Mi última peripecia a Austria a ver..ga a mi suegra.

Quiero dedicarles este relato a todos aquellos que tuvieron la paciencia de leer mis relatos anteriores sobre el tema de cómo conocí a mi esposa y las desventuras con mi suegra. A los que no lo hicieron, le recomendaría hacerlo si quiere entender este.

Tardé en escribir este post, que quizás sea el último, un poco por remordimiento de conciencia o culpa y otro poco para poder hacerlo con un poco de respeto por las consecuencias, a pesar de que en el momento en que ocurrió, podía haberle pasado a cualquiera de los otros tres, no se sabe, porque nadie tiene la vida comprada.

Esto me lleva a una reflexión: cuando tengamos sexo, hagámoslo con pasión y como si fuera la última vez, porque no sabemos si en realidad no lo va a ser.

Esperó que disfruten del escrito, y de paso si los lleva a sacar una conclusión buena, mejor.

He aquí el relato:

En el último viaje solo que hice a mediados del año pasado a Austria a visitar a mi suegra, porque mis hijos estaban en temporada de clase, empujado por mi mujer que no quería que pasara mucho tiempo sola y "le agarrara depresión", me encontré envuelto en un flor de quilombo del que salí bien parado de casualidad y gracias a la rapidez mental de mi suegra.

Como ya conté sobre mi querida y bien cojida suegra, cada vez que la visitaba no perdía la oportunidad de acovacharse mi verga bien adentro, acompañada de su reciente noviecita sueca.

Como era de esperar, sabiendo que venía solo, me recibió en el patio sólo con el hilo dental que usa para bañarse en el lago (usa eso porque un vecino se quejó a las autoridades porque encontraron a sus dos hijos varones pajeándose viéndola a ella en bolas en la playita, y dicho sea de paso esta yegua vale muchas pajas).

Bueno, hete aquí que entre ambas no me dejaron ni comer, porque cuando me estaba dando una ducha reparadora aparecieron ambas y se metieron bajo el agua conmigo.

Siempre lo dije, con mi esposa tengo un excelente sexo, tal que nos llevó a tener 5 hijos, pero cuando me agarran estas dos me dejan las piernas temblando y más exprimido que una naranja después de sacarle todo el jugo.

Aclaro, porque en el fondo con esto tiene que ver, que nunca tomé ningún tipo de droga, pastillita celeste ni nada. Juntas no dejan que la pija se baje, sólo le dan un poco de descanso para que no se irrite y a la carga otra vez.

Lo que yo no sabía era que Inga, la "noviecita" sueca de mi suegra Erik, sí tomaba de vez en cuando (y vaya a saber cuánto), especialmente cuando yo llegaba.

A la noche cenamos temprano en el chalet de Inga y nos pusimos a ver unas películas para hacer la digestión y de paso hacerme juntar leche. También salimos a caminar un poco por ese paraíso bajo la luna. Demás esta decir que casi no podía mirar el paisaje de los besos a las dos y casi ni caminar de cómo empujaba mi pija el pantalón jean queriendo salir.

Cuando pasamos por debajo de una luz Erika me mira y se entra a cagar de risa diciendo bueno ya estás listo, podemos volver. Miro mi pantalón y veo una aureola húmeda que había dejado mi verga en el jean por los jueguítos de la previa.

Decidimos quedarnos en el chalet de Inga porque ella tenía una cama king, o sea de 3 plazas.
Permanecimos más de 3 horas en las cuales les llegué a dejar el culo como higo maduro, abierto y chorreando. Ya para finalizar, quise terminar el tercero dentro de la sueca y acá vino el problema.

La había notado súper caliente, a tal punto que nos mojábamos todo con sus fluídos, y éstos la volvían loca a mi suegra Inga comenzó a acabar de una forma en la que nunca la había visto y eso me llevaba a acabar a mi también. Gimió y se retorció como una loca y yo la llené de leche.

Se quedó quieta y yo me hice a un lado para no aplastarla, mientras mi suegra lamía toda mi pija y huevos con los restos del flujo de Inga y mi leche.

Unos minutos más tarde nos levantábamos para ir a tomar algo cuando nos dimos cuenta que Inga no estaba descansando, estaba muerta.

Como poder explicarles todo lo que pasó por mi cabeza en un instante, el quilombo que me veía venir con mi mujer, etc. Pero yo sólo pensaba en mi, no reparé en mi suegra, a la que se le acaba de morir su íntima amiga, su compinche, su todo, muy egoísta de mi parte.

Para mi sorpresa, me dijo que fuera para su casa llevándome toda mi ropa, que ella llamaría al médico.

Un rato después ví por la ventana llegar la ambulancia, que estuvo un rato. Había muerto por un infarto cardíaco masivo, provocado seguro por "la/s pastillita/s". Mi suegra les dijo que estaban teniendo sexo entre ambas cuando ocurrió (allá no es de asombrar esas cosas).

En horas de la mañana llamó mi mujer para hablar con su madre y le dije que estaba en el centro haciendo los arreglos para el funeral. Mi esposa Hilda no lo podía creer, una mujer tan joven morir de un ataque al corazón!. Yo le comentaba para disimular que "para mi que esa chica se daba con algo, por eso se murió". La respuesta fue que yo siempre soy un mal pensado y que lo único que faltaba era dijera "seguro que un tipo la mató de un pijazo". Es casi adivina la hija de puta.

Todo lo que pasó después son cosas tristes que no vienen al caso y aclaro, por las dudas, que ni volví a ponérsela a mi suegra en la semana restante que estuve ahí, a pesar de dormir juntos todas las noches no se me volvió a parar y hasta hoy no regresé a visitarla. Mi esposa sí viajó a hacerle compañía con los 3 chicos menores, mientras yo me quedé con los dos mayores.

No sé si volver, tengo miedo de que la próxima se me muera mi suegra de empacho de verga.