
¿Qué hacer cuándo te enamorás de una pendeja bellísima e inalcanzable?

Seguramente la respuesta es mirarla de lejos,

recordarla, y luego, a solas,

gozar con la paja.

Al menos cuando era pibe sólo tenía el recuerdo. Hoy, con un celular, podés sacarle fotos, bajar las imágenes en la compu, y mirarla para el placer. A veces no se puede. Sin embargo, Internet ayuda.
La pendeja de las pimeras fotos es maravillosa.
Pero, ¡ay!, para el toque final, es necesario algo más…



Y más…

Como también gastar un poco

Esta se llama Anahí, de Tucumán. Tengo su tel.

1 comentarios - Lo que se puede
Bueno, dale, andá pasandome el celu de la tucumana....le como la conchita....jaja!! saludos..