Claudia es una perra vengativa 5
Al día siguiente fui a verlo al tal mauro, tenía un taller donde administraba toda una tropa de autos, me dijo que lo había llamado un amigo, lo que tenía que pagar por día y me dio la llave del auto. Los primeros días fueron un poco difíciles pero pronto aprendí, lo que en mucho tiempo me había costado aprender, a callarme, a observar, a que en ciertos lugares la mejor verdad es mentir todo el tiempo con descaro. Y aceptar las mentiras ajenas como verdades. Con Claudia estaba todo muy bien, estaba más que contenta que me adaptara y aceptara trabajar. Aunque no ganaba mucho, me daba placer ganar dinero, había olvidado un poco el placer de hacerlo. Claudia estuvo toda la semana ocupada con su trabajo, no vio a nadie, solo trabajo y familia, el viernes me dijo que cenábamos a la noche, ya que la nena salía nosotros salíamos a cenar. El adminículo me lo saco, lo usaba solo en algunas oportunidades para jugar, resultaba muy incomodo para trabajar, a ella le alcanzaba conque tuviera su llave colgada en el cuello. Era un símbolo para nosotros, igual lo usaba algunas veces como un juego. Ese viernes que fuimos a cenar fue lo primero que hizo, ponérmelo, mientras se arreglaba para salir, estaba deslumbrante, con transparencias, parecía una modelo, me moría de calentura. ella me miraba sonriente, fuimos en su auto a cenar a un restaurante muy elegante, cenamos en silencio acariciándonos las manos, y charlando suavemente. En un momento ella me dijo algo así:
-Quiero que entiendas que en lo que pasa y pasará no hay nada personal con vos... necesito explorar esto que siento dentro... por momentos me siento una puta... una hembra fácil... me encanta que me traten como tal... y con vos no podría... te amo de otra manera... -yo aproveche y use mis nuevos conocimientos de guardar silencio. Ella me acaricio la cara un momento solamente. En ese mismo momento lo llamo al mozo y empezó a coquetear con el se hacia la niña ingenua, el mozo se acercaba lo más posible sin perder su ubicación claro, era un mozo, la vista de sus pechos era privilegiada desde su posición, Claudia tomo la servilleta y le rozo la pierna al mozo, como si fuera un descuido, y ese solo gesto me calentó muchísimo, yo sabía que no era sin querer, nada de lo que hacía era sin querer. Después de cenar fuimos a un hotel, yo pensé que tendría algún plan mas retorcido, cogimos como siempre lo hacemos con mucha pasión, los dos disfrutamos muchísimo, el vino le había soltado la lengua, se monto sobre mi con su ropa interior puesta. y mientras yo callaba ella hablaba en mi oído suavemente, clavada sobre mi.
-El señor que nos dio el registro tiene una mano bárbara... esta semana me llamo... no te había dicho nada... me espera el lunes... me vas a llevar con tu taxi... y me vas a esperar... sabiendo que mientras esperas me van a estar recogiendo... como a la más puta... -yo solo gemía y la clavaba aguantando y haciendo que parara de moverse si estaba muy cerca de llegar.
y lo que te dije antes... nada personal... pero soy mucha hembra para vos... al final entendí a la puta de mi amiga Mary... te la voy a presentar... es una enfermera... la amo también... -se quedo quieta sobre mi mientras solo nos besamos por un tiempo que pareció eterno, solo los dos así abrazados, clavada ella en mi besándonos, di gracias mentalmente. al infinito y las estrellas.
-Está bueno que entiendas que me tenes que compartir... aceptar tu lugar... que es el que yo te de... siempre... en todo momento... no quiero que llegues... se irguió sobre mi y su pechos se sacudieron miro hacia arriba para tomar aire bien profundo abriendo su garganta y tuvo un profundo orgasmo, cayo sobre mi y se quedo muy melosa besándome, se salió de arriba mío. y se acostó a mi lado. Descansamos un rato eran cerca de las 300 de la mañana. Descanso un rato, tomo su celular y lo llamo a Exequiel.
-Hola como estás... fuiste a bailar al final... te busco a las 0700 y desayunamos juntos... te voy a chupar la pija hasta la ultima gota... como a vos te gusta... -mi pija seguía dura como una piedra.- Vamos a tu departamento... queres... no la cola no me gusta ya sabes... algún día quizás... ahora no... no me hagas hablar de eso que me da vergüenza... te busco a las 0700 dale... para que anoto... y después de anotar corto. Nos bañamos juntos me acariciaba, yo tenia una cara rara, me sentía muy molesto, quería terminar la noche con ella.
Me llevó con el auto a casa, se quedó un rato y se fue. Antes de irse me colocó el aparatito.
-Estás muy caliente... sos un peligro... -después de ponerlo me beso profundamente dándome lengua bastante tiempo, se me ponía dura y me molestaba muchísimo. Ella salió de la habitación, me pidió que no me olvidara que cerca del mediodía venía la nena. Yo fui al cementerio a llevarle flores a papá. Ya sabes para quien llame fui al cementerio.
Claudia es una perra vengativa 6
Así fue, me acosté tratando de descansar, pero estaba tan caliente que se me ponía dura y la molestia me hacía despertarme, finalmente me dormí y no me desperté hasta que cerca del mediodía escuche la puerta, era Lucía que volvía, me levante a preparar el almuerzo, Lucía me contó que estaba de novia, que estaba recontenta, se sentía muy feliz y muy cuidada por su chico, era el amor de su vida... etc. etc., etc., la adolescencia pensé y me reí por dentro. Me pregunto por su mama y le dije que había ido al cementerio a ver al papá, no podía evitar que la parte más vulgar mía pensara si hija de puta te la están enterrando a la vez que sentía que se me ponía dura y el dolor me hacía buscar otras imágenes en que refugiarme, pero era una obsesión no podía parar de imaginar como la estarían montando que le diría que harían, me volaba la cabeza pero la molestia del aparatito, me hacía cambiar de ideas. Claudia llegó cuando casi estaba el almuerzo, parecía que venía del cementerio, cara de cansada, una ropa común, donde se habrá cambiado pensé.
Se quedo charlando un largo rato con Lucía en la sala mientras yo terminaba la comida. Después almorzamos todos juntos y Claudia dijo que iba a dormir un rato que la despertara más tarde, cuando la fui a despertar estaba desnuda en la cama tapada solo con la sabana, le acaricie todo el cuerpo con detenimiento y se despertó sonriente, me dijo que cerrara la puerta y me acostara boca arriba en la cama. Jugó con mis pelotas un rato antes de sacarme el aparato, mi pija dio un respiro, estaba bien dura no había podido acabar, me sentía demasiado caliente, Claudia evaluando la situación me puso un forro, quería obviamente que pudiera aguantar mas, me monto despacito y vino con su boca a buscar la mía, no se movía solo nos besábamos muy suavemente comiendo nuestras bocas y enganchados como estábamos, paro de besarme y se acercó a mi oído.
-Hoy si querés me podes preguntar algo y te cuento… lo que quieras saber… -yo no conteste, me avergonzaba hablar.- No te gustaría saber nada… -dijo en un susurro junto a mi oído-
-Me avergüenza preguntar… -me beso nuevamente y nos besamos otro largo rato y después volvió a mi oído-
-Exe no me da tiempo a nada… casi me arranca la ropa cuando llego, me amasa caliente… desbocado como un potro y desnuda me tira sobre la cama… -yo me quede mas quieto todavía, estaba muy cerca de llegar.- se desnuda el y enseguida me esta montando… me da duro… está muy enojado porque volviste y se le nota… me lo quiere hacer sentir… quiere que sienta bien su dureza… me dice que quiere mi culo y siempre se lo niego… después muchas veces me pone de perrito en la cama y asi me coge… me da bien duro… me pide dármela por el culo y se lo niego… pero cada vez me pongo más caliente… las ultimas veces que pregunta le digo un no que el no alcanza a interpretar… es un siiii profundo… pero no se da cuenta…. y me rió por dentro porque estoy más que entregada… podría hacer lo que quiera conmigo en esos momentos… y no se da cuenta… -paró de hablarme y nos besamos otro largo rato, se salió de encima mío y quedamos besándonos un montón de tiempo más. Después de descansar un rato me volvió a montar.
-Después que acaba… y cuando se acuesta en la cama… se la voy a chupar… se la gasto a chupadas en seguida se le pone dura… ya no me pide la cola… me lo cojo un rato como me gusta estando arriba y después lo dejo que me llené la boca… que me de todo lo que tiene… se la paladeo y la trago toda… toda la que me da… -en ese instante mismo explote, con una mezcla profunda de sentimientos. Nos quedamos besándonos y acariciándonos, un rato que pareció eterno.
A la mañana siguiente se arreglo preciosa con una pollera entallada, una remera musculosa semitransparente, zapatos de taco alto y fuimos hacia donde me habían dado el registro, al encuentro con el fulano. Ella quiso que la esperara en el auto, bajo sola, mi cabeza estaba en las nubes, en algunos momentos gente me hacía seña preguntando si estaba libre y no me daba cuenta tenía la cabeza a mil kilómetros de distancia. Paso cerca de una hora hasta que volvió al auto. Su cara estaba seria, no hablo ni dijo nada. me pidió que la llevara a casa que quería darse una ducha. Pensé que me iba a hacer algún comentario pero se la veía sería, relajada pero sería y sobretodo muy revuelta. En casa se fue a la ducha y tardó como una hora. Cuando estaba por salir me pidió que fuera al baño, la ayude a secarse me pidió que la abrazara fuerte, lo hice, algunas lagrimas cayeron de sus mejillas. Pero no se la veía triste. Después se vistió tranquila y me pidió que la llevara al hospital. Pasaron casi dos semanas en las que nuestra vida se transformo en la rutina de una familia normal. Ella estaba casera como nunca, salíamos al cine, cuando podíamos, a cenar, muchas veces Con Lucía y a veces solos. Fueron como unas vacaciones en nuestra rutina. Yo sentía que ella iba volviendo de a poco de donde fuera que había estado. Era viernes en la noche, Lucía había salido y cenábamos solos Claudia me miró y me dijo que se sentía muchísimo mejor y que tenía ganas de contarme lo que había pasado en la oficina de este señor. Pero me dijo que me lo iba a contar algún día pero en la cama. Antes que volviera a verlo, porque seguramente lo haría y no dentro de mucho tiempo.
Esa misma noche al acostarnos me monto enseguida, volaba de calentura, se clavo sobre mi y me vino a besar la boca enseguida y luego paso a mi oído. Sin moverse sobre mi solo con un susurro en mi oído.
-Esa mañana que lo fuimos a ver… entre caminando sensualmente a su despacho… me pidió que caminara más que era muy elegante para caminar… me dijo que era una puta fina… que mi amiga Mary tenía un ojo bárbaro… me hizo caminar un rato y luego tomo un trapo largo que tenía en su escritorio y vino hacia mi… me ato las manos a las espalda y desde atrás me acaricio lentamente… mi respiración se ponía mas agitada me fue empujando hacia el escritorio mientras me susurraba al oído como yo te susurro a vos ahora… si viniste a esta hora un lunes hasta acá… no es porque busques pija… otra cosa estás buscando una experiencia distinta… alguien que te encarrile… que te ordene… y por eso la puta de Mary te mando conmigo… mi respiración era mas agitada… el me apoyo boca abajo en su escritorio… levanto mi pollera y metió sus dedos por debajo de mi tanga… no me equivoco… estas encharcada… saco su miembro del pantalón y se puso detrás mío solo jugando con la punta de su pija en la puerta de mi conchita… se inclino sobre mi y me hablo al oído… ahora podría llamar a un asistente para enfiestarte y no pondrías el menor reparo… pero no es el momento todavía… yo ni me movía estaba entregada… me la dejo ir de una y se quedo quieto sobre mi… tiene una influencia tremenda sobre mí… me sentía suya… toda suya… me bombeaba muy suave pero muy profundo… me agarro los pelos y me hizo una colita… pero con mucha suavidad… después me chupaba detrás de la oreja y de a ratos me decía cosas sucias… después me soltó las manos que tenía atadas… se incorporó un poco dejo caer saliva en mi culo y empezó a jugar con su dedo gordo en el… después sentí como apoyaba la punta de su pija y me metía primero y suave la cabeza… para ir dejándomela entrar de a poco… paso sus manos por debajo de mis pechos agarrándome de los hombros… te monto como a una perra… move la cola perrita… dale… move… y yo me movía tratando de que me la metiera más adentro… que se calentara más… estuvimos así una eternidad… el me la dejaba bien duro y me serruchaba de a ratos… hasta que en un momento se tensó y me la clavo bien al fondo… me descargo toda su leche en mi culo. Dejo que salga sola y tomándome del pelo me hizo arrodillar delante de el… de su pija… y sin que me diga nada supe lo que tenía que hacer y se la chupe hasta que me hizo parar… me puso de pie… y salió de la oficina sin decir palabras. Después Salí yo.
Claudia es una perra vengativa 7
Pasaron varios meses en que todo siguió mas o menos igual, Claudia siguió con Exequiel, no volvió a verlo al señor del registro, me pareció que tenía algo semejante a miedo, no quería pasar cierto limite, en realidad lo temía pero lo deseaba. Creo que sabía que no podría parar el día que volviera a verlo y por eso lo evitaba. Yo estaba recaliente con ella cada día me parecía más sensual, en plena madurez, lista para gozar.
También con el tiempo caí en la cuenta que tomaba más vino que antes y que eso le soltaba la lengua y le encataba hablar cuando lo hacíamos, a mi eso me calienta pero me incomodaba muchísimo tener que preguntarle, con la dosis justa de vino, era una delicia escucharla. Una de esas noches después de cenar que habíamos cenado con buen vino y en plena faena, como siempre ella como amazona cabalgándome, llena de las marcas de su amante, me confeso que no lo iba a ver más, que el quería ser algo más que un amante, esposo tengo. Yo sentí una especie de alivio, me preocupaba que esta relación fuera algo más fuerte y comprometido.
-Igual quedate tranquilo… entró un medico nuevo a trabajar… estuvimos tomando un café… es casado y medio en broma medio en serio le dije que necesitaba un amante… que el que tenía no me servía… esta casado también… así que eso no es problema… algunos dicen que es medio afeminado que les parece raro… para mi nada que ver pero lo tengo que comprobar… cuando le paso cerca o lo rozo como al descuido siento la reacción de su cuerpo… y me mira el culo para comérselo… no creo que sea gay… tiene unas manos que ya me las imagine amasándome… y dedeandome… haciéndome su puta… quiero ser su puta fácil… no negarle nada… necesito un hombre que me domestique… que me devuelva a mi lugar de hembra… -Yo solo en silencio, escuchando sus ires y venires, no me pude contener y abrí la boca-
-Y porque no lo llamas al señor del registro…
-Te gustaría que lo llame… eh… queres que me haga su puta… ehhh…. Querés que sea la puta de ese señor…. Pedímelo si querés y te lo concedo… -se empezó a mover bien fuerte sobre mi la note agitada, le metí un dedo en el culo y le encanto como siempre que esta caliente- Ya se que vamos a hacer… el día que quieras me llevas a bailar al lugar que va él… le pido a Mary que lo invite y lo encontramos de casualidad… así la conoces a Mary y vemos que podemos hacer… quizás nos lo podamos coger delante tuyo, enfiestarlo entre las dos… te gustaría ver?
-No creo que me guste verte con otro…
-Pero si igual sabes que cojo con otros….
-Ojos que no ven… -De golpe su cara cambió, estaba sonriente-
-Y si no te vuelvo a tocar hasta que no vayamos… que te parece te gustaría… que te deje con el aparatito puesto… y juntando calentura…
-No no me gustaría…
-Y entonces…
-No quiero verlo y menos con ese fulano…
-Te voy a ir acostumbrando de a poco queres… primero ver como me manosean… después verme acariciando una pija… chupandola después con deleite… te gustaría eh…
-No no quiero ver…
-Despacito vas a ir cediendo… me voy a poner en campaña… así podes ser mi compañero… no dejarme sola… cuidarme… -Y tenía dibujada una sonrisa de puta al tiempo que empezó a acabar y moverse como loca sobre mi. Se recostó sobre mi pecho y me besó.
A la semana de eso me dijo que el taxi no daba, que había renunciado su secretaria y que le parecía bueno tener un secretario en el consultorio. Y que mejor que yo, para ser su secretario. Así estaba decidido y así fue. Las primeras semanas fueron tranquilas, no teníamos casi sexo. Ella me tenía cada vez más caliente. Un día me comento que habían apretado un par de veces con el Dr. en una sala del hospital, que había entrado Mary y los había sorprendido. Me dijo que el día siguiente a última hora la iba a visitar en el consultorio, que tenían que charlar un asunto.
Ni que decir que estuve todo el día ido nervioso, después que había entrado la última paciente, sonó el timbre, abrí y entro un señor de bigotes, de uno treinta y pico, me dijo que era el doctor Blanco, que tenía que resolver unos temas con la Dra. Le dije que estaba avisado que tomara asiento, que estaba con la ultima paciente, le avise por el intercomunicador, la paciente salió enseguida y me dijo que lo hiciera pasar al Dr. Yo quede esperando afuera, pasaron como unos treinta o cuarenta minutos, salio el doctor, me dio la mano, me dijo que era un gusto, no sabía que era el esposo y salio. Lo despedí en la puerta y Claudia me llamo, cuando entre en el consultorio estaba apoyada sobre la mesa desnuda de la cintura para abajo, me miro con cara de perra y me hizo acercar, me tomo la mano y la llevo a su concha, estaba encharcada.
-Desnúdate y vení a cogerme… quiero que me cuentes como se siente… la leche de otro hombre en mi… dale movete… -así lo hice la penetre despacio, que rara sensación-
Contame dale como la sentís….
-Esta rellena y se siente muy caliente… -ella me mordió el hombro y empezó a acabar-
-Es la primera vez que me coge… me encanto… es muy fogoso… y atrevido… me encantó no tuvo problemas… le dije que eras mi marido y cerró la puerta con llave y vino como una fiera…. Sentís como me lleno… le exploto la pija… me sacó un orgasmo como pocas veces… vos creo que nunca nada parecido… y te gusta
-Si… esta muy caliente… pero es raro…
-Que es lo raro… que te cojas a la puta de tu mujer… como otras veces no pudiste… después que me cogió Exequiel… por ejemplo… así me dejaba siempre… llena de leche… -la calentura del momento y la acumulada me hicieron no poder aguantar más y los dos llegamos, ella una vez más me abrazó fuerte mientras llegaba.
Pasada la calentura miro la alfombra y se dio cuenta que estaba toda manchada.
-Tenemos que sacar la alfombra y poner algo que te sea más facil de limpiar. Voy al baño y me voy a casa. Tomate un taxi.
Claudia es una perra vengativa 8
Después de la visita del Dr., Claudia estaba transformada estaba caliente como nunca, parecía desesperada, me hacia que le chupara la concha entre pacientes, estaba como descontrolada, no sabía ella tampoco que le pasaba, o eso decía al menos. Cuando estábamos cerca del viernes me dijo que iba a venir a cenar a casa Exequiel, mi cara se transfiguro.
-La nena no va a estar y quiero que me coja estando vos… con el odio que te tiene eso lo va a calentar a full… vas a tomar vino y yo le voy a decir que te di una pastilla para dormir… que me puede coger tranquilo… y vos te vas a dormir en el sillón de un cuerpo del comedor… el de 2 cuerpos lo quiero libre… y se rió.
-Vos estás loca… yo no voy a ver como otro te garcha…
-Mantené los ojos cerrados y listo… si vas a estar dormido…
-No, paremos acá es una locura…
-Me parece que te olvidaste lo que hablamos el primer día que me pediste volver… creo que fui clara… si no tenés ganas de hacer lo que te digo junta tus cosas y mañana mismo te vas…
-Pero…
-Nada… te vas y lo voy a invitar otro día… espero que no este la nena… si la querés tanto hacelo por ella entonces… -Hija de puta, pensé me sentía revuelto y caliente-
Para el viernes se arreglo con unas medias con liguero, vestido corto, zapatos de taco, parecía que fuéramos a salir no a cenar en casa y se puso obviamente los aros redondos que a mi me calentaban. Cerca de las diez sonó el timbre, me pidió que abriera que se estaba terminando de peinar. Me saludo un muchacho que aparentaba unos treinta años, muy morocho, de manos gruesas y ásperas, me pareció notar mucho odio en su mirada.
-hola soy Exequiel… tu señora me invito a cenar…
-Si pasa ponete cómodo… se sentó en el sillón y yo le serví algo de tomar. Cuando claudia termino de arreglarse vino a saludarlo el se puso de pie y se besaron en las mejillas.
-Hola te invite porque tengo muchas cosas importantes que hablar con vos… necesitaba verte… -se quedaron mirando, Claudia giro su cabeza y me dijo- querido porque no vas a la cocina y terminas la cena le voy a mostrar la casa a Exe… Después de un rato los llame a comer. La cena fue una cena normal, yo más que nada escuchaba sus anécdotas hospitalarias y demás, Claudia me sirvió varias veces vino, yo tenía un poco de modorra pero con lo que me esperaba, estaba más que despabilado. En un momento, Exequiel se levanto para ir al baño. Claudia me dijo
-Cuando vuelva deci que estas cansado… y que te vas un rato al sillón… -así paso fingí quedarme dormido, por un rato más charlaron en la cocina. Después vinieron al sillón de dos cuerpos que está justo frente al que yo estaba. Claudia le tomo la mano y se la llevo a su cajeta.
-No tengo ropa interior… sentí que caliente estoy…
-Y si se despierta…
-Tomó mucho… además lo ayude un poco… y se río…
-Que guacha sos… dijo el chabon y la empezó a besar mientras ahora su mano se movía a su antojo, yo miraba de a ratos en la penumbra y con los ojos entrecerrados.
En un momento se puso de pie y libero su pija, era un poco más larga que la mía pero de un grosor impresionante, Claudia se puso de rodillas en el piso y lo miro a los ojos mientras empezaba a jugar con su lengua y su boca por toda ella, lo miraba fijo a los ojos, paraba de a ratos para hablarle.
-Extraño que me cojas… nadie me coje como vos…
-Y porque no te venís conmigo entonces…
-Y el me ayudo a cuidar a la nena… a ella le hace bien… -el se sentó en el sillón y la atrajo de frente a el, subió solo un poco el vestido y ella lo monto acomodando su pija en su gruta en la que fue entrando despacio, de a poco
-Te gusta mi concha…
-Es una delicia… apretadita y jugosa…
-vos me pones jugosa y caliente… te veo y me mojo… estuvieron en silencio un rato largo dándose bien duro, el ritmo crecía cada vez más, Exequiel le mordía el cuello y por momentos la apretaba como asfixiándola, le saco un par de orgasmos seguidos.- si…. Que rico… soy tu puta… tu hembra…. Si que delicia… cogeme fuerte… ahhhhh….ahhhh…. y volvió a estallar… el la volcó sobre el sillón y ahora la taladraba con violencia.- Que rico me cogés… dame duro soy toda tuya… soy tu hembra…
-Me gustaría hacerte un hijo… llenarte de mi leche… y verte llena de mi…
-aaaaaahhhhhhhhh… cogeme…. Fuerte dale…. Me gusta tu pija es la mejor… vos sos mi dueño… -se la saco y se acercó a su boca-
-comemela no encontré ninguna puta que se la trague toda como vos… que no deje un poco de leche sin tragar… -ella lo agarró del culo y lo atrajo hacia ella se la chupo hasta que lo vi que se tensaba. Veía su culo oscuro y Claudia tomaba todo lo que le daba, sin moverse, como la más puta de todas. Me sentía caliente. Quería parar eso, hacer algo. Claudia se la chupo hasta que salió morcillona de su boca el se sentó en el sillón y ella fue a la cocina a buscar algo para tomar. Vino y se sentó junto a él.
Ya pasada la calentura el le decía que no quería verla solo algunas veces, necesitaba tenerla cerca. Que pasaran tiempo juntos. Ella no contestaba. Solo sexo querés.
-No es solo sexo lo nuestro… pero las cosas son como son… podes venir más seguido… quizás lo pueda ir acostumbrando a mi marido…
-A que lo vas a acostumbrar…
-Bueno, no se yo, siempre fui la que domina… de a poco, quizás… puede aceptar que vengas a cogerme… -el la miraba sin entender muy bien- yo le voy a ir mostrando que ya no me satisface como antes… y bueno… eso… si no quiere que me vaya… -la cara del mancebo cambio, se besaban profundamente su pija dura de nuevo. Ella esta vez directamente se fue a chuparla le hizo un buen trabajo, después se puso en cuatro mirando hacia mi lado.- cogeme en cuatro… me encanta sentirme tu perra… dale… y -así fue, la taladro en cuatro los gemidos de Claudia llenaban la casa- si soy tu perra… háceme tu puta… cogeme… entrégame, hace lo que quieras conmigo… estuvieron un montón de tiempo hasta que el volvió a acabar mientras le mordía la nuca con fuerza y ella gemía y gozaba como la más puta. Ella cayo al suelo como estaba y el se quedo acostado sobre ella. Después se compusieron, el se arreglo y salió. Yo me puse de pie, fui al baño y luego a la cama. Después de un rato vino Claudia, me dio un beso muy profundo me metía su lengua con sabor acido en mi boca.
-Te gustó…
-Me siento extraño
-Pensa en lo que le dije… no te vas a hacer más el dormido… vas a dormir en el sillón cuando el me coja en nuestra cama… que descanses, me dio un beso se dio vuelta y se durmió.
Al día siguiente fui a verlo al tal mauro, tenía un taller donde administraba toda una tropa de autos, me dijo que lo había llamado un amigo, lo que tenía que pagar por día y me dio la llave del auto. Los primeros días fueron un poco difíciles pero pronto aprendí, lo que en mucho tiempo me había costado aprender, a callarme, a observar, a que en ciertos lugares la mejor verdad es mentir todo el tiempo con descaro. Y aceptar las mentiras ajenas como verdades. Con Claudia estaba todo muy bien, estaba más que contenta que me adaptara y aceptara trabajar. Aunque no ganaba mucho, me daba placer ganar dinero, había olvidado un poco el placer de hacerlo. Claudia estuvo toda la semana ocupada con su trabajo, no vio a nadie, solo trabajo y familia, el viernes me dijo que cenábamos a la noche, ya que la nena salía nosotros salíamos a cenar. El adminículo me lo saco, lo usaba solo en algunas oportunidades para jugar, resultaba muy incomodo para trabajar, a ella le alcanzaba conque tuviera su llave colgada en el cuello. Era un símbolo para nosotros, igual lo usaba algunas veces como un juego. Ese viernes que fuimos a cenar fue lo primero que hizo, ponérmelo, mientras se arreglaba para salir, estaba deslumbrante, con transparencias, parecía una modelo, me moría de calentura. ella me miraba sonriente, fuimos en su auto a cenar a un restaurante muy elegante, cenamos en silencio acariciándonos las manos, y charlando suavemente. En un momento ella me dijo algo así:
-Quiero que entiendas que en lo que pasa y pasará no hay nada personal con vos... necesito explorar esto que siento dentro... por momentos me siento una puta... una hembra fácil... me encanta que me traten como tal... y con vos no podría... te amo de otra manera... -yo aproveche y use mis nuevos conocimientos de guardar silencio. Ella me acaricio la cara un momento solamente. En ese mismo momento lo llamo al mozo y empezó a coquetear con el se hacia la niña ingenua, el mozo se acercaba lo más posible sin perder su ubicación claro, era un mozo, la vista de sus pechos era privilegiada desde su posición, Claudia tomo la servilleta y le rozo la pierna al mozo, como si fuera un descuido, y ese solo gesto me calentó muchísimo, yo sabía que no era sin querer, nada de lo que hacía era sin querer. Después de cenar fuimos a un hotel, yo pensé que tendría algún plan mas retorcido, cogimos como siempre lo hacemos con mucha pasión, los dos disfrutamos muchísimo, el vino le había soltado la lengua, se monto sobre mi con su ropa interior puesta. y mientras yo callaba ella hablaba en mi oído suavemente, clavada sobre mi.
-El señor que nos dio el registro tiene una mano bárbara... esta semana me llamo... no te había dicho nada... me espera el lunes... me vas a llevar con tu taxi... y me vas a esperar... sabiendo que mientras esperas me van a estar recogiendo... como a la más puta... -yo solo gemía y la clavaba aguantando y haciendo que parara de moverse si estaba muy cerca de llegar.
y lo que te dije antes... nada personal... pero soy mucha hembra para vos... al final entendí a la puta de mi amiga Mary... te la voy a presentar... es una enfermera... la amo también... -se quedo quieta sobre mi mientras solo nos besamos por un tiempo que pareció eterno, solo los dos así abrazados, clavada ella en mi besándonos, di gracias mentalmente. al infinito y las estrellas.
-Está bueno que entiendas que me tenes que compartir... aceptar tu lugar... que es el que yo te de... siempre... en todo momento... no quiero que llegues... se irguió sobre mi y su pechos se sacudieron miro hacia arriba para tomar aire bien profundo abriendo su garganta y tuvo un profundo orgasmo, cayo sobre mi y se quedo muy melosa besándome, se salió de arriba mío. y se acostó a mi lado. Descansamos un rato eran cerca de las 300 de la mañana. Descanso un rato, tomo su celular y lo llamo a Exequiel.
-Hola como estás... fuiste a bailar al final... te busco a las 0700 y desayunamos juntos... te voy a chupar la pija hasta la ultima gota... como a vos te gusta... -mi pija seguía dura como una piedra.- Vamos a tu departamento... queres... no la cola no me gusta ya sabes... algún día quizás... ahora no... no me hagas hablar de eso que me da vergüenza... te busco a las 0700 dale... para que anoto... y después de anotar corto. Nos bañamos juntos me acariciaba, yo tenia una cara rara, me sentía muy molesto, quería terminar la noche con ella.
Me llevó con el auto a casa, se quedó un rato y se fue. Antes de irse me colocó el aparatito.
-Estás muy caliente... sos un peligro... -después de ponerlo me beso profundamente dándome lengua bastante tiempo, se me ponía dura y me molestaba muchísimo. Ella salió de la habitación, me pidió que no me olvidara que cerca del mediodía venía la nena. Yo fui al cementerio a llevarle flores a papá. Ya sabes para quien llame fui al cementerio.
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Así fue, me acosté tratando de descansar, pero estaba tan caliente que se me ponía dura y la molestia me hacía despertarme, finalmente me dormí y no me desperté hasta que cerca del mediodía escuche la puerta, era Lucía que volvía, me levante a preparar el almuerzo, Lucía me contó que estaba de novia, que estaba recontenta, se sentía muy feliz y muy cuidada por su chico, era el amor de su vida... etc. etc., etc., la adolescencia pensé y me reí por dentro. Me pregunto por su mama y le dije que había ido al cementerio a ver al papá, no podía evitar que la parte más vulgar mía pensara si hija de puta te la están enterrando a la vez que sentía que se me ponía dura y el dolor me hacía buscar otras imágenes en que refugiarme, pero era una obsesión no podía parar de imaginar como la estarían montando que le diría que harían, me volaba la cabeza pero la molestia del aparatito, me hacía cambiar de ideas. Claudia llegó cuando casi estaba el almuerzo, parecía que venía del cementerio, cara de cansada, una ropa común, donde se habrá cambiado pensé.
Se quedo charlando un largo rato con Lucía en la sala mientras yo terminaba la comida. Después almorzamos todos juntos y Claudia dijo que iba a dormir un rato que la despertara más tarde, cuando la fui a despertar estaba desnuda en la cama tapada solo con la sabana, le acaricie todo el cuerpo con detenimiento y se despertó sonriente, me dijo que cerrara la puerta y me acostara boca arriba en la cama. Jugó con mis pelotas un rato antes de sacarme el aparato, mi pija dio un respiro, estaba bien dura no había podido acabar, me sentía demasiado caliente, Claudia evaluando la situación me puso un forro, quería obviamente que pudiera aguantar mas, me monto despacito y vino con su boca a buscar la mía, no se movía solo nos besábamos muy suavemente comiendo nuestras bocas y enganchados como estábamos, paro de besarme y se acercó a mi oído.
-Hoy si querés me podes preguntar algo y te cuento… lo que quieras saber… -yo no conteste, me avergonzaba hablar.- No te gustaría saber nada… -dijo en un susurro junto a mi oído-
-Me avergüenza preguntar… -me beso nuevamente y nos besamos otro largo rato y después volvió a mi oído-
-Exe no me da tiempo a nada… casi me arranca la ropa cuando llego, me amasa caliente… desbocado como un potro y desnuda me tira sobre la cama… -yo me quede mas quieto todavía, estaba muy cerca de llegar.- se desnuda el y enseguida me esta montando… me da duro… está muy enojado porque volviste y se le nota… me lo quiere hacer sentir… quiere que sienta bien su dureza… me dice que quiere mi culo y siempre se lo niego… después muchas veces me pone de perrito en la cama y asi me coge… me da bien duro… me pide dármela por el culo y se lo niego… pero cada vez me pongo más caliente… las ultimas veces que pregunta le digo un no que el no alcanza a interpretar… es un siiii profundo… pero no se da cuenta…. y me rió por dentro porque estoy más que entregada… podría hacer lo que quiera conmigo en esos momentos… y no se da cuenta… -paró de hablarme y nos besamos otro largo rato, se salió de encima mío y quedamos besándonos un montón de tiempo más. Después de descansar un rato me volvió a montar.
-Después que acaba… y cuando se acuesta en la cama… se la voy a chupar… se la gasto a chupadas en seguida se le pone dura… ya no me pide la cola… me lo cojo un rato como me gusta estando arriba y después lo dejo que me llené la boca… que me de todo lo que tiene… se la paladeo y la trago toda… toda la que me da… -en ese instante mismo explote, con una mezcla profunda de sentimientos. Nos quedamos besándonos y acariciándonos, un rato que pareció eterno.
A la mañana siguiente se arreglo preciosa con una pollera entallada, una remera musculosa semitransparente, zapatos de taco alto y fuimos hacia donde me habían dado el registro, al encuentro con el fulano. Ella quiso que la esperara en el auto, bajo sola, mi cabeza estaba en las nubes, en algunos momentos gente me hacía seña preguntando si estaba libre y no me daba cuenta tenía la cabeza a mil kilómetros de distancia. Paso cerca de una hora hasta que volvió al auto. Su cara estaba seria, no hablo ni dijo nada. me pidió que la llevara a casa que quería darse una ducha. Pensé que me iba a hacer algún comentario pero se la veía sería, relajada pero sería y sobretodo muy revuelta. En casa se fue a la ducha y tardó como una hora. Cuando estaba por salir me pidió que fuera al baño, la ayude a secarse me pidió que la abrazara fuerte, lo hice, algunas lagrimas cayeron de sus mejillas. Pero no se la veía triste. Después se vistió tranquila y me pidió que la llevara al hospital. Pasaron casi dos semanas en las que nuestra vida se transformo en la rutina de una familia normal. Ella estaba casera como nunca, salíamos al cine, cuando podíamos, a cenar, muchas veces Con Lucía y a veces solos. Fueron como unas vacaciones en nuestra rutina. Yo sentía que ella iba volviendo de a poco de donde fuera que había estado. Era viernes en la noche, Lucía había salido y cenábamos solos Claudia me miró y me dijo que se sentía muchísimo mejor y que tenía ganas de contarme lo que había pasado en la oficina de este señor. Pero me dijo que me lo iba a contar algún día pero en la cama. Antes que volviera a verlo, porque seguramente lo haría y no dentro de mucho tiempo.
Esa misma noche al acostarnos me monto enseguida, volaba de calentura, se clavo sobre mi y me vino a besar la boca enseguida y luego paso a mi oído. Sin moverse sobre mi solo con un susurro en mi oído.
-Esa mañana que lo fuimos a ver… entre caminando sensualmente a su despacho… me pidió que caminara más que era muy elegante para caminar… me dijo que era una puta fina… que mi amiga Mary tenía un ojo bárbaro… me hizo caminar un rato y luego tomo un trapo largo que tenía en su escritorio y vino hacia mi… me ato las manos a las espalda y desde atrás me acaricio lentamente… mi respiración se ponía mas agitada me fue empujando hacia el escritorio mientras me susurraba al oído como yo te susurro a vos ahora… si viniste a esta hora un lunes hasta acá… no es porque busques pija… otra cosa estás buscando una experiencia distinta… alguien que te encarrile… que te ordene… y por eso la puta de Mary te mando conmigo… mi respiración era mas agitada… el me apoyo boca abajo en su escritorio… levanto mi pollera y metió sus dedos por debajo de mi tanga… no me equivoco… estas encharcada… saco su miembro del pantalón y se puso detrás mío solo jugando con la punta de su pija en la puerta de mi conchita… se inclino sobre mi y me hablo al oído… ahora podría llamar a un asistente para enfiestarte y no pondrías el menor reparo… pero no es el momento todavía… yo ni me movía estaba entregada… me la dejo ir de una y se quedo quieto sobre mi… tiene una influencia tremenda sobre mí… me sentía suya… toda suya… me bombeaba muy suave pero muy profundo… me agarro los pelos y me hizo una colita… pero con mucha suavidad… después me chupaba detrás de la oreja y de a ratos me decía cosas sucias… después me soltó las manos que tenía atadas… se incorporó un poco dejo caer saliva en mi culo y empezó a jugar con su dedo gordo en el… después sentí como apoyaba la punta de su pija y me metía primero y suave la cabeza… para ir dejándomela entrar de a poco… paso sus manos por debajo de mis pechos agarrándome de los hombros… te monto como a una perra… move la cola perrita… dale… move… y yo me movía tratando de que me la metiera más adentro… que se calentara más… estuvimos así una eternidad… el me la dejaba bien duro y me serruchaba de a ratos… hasta que en un momento se tensó y me la clavo bien al fondo… me descargo toda su leche en mi culo. Dejo que salga sola y tomándome del pelo me hizo arrodillar delante de el… de su pija… y sin que me diga nada supe lo que tenía que hacer y se la chupe hasta que me hizo parar… me puso de pie… y salió de la oficina sin decir palabras. Después Salí yo.
Claudia es una perra vengativa 7
Pasaron varios meses en que todo siguió mas o menos igual, Claudia siguió con Exequiel, no volvió a verlo al señor del registro, me pareció que tenía algo semejante a miedo, no quería pasar cierto limite, en realidad lo temía pero lo deseaba. Creo que sabía que no podría parar el día que volviera a verlo y por eso lo evitaba. Yo estaba recaliente con ella cada día me parecía más sensual, en plena madurez, lista para gozar.
También con el tiempo caí en la cuenta que tomaba más vino que antes y que eso le soltaba la lengua y le encataba hablar cuando lo hacíamos, a mi eso me calienta pero me incomodaba muchísimo tener que preguntarle, con la dosis justa de vino, era una delicia escucharla. Una de esas noches después de cenar que habíamos cenado con buen vino y en plena faena, como siempre ella como amazona cabalgándome, llena de las marcas de su amante, me confeso que no lo iba a ver más, que el quería ser algo más que un amante, esposo tengo. Yo sentí una especie de alivio, me preocupaba que esta relación fuera algo más fuerte y comprometido.
-Igual quedate tranquilo… entró un medico nuevo a trabajar… estuvimos tomando un café… es casado y medio en broma medio en serio le dije que necesitaba un amante… que el que tenía no me servía… esta casado también… así que eso no es problema… algunos dicen que es medio afeminado que les parece raro… para mi nada que ver pero lo tengo que comprobar… cuando le paso cerca o lo rozo como al descuido siento la reacción de su cuerpo… y me mira el culo para comérselo… no creo que sea gay… tiene unas manos que ya me las imagine amasándome… y dedeandome… haciéndome su puta… quiero ser su puta fácil… no negarle nada… necesito un hombre que me domestique… que me devuelva a mi lugar de hembra… -Yo solo en silencio, escuchando sus ires y venires, no me pude contener y abrí la boca-
-Y porque no lo llamas al señor del registro…
-Te gustaría que lo llame… eh… queres que me haga su puta… ehhh…. Querés que sea la puta de ese señor…. Pedímelo si querés y te lo concedo… -se empezó a mover bien fuerte sobre mi la note agitada, le metí un dedo en el culo y le encanto como siempre que esta caliente- Ya se que vamos a hacer… el día que quieras me llevas a bailar al lugar que va él… le pido a Mary que lo invite y lo encontramos de casualidad… así la conoces a Mary y vemos que podemos hacer… quizás nos lo podamos coger delante tuyo, enfiestarlo entre las dos… te gustaría ver?
-No creo que me guste verte con otro…
-Pero si igual sabes que cojo con otros….
-Ojos que no ven… -De golpe su cara cambió, estaba sonriente-
-Y si no te vuelvo a tocar hasta que no vayamos… que te parece te gustaría… que te deje con el aparatito puesto… y juntando calentura…
-No no me gustaría…
-Y entonces…
-No quiero verlo y menos con ese fulano…
-Te voy a ir acostumbrando de a poco queres… primero ver como me manosean… después verme acariciando una pija… chupandola después con deleite… te gustaría eh…
-No no quiero ver…
-Despacito vas a ir cediendo… me voy a poner en campaña… así podes ser mi compañero… no dejarme sola… cuidarme… -Y tenía dibujada una sonrisa de puta al tiempo que empezó a acabar y moverse como loca sobre mi. Se recostó sobre mi pecho y me besó.
A la semana de eso me dijo que el taxi no daba, que había renunciado su secretaria y que le parecía bueno tener un secretario en el consultorio. Y que mejor que yo, para ser su secretario. Así estaba decidido y así fue. Las primeras semanas fueron tranquilas, no teníamos casi sexo. Ella me tenía cada vez más caliente. Un día me comento que habían apretado un par de veces con el Dr. en una sala del hospital, que había entrado Mary y los había sorprendido. Me dijo que el día siguiente a última hora la iba a visitar en el consultorio, que tenían que charlar un asunto.
Ni que decir que estuve todo el día ido nervioso, después que había entrado la última paciente, sonó el timbre, abrí y entro un señor de bigotes, de uno treinta y pico, me dijo que era el doctor Blanco, que tenía que resolver unos temas con la Dra. Le dije que estaba avisado que tomara asiento, que estaba con la ultima paciente, le avise por el intercomunicador, la paciente salió enseguida y me dijo que lo hiciera pasar al Dr. Yo quede esperando afuera, pasaron como unos treinta o cuarenta minutos, salio el doctor, me dio la mano, me dijo que era un gusto, no sabía que era el esposo y salio. Lo despedí en la puerta y Claudia me llamo, cuando entre en el consultorio estaba apoyada sobre la mesa desnuda de la cintura para abajo, me miro con cara de perra y me hizo acercar, me tomo la mano y la llevo a su concha, estaba encharcada.
-Desnúdate y vení a cogerme… quiero que me cuentes como se siente… la leche de otro hombre en mi… dale movete… -así lo hice la penetre despacio, que rara sensación-
Contame dale como la sentís….
-Esta rellena y se siente muy caliente… -ella me mordió el hombro y empezó a acabar-
-Es la primera vez que me coge… me encanto… es muy fogoso… y atrevido… me encantó no tuvo problemas… le dije que eras mi marido y cerró la puerta con llave y vino como una fiera…. Sentís como me lleno… le exploto la pija… me sacó un orgasmo como pocas veces… vos creo que nunca nada parecido… y te gusta
-Si… esta muy caliente… pero es raro…
-Que es lo raro… que te cojas a la puta de tu mujer… como otras veces no pudiste… después que me cogió Exequiel… por ejemplo… así me dejaba siempre… llena de leche… -la calentura del momento y la acumulada me hicieron no poder aguantar más y los dos llegamos, ella una vez más me abrazó fuerte mientras llegaba.
Pasada la calentura miro la alfombra y se dio cuenta que estaba toda manchada.
-Tenemos que sacar la alfombra y poner algo que te sea más facil de limpiar. Voy al baño y me voy a casa. Tomate un taxi.
Claudia es una perra vengativa 8
Después de la visita del Dr., Claudia estaba transformada estaba caliente como nunca, parecía desesperada, me hacia que le chupara la concha entre pacientes, estaba como descontrolada, no sabía ella tampoco que le pasaba, o eso decía al menos. Cuando estábamos cerca del viernes me dijo que iba a venir a cenar a casa Exequiel, mi cara se transfiguro.
-La nena no va a estar y quiero que me coja estando vos… con el odio que te tiene eso lo va a calentar a full… vas a tomar vino y yo le voy a decir que te di una pastilla para dormir… que me puede coger tranquilo… y vos te vas a dormir en el sillón de un cuerpo del comedor… el de 2 cuerpos lo quiero libre… y se rió.
-Vos estás loca… yo no voy a ver como otro te garcha…
-Mantené los ojos cerrados y listo… si vas a estar dormido…
-No, paremos acá es una locura…
-Me parece que te olvidaste lo que hablamos el primer día que me pediste volver… creo que fui clara… si no tenés ganas de hacer lo que te digo junta tus cosas y mañana mismo te vas…
-Pero…
-Nada… te vas y lo voy a invitar otro día… espero que no este la nena… si la querés tanto hacelo por ella entonces… -Hija de puta, pensé me sentía revuelto y caliente-
Para el viernes se arreglo con unas medias con liguero, vestido corto, zapatos de taco, parecía que fuéramos a salir no a cenar en casa y se puso obviamente los aros redondos que a mi me calentaban. Cerca de las diez sonó el timbre, me pidió que abriera que se estaba terminando de peinar. Me saludo un muchacho que aparentaba unos treinta años, muy morocho, de manos gruesas y ásperas, me pareció notar mucho odio en su mirada.
-hola soy Exequiel… tu señora me invito a cenar…
-Si pasa ponete cómodo… se sentó en el sillón y yo le serví algo de tomar. Cuando claudia termino de arreglarse vino a saludarlo el se puso de pie y se besaron en las mejillas.
-Hola te invite porque tengo muchas cosas importantes que hablar con vos… necesitaba verte… -se quedaron mirando, Claudia giro su cabeza y me dijo- querido porque no vas a la cocina y terminas la cena le voy a mostrar la casa a Exe… Después de un rato los llame a comer. La cena fue una cena normal, yo más que nada escuchaba sus anécdotas hospitalarias y demás, Claudia me sirvió varias veces vino, yo tenía un poco de modorra pero con lo que me esperaba, estaba más que despabilado. En un momento, Exequiel se levanto para ir al baño. Claudia me dijo
-Cuando vuelva deci que estas cansado… y que te vas un rato al sillón… -así paso fingí quedarme dormido, por un rato más charlaron en la cocina. Después vinieron al sillón de dos cuerpos que está justo frente al que yo estaba. Claudia le tomo la mano y se la llevo a su cajeta.
-No tengo ropa interior… sentí que caliente estoy…
-Y si se despierta…
-Tomó mucho… además lo ayude un poco… y se río…
-Que guacha sos… dijo el chabon y la empezó a besar mientras ahora su mano se movía a su antojo, yo miraba de a ratos en la penumbra y con los ojos entrecerrados.
En un momento se puso de pie y libero su pija, era un poco más larga que la mía pero de un grosor impresionante, Claudia se puso de rodillas en el piso y lo miro a los ojos mientras empezaba a jugar con su lengua y su boca por toda ella, lo miraba fijo a los ojos, paraba de a ratos para hablarle.
-Extraño que me cojas… nadie me coje como vos…
-Y porque no te venís conmigo entonces…
-Y el me ayudo a cuidar a la nena… a ella le hace bien… -el se sentó en el sillón y la atrajo de frente a el, subió solo un poco el vestido y ella lo monto acomodando su pija en su gruta en la que fue entrando despacio, de a poco
-Te gusta mi concha…
-Es una delicia… apretadita y jugosa…
-vos me pones jugosa y caliente… te veo y me mojo… estuvieron en silencio un rato largo dándose bien duro, el ritmo crecía cada vez más, Exequiel le mordía el cuello y por momentos la apretaba como asfixiándola, le saco un par de orgasmos seguidos.- si…. Que rico… soy tu puta… tu hembra…. Si que delicia… cogeme fuerte… ahhhhh….ahhhh…. y volvió a estallar… el la volcó sobre el sillón y ahora la taladraba con violencia.- Que rico me cogés… dame duro soy toda tuya… soy tu hembra…
-Me gustaría hacerte un hijo… llenarte de mi leche… y verte llena de mi…
-aaaaaahhhhhhhhh… cogeme…. Fuerte dale…. Me gusta tu pija es la mejor… vos sos mi dueño… -se la saco y se acercó a su boca-
-comemela no encontré ninguna puta que se la trague toda como vos… que no deje un poco de leche sin tragar… -ella lo agarró del culo y lo atrajo hacia ella se la chupo hasta que lo vi que se tensaba. Veía su culo oscuro y Claudia tomaba todo lo que le daba, sin moverse, como la más puta de todas. Me sentía caliente. Quería parar eso, hacer algo. Claudia se la chupo hasta que salió morcillona de su boca el se sentó en el sillón y ella fue a la cocina a buscar algo para tomar. Vino y se sentó junto a él.
Ya pasada la calentura el le decía que no quería verla solo algunas veces, necesitaba tenerla cerca. Que pasaran tiempo juntos. Ella no contestaba. Solo sexo querés.
-No es solo sexo lo nuestro… pero las cosas son como son… podes venir más seguido… quizás lo pueda ir acostumbrando a mi marido…
-A que lo vas a acostumbrar…
-Bueno, no se yo, siempre fui la que domina… de a poco, quizás… puede aceptar que vengas a cogerme… -el la miraba sin entender muy bien- yo le voy a ir mostrando que ya no me satisface como antes… y bueno… eso… si no quiere que me vaya… -la cara del mancebo cambio, se besaban profundamente su pija dura de nuevo. Ella esta vez directamente se fue a chuparla le hizo un buen trabajo, después se puso en cuatro mirando hacia mi lado.- cogeme en cuatro… me encanta sentirme tu perra… dale… y -así fue, la taladro en cuatro los gemidos de Claudia llenaban la casa- si soy tu perra… háceme tu puta… cogeme… entrégame, hace lo que quieras conmigo… estuvieron un montón de tiempo hasta que el volvió a acabar mientras le mordía la nuca con fuerza y ella gemía y gozaba como la más puta. Ella cayo al suelo como estaba y el se quedo acostado sobre ella. Después se compusieron, el se arreglo y salió. Yo me puse de pie, fui al baño y luego a la cama. Después de un rato vino Claudia, me dio un beso muy profundo me metía su lengua con sabor acido en mi boca.
-Te gustó…
-Me siento extraño
-Pensa en lo que le dije… no te vas a hacer más el dormido… vas a dormir en el sillón cuando el me coja en nuestra cama… que descanses, me dio un beso se dio vuelta y se durmió.
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