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Una escapada al placer.

Acá para mi casa vive una chava que me atrae en forma particular. No es el tipico arquetipo de mujer sensual, de esas que a todos gustan y sin embargo por eso mismo tenia tiempo atrayendome la idea de gozar con ella.

Tenia una belleza particular, y muy suya. A mi me gusta encontrar en las mujeres no esa belleza que comparten con todas, no esa silueta común, no esa medida estandar, no esos ojos típicos ni la actitud tipica sino más bien, todo lo contrario, esa belleza que las hace únicas que las hace ser diferentes, que las saca del modelo en serie que nos proponen los medios.

Ella era así, completamente una belleza única.

De aproximadamente 25 años. Tenia un rostro bonito, y una cara casi angelical. Un pelo castaño que le caia naturalmente por la espalda hasta la cintura, se ondulaba como pequeñas dunas de agua, los pechos de tamaño pequeño pero atractivos ligeramente puntiagúdos, la cintura entallada y unas nalgas relativamente grandes en contraste con el resto del cuerpo. Tenia unas piernas absolutamente hermosas. Y una particularidad; tenia más corta ligeramente la pierna derecha por lo que cojeaba de la pierna derecha.

Aunque la habia visto con amigas y con amigos ahora que lo pienso casi nunca la habia visto con un chico, es decir no parecia que tuviera novio alguno, ni sabia que lo haya tenido. Quizás su condición hacia que muchos no la aceptaran por aquello del que dirán... pero sinceramente no quiero darle tanta importancia a "ese defecto".

El dia que me la encontré iba vestida con un vestido justo arriba de la rodilla en color azul y con flores bermellón al detalle, unos zapatos de tacón, y el derecho llevaba una suela ortopédica para disminuir la cojera, unos aretes pequeños pero bonitos también de flores, una sonrisa y una mirada encantadora.

Ibamos caminando por la misma acera, yo la ví. Justo cuando pasó junto a mi senti un impulso irresistible e hice algo que jamás me hubiera creido capaz de hacer, le toque la nalga ligeramente, apenas un roce, algo muy sutil pero bien palmeada. Pensé que era inevitable un grito o una cachetada y hasta la esperaba; era el precio a pagar.

Ella sólo gimió sorprendida y volteo a verme y me dijo:

-Oyeeee!

-Perdón, perdón... lo siento.

-Si, yo también lo sentí -me dijo y se rio brevemente mientras lo hacia ví que me recorria desde los ojos hasta los pies con la mirada.

-Disculpame le dije y no pude sostener la mirada para cuando me sentia arrepentido y sonrojado.

-¿Te gustó? me lanzo asi sin más la pregunta. Yo me quede absorto y una parte de mí supo que acababa de abrir una ventana.

-Bueno, no sé... es, eres...

-¿Te gustó? ¿O te hizo falta más? me dijo mientras se mordisqueaba un poco el labio.

-Eh pues... si, si.

En realidad no esperaba para nada esta reacción. No sabia que hacer, estaba confundido hasta cierto punto. Y sabia que deseaba algo más.

Le dije que sin duda estaba bien, pero que podria ampliar la experiencia para que le pudiera dar una respuesta más amplia, ella sonrio y me preguntó:

-¿Qué es exactamente lo que propones?

Para resumir le dije que tenia tiempo dandole vueltas a una fantasia, la de perderme con alguien por dos o tres horas de placer y solo placer, usar y sentirme usado, sin más. Pero eso era solo una fantasia "just a fantasy".

-Just a fantasy...- me dijo- mientras me miraba y después me dijo ¿Dónde?

-Bueno el lugar no importa... puede ser donde sea.

Después de dos o tres preguntas más coincidimos en ir a un parque deportivo. Quedaba muy cercas.

Al llegar al lugar, antes de pagar nuestra entrada, ella me dijo:

-¿Estas seguro?

-Bueno es...

-Al cruzar no hay vuelta atrás... y todo puede pasar. Sólo te pido que no me hagas hacer nada que no quiera.

-Dime ¿que no quisieras hacer?

-Penetración... eso no. En verdad me da algo de... miedo tu sabes.

-Esta bien. Le dije.

Al entrar ella dejo el teléfono en la bolsa y me pidio que hechara el mio, lo dejo en recepción y entramos.

Perdidos en el parque entre los árboles encontramos una banca algo aislada, nos sentamos allí y después de un rato, nos besamos. Con besos apasionados, cachondos.

Ella me besaba y con sus manos tocaba mi cuellos y espalda, yo comencé a deslizarme un poco bajo la falda. Ella no oponia resistencia, estaba entregada y cada vez más. Se acercaba a mi, y me repego los pechos varias veces, sentia su dureza en mis brazos y en mi pecho.

Metí mi mano un poco más, lenta, pero apasionadamente. Ella me agarró el pene encma de la ropa y lo apreto. Después de unos tantos toqueteos así... ella me pidio que fueramos a otro lugar más apartado.

Buscamos tras unos arbustos, en la completa oscuridad. Puse mi camisa sobre el pasto y la recoste a ella, me deslice junto a ella. Ella metio su mano bajo mi pantalón y me tocó el pene con un duro apretón y se rio quedito. Al oido me susurro que le hiciera lo que quisiera; respetando su desición de no penetrarla.

Yo deslice mi mano bajo la falda y le toque la conchita por encima de la braga. MIentras la besaba. ella se desabrocho el vestido un poco para sacar el pecho. La toque, toque encima del bra y luego le saque el pecho, lo lamí suave.

Despues ela se puso de pie y se quito las bragas, yo me abri el jeans y saque mi pene. Ella lo agaró y jugueteo con él. Me comenzó a masturbar. Yo a ella.

Y para ahorrarme detalles diré que maravillosamente ella me recosto y se sento sobre mí. Puso mi pene entre los labios de su conchita y se movia ritmicamente arriba y abajo, sin penetrar, pero era un masaje... un masaje cachondisimo. Luego con su mano acariciaba la glande. Eyaculé.

Después de un rato cuando escuchamos que venia el guardia de seguridad y nos quedamos calladitos y quietecitos abrazados a la oscuridad. Cuando se retiró... y ya faltando solo 30 minutos para que nos cerraran el parque; le hice sexo oral. Y ella a mí, volvi a eyacular.

Fuimos los últimos en salir del parque...

-¿Te gustó? - me preguntó.

-Si, sin duda.... eres cachondisima. ¿A ti te gustó?

-Claro, me gusto sentirme objeto de placer... sabes por mi pierna muchas veces nadie quiere conmigo y me siento como despreciada por eso... es como si a nadie.

La calle entonces con un beso.

J.R. 2016

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2 comentarios - Una escapada al placer.

ElmironMira +1
Severo que involucararas a una coja
👍
jonhnynude +2
Pero entre más coja... mejor. ¿No? Jejeje

bueno ya hablando en serio creo que como ser humano también ellas merecen atención y cariño por supuesto que también tienen todo el derecho a tener una vida sexual y a disfrutar. Creo que no se trata de nada criminal en mi relato pues seria diferente si hablase de una persona sin facultades mentales para decidir sobre el acto sexual, por ejemplo una ologofrénica; eso si seria severo.

Saludos
El_abuelito +1
Muy bueno tu relato y veo que ya no eres tan tímido como en casos anteriores ya que "te atreviste a tocarle ligeramente las nalgas a la chica"
Saludos, van puntos...
jonhnynude
Gracias por pasar y comentar. Sí debe haber un progreso jejeje