Algunos hombres son unos perfectos inútiles, otros más o menos, pero la mayoría...
Claudia es una perra vengativa 117
Después de casi un mes reapareció Javier en nuestras vidas habló conmigo para que la convenciera a Claudia que lo dejara venir a casa a cenar. Ella me hizo transmitirle que estaba encantada pero que no iba a poder irse hasta que ella se lo permitiera, no quería que se hiciera el nene enojado y se levantara a mitad de la cena, delante de los chicos. Si aceptaba eso todo bien sino que ni viniera. Yo sabía que si Javier aceptaba estaba perdido, para Claudia y su mentalidad jugaba del lado de los perdedores, por decirlo de alguna manera. Le dijo que viniera el viernes. El viernes el llegó, ella se había demorado en el trabajo, llego sobre la cena, venía con un vestido rojo hermoso que le marcaba su culazo bien entangado.
-Hola… -dijo, y me dio un beso en la boca a mi y uno en la mejilla a Javier estaban los chicos delante.- el jefe necesitaba que lo ayude a resolver un tema… se me hizo tarde… no le pude decir que no… me tenía que quedar… -javier no dijo nada pero se mordía la lengua se lo notaba molesto, cenamos charlando de todo un poco y después de acostar a los chicos Claudia dijo porque no íbamos a la cama. Cuando entramos al cuarto lo hizo acostar a Javier en la cama desnudo con su pija bien dura apuntando al techo. El quería hablar pero ella con un gesto le indico callar. Se saco el vestido rojo y quedo solo con su ropa interior, le dijo a Javier
-Te voy a atar… así no te me escapas… -y le ato sus manos como hacía siempre conmigo. Para mi sorpresa el ni se resistió ni nada, su pija daba saltitos en el aire. Ella vino a besarme a mi y nos toqueteamos un largo rato. En un momento lleve mi dedo a su culito y me dijo
-No la cola no me toques mucho… me arde… -con esa voz de puta que suele poner. Después se fue sobre Javier y corriendo su tanga a un lado lo montó.- como te late la pija… me extrañabas eh…
-No veía la hora de cogerte… sos una puta divina…
-si aprendes a ser menos posesivo… vas a poder disfrutar más…
-así que te arde el culo…
-si el jefe es un cabrón… siempre se ensaña con mi colita… se cree que soy un culo nada más… una putita cualquiera…
-Que hija de puta sos…
-no soy muy puta… me encantan los machos… como el jefe… que me coge bien duro… disfruta de mi culo… se hace el dueño de él…
-yo te lo voy a hacer ahora… eh puta…
-vos estas atado… si quiero me salgo de encima tuyo y te dejo caliente… querés…
-Que perra…
-Hoy otra vez me dio la leche en la cola… no me la da muy seguido… esta grande pobre…
Me decía que era su culorroto mientras me lo hacía… y es verdad claro…
-No hables más…
-Porque… si tu pija esta bien dura… no me parece que le moleste… te pareces cada día más a mi marido…
El movía su cadera bien duro tratando de clavarla cada vez más, Claudia en un momento se salió de encima de el y vino a besarme.
-Mira tu amigo que caliente esta… se fue enojado la ultima vez… no se si merece llegar… vos que decís cielo… -yo obviamente silencio absoluto.
-Soltame que te voy a partir el culo en cuatro…
-ay… mírenlo al machito… -se puso acostada entre sus piernas con su lengua y boca jugando con su pija.- te voy a sacar la lechita asi… te vas a escupir toda la pancita…
-soltame que te recojo hija de puta…
-si tu pija se bajara te suelto enseguida… pero sigue bien dura… dando saltitos… te gusta el trato… igual que a mi marido… -el dejo de hablar hacía esfuerzos para bajar su calentura pero no podía.- ella lo estuvo chupeteando hasta que lo hizo llegar su pija escupió un chorro larguísimo que cayo en su pecho, Claudia sonrió sarcásticamente y eso pareció prolongar su orgasmo, después atado como estaba parecía que hubiera perdido todas las fuerzas, se lo notaba rendido. Claudia me hizo acostar a mi al lado de él y me montó.
-Suerte que mi marido sabe ubicarse… aguanta bien.. –y se movía muy duro sobre mi, tuvo un orgasmo muy intenso sobre mi y giro su boca para besarlo a Javier que le devolvió el beso. – ahora voy a tener dos inútiles a falta de uno…? Eh javito…? Me gusta javito… suena como cabrito… que son cornudos…
El no tenía fuerzas ni para fingir enojarse, se sentía vencido, humillado o así me lo parecía a mi recordando mis primeras experiencias semejantes con Claudia.
-Vos no acabés… -me dijo.- ya no rendís como antes… aguántate sabés… si bien duro cógeme dale… perro puto… maricona de mierda… igual que tu amigo… aaaaa…. Siiiiiiii….aaaaaaa… que placer… -javier no decía nada. Claudia se salió de encima mio y se monto con sus rodillas a ambos lados de la cabeza de él y le dio su concha a chupar.
-chupa bien… recién cogida… decí que tiene un forro y no lo deje llegar… sino te vas a volver adicta a la leche vos también… eh… -la pija de el estaba bien dura. Y protesto
-Te equivocas perra… yo no soy como tu marido… -ella por respuesta le apretó el costado de su cara con su rodilla y le clavo su pelvis contra la boca.
-Chupa bien… que sos una a aprendiz de mamona como mi marido… mira como tenés la pija… maricon…
El protestaba pero seguía chupando, Claudia lo pajeaba lo estuvo pajeando un largo rato cuando lo sintió por llegar le dijo.
-La próxima la vas a chupar llena eh…? Queres maricona… -el se quejaba con la concha de Claudia clavada en su boca y su pija escupiendo otra vez chorros al aire. Después de un rato lo desato y le dijo que se vistiera y se fuera, que quería estar tranquila con su marido, lo vi salir con su cabeza gacha, Claudia se abrazo a mi apoyando su cabeza en mi pecho.
-Te sigue los pasos… y como es joven… va a ser mucho peor…
Claudia es una perra vengativa 117
Después de casi un mes reapareció Javier en nuestras vidas habló conmigo para que la convenciera a Claudia que lo dejara venir a casa a cenar. Ella me hizo transmitirle que estaba encantada pero que no iba a poder irse hasta que ella se lo permitiera, no quería que se hiciera el nene enojado y se levantara a mitad de la cena, delante de los chicos. Si aceptaba eso todo bien sino que ni viniera. Yo sabía que si Javier aceptaba estaba perdido, para Claudia y su mentalidad jugaba del lado de los perdedores, por decirlo de alguna manera. Le dijo que viniera el viernes. El viernes el llegó, ella se había demorado en el trabajo, llego sobre la cena, venía con un vestido rojo hermoso que le marcaba su culazo bien entangado.
-Hola… -dijo, y me dio un beso en la boca a mi y uno en la mejilla a Javier estaban los chicos delante.- el jefe necesitaba que lo ayude a resolver un tema… se me hizo tarde… no le pude decir que no… me tenía que quedar… -javier no dijo nada pero se mordía la lengua se lo notaba molesto, cenamos charlando de todo un poco y después de acostar a los chicos Claudia dijo porque no íbamos a la cama. Cuando entramos al cuarto lo hizo acostar a Javier en la cama desnudo con su pija bien dura apuntando al techo. El quería hablar pero ella con un gesto le indico callar. Se saco el vestido rojo y quedo solo con su ropa interior, le dijo a Javier
-Te voy a atar… así no te me escapas… -y le ato sus manos como hacía siempre conmigo. Para mi sorpresa el ni se resistió ni nada, su pija daba saltitos en el aire. Ella vino a besarme a mi y nos toqueteamos un largo rato. En un momento lleve mi dedo a su culito y me dijo
-No la cola no me toques mucho… me arde… -con esa voz de puta que suele poner. Después se fue sobre Javier y corriendo su tanga a un lado lo montó.- como te late la pija… me extrañabas eh…
-No veía la hora de cogerte… sos una puta divina…
-si aprendes a ser menos posesivo… vas a poder disfrutar más…
-así que te arde el culo…
-si el jefe es un cabrón… siempre se ensaña con mi colita… se cree que soy un culo nada más… una putita cualquiera…
-Que hija de puta sos…
-no soy muy puta… me encantan los machos… como el jefe… que me coge bien duro… disfruta de mi culo… se hace el dueño de él…
-yo te lo voy a hacer ahora… eh puta…
-vos estas atado… si quiero me salgo de encima tuyo y te dejo caliente… querés…
-Que perra…
-Hoy otra vez me dio la leche en la cola… no me la da muy seguido… esta grande pobre…
Me decía que era su culorroto mientras me lo hacía… y es verdad claro…
-No hables más…
-Porque… si tu pija esta bien dura… no me parece que le moleste… te pareces cada día más a mi marido…
El movía su cadera bien duro tratando de clavarla cada vez más, Claudia en un momento se salió de encima de el y vino a besarme.
-Mira tu amigo que caliente esta… se fue enojado la ultima vez… no se si merece llegar… vos que decís cielo… -yo obviamente silencio absoluto.
-Soltame que te voy a partir el culo en cuatro…
-ay… mírenlo al machito… -se puso acostada entre sus piernas con su lengua y boca jugando con su pija.- te voy a sacar la lechita asi… te vas a escupir toda la pancita…
-soltame que te recojo hija de puta…
-si tu pija se bajara te suelto enseguida… pero sigue bien dura… dando saltitos… te gusta el trato… igual que a mi marido… -el dejo de hablar hacía esfuerzos para bajar su calentura pero no podía.- ella lo estuvo chupeteando hasta que lo hizo llegar su pija escupió un chorro larguísimo que cayo en su pecho, Claudia sonrió sarcásticamente y eso pareció prolongar su orgasmo, después atado como estaba parecía que hubiera perdido todas las fuerzas, se lo notaba rendido. Claudia me hizo acostar a mi al lado de él y me montó.
-Suerte que mi marido sabe ubicarse… aguanta bien.. –y se movía muy duro sobre mi, tuvo un orgasmo muy intenso sobre mi y giro su boca para besarlo a Javier que le devolvió el beso. – ahora voy a tener dos inútiles a falta de uno…? Eh javito…? Me gusta javito… suena como cabrito… que son cornudos…
El no tenía fuerzas ni para fingir enojarse, se sentía vencido, humillado o así me lo parecía a mi recordando mis primeras experiencias semejantes con Claudia.
-Vos no acabés… -me dijo.- ya no rendís como antes… aguántate sabés… si bien duro cógeme dale… perro puto… maricona de mierda… igual que tu amigo… aaaaa…. Siiiiiiii….aaaaaaa… que placer… -javier no decía nada. Claudia se salió de encima mio y se monto con sus rodillas a ambos lados de la cabeza de él y le dio su concha a chupar.
-chupa bien… recién cogida… decí que tiene un forro y no lo deje llegar… sino te vas a volver adicta a la leche vos también… eh… -la pija de el estaba bien dura. Y protesto
-Te equivocas perra… yo no soy como tu marido… -ella por respuesta le apretó el costado de su cara con su rodilla y le clavo su pelvis contra la boca.
-Chupa bien… que sos una a aprendiz de mamona como mi marido… mira como tenés la pija… maricon…
El protestaba pero seguía chupando, Claudia lo pajeaba lo estuvo pajeando un largo rato cuando lo sintió por llegar le dijo.
-La próxima la vas a chupar llena eh…? Queres maricona… -el se quejaba con la concha de Claudia clavada en su boca y su pija escupiendo otra vez chorros al aire. Después de un rato lo desato y le dijo que se vistiera y se fuera, que quería estar tranquila con su marido, lo vi salir con su cabeza gacha, Claudia se abrazo a mi apoyando su cabeza en mi pecho.
-Te sigue los pasos… y como es joven… va a ser mucho peor…
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