capítulos anteriores...
1 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2848482/Jugando-con-su-primita.html
2 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2851819/Jugando-con-su-primita-Parte-II.html
3 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2851820/Jugando-con-su-primita-Parte-III.html
4 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2881590/Jugando-con-su-primita-IV.html
5 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2884463/Jugando-con-su-primita-V.html
Hasta la próxima!
Por un lado el lazo sanguíneo con ella es muy fuerte, por el otro, tras tener relaciones con dos primas, Julieta y Mónica ¿Que tanta diferencia podía haber? ¿Podría Flor seducirse a entrar en ese submundo o se escandalizaría y le haría la cruz a su hermano? ¡Vamos a averiguarlo!
Como es costumbre, imágenes a modo de ayuda visual, o incentivo, para que imaginemos a los personajes de cierta forma, aunque recuerden, tienen total libertad de imaginárselos como quieran 😛
Estoy seguro que a los que quieren "acción" rápida se les va a hacer largo el desarollo (Flor es un personaje nuevo, y no es fácil contar si se termina curtiendo al hermano o no, al menos no es mi estilo ir tan rápido a los bifes) Si están ansiosos, vayan a la imagen dentro del texto que es donde la cosa pasa de cuarta a sexta.
En este episodio además de conocer a Flor, quédense hasta el final que les esperan nuevos y atractivos personajes :D:D:D ahora sí, que lo disfruten!!
Personajes
Julieta... no se llamaría jugando con su primita si ella no estuviera 😛
Florencia, hermana de Matías
Y la presentación de Carolina (Ya van a ver que pito toca :P)
Ahora si, arrancamos por fin...
Matías no sabía como ocurriría, pero tampoco supo en su momento que ocurrirían cosas con su prima, con la amiga de su prima, y hasta su madre… así que de la mano de Julieta, todo podía pasar, y se dejó llevar por ella a una nueva aventura.
Por suerte la tarea de pervertir a Flor pasó a manos de Juli, que como una en una misión contrarreloj se la pasaba al lado de ella para llenarle la cabecita de a poco, con comentarios e ideas muy picantes. La abrazaba muy pegote, le besaba el rosto, le halagaba los cabellos negros, las pequitas, los ojazos azules… como si hubiera sido cinco años menor y fuese la típica niñita molesta.
- Veo que me extrañaron he, tengo que venir más seguido.
- Por supuesto Flor, te extrañamos mucho.- Poniendo su manos sobre la de ella y regalándole una sonrisa que no supo si le salió pervertida, pero pretendía ser amistosa.
- Mmm me tenés que decir tu secreto, para que te crezcan tan ricas las tetas.- Y Julieta se las masajeó levemente, en un toqueteo más pícaro que pervertido.
- Bueno, después te paso mi receta… para boluda, mi hermano mira ¿No me vas a cuidar vos de esta pervertida?
- No la hagas sentir incómoda a Flor, que no está acostumbrada a que la manoseen.
- ¿Cómo que no? ¿Me vas a decir que no hay un hombre que le de vida a estos chopes?
Todos rieron, ambos sabían que estaba soltera. Para Matías no todo era perversión, también había sano reencuentro, anécdotas, recuerdos y risas clásicas de las que hay entre hermanos que siempre se llevaron bien, sin embargo, un mensaje tempranero de Mónica los energizó como para volverse locos…
“Estuve convenciendo a varios, tenemos nuevos miembros y un jueguito preparado. Ustedes convenzan a Flor de unirse, porfis”
Matías, que lo leyó mientras compartía una ronda de mates a la mañana con bizcochitos de grasa, volcó el mate.
- Si serás boludo hermano, siempre igual vos.
- No te distraigas Mati, deja el celular ¿O pasa algo?
- Nada, mensajes del laburo, pero nada importante Juli.- Florencia, ni tonta ni lerda, captó la química entre ellos al instante. Ese tonito de voz, esa chispa en la mirada, ese toqueteo en su hombro.
- Jamás creí que ustedes dos se podrían llevar tan bien. La adoptaste como a una hija Mati.
Julieta se le abrazó cariñosa y le besó la comisura de los labios de manera peligrosa.
- Bueno, me sobraba espacio, ya está en edad de independizarse, además casi no estoy acá. Me hace un favor. Bla, bla, bla… la verdad es que nos llevamos bien.
- Para un cachito ¿Qué es tan gracioso prima?
Mientras las conversaciones y los mates seguían, la máquina está ganando inercia gracias a Mónica y su dominio de las redes. Para una mujer de sus atributos y actitud no había imposibles le confirmaba a cada minuto quienes se unirían a una nueva experiencia que estaba planeando.
- Tengo una idea ¿Querés salir a correr Flor? Aprovechemos el día lindo. Mientras que Mati limpie todo y prepare las cosas.
- Dale, sin ofender, pero huele raro. Ventila mientras no estemos Mati.
- Claro, ustedes se divierten, yo limpio, y encima me echan en cara el olor jaja. Rajen mejor-
Riendo con ganas- Vayan con cuidado.
En sus adentros sabía que ese olor “raro” eran manchas de semen en la alfombra y el sillón que al no limpiar inmediatamente (por no encontrarlas, mucha veces cuando la leche salta, y los hombres me darán la razón, algunas gotas se teletransportan quién sabe a dónde). Pobre Flor, pensó, había caído en un nido de víboras, por decirlo de alguna forma. ¿Cómo reaccionaría cuando descubra que dormían juntos? ¿Y si veía la infinidad de juegos y juguetes sexuales en los armarios?
- Vos dejámela a mí, le voy a sacar la putita que todas llevamos dentro.- Le susurró mientras Florencia se cambiaba en el baño. – Lo que menos vamos a hacer es correr.
- ¿Qué tanto le vas a decir?
- Le voy a contar que en la fiesta va a pasar “algo distinto” pero lo nuestro lo va a descubrir por “accidente”
Una de las últimas costumbres de Julieta era salir a correr, lo hacía muy seguido. En cambio conocía a Flor y era muy remolona, para nada amiga del ejercicio. De seguro era la excusa perfecta para hablar, para poner en claro ciertos temas…
- Prima, me queda muy apretado, voy a parecer un matambre.- Como Florencia no había traído ropa cómoda para esa clase de actividad, Juli le prestó una calza que le quedaba como una segunda piel, y una musculosa holgada sobre un top que le juntaba las gomas como si fueran dos mitades de sandía listas a servirse.
- No digas pavadas, estás hecha una divina, los tipos van a caer como moscas con esas gomas.- Definitivamente a Juli se le estaba pasando la mano, se la comía con la mirada.
Ella, Santino y hasta Mónica lo estaban presionando para que pase “algo” con su hermana, así como él había pervertido a Juli y Santi, como una venganza pasiva, silenciosa, que no estaban en ningún contrato pero por códigos (como si hubiera códigos en esta historia) debía llevar a cabo.
- No le hagas caso Flor, vayan a tomar aire, no necesariamente van a correr una maratón.
- Lo mío va a ser alevoso, las tetas me van a repiquetear como dos campanas, van a hacer tulún tulún…
- Bueno, no pudo hablar en nombre de todos los hombres, pero es verdad, ponete una camperita arriba porque vas a distraer a los conductores y hacer un caos.- Flor lo miró sorprendida, él no era de dar halagos tan descarados antes, sin dudas la chica estaba empezando a notar “el cambio” Todas eran muestras, por ahora sutiles, de que se había adentrado en un mundo nuevo…
- Gracias, voy a tratar de no quemar la ciudad, chau.- Y Flor le besó la mejilla antes de partir.
Matías quedó a solas, aunque era un decir, el chat de whatsapp estaba que ardía. Mientras armaba su bolso, revisaba el auto, y ordenaba el departamento antes de partir (saldrían a la mañana siguiente) observaba las personas que se sumaban a jugar un nuevo juego…
- Lo que puede un buen par de tetas he… al final no hay con qué darle, no importa que seamos familia, unas buenas tetas lo pueden todo.- Dijo a solas al ver los familiares que jugarían el misterioso juego, que por motivos favorables al suspenso, no mencionaremos aún.
Al grupo Juli subió una foto que lo desconcertó. La muy atrevida le sacó una foto al traserillo ajustado de Florencia mientras compraba una gaseosa en un kiosco a escondidas, y ella, en perspectiva, hacía un gesto obsceno con la lengua. Preguntaba “¿Se nos unirá?” con una carita alocada.
Sorprendido por lo atrevida que se había vuelto su prima, Mónica la reprimió junto a otros en el grupo porqué no debía ser tan mandada. Santino en cambio le mandó un msj por su cuenta de whatspapp particular.
"Vos me descociste a mi hermana de todos lados, espero que no te moleste si te hago lo mismo he… a no quejarse :P:P:P "
Aunque acompañaba todo de caritas amistosas, era una sentencia de venganza. El guachó quería lo suyo, y en la verdad, tenía razón. Las vio llegar al rato antes de que pudiera contestar, todas traspiradas y jocosas después de almorzar. Habían corrido más de la cuenta, quedando agitadas y hambrientas. Juli no perdió el tiempo y volvió a remarcar las miradas masculinas sobre Florencia.
- Nadie puede evitar mirar tal escultura, perdóname que te lo diga…
- ¿Y vos hermanito? – Le preguntó algo subida de tono ¿Acaso le había contado todo?- ¿Vos podes evitar mirar?
- No me hagas decir una locura…- Y se levantó a prepararles la comida, o mejor dicho, recalentar el rejunte que quedó en la semana. No iban a comprar comida sabiendo que estaban por irse.
- Hermano, no me evites… ¿Cuándo me lo pensabas decir?
Flor se apoyó contra la heladera, escrutándolo con la mirada. Matías tragó saliva. Por más que la aceptación de Mónica había aliviado la mochila, seguía viviendo en un gran pecado.
- ¿Cuándo me pensabas decir que cocinabas muy bien? Le dije a Juli que compráramos algo en el camino y me dice “Noooo boluda, si Mati cocino unas tiras de vació riquísimas” Te lo tenías guardado he, en tu puta vida cocinaste algo.
- Bueno Flor, siempre fui una caja de sorpresas.- Expresó en chiste.
- Y las sorpresas que te guardarás…
En eso llegó Julieta, que se le abrazó mientras esperaba a que la bandeja con la carne se caliente en el horno. Flor los miró de manera sospechosa. Algo le decía que la gran “revelación” para ella se caía de madura, no pasaría una noche sin saber que entre los primos pasaba algo indecente.
Por suerte todo transcurrió con suma normalidad hasta la noche. Matías sin embargo, se preguntaba si el Matías normal era el que hablaba de su trabajo, las películas que vio y hacía chistes malos, o el verdadero Matías era el que por las noches le comía el culo a la prima como un poseso. Sea uno u otro, el Mati que consideraba normal disfruto de la charla y calidez familiar de su hermana toda la tarde sin un ápice de perversión. Tuvo el momento de paz que necesitaba antes de sumergirse de lleno en la indecencia.
Juli se fue a bañar y los dejó a solas, con el calor de verano, el ventilador a tope, los snacks que aumentaban la temperatura…
- Estas cosas son muy dañinas cuando hace calor ¿Comprar fruta vos ni ahí, no?
- Tengo estomago de sapo, trago lo que venga y no me pasa nada.
- ¿Lo que sea, he?- Parecía que Flor preparaba algo importante que decir.
- Quiero que me digas la verdad Mati, es algo raro lo que voy a decir, pero cambiaste mucho desde que vivís solo ¿Qué pasa? ¿Te sacaste la lotería y no me contaste? No puede ser que no te hayas quejado de nada desde que llegué. Antes te la pasabas a las puteadas.
- Si, en realidad no, pero me pasó algo bueno que es como sacarse la lotería. Digamos que cambiar de ambiente me sentó de lujo.
- Antes también estabas bien, tampoco te mudaste a un palacio. ¿No me vas a decir más?-
Tomando un puñado de snacks triangulares de queso.
- Prefiero que lo descubras vos, linda. Vas a descubrir cosas nuevas que por lo menos a mí, me hicieron muy feliz.
- Me das miedo, hermano.
- No estoy metido en drogas, ni mate a nadie he, somos adultos, te puedo asegurar que no es para temer…
- No lo dije por eso. Me dijiste linda.- Y le golpeó el mentón amistosa.- Creo que ya se por donde viene la mano.- Y le guiñó un ojo, ese gesto no dejaba muchas dudas. Debía intuirlo.
La tensión del momento a solas la rompió Juli, llamando a Matías a entrar al baño porque se olvidó el shampoo en el botiquín y no quería salir mojada.
- ¿No me llama a mí que soy mujer?
- Es confianzuda, deja que yo voy. - …- Metiéndose el hombre entre el vapor.- Si serás boludita he, acá lo tenés.
Le manoteó el embase, lo tiró por ahí, y lo abrazó para comerle la boca, el verdadero motivo del llamado. Una mañana y tarde sin sus besos, sin una ronda cariñosa de sexo oral, o aunque sea un abrazo muy caliente le parecía mucho. Sintió en esos labios fogosos el placer que le daba saber que Flor estaba en la sala, quizás escuchando el silencio, o los ruidosos chupones que le daba a esos labios juveniles, sus brazos le recorrieron la espalda mojada bajando hacia sus manzanitas tan lisas y preciosas… lo que no sabía, era que Flor estaba atrás de ellos.
Ella los empujó desde atrás, Matías fue a parar con ropa y todo en la bañera enganchado en la cortina de baño como un pez en una red. Ambas chicas rieron como locas, aunque Juli no se lo esperaba. Mati observó todo desde abajo, empapándose la ropa y el pelo con la lluvia, shockeado por la broma pesada hasta que reaccionó…
- ¿Así tratas a tu hermano? ¡Vení para acá pendeja maleducada!
La manoteó a Flor desde abajo pasando su brazo por entre las piernas y la tiró contra él para que se empape por la ducha. Juli los miraba deleitándose con el espectáculo, Flor quería librarse dejándolo sordo con sus chillidos, pero esos brazos la atrapaban para que se mojara toda, manoseándole el vientre, las tetas… hasta que se la pegó a él como quien no quiere la cosa, y en un segundo de silencio y quietud Matias la besó.
- Que tiernos, no paren por favor.- Susurró Juli desnudita como dios la trajo al mundo frente a los hermanos. Él estaba demasiado concentrado en el sabor de esa boca, su piel siendo rociada por el agua caliente, sus manos acariciando la espalda de su hermana de una forma que jamás pensó que haría.
Flor sumisa, se dejaba besar como una amante inexperta, con cierta timidez le exploraba la boca al hermano mayor, aunque los ojitos cerrados, la respiración y las manos ubicadas en el cuerpo del hombre, indicaban que estaba explorando con placer, no estaba horrorizada ni mucho menos.
Juli no pudo esperar más sin hacer nada, se arrodilló entre ellos y se unió al besó. Sí, los tres, sin despegarse, se comieron, chuparon, y lengüetearon los labios. Las manos de Juli los tomaron de las cabezas para que se mantuvieran unidas a ese beso incestuoso y lésbico que duro unos prodigiosos minutos.
- No puedo pasar de 1 a mil en un segundo. Para prima…- Le paró el carro a Juli que le había metido una mano en el pantalón.
- Bueno, Flor dejemos a Julieta terminar de bañarse de una vez, tiene los dedos más arrugados que mi abuela.
No supo cómo, pero salieron de la situación de la mejor manera posible. Con muchas risas, diálogos, chistes. Flor naturalizó la cuestión con las palabras justas, no era la mente cerrada o santurrona que su hermano creía que sería ante esas situaciones. No preguntaba, no necesitaba hablar al respecto, simplemente besó a su hermano y prima en la ducha y continuó con su vida, deseosa de lo que le depararían ahora que sabía cómo venían las cosas.
Recién en la cena Flor sintió la necesidad de contextualizar la situación en palabras claras, en definitiva, empezó a preguntar.
- ¿Hace cuanto que… empezaron con este jueguito?
- Desde que estrene departamento. Hacía rato que teníamos algo así como una tensión que romper…
- El pervertido es él, que me confesó que tenía ratones conmigo, su primita pequeña jaja
- ¿Al menos tenías 18 no?
- Si…- Contestó Matías pero Julieta rió. El hombre prefirió comer con una sonrisita.- Que bueno que seas de mente abierta Florencia, porqué en la fiesta de fin de año Mónica tiene algo planeado.
- ¿Me estás diciendo que la prima Moni…?
- Sí, Moni y mi hermano Santi lo saben. Es una larga historia, pero Santi se nos coló en una salida y se enteró. Al final le gustó la idea. Hace poco Mati se mandó un cagadón y Mónica se enteró de todo. Al final, también le gustó la idea. Ahora que te enteraste vos ¿Qué te parece la idea?
Flor se llenó la boca de fideos e hizo un gesto de tibia aprobación.
- Me gusto la idea.
- Nadie te va a obligar a nada, ni vas a tener que pasar de 1 a mil como dijiste.
- Es muy simple hermano, una parte de mi es temerosa, no quiere saber nada, y la otra quiere probar experiencias nuevas. Todavía no decidí a cual parte darle el control de todo. Pero algo es seguro, yo voy a todo o nada. O me uno por completo o me aparto de la situación.
Ambos prefirieron dejarla comer en paz. Esa escena de la ducha había sido bastante más de lo que esperaba de su hermana Flor. Por suerte los planes de Julieta no concluyeron y para antes de dormir, cuando se aparecieron en el living con ropas de cama, (por el calor, Flor ni se había cambado las ropas mojadas) vino con una idea prometedora.
- Deja tu computadora, tengo una idea primo.- Se inclinó con una remerita roñosa que no le había visto nunca, muy holgada que le llegaba al ombligo. Abajo solo tenía una bombachita común y en las piernas las medias rayadas de siempre. Hasta Flor la fichó y la miró con descaro. Ella por su parte tenía un pantalón de gimnasia ajustado y una musculosa común.
- ¿Qué tenes en mente?
- Algo que jugaba con mis amigas… fa, hace cuanto que no las veo, estoy re cortada con ellas. – Se ensimismó por unos segundos- En fin… omegle.
- ¿Omegle?- Preguntó Flor.
- Es un sitió de videoconferencia al azar, como una ruleta rusa de gente. Dónde el 90% son tipos jalándose el ganso.
- ¿Y para qué queremos ver eso?
- No seas tímida Flopi, sentate…- Y la puso en el medio, mientras que a los lados, se acomodaron tanto ella como él.- Vamos a buscar a una pareja de lo que sea, y si nos dan bola, empezamos algún juego de prendas, o hacemos algo divertido, lo que pinte.
- Me gusta, me gusta. No sé porque nunca se me ocurrió Juli.- No se lo vio venir.
Con el plan nocturno en marcha, empezaron a gatillar la barra para ir pasando a personas que estaban masturbándose. Muchas soltaban el ganso para escribir, pero Juli los pasaba, también a los que mediante gestos pedían que no los pasaran. Lamentablemente, cuando encontraban grupos de amigas o mixtos para jugar acordes, no siempre había suerte. Ya sea por diferencias idiomáticas o desinterés, les pasaban. Juli era muy selectiva, como si contara con un sexto sentido, tenía la mira puesta en otros como ellos y no descansaría hasta encontrarlos.
- Vas a tener que conformarte con sos pendejitos pajeros Juli, dejá.
Por fin tras media hora de chillidos de Flor cada vez que salía una poronga en primera plana, encontraron a un trío muy disparejo, como ellos. Julieta “teclado salvaje” se presentó, les hizo unas preguntas y propuso el juego al toque, activó el micrófono, del otro lado igual y tras dialogar como por diez minutos, aceptaron.
- Veni primo, se llaman Carolina, Arturo, y un amigo de Arturo, Fabián. Son de Córdoba. Quieren jugar.- Del otro lado, los recibieron con un saludo una chica de pelo castaño enrulado, muy bonita, y un vestido aniñado, un chico de pelo rubio con un manojo de rastas atadas (parecido al de Verano del 98, una serie argenta) y su amigo de contextura deportiva, flaco, alto y medio narigón. Parecían divertidos, pero para Matías no se animarían a mucho, no daban el perfil de traviesos. Estaban en una habitación aniñada empapelada de rosa, con peluches en repisas y platos con estampados colgados. ¿Serían legales? A Matías se le hacía más difícil saberlo con esos jóvenes de entonces.
- ¿Entonces son todos primos ustedes? Él es mi hermano y su amigo, están a punto de ir a Mardel, por eso me lo estoy bancando acá, de inquilino…
- Que linda presentación he, una simpática tu hermana Artu.
- Sí Caro, ellos son hermanos, y mis primos. ¿Entendes? ¿Quieren empezar ya? – La rubia estaba muy ansiosa.
- A ver si entendí ¿Preguntan de lo que sea?
- No se valen preguntas muy cientifiquoides, tienen que ser contestables.
- Si acertamos la respuesta, preguntamos nosotros, sino ¿Sale prenda? ¿Entre primos y hermanos quieren jugar a eso? Dijeron que las prendas podían ser zarpadas.
- Dale, es re divertido, es de esas cosas que de decir no, se arrepienten de acá a la tumba.- Habló convincente la rubia. De otro lado, tras cuchichear por unos minutos (el hombre flaco desconfiaba por tener novia) aceptaron y quedaron en tirar la primera pregunta.
- ¿Preguntas de lo que sea?- Al asentir las mujeres a Fabián arrancó con una preguntó que creyó, sería matadora- Bueno, con esta las mato, espero que no sepan de fútbol ¿Cuántos torneos locales tiene Racing Club?
Gracias a Flor, que sabía bastante de fútbol, con Mati coincidieron, arriesgaron y acertaron. No valía buscar material para preguntar en libros ni las respuestas en internet. Debía ser todo sumamente espontáneo.
-Ahora nos toca a nosotros… ¿Cuántos Oscar ganó Leonardo DiCaprio?- Del otro lado rieron, Florencia se había apresurado, era una pregunta muy fácil. Caro dijo confiada que uno solo.
Así siguieron tirándose preguntas, como tanteando el terreno, sin animarse ni un grupo u otro a hacer preguntas comprometidas. Matías les sacó el perfil a los chicos rápido. El morocho preguntaba de deportes, la chica de cantantes del momento y el de rastas, bueno, no sabía si estaba fumado o qué, pero salía con cualquier cosa, precisamente tenía que preguntar él…
- Hay siete moscas en la mesa, y aplastas dos ¿Cuántas quedan?
Julieta se apuró y la boluda dijo de una que quedaban cinco. Del otro lado rieron, era una pregunta engañosa. El hippie le explicó que las otras cinco se iban volando, solo quedaban en la mesa las dos aplastadas.
- Bueno, dejen de reírse malos, tiren una prenda.
- Y una buena he, que me estoy aburriendo.- Picaneó Florencia.
- Esa remerita toda agujereada, sacátela si te animas, claro. – Le sugirió el morochito simpático, a ver si accedía.
- Pidan otra cosa, Juli no se puso corpiñ…- Flor quedó boquiabierta. Julieta se libró de la remera sin chistar liberando esos preciosos pechitos blancos ante los incrédulos muchachos.- Okey, esto va en serio. Muy enserio.
- Si siguen jugando van a ver mucho más, pero tienen que animarse ustedes también, he.- Sugirió lujuriosa. Del otro lado, como los varones eran mayoría, estaban entregadísimos. Carolina no tanto, pero tampoco dejaba ver nada que anticipara una retirada.- Siguen ustedes, el que pregunta y gana sigue.
- Para mí no son primos, hizo topless como si estuviera en el patio de su casa.- Se sorprendió Carolina.- Son novios seguro y nos vendieron gato por liebre.
- Te aseguro que somos primos, Julieta es así, lanzada como ella sola, libertina, no tiene ataduras, yo recién ahora me estoy acostumbrando.
- ¿Y si seguimos chicas? Después nos analizamos.- Apuró Fabián.
El hippie Salió con otra de las suyas.
- ¿Los veganos usan condones de látex?
- Que pregunta de mierrrrrrda- Exclamo Juli. Mati estaba perdido, pero fue Flor quien arriesgó.
Debía mejorar la comunicación de su equipo y pensar las respuestas, porqué erró.
- Calculo que sí, si no se los comen…
- Falso- Contestó Arturo- Tienen caseína, un producto que viene de la leche, algunos no los usan.
- Con razón hay tantos- Reflexiono Flor intentando suavizar la situación, ya se veía como blanco de esas mentes pervertidas, sin embargo, Carolina tomó las riendas.
- Ustedes babosos ya se están ahogando en baba por esas tetas, ahora me toca a mí. Quiero que Matías se saque la remera, que muestre carne…- Interceptó la joven antes que se lancen como barracudas por más carne femenina.
Entre risas, Mati se mostró sorprendido y complacido, al parecer la rutina le había dado frutos y quedaban mujeres que apreciaban el trabajo muscular, o al menos, querían verlo. Julieta lo miro risueña, estaba gozando ese nuevo jueguillo.
- ¿Y bien? ¿Seguimos?- Carolina le levantó el pulgar y le guiñó un ojo- Puede preguntar otro he. Tus preguntas son letales, Arturo.
- No, dejen a Artu que de tanto porro le salen unas cosas re locas.- Y el trió detrás de la pantalla rió como loco. Eran pibes piolas, se notaba, Matías se preguntaban hasta dónde llegarían con el juego… si tan solo tuvieran una chance se la devolverían. Su equipo perdía 2 a 0, dos en cuero, y del otro lado, invictos.
- ¿En qué lugar el jueves esta antes que el miércoles?- Antes de que maldiga al hippie por sus ocurrencias, les tapó las bocas a sus compañeras para que antes de que arriesguen, piensen una respuesta. Debían tranquilizarse y pensar o quedaría en bolas muy rápido como tres pelotudos.
Del otro lado reían triunfales mientras el tiempo corría, ya estaban por dárselas por perdida. Matías se rebanaba los sesos para encontrar la respuesta, y le cayó la ficha.
- ¡En el diccionario!- Ambas lo vitorearon, el juego ahora estaba en sus manos.
- Ahora los matamos jaja pensa una buena Mati, dale. – Le alentó su “primanovia”.
- Yo tengo una buena también he…
- Preguntó, después vos Flor… - Ya tenía una pregunta relacionada con su trabajo - ¿Cómo se llama la disposición de letras en los teclados que todos usamos?- Obviamente, los fusiló. Tras tres minutos Caro expresó su derrota.
- Se llama QWERTY, tomaron el nombre de las primeras letras de izquierda a derecha.- Tras varias risas de nerviosismo del otro trío, el suyo pensó una buena prenda con sus cofrades.
- ¿Sabes que el otro día lo leí en face pero me olvide?- Se sorprendió Arturo.
- A llorar a los caños.- Se mofó Julie- En vez de carne, queremos ver acción… como mínimo, un beso francés entre Caro y Arturo.
- ¿¡Qué!? ¡Qué pervertidos! Si saben que somos hermanos ¿Qué locura es esa?- El hippie decía “woa” una y otra vez, haciéndose el aturdido. Ambos estaban colorados como un tomate… por suerte, Florencia se redimió de su anterior error y emendó la situación.
- ¿Qué es un buen beso entre hermanos hoy en día? ¡Vamos!- Flor lo tomó de cuello para estamparle un beso breve pero con todos los tintes que un beso debe tener para ser bueno.
- Ustedes no son hermanos, seguro, manga de perverts…
- La cuestión… chicos, es que mis pechos son poca cosa, pueden ver mucho más, si se animan y seguimos jugando.- Y Juli le manoseó las tetas a Flor.- ¡Pero tiene que seguir! ¡Vamos!
Caro y Arturo cedieron a la presión, y se enfrentaron entre risas nerviosas y mejillas que parecían abofeteadas. La presión no venía de su equipo, sinó de Fabián, que insistía en que un beso “no era nada” que debían “animarse” El hijo de puta no daba más de ver tetas y argollas ajenas del otro lado de la pantalla y nunca les perdonaría perder el juego, la experiencia de sus vidas.
De a poquito, las bocas se acercaron, Carolina y su rosto angelical se relajó y se unió en labios con el rostro nervioso de Arturo, y por unos instantes, sus bocas se movieron pegadas esbozando pasión, el tiempo se detuvo y la noche se volvió silencio mientras los hermanos hicieron lo que jamás creyeron que harían. Hasta que no pudieron más y se separaron entre risas, se les estaba yendo la mano y lo notaron. Arturo no parecía tan contrariado, tenía una sonrisa pícara igualita a la del joker.
- Pensá en la venganza Caro, en la venganza…- Le susurró Fabián al oído.
- Cállate baboso, con lo de esta noche tenés la cuca asegurada de por vida.
Lamentablemente, el otro grupo no era para nada lerdo y acertaron la siguiente pregunta suya (¿Qué se invento antes, la máquina de escribir o la ametralladora?) ahora estaban en manos de Arturo y sus peculiares preguntas.
- ¿Porqué los buceadores se tiran de espaldas? - Fue otro knock-out. Los minutos pasaron y el hippie se cansó de esperar- ¡Porque si se tiran de frente se dan con el tubo de oxígeno en la nuca!
- ¿En serio es por eso? Para mi es mentira.- Pensó Flor.
- Sí, tan mentira como que ustedes son familia, vamos.- Le reprochó Caro.
Los cibernautas rieron con ganas ¿De dónde habían salido? Les estaban dando una paliza, Juli lo miró sorprendida, pensaba ver un show pero lo darían ellos. Estaban a su merced como un cacho de carne tirado a una perrera.
Los cuchicheos cesaron y Carolina dio el veredicto. Querían verle el miembro a Matías, ni más ni menos, o sino ella no seguía jugando.
- Mirá la carita de ángel, resulto bien putona he…- Reconoció. La chica le sonrió de forma socarrona.
- ¿No están acelerando demasiado? Una cosa es besar a mi hermano, pero verle la pija es otra.
- Déjalos Flor, déjalos, que Mati lo haga, ya nos va a tocar. Estos nenes saben jugar, seguro.- Era extraño verla hablar con las gomas al aire, como una vedetonga cualquiera. Dale mostrá Mati. Demostrales de qué está hecha nuestra familia.
Flor se llevó las manos a la cara, Juli estaba en su salsa, Carolina miraba inquieta, quería parecer superada, pero sabía que estaba a punto presenciar algo fuerte. Por fin, se abrió la bragueta, y bajando el slip desde adentro, soltó la polla y las pelotas para dejarlas colgando ahí, semierecta, de pie a un lado de su hermana, que le miró el miembro, lo miró a él, y rio a carcajadas para no llorar.
- ¿Estás bien Flopi? Es una pija, no te horrorices.
- Para vos es común vérsela Sati por lo visto, pero hoy me entero de tu relación con mi hermano, la relación que tiene con Moni, lo besé, y encima, le veo el pedazo. Es todo un tema prima.
- Bueno, después te toca a vos, este juego es así Flor, no te escandalices. ¿Contenta mi amor?
¿La puedo guardar o te la sigo meneando?- Pregunto cansino sin dejar de enseñar su orgullo.
- No, no, nada de guardar, dejátela afuera.
- Que puta resultó tu hermanita Arturo…- Lo cargó su amigo y recibió un golpe de puño de ella en el hombro. El juego prosiguió con dos miembros desvestidos. La balanza debía inclinarse.
Por suerte, Flor inclinó la balanza al poco tiempo, haciendo una pregunta que ninguno del otro lado respondió. ¿En qué país libró Napoleón su última batalla? Aunque Arturo sabía que era en un lugar llamado Waterloo, no supo que estaba en Bélgica. Bendita Flor y sus finales de historia, que aprobó antes de venir y tenía frescos en la memoria.
- Bien, perfecto, ahora nos toca a nosotros. – Brevemente, las chicas llegaron a un acuerdo y fueron a por la carne. Querían vérsela a Arturo, que no se la vio venir.
- Después, por favor, le pedimos que se saque algo a Caro. Porqué no tenía en mente ver pija toda la noche.
- Te la bancas hermano, Juli está con las tetas al aire y ni se queja, bien que te gusta verla así pervertido.- Le recriminó jocosa Flor. Del otro lado no hubo ni discusión. Carolina se dio vuelta, haciéndose la consternada y se re notaba que tenía las re ganas de verle la verga al hermano. A Fabián le chupaba un huevo, quería ver tetas, culo, concha y haría lo posible por quedarse hasta el final.
- Perdón hermana, pero si el otro caballero lo hizo sin chistar… ya vendrán tiempos mejores.- Y rebeló su arma. Tanto Juli como Flor fueron gentiles y lo vitorearon, así como exclamaron palabras de aliento ante una polla bastante gorda, que por el vello púbico, las damas no podían apreciar muy bien.
Caro, vamos, animate y aunque sea mirale la pija a tu hermano, que no se sienta menos- Le hostigó Julieta.
- No te conozco, pero voy a encontrarte, y voy a matarte Julieta.- imitando la clásica escena de Liam Neeson. A Matías empezaba a encantarle esa guchina.
Criticar y describir pijas no era su campo, pero se sintió bien al saber que ese día, no era superado abrumadoramente como cuando Santino estaba presente. Arturo tenía “lo suyo” en grosor, pero era corta como un dedo gordo, nada que su falo depilado y bien atendido envidiara.
Las preguntas eran cada vez más boludas y desesperadas, antes de que ocurriera algo interesante, contestaban cinco cada uno. Sin dudas estaban sin ideas, habían quemado todas las genialidades y el deseo a la carne les sucumbía a la sinapsis neuronal. Sin embargo, Matías estaba acostumbrado a llevar los juegos al final, sin perder del todo la razón.
- ¿Había dinosaurios marinos?
Cayeron en su trampa, al unísono dieron el afirmativo y ya estaban formulando una nueva pregunta cuando Mati les informó la verdad.
- No había dinosaurios marinos, eran todos terrestres. Les dejo googlear si quieren pero esos que ustedes creen dinosaurios, eran reptiles.
- No, confiamos, caímos en tu trampa- Reconocía Carolina. – Era muy fácil, pensé que debía tener trampita.
- Bueno corazón, que linda actitud la tuya, porqué te voy a pedir algo a vos, quiero que imites a mi prima, y dejés esos pechos que tan bien te cubrís al aire.
- Me la veía venir, duré bastante así. – La carita de Ángel ni se molestaba. Sin darle bola al hermano (nerviosísimo, no sabía si actuar normal o expresar su consternación) Al final, tanto Arturo como Fabián se quedaron pegados a la cámara cuando se dejó caer el vestido floreado cubriéndose con las manos, hasta que las soltó para revelar sus tetas con sus respectivos pezones en punta orgulloso de estar en el foco de atención colectivo.
- Muy, pero muy, pero muy complacido Caro, preciosas.- Juli le pegó un coscorrón.
- No te pases de listo, he. Tus tetas son las mías.
- Son todas preciosas, las de ella también, no te me pongas celosa amor.- Admirando esas tetas bien redonditas con unos pezones tipo copito acaramelados. Daban ganas de lamer la pantalla, se veían muy ricas incluso a la distancia.
Las preguntas siguieron, aunque lo gracioso era ver lo nerviosa que estaba Caro ante su situación. No estaba acostumbrada a putanear así, encima, Fabián quiso estirarse para tomar agua y le rozó un pezón, lo que provocó su furia.
- Fue sin querer, enserio, mira si me voy a hacer el loco enfrente de tu hermano.
- Por favor, les recuerdo que hicimos una pregunta ¿Dónde nació Huck Jackman?- La primera pregunta formulada por Juli, fanática del actor.
- ¿Estados Unidos?
Juli imitó el sonido de un timbrazo de eliminación. Era australiano, y ahora el equipo de enfrente estaba en desventaja.
- Vos venís invicto alto, te toca a vos. Mostrá paquete, dale.
- Bueno, ya saben, lo siento, perdón, no era mi intención… - Dijo rapidito y desinteresado- No quiero ser menos, en fin. Más vale que ustedes dos muestren más he…
Dejó al descubierto una manguera larga como él, muy venosa y fina, casi una cuerda. Flor no daba más, le faltaba el aire, y Juli aplaudía e hinchaba por Racing. Estaban re locas.
- Bueno, orden en la sala, tres pijas al aire y las perdí por completo. Bueno, me toca, y pregunto. ¿Qué animal camina en 4 patas al principio del día, en dos por…
- ¡El hombre boludo! ¡La respuesta es el hombre! – Matías no estaba tan seguro de una pregunta tan conocida por el mito de la esfinge, pero también pensaba que para no hacer decaer los ánimos del resto, debían ganar algo.
Como en una mesa redonda de caballeros, Arturo y Fabián dejaron afuera a una molesta Caro mientras decidían la siguiente movida.
- Bueno, vamos por todo, te queremos ver como dios te trajo al mundo Juli. Apostamos por vos rubia porque te animas seguro.
- Pensé que te destetaban.- Le susurró a Flor la rubia- Bueno, a pedido de mi hinchada, empecemos, pero antes…
Julieta acomodó la cámara para que la enfoque solo a ella, y como una bailarina exótica, se despojo de sus prendas con mucha sensualidad, y por prendas, me refiero a zapatillas y medias, la ropa interior, lo único que le quedaba, la fue bajando de a poco y de espaldas.
Entre un silencio de tumba, en el que la sangre empezaba a bullir en esas pijas voyeuristas, la colita de Juli quedó pelada, cómo dios la trajo al mundo, y se inclino para que vieran sus orificios. La muy putona disfrutaba de eso como nunca, ser devorada por esos hipnotizados jóvenes, con sus ojos clavados en su vagina angelical y su ano.
- ¿Los complací chicos?- Preguntó con la cabeza boca abajo entre las rodillas, de espaldas como toda una contorsionista.
- Espera, que los voy a ayudar.- Matías se levantó con la cámara y estiro el cable para que vieran en primer plano la vagina de Juli, con cada parte perfectamente reconocible, el clítoris respingón, y los labios que al ser separados revelaron su excitante humedad, que como losa de lujo embaldosaban la ardiente cavidad. Se sintió como un proxeneta enseñando a su mejor nena.
- ¿Se vio bien chicos?
Ellos no contestaron, ya estaban manoseándose las pijas, paradas al mango. Juli se sentó como si fuera el día más normal en la Tierra. Arturo estaba tan cebadísimo que se la cascaba mirándole las tetas a la hermana y estaba ni se cubría. Caro estaba paralizada, como si hubiera visto su vida pasar frente a sus ojos.
- Pregunten; porque sino apago la cámara y nos vamos coger. Se lo pierden todo.- Amenazó la blonda. La amenaza de dejar el juego los hizo reaccionar.
- ¿Es la araña un insecto? – Soltó el muy bruto de Fabián. Era demasiado fácil cuando Matías contestó, Caro los reprimió a ambos.
- Vaya, vaya, están en mis manos. Veamos, Así como quedó mi primita, te quiero ver a vos Caro, preciosa.
- ¡No es justo! ¡Están todos contra mí! Manga de pajeros, estos pibes son re tarados.- Exclamó nerviosa, y por primera vez, pensaron que los dejaba en banda.
- No te enojes, vas a pasarla bien igual, en unos segundos, los nervios se te van y te olvidas que estas en bolas. Consejo de mujer a mujer.
- Esto queda entre nosotros, y entre ustedes, es una experiencia más, vamos ¿Vas a negar que esto no es excitante? Y te lo dice alguien que conoció el incesto hoy.- Ayudó oportuna Flor.
- Con una condición. Los quiero conocer algún día he.
- Por supuesto Carolina, es un trato, vamos, no seas tímida, mostrá tu belleza natural.
- En que lio me metí, dios.- Sin embargo, tras una pausa en la que su hermano y amigo prefirieron hacer silencio, la jovencita resolvió positivamente.
Haciendo un poco de sana trampa, Carolina se subió el vestido para tenerlo recogido hasta la cintura. Reveló así unas braguitas muy inocentes, color azul, con voladitos delicados que no ajustaban mucho, sin dudas tenían “jodidos” los elásticos. Estaba trasparentada como una hoja de calcar debido al flujo de su excitación. Se había corrido como una monja en un burdel y le daba vergüencita admitirlo.
De a poco, fue bajando la prenda de espaldas, mientras los hombres, al palo, le sostenían el vestido para que no cayera.
Una colita preciosa, pulposa y trigueña fue revelada ante la cámara, y tuvo la delicadeza de mantenerla así, quietita para que propios y ajenos la admirasen, y hasta las abrió un poquito.
Luego se dio vuelta como tortilla y mostró su coñito al natural, totalmente al natural, con bellos castaños como su pelo en abundancia, de un encanto único que solo las peluditas tenían. Tuvo que ayudarse don dos deditos tímidos para enseñarle la vulva empapada de entre la maraña, sin embargo, ese gesto fue demasiado para quienes la acompañaban.
- Como me gustaría estar ahí, y darme un buen chapuzón de lengua en esa zanjita empapada…- Avivó el fuego Matías.
La calentura fue demasiado para esos pibes. Mientras enseñaba el coñito Fabián sin decir palabras se le prendió a una teta como un mejillón al casco de un barco. Abajo, Arturo se arrodilló mirando a su hermana a los ojos, e interno sus labios en esa vagina velluda para cerrar los ojos extasiados de placer, devorarse esa vulva que su hermana le entregaba gustosa.
-Misión cumplida Mati, veni, sentate acá.- Julieta lo invitó a sentarse en el lugar de Flor, el centro, y se arrodilló para dejarlo disfrutar del espectáculo que la vida y la pantalla le ofrecían.
- ¿Chupaste una pija antes Flor? – Preguntó en un susurró desde abajo, mientras se refregaba el tronco por toda la cara, impregnándose de su olor, de la textura grasienta que tanto le gustaba.
- Algunas pocas ¿Me enseñas?
- Por supuesto.- Y como si Mati no estuviera y fuera un simple muñeco, empezaron las lecciones de sexo oral arrodilladas una a cada lado
- En el porno es común que escupan antes, pero a Mati le gusta más que te ensalives bien la boca, como si fueras a escupir, te la humedeces bien, pasas la baba de un cachete a otro y le colocas el forro de baba.
Sin saber si mirar el otro lado o el suyo, tenía una sonrisa de oreja a oreja por la felación de su prima, que envolvió el glande en su boca repleta de baba, y fue bajando para chorreársela por todo el tronco, hasta la base. Mantuvo el falo cubierto por varios segundos y empezó a subir sorbiendo toda la baba.
- Te entró toda Juli, sos una profesional.
- Ahora vos, hace lo mismo, llénate la boca de baba, y se la desparramas despacito mientras bajas.
- ¿Me dejas Mati? ¿Puedo mamártela hermano?- Regalándole una mirada de amor con esos ojazos azules.
- Lo que vos quieras, sos mi invitada.- Y quedó con los ojos en blanco al ver su falo perderse en esa boca más prohibida que ninguna. Al sentir esas mejillas por dentro con su ariete, que se la estaba dejando brillante como un tubo de neón. Mientras Juli se ocupaba de sus pelotas con el cariño que la caracterizaba, succionando la pielcita colgante como si sacara algo de ello.
Flor probó imitar a su prima en el buceo profundo y a pesar de las arcadas logró tragarla y seguir con la degustación de pija. Juli le recomendaba qué hacer para que el glande no le dé arcadas.
Del otro lado, como él, Caro era atacado por dos bocas en su sexo, había levantado la pierna como una contorsionista mientras Arturo y Fabián probaban su néctar vaginal.
- ¿Me escuchan todavía pibes? Les doy un consejo, a la mujer se la comparte como a un bombón dos corazones. Un lado para cada uno, no se van a arrepentir.
Y como había hecho él y Santino en la película porno con Juli, Arturo le hizo caso. Su amigo Fabi no dejaba la concha como si se hubiera quedado pegado, entonces el hermano se fue atrás.
Mati vio extasiado como cada uno en su lado atacaba el orificio que le toco, incluso Arturo, sin ningún recato, le abría las nalguitas para hundir sus labios en el ojo negro de su hermana y refregarse la boca con lo prohibido, Cami como una tontita repetía “el culo no, el culo no, no me chupes el culo…” pero se dejaba de tal forma que se sacó el vestido para abrirse las nalguitas con las manos, y teniéndolas bien abiertas, como una invitación, le permitió a su hermano llegar bien adentro de su ano con su lengua. Toda una histeriqueda, decía que el culo no, pero le abría las nalgas para hacerle el anilingus fácil al hermano.
- ¿Tge gzztha lo ggg vzzes? – Preguntó Juli con la boca llenas de bolas, y la carita ensalivada. Toda la baba que Flor dejaba caer con la felación frenética le caía a ella sin importarle.
- Es un sueño, y lo mejor, es que hicimos algo bueno por los demás. Liberamos a esas almas en pena de su encierro rutinario…
- ¿Y a mí hermano? ¿Me vas a liberar? ¿Me alcanza esto para pagar la membrecía?
Florencia se retiró el pantalón y ropa interior para sentarse sobre él con una concita gordita y depilada que era un canto a la vida. Se la refregó por la cabeza para humedecerle con un flujo ardiente como el aceite, que chorreaba como miel. Sintió la dureza del clítoris rozando el orifico de su uretra y luego a suya.
- Si así estas por fuera Flor, no me quiero imaginar adentro. Sentate hermanita, la membrecía es una sentada.
Del otro lado de la pantalla, ahora Carolina se turnaba para lustrar con su boquita el sable del hermano y su amigo, unas boqueadas a uno, y luego a otro sin discriminar. Muy cerquita a la cámara, lengüeteaba ambas pijas como si fueran paletas y las tragaba de vez en cuando.
- ¿Estás lista Flor?- Ella se le siguió frotando hasta que levantó una patita para que sea penetrada, y mientras se besaban como un preso y su puta, le perforó la vulva.
¡Qué estrechita! Parecía que ni siquiera se había colado los dedos. Ella marcaba el ritmo, tragando con la concha el pene cada vez más rápido. Estaba tan caliente que ardía, le hinchaba las venas de tan jugoso coño familiar que su glande miraba de adentro.
- Ahh ahhh ahhh ahhh ahaha ahaha… Mmmm sí, que buena pija hermano.- Gozaba como una loquita Flor, sin dudas no estaba en sus planes poner sus pies en la silla para dejarse caer y subir, caer y subir, caer y subir sobre el tronco de Matías.- ¿Porqué no me invitaste antes puto?
- No pensé que te gustaría una verga familiar.
- Así es, cojan como conejos, cojan los hermanos que sinó se los cojen los de afuera…- Juli se acercó con la webcam engolosinada para que del otro lado vieran la penetración desde atrás, captando bien como entraba y salía el miembro de esa concha húmeda como una segunda boca.
- Que precioso culito tenés prima- Reconoció desde abajo, cansada de estar fuera de escena. O mejor dicho, en las bolas de Matías.- ¿Me dejas comértelo?
- ¿Qué? ¡Sos una morbosa nena!- Despegándose de los labios de su hermano.- ¿En serio querés poner tu boca en… ¡Ohhh joder!
Cualquier respuesta para Juli, cuando se le ponía una idea era un sí rotundo. Mati le indicó a su sister que se quedara quieta para que Julieta pueda chupar el culo bien, ahora sería él quien pasaría a activo desde abajo.
- Dejame ayudarla un poquito.- Y le abrió las nalgas de par en par para que su prima hundiera su boca lo más posible.- ¿Te gusta la sensación de mi pija y su lengua en tu cuerpo?
- Dios, esa lengua hurgándome ahí… es insano.- Decía insano, pero lo gozaba como una putita con los ojitos dados vuelta y los labios temblorosos.
Y se puso más insano, cuando empezó a cogerla de parado sosteniéndola bien del culo mientras abajo Juli, hacía lo que le gustaba, la exploración que últimamente la tenía en vilo: la degustación anal. Quería entender porqué a los hombres les gustaba tanto atacar esa zona a lengüetazos, y para entenderlo debía practicarlo.
Flor era otro tipo de mujer, con otro cuerpo, otras cachas. En definitiva era pesada, y mal acostumbrado a Julieta que era una casi una muñequita de trapo, prefirió correrse rápido antes de terminar despatarrado contra ella en el suelo.
- Me vengo Flor, me vengo…
- Mhahaa hahaha ahhaha ahaaha hahaha tambi… én yo, yo también…- Expresó babeando cómo rabiosa.
Avisaron por cortesía mientras sentía gatillar el semen una y otra vez en el interior edulcorado de su hermana. Abajo Juli recibía gustosa las gotitas de flujo y chele que le caían. El crimen estaba perpetrado, las víctimas consumadas y la escena, totalmente repleta de evidencia. Al salir la pija dejó caer una gota blanca bien cargada en la boca de su prima.
Volvieron a la silla agotados de tanto placer, con su hermana abrazada a él y la vagina chorreando leche como una sache reventado.
En Córdoba también terminaban su función de Calígula. Ambos hombres se habían acabado en el rostro de la chica, que bastante bien, resistía un caudal doble de semen recorriéndole la frente, salpicando sus carrillos redondos y cayendo hasta sus pechos ensalivados. Como una bedette a punto de salir de gira, se pasaba las pijitas gomosas y cansadas por los labios como si se estuviera pintando la boca con ellas. Arturo le quitaba le leche de los ojos para que pudiera abrirlos de nuevo.
- Increíble, te coji y ni siquiera tuve el decoro de verte las tetas Flor. – Masajeándoselas por arriba de la remera, única prenda sobreviviente de la masacre de prendas.
- Guarda algo para después campeón.- Se les abrazó Juli con aliento a baño público.- ¿O porqué no van a la camita, a aprovechar el segundo aire?
- No quiero que pierdas contacto de nuestros amigos ¿Sí? Mantenelos entretenidos y después vení con nosotros que para mi princesa siempre hay premio.
- Claro mi amor- Regalándole un beso de amante- No los voy a perder, ustedes vayan, pásenla lindo…
- Son un amor, con razón Moni, Santi, todos les permiten esto, son re tiernos. – Y se despidió de Juli de un pico. Esta fue a la cocina y regresó con un enorme y poroso pepino.
- ¿Están listos para un segundo round chicos?
Mientras él cargó a Flor una vez más y se la llevó al colchón como si fueran recién casados para hacer rechinar bien esos resortes. Una silla no era el lugar más cómodo para la fornicación.
- ¿Te quedaste con ganas de verme las tetas?- Y sobre él, bien en papel de hembra alfa, se sacó la remera para rebelar terribles gomas que le llegaban casi al ombligo, tan preciosas y esponjosas como un hombre podría desear…
- Dios, me muero y revivo con semejantes tetas, una y otra y otra y otra vez…
Y asi, con Julieta gimiendo en la otra sala acompañada de otros gemidos… y él, enfundando de baba esas tetas familiares… la noche más perfecta de su vida prosiguió a un ritmo que ya era imposible diferenciar el sueño de lo real. El problema, era que Matías no sabía en qué momento había dejado de vivir para experimentar en un limbo de lujuria sus fantasías más obscenas…
El despertador a las doce lo sacó de sus dilemas existenciales. Nada era fantasía, el aliento de Julieta de un lado y de Flor al orto, contra su cuerpo, era lo más real del mundo. Y tenían un viaje por delante.
Que noche, pensó sentado contra la ventana mientras Flo roncaba y Juli se desperezaba. Los recuerdos llegaban a su mente y se reordenaban. Como una resaca de lujuria y sexo, le costó recodar que luego de recibir una prodigiosa turca de Florencia, llegó Julieta triunfante, para decirle que Carolina y su grupo le dieron los datos y querían conocerse. Flor le pasó el timón a su prima y comandó el barco que era Matías, cabalgándolo como ella sabía mientras su hermana se posicionaba bien apoyada con su concha contra su boca.
- Va a costar superar lo de anoche. ¿Cuántas veces te corriste Mati?- Le preguntó en un susurro apenas audible abrazada a su espalda.
- Tres en ella, dos en vos. Igual no es cuestión de veces, para mí fue un delirio por los otros chicos, por como los corrompimos.
- Me voló la cabeza verlos así, yo estaba fuera de control debo admitir.
- Al final, no me siento tan enfermo ¿Sabes? Si esos pibes que parecían unos santos desataron un infierno entre ellos, quizás no se trate tanto de perversión como creía, sino de recibir los estímulos adecuados en el momento indicado, y el incesto germina solo, como una mala hierba incontrolable.
- Después de tanto tiempo, de tantas fechorías, seguís buscándole una razón a la sinrazón de todo esto. – Y le envolvió la boca con la suya. Las mañanas siempre despertaban la ternura en ella.- Deja de pensar un poquito, disfruta el momento.
- ¿Te parece que no lo estoy disfrutando?- Devolviéndole el cariñito. Ella se estiró para tomar los lentes de la mesita de luz y Matías fue a bañarse. – A las dos le dije a Moni que pasaba, no llegamos ni a palos, más con lo tronco que es Florencia, decile que a las tres pasamos.
- Eso si esta remolona se despierta- Y Juli la movió pero la morocha siguió durmiendo como un tronco.
- Dejala, fue toda una noche nueva para ella. Prepara todo corazón, me ducho y desayunamos.- Y se dejó perder por el agua caliente golpeando su sien, dejó la mente en blanco para limpiarla, aclararla ante tanta cosa rara por no decir negra que estaba viviendo.
Y lo que estaba por venir. Por suerte, a eso de las dos y cuarenta ya estaban esperando a que Mónica bajara del departamento con Santino. Lo más difícil fue mantener a Flor despierta y que juntara sus cosas y comiera algo, lo bueno del verano, era que los bolsos aparatosos podían suplantarse con una modesta mochila, y ninguna tardó en hacer “las valijas” El viaje sería largo, estaban mal dormidos, pero igual, había mucha buena onda en el aire.
- ¡Estás enorme yegua! ¡Hace cuanto no te veía!- Abrazó Moni a Flor que estaba más en la almohada que dejó que allí, apretujada contra el auto. – nos tenías abandonados…
Luego la saludo Santino en un abrazo más compinche, sin tanto calor, pero en un segundo que duró el abrazó, le guiñó el ojo a él como diciendo “ahora me toca a mí”
Sin más preámbulos, Matías preguntó si tenían todo y al responderle que sí, arrancaron nomás hacia la fiesta de fin de año, en lo de Román, en Misiones. Con Juli a su lado de acompañante (ese lugar no se lo sacaba ni dios) y Flor, Moni y Santi atrás. Aunque acordaron cambiar de posiciones o parar a estirar las gambas cada tanto. La idea era pasar a buscar a Agustín un primo, de pasada, pero como no entraba una aguja en el auto, debía irse en colectivo.
- Pobre Agus, me va a re putear, pero bhue, él tiene plata.- Dijo Florencia, la única que veía a Agustín de Capital seguido.
Flor se despabiló con el viaje, la música a poco volumen (para que pudieran conversar sin gritar) y el interrogatorio de Moni. Todo en mode “normal” ya que no daba tocar asuntos turbios tan temprano. Les contó todas las buenas nuevas de su vida y Mónica también, y Santi, perdido en el celular como siempre, no tardó en percatarse de algo peculiar.
- ¿Quiénes son Carolina Machada y Arturo Machada? Están en el chat y ni los conocemos, re infiltrados.
- Cuando pasemos Entre Ríos, ponele, te cuento hermano.- Le contestó Juli, con unas sonrisita cómplice.
- ¿Pero están invitados o algo? Esa Carolina esta re buena…
- A Román no le va a importar poner dos platos más en la mesa…- Reconoció Julieta mientras Florencia y Mónica estaban en otra mostrándose fotos de otras vacaciones.
Mati y Juli rieron, todavía quedaban montones de kilómetros como para explicar la mina de oro en bruto que Julieta había encontrado en omegle, ya quedaba tiempo para decirse todo, ponerse al día de todo, y quizás, hasta para alguna que otra sorpresa más.
GRACIAS POR LEER! Espero que les haya gustado ;););) si les gustó no se olviden de puntuar o comentar. Acepto sujerencias, ideas, aunque ya se como va a seguir todo esto. (Digamos que el viaje va a ser muy largo y van a tener que buscar con que entretenerse)
Los capítulos anteriores...
1 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2848482/Jugando-con-su-primita.html
2 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2851819/Jugando-con-su-primita-Parte-II.html
3 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2851820/Jugando-con-su-primita-Parte-III.html
4 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2881590/Jugando-con-su-primita-IV.html
5 - http://www.poringa.net/posts/relatos/2884463/Jugando-con-su-primita-V.html
Hasta la próxima!
4 comentarios - Jugando con su primita VI