La nena de la familia Parte 10 -Remasterizada-

Capitulo Veinte

Aun con eso seguía sin entender del todo la situación. ¿Que carajos estaba pasando? Jazmín era extraña… y muy inteligente. Nunca dejaba nada al azar. Y este parecía ser un plan perfectamente orquestado por ella. ¿Seria este el final que ella quería? La voz de la razón dentro de mi cabeza me decia que algo estaba mal, que esto no era algo normal. Pero mi lado perverso no paraba de decirme “tranquilizate y disfruta”. Era como en esos programas de concursos por tv, donde podes retirarte victorioso o ir por mas y perder todo. ¿Era momento de retirarme, tirar la toalla y poder presumir de mis logros? Porque había llegado lejos en todo sentido, me enamore de una de ellas y gracias a eso conocí a las otras dos... pude estar con las tres... y... si tenia que admitirlo, me enamore de otra en el transcurso de toda la historia... ¡Pero estuve con las tres! ¿Quien se podía jactar de algo así? Me sentí orgulloso de mi mismo por todo esto... pero... pero ahí estaba la puerta. Podia irme y escapar de esta escena dantesca. Esto era una cosa de locos y en una de esas terminaba mal...
No.
No podia irme.
Tenia que saber que pasaría cuando volvieran las tres hermanas.
Me las jugaba a todo o nada. ¿Si había logrado tanto, porque retirarme ahora?
Saque un cigarrillo y lo encendí. Nunca fui de fumar mucho pero la situación lo ameritaba. No se que se tramaban las tres hermanas. Pero había algo que no me cerraba. Y lo que me molestaba era que no tenía el control. Pero había algo mas que no entendía. Todo esto era demasiado perfecto. No era normal. No podía ser que yo este a punto de tener sexo con las tres hermanas a la vez. Era irreal. Mire mi verga, seguía durísima. Que sea lo que dios quiera.
-Aunque no lo entiendas, disfrútalo- Dije mirando a mi verga recordando las palabras de Luciana. Estas cosas no le pasan seguido a cualquiera. Y tenia que aprovecharlo. Al fin y al cabo estaba a punto de estar con las tres hermanas a la vez. Y era un logro increíble. No podía creer que hubiera llegado tan lejos.
Escuche ruidos en las escaleras. Y lo que vi me dejo atónito. Quede con la boca abierta con lo que vi. Las tres hermanas bajaban en fila por las escaleras. Era... como decirlo... era un sueño húmedo hecho realidad. Sinceramente en ese momento dude de mi cordura. Jazmín, Jessie y Luciana estaban vestidas con sus uniformes del colegio. Luciana tenia uno tan ajustado que en la parte de las tetas no cerraban los botones. La falda tableada era tan corta que podía ver su tanga al caminar. Jessie tenia su uniforme, pero este seguramente era de años anteriores, le quedaba absolutamente fantástico. No era holgado como siempre, era algo ajustado... ese uniforme me enloquecía. Y Jazmín… ver a Jazmín con ese uniforme era como volver al pasado. Ese uniforme que me enamoro y tanto me excitaba vérselo puesto. Corto, ajustado, sexy. Las tres peinadas con dos trencitas a los costados de sus cabezas. Las tres vestidas de colegialas. Esto no podía ser real. Yo ya no estaba en mis cabales, lo que veía no podía ser real.
Jazmín traía una caja en la mano. La dejo a un costado y se quedo mirándome fijamente. Sentí que me analizaba. Luciana se acerco a mí sonriendo. Yo estaba duro de la emoción. Jessie se acerco tímidamente, no me miraba a los ojos. Jazmín se acerco. Jessie me miro y sostuvo la mirada. Las tres tenían una mirada perversa. Sonreían como si yo fuera su juguete. Hasta Jessie, parecia otra persona. Comenzaron a tocarme por todo el cuerpo. Sentía todas esas manos sobre mí y era como recibir el masaje de los dioses. Yo estaba parado en medio del living. Las tres rubias giraban a mi alrededor danzando y tocándome por todos lados. Me quede quieto para saber a donde querían llegar. Tenia miedo de que si hacia algo esa magia se rompiera. Luciana comenzó a sacarme la remera. Jessie se arrodillo y me sacaba mis zapatillas. Jazmín me abrazo por detrás y bajo mis pantalones. Entre las tres me dejaron completamente desnudo. Intente tocarlas pero no pude. Cada vez que me quería mover las chicas no me dejaban.
-Quietito…- Decían y seguían tocándome ellas. Jessie trajo una silla y me sentaron en ella. No se cuanto tiempo estuve así. Sentí besos de Jazmín en mi cuello. Vi como Luciana agarraba una de mis manos y chupaba mis dedos golosa. Jessie lamió mi lóbulo de la oreja. Me perdí y cerré los ojos. Si tenia que morir que sea de esa manera por favor. Recorrían todo mi cuerpo. Sentía sus labios por todos lados provocandome sensaciones increíbles. Pero no tocaban mi miembro.
-Tranquilo... el postre es para el final...- Dijo Jazmín jadeando en mi oído.
Mi verga latía furiosa. Cuando ya no aguantaba más y quise tocarlas, note que no podía. Intente mover mis brazos pero no pude. Me había perdido tanto en las sensaciones que no note sus verdaderas intenciones. Las tres hermanas me habían atado.
-Pongamos algo de música- Dijo Luciana y Jessie troto hasta el equipo de música. Comencé a ponerme algo nervioso. Bueno lo admito,me asuste un poco. Un rock tranquilo comenzó a sonar en todo el living. Las tres hermanas parecían saber exactamente lo que hacían. Incluso Jessie. Jazmín cerrando los ojos comenzó a bailar lentamente meneando sus caderas. Luciana se acerco por delante y la tomo por la cintura. Jessie la tomo por detrás. Las tres se movían al compás de la música contoneando sus cuerpos. Jessie y Luciana apretaban a Jazmín contra ellas. Se me fue todo susto que podía tener. Ver a las tres hermanas menearse de esa manera quitaría el hipo a cualquiera.
-Esto es divertido…- Susurro Jessie pero la escuche. Las tres me miraban. Las tres hermanas con una cara de vicio, de malicia, de que tenían todo el control sobre mí. La única que seguía siendo igual era Luciana. Jessie y Jazmín parecían otra persona. El angelito inocente de Jessie ya no estaba. Ni la gatita elegante de Jazmín. Eran tres perras provocándome. Y lo estaban logrando.
-Mmmmmm…- Jadeaban mientras refregaban sus cuerpos. Se tocaban entre ellas. Luciana metía sus manos bajo la camisa de Jazmín mientras pasaba la lengua por su cuello. Jessie acariciaba las piernas de Jazmín metiéndolas bajo la falda tableada. Todo esto sin dejar de mirarme. Las tres querían que viera todo.
-Miren… el torito quiere soltarse..- Comento Luciana. Yo hacia fuerza para soltarme pero no podía. Jazmín y Jessie rieron la verme así. ¿Porque Jessie se comportaba así? No la vi tomar alcohol ni nada. Y ni hablar de Jazmín. Pero... verlas así me ponía de una manera… quería romper mis amarras e ir hacia ellas y castigarlas con mi verga.
Estaba enloqueciendo de verlas tocarse. Dios… Ahora comenzaban a besarse. Luciana comenzó a besar a Jazmín… Jazmín luego agarro a Jessie y la arrojo sobre el sillón. Jessie rió divertida. Sus dos hermanas mayores se sentaron una a cada lado. Comenzaron a mandarle mano a Jessie por todos lados. Luciana lamia su cuello y subía hasta su oreja. Jazmín comenzó a besarla en los labios… Mi verga temblaba, necesitaba ya ir con ellas, quería penetrarlas, quería cogerlas ahora.
Las tres chica me miraron riendo mientras se tocaban y besaban entre ellas. Una a una se fueron bajando del sillón. Las tres hermanas ahora venían hacia mí. Las tres con esa mirada devoradora de hombres. Luciana se coloco a un lado mío y comenzó a tocarme el pecho. Jessie a mi otro costado y comenzó a tocarme el pelo. Jazmín se coloco entre mis piernas. Pero no agarro mi verga. Solo paso su dedo sobre ella haciéndome delirar.
-Te voy a contar un secreto…- Dijo Jazmín mientras pasaba su dedo por mi verga tiesa.
-Yo... yo sabía todo esto antes de que vos hicieras algo…- Continuo Jazmín mirándome fijamente con una sonrisa que conocía muy bien. Sonreía de esa manera cuando ganaba.
-¿Como…?- No entendía.
-¿No te acordás de esto: “no te gustaría coger con mis hermanas?”, te acordás?- Vinieron a mi mente las veces que teniendo sexo con Jazmín ella me decía esas cosas. Jazmín soltó una carcajada al ver mi cara confundida.
-Jamas te cuestionaste, ni siquiera me propusiste aunque sea una vez en serio de hacer un trío con mis hermanas....- Continuo Jazmín.
-Un cuarteto... eso es ahora...- La corrigió Luciana. Jessie rio divertida. Era verdad, Jazmín siempre decia esas cosas a la hora del sexo. ¿Me había lavado el cerebro?
-¿Puedo jugar con tu novio? Pregunte un día a Jazmín… y ella acepto...- Dijo Luciana masajeando mi pecho.
-Provocalo... quiero saber hasta donde llega... Eso le dije a Jessie hace un tiempo…- Continuo Jazmín.
-Yo acepte… me gustabas mucho… de verdad me gustabas mucho- Me susurro Jessie al oído.
-¿Te creías Don Juan de Marco conquistando a tres hermanas? ¿Pensaste que eras un macho alfa conquistando a tres lindas hermanas? -Dijo riendo Jazmín, agarro mi verga y la apretó con fuerza.
-Todo fue planeado… y todo salio exactamente como queríamos... - Dijo Luciana riendo.
-Desde mucho antes de lo que pensás... nada... nada de esto fue idea tuya... todo que paso fue porque queríamos que pasara...- Continuo Jazmín triunfante. Mi cabeza daba vueltas.
No podía creer lo que estaba escuchando. ¿Todo era un plan de ellas? Ahora todo cerraba. Ahora sabía porque todo era tan irreal. Porque era todo tan perfecto.

Simplemente nada era real.



Capitulo Veintiuno

Quede ahí sentado, atado y con la verga dura de viagra. ¿Así que todo era un plan maléfico de novela de misterio? ¿Nada fue real? ¿Desde cuando fue así? Sentí una enorme sensación de estafa. Mi lado machista creía... se sentía bien el saber que pude conquistar tres hermanas... Me sentí manejado, usado... llegar a la final de la carrera para saber que nunca corrí.... Ahora toda mi creencia de mis logros machistas se desinflaba... Después de lo que dijeron estuve en silencio sin saber bien que decir.
-¿De que te sorprendes? Pensé que ya te habías dado cuenta… - Dijo Jazmín sonriendo mientras abrazaba a Jessie desde atrás, manoseandola. -...Deberias ver tu cara...- Jazmín lo estaba disfrutando muchísimo.
-Te di varias pistas y nada, cabeza dura dura- Dijo Luciana riendo muy divertida. Jessie solo miraba todo con una mirada extraña, analizandome. No sabía bien que pasaba por su cabeza. Yo solo pensaba en algo: ¿No era real lo que tenia con Jessie? ...yo...yo... yo estaba enamorado de ella... ¿Nada era real?
-¿Estas pensando que somos una perversas enfermas no?- Dijo Jazmín también riendo mientras empujaba a Jessie. La hizo arrodillarse frente a mí. Mire a Jessie, ella me miro fijo con sus enormes ojos celestes. Luego bajo la mirada y se mordió el labio inferior.
-Yo…- Balbuceé -… Si, va no… no se… - Luciana reía muy divertida de la situación y de mi desconcierto.
-A ver como chupa la nena de la familia…- Dijo Jazmín empujando la cabeza de Jessie hacia mi verga. Jessie sabia que hacer. Abrió su boca y engullo mi verga. Podría estar confundido, hasta podría estar enojado de la situación. Pero los labios de Jessie sobre mi verga, sentir su lengua me proporcionaban un placer que nadie mas podía darme. Jazmín empujo su cabeza hasta que trago mi verga completamente. Jessie casi se ahoga.
-¡Huy dios, ustedes hacen todo tan lento!- Dijo Luciana corriendo a Jessie. Jessie tosió y chorreo saliva cuando mi verga salio de su garganta. Luciana paso su pierna sobre mi y sin preámbulos se sentó sobre mi verga. No tenía nada bajo la falda tableada. Se la enterró en su vagina sin más. Y así como se sentó comenzó a cabalgarme rápidamente. Sus tremendas tetas se bamboleaban hacia arriba y abajo en su montada. Al ritmo que lo hacia no iba a poder aguantar mucho sin acabar.
-Sos nuestro juguete... nuestro... - Dijo jadeando Luciana mientras se abría la camisa y dejaba sus enormes tetas libres. Mientras me montaba se pellizcaba los pezones con furia.
-Como me gusta andar en caballito- Comentaba Luciana mientras mi verga entraba y salía cada vez a más velocidad. Jazmín sostenía a Jessie, pareciera que tenia miedo de que se escape o algo. La abrazaba desde atrás y la agarraba de las tetas. Las masajeaba por encima de la camisa, las estrujaba. Miraba todo siempre con una sonrisa. Esta era la situación que esperaba. Jessie miraba todo mordiéndose el labio inferior.
-Ahhhh…. ¡¡Ahhhhhhhh!!...- Luciana cerró los ojos y se arqueo hacia atrás. Pude sentir contracciones de su vagina apretando mi verga. Estaba acabando. Grito como una loba en celo y quedo jadeando. Me miro fijamente y paso su lengua desde mi mentón hasta mi frente. Luego se desmonto de mí. Mi verga aun seguía dura.
-¿Su plan es violarme o algo?- Dije al fin. Jazmín y Luciana me miraron, luego se miraron entre ellas y estallaron a carcajadas. Jessie miraba todo con una expresión que no podía descifrar.
-Algo así, veremos que pasa. La noche es larga y tenemos bastantes ideas…- Dijo Jazmín. Luciana tomo la cámara de video.
-Grabemos a la nena haciendo cosas indecentes- Dijo Luciana. Jazmín divertida trajo a una temerosa Jessie hasta mí. Ella se dejaba hacer, parecía una muñequita a control remoto. Cruzo una pierna sobre mi como había hecho Luciana momentos antes. Jessie me miro fijamente mordiéndose el labio. Quería decirme algo con la mirada pero no sabia que. Tenia puesta una bombachita de algodón bajo su falda tableada. Sin dejar de mirarme con carita de cachorrita asustada se la corrió hacia un costado. Lentamente coloco la punta de mi verga entre los labios vaginales y comenzó a bajar. Lentamente se iba sentando sobre mi pene.
-No tenemos tanto tiempo…- Dijo Luciana y tomandola de los hombros, empujo a Jessie hacia abajo ensartándole mi verga de una.
-¡¡¡¡Ahhhhhhhhhhhhhhhh!!!!...- Jadeo Jessie cerrando los ojos y apretando los dientes. Mi verga comenzó a palpitar al sentir la cálida cueva de Jessie.
Los que conocen esta historia pueden pensar cosas como “Jessie esta re abierta” “debe tener los agujeros del tamaño de una cacerola”. Lamento decirles que no. La manera de ajustarse a mi verga, el calor que emitía… su lubricación… todo era tan perfecto. Sentía pequeñas palpitaciones de su vagina. Jessie no se movía, pero tan solo tenerla ahí me provocaba sensaciones increíbles.
-Mmmm… Mmmmm…- Ella solita comenzó a subir lentamente. Luego bajaba jadeando dulcemente y volvía a repetir la operación. En cada penetración las coletas de sus cabellos rebotaban. Luciana daba vueltas a nuestro alrededor grabando todo con sumo detalle. Andaba con sus tetotas al aire y su modo de caminar gatuno hacia ondear su minúscula falda. Jazmín se coloco detrás de Jessie y la abrazo.
-Siempre envidie las tremendas tetas de la princesa- Dijo mientras masajeaba los pechos de Jessie por encima de la camisa. Jessie jadeo. Luego Jazmín tomo los bordes de la camisa con sus dos manos. Tiro hacia los costados y rompió la camisa de Jessie abriéndola de golpe. Los botones salieron volando en todas direcciones. Las tetas de Jessie salieron disparadas hacia fuera. La corbata cayó en medio de ellas. Jazmín con sus dedos comenzó a pellizcar sus pezones. Jessie se quejo, pero siguió subiendo y bajando por mi verga. Me miraba fijamente mordiéndose el labio.
-Te voy a contar una historia…- Comenzó Jazmín si dejar de manosear a Jessie. Aplastaba las generosas tetas de su hermana a gusto, lamia su cuello. Prestarle atención a Jazmín mientras Jessie me cabalgaba y ver sus tetas manoseadas era una tarea bastante jodida.
-Hace un tiempo todo era tan normal, tan…- Continuo Jazmín.
-Aburrido...- Completo Luciana sin dejar de grabar todo.
-Claro… aburrido…- Siguió Jazmín y lamió la oreja de Jessie. Ella se estremeció y gimió con los ojos cerrados sin dejar de moverse sobre mi.
-… Teníamos nuestras cositas. Yo sabia bien que Luciana era una fanática sexual, así que yo trataba de mantenerlo un poco oculto. Y Jessie, bueno, ella es un angelito…- Jazmín apretó las tetas de Jessie con furia. Apenas si entraban en sus manos.
-¿Te acordás como comenzamos Lucy?- Pregunto Jazmín a su hermana mayor.
-¡En el campamento!- Grito Luciana riendo.
-Mmmmmm… Aaaaaahh… Aaaahhmmm… -Los gemidos de Jessie seguían. Me cabalgaba lentamente sin prestarle atención a lo que decía Jazmín.
-Aun estábamos en el colegio. Y tuvimos que ir a un campamento… dio la casualidad de que iban mi división y la de Luciana…
-¿Te acordás lo que tomamos esa noche? Le chupe la verga a un profesor y nos dejo pasar alcohol... - Agrego Luciana súper divertida de recordar esas cosas.
-Tomamos bastante y estábamos muy alegres esa noche. Jugamos a un juego de dar besos entre todos. Y….- Jazmín apretó las tetas de Jessie y lamió su cuello.
-… y tuvimos que besarnos. Lucy y yo. Primero fue un simple pico… pero nuestros compañeros pedían mas. Están bastante tomadas ayudaba mucho…. Trenzamos nuestras lenguas.
-Fue tan excitante… yo aun tenia gusto a semen del viejo profesor en la boca…- Dijo Luciana.
-Mmmmmm... Mmmmmmmm…. - Jessie no dejaba de subir y bajar sobre mi. Lo hacia tan bien, tan despacio que parecía que jamás íbamos a acabar.
-Eso desencadeno todo… en casa de repente estábamos muy unidas... hasta que una noche terminamos lo que comenzamos en ese campamento... - Dijo Jazmín.
-Me gusto tanto ese beso.... que una noche que llovía entre a su cuarto para dormir con ella... pero me tire sobre ella y me comí su boca…- Dijo Luciana.
-A mi me encanto, jamás había besado a una chica de esa manera... ¿Y sabes? Jamás me pareció extraño que fuera mi hermana.
-Nos revolcamos toda la noche… solo nosotras. Hicimos todo lo posible y lo imposible también jajaja… -Dijo Luciana riendo mientras abría la caja. Me asuste al ver que sacaba de ahí un cinturón con consolador. Era una cosa larga y negra, bastante gruesa. Se lo coloco. Tomo un tarro de lubricante y lo dejo caer en el consolador. Daba miedo ver a Luciana con semejante cosa entre las piernas, llenándola de lubricante como su tuviera una verga de verdad y se estuviera masturbando.
-La nena esta muy tranquila- Dijo Jazmín al ver a Luciana. Yo no decía nada. Tener a Jessie sobre mi verga y escuchar esas confesiones era mucho para mí. Creo que nadie en mi situación podría pensar con claridad.
-…Comenzamos a compartir cosas…- Continuo Jazmín. Luciana se coloco detrás de Jessie y apunto la punta del consolador su culito. Jessie miro hacia atrás pero no dijo nada. Luciana dejo caer un chorro de lubricante en la cola de Jessie.
-Aaaahhg….- Se quejo Jessie apretando los dientes. Se tiro sobre mí sepultando mi cara con sus grandes tetas.
-Lucy me presto su novio una vez… Yo le preste el mío… y varias noches aburridas nos dormíamos juntas…- Seguía Jazmín.
-Lo que menos hacíamos era dormir...- Rió Luciana. Sentía como el consolador se metía en el recto de Jessie, sentía la presión en mi verga.
-Ahhhhhh…. Mmmmmmmmm…. Luciana seguía introduciendo el enorme consolador en el culito de Jessie hasta que choco con sus cachetes. Jessie respiro aliviada. Pero Luciana comenzó a ir hacia atrás. Y luego se la volvió a meter de golpe. Jessie pego su frente a la miá mirándome. Estaba totalmente sonrojada y transpirando.
-Hablábamos mucho de Jessie. De lo linda que era. Tan dulce y con tremendo cuerpo. Y nada, ni una pagina porno, ni un novio, nada. La nena de papi era un angelito…- Continuo Jazmín.
-Y eso nos excitaba más…- Dijo Luciana comenzando a penetrar a Jessie cada vez más rápido. Mi verga en su vagina sentía la presión del consolador. Dios, Jessie estaba teniendo una doble penetración... todos probaban su culito menos yo. Estaban pasando cosas loquisimas a mi alrededor pero yo solo pensaba en el culo de Jessie.
-Pero no sabíamos como sumarla a nuestros juegos… hasta que una noche que fui al baño... escuche gemidos… el dulce canto angelical de mi hermanita masturbándose en la oscuridad de su cuarto…- Dijo Jazmín.
-Así que el Angelito cometía pecado.... Jazmín me fue a buscar.... nos metimos en el cuarto de Jessie sin que se diera cuenta. Nos quedamos mirando un buen rato como se metía unos deditos ahí abajo… era tan excitante… ¿no Jessie?- Dijo Luciana culeandola cada vez mas fuerte. Jessie apretaban los dientes bufando.
-Y una noche que se había cortado la luz... fue la noche ideal... Nos metimos en su cama… Comenzamos jugando…- Dijo Jazmín divertida.
-Juego de hermanas... una mano acá... un pellizco por acá...- Continuo Jazmín
-Te vamos a enseñar a besar le dije...- Dijo Luciana. -....Jessie quiso decir algo....-
-Pero mis labios no la dejaron…- Agrego Jazmín.
-Me prendí a sus tetas y no podía creer que las tuviera tan grandes, redondas, firmes… -Continuo Jazmín.
-Entre las dos masturbamos a nuestra hermana y ella no pudo resistirse. Comenzó a gozar… y a acabar una y otra ves. Nos pedía que paremos…- Dijo Luciana culeando a su hermanita sin piedad. La tenia agarrada de las caderas y se movía como si fuera un hombre. Jessie tenía los ojos cerrados y aguantaba la culeada. Ella misma se movía para penetrarse con mi verga...
Jazmín se acerco a Jessie y lamiéndole la oreja le dijo:
-Contanos como era…- Jessie trataba de hablar entre jadeos. La doble penetración la tenia fuera de si.
-Aaaahh… no… queria… mmmm… aahhhgg… pero…. Pero… me gustaba tanto… tanto lo… lo que haciaaann… aaahhmmmm…- Apenas pudo decir Jessie entre jadeos.
-Tan dulce… tan perfecta…- Dijo Jazmín riendo y beso a Jessie.
-Ahhgg… Aaaammm… Aaahhhhhh…¡¡¡¡Aahhhhhhhhhh!!!!!.. - Jessie gritaba temblando y clavando sus uñas en mis hombros. Comenzó a acabar pero Luciana no la dejaba en paz y la seguía culeando.
-Jazmín una vez me dijo: no sabes el pedazo de verga que tiene el pibe con el que estoy saliendo…- Luciana no tenia piedad con su hermana.
-Y ese pibe era vos… el resto creo que ya lo conoces…- Completo Jazmín.
Dios era mucha información. Era todo tan extraño. ¿Podría ser real esa historia? ¿Tenia que confiar en eso? La verdad no entendía nada. Pero algo dentro de mí me decía: nada importa una mierda, estas con las tres hermanas juntas, que importa como se armo todo.
-Hasta Jessie se sumo a nuestro juego… aunque creo que ella siguió de largo…- Decía Jazmín. Yo sudaba. Comencé a apretar mis puños sintiendo que estaba por acabar. Luciana se dio cuenta de esto y saco a Jessie de encima en un instante. Mi verga quedo ahí en el aire palpitando a punto de acabar. Luciana la tomo y le pego un lameton. Jazmín se sumo a su lado y ambas pasaron sus lenguas. Los chorros comenzaron a salir sin control a una velocidad increíble. Jamas me había saltado semen de esa manera. Jessie miraba todo sentada en el piso, agitada. Fueron seis potentes corros que salieron disparados a gran altura para luego caer sobre las caras de Jazmín y Luciana. Ellas lamían al unisono mientras yo acababa sin control. Jazmín y Luciana no desperdiciaron nada. Pasaron su lengua por toda mi verga hasta dejarla limpia y se lamieron su cara entre ellas. Jessie observaba todo jadeando sentada en el piso. Tenía una carita de “eso era mío”.
-Nunca viene mal un vasito de leche antes de dormir…- Bromeo Luciana.
-Vení y seguí tomando tu mamadera…- Ordeno Jazmín a Jessie. Ella vino hacia mí sin mirarme, se arrodillo y sin más comenzó a mamarme la verga. Mi verga esta algo sensible pero los dulces labios de Jessie eran una buena medicina.
-Pero vos… por eso estabas tan distante…- Le dije a Jazmín tratando de entender las cosas. Jazmín me miro con una sonrisa. Luciana le empujaba la cabeza a Jessie y hacia que mi verga le llegue a la garganta. Jessie se la sacaba de la boca chorreando saliva a raudales. Le encantaba hacer eso.
-En realidad estaba así porque me estoy viendo con otra persona. Técnicamente hoy estamos dando fin a nuestra relación formal...- Mas y mas información. Ahora ya no éramos novios, si es que alguna vez lo fuimos en realidad.
-¿Cuando nos vas a presentar el nuevo juguete?- Dijo Luciana mirando a su hermana.
-No, es solo para mi. La cosa va en serio... - Jazmín tenia una mirada seria. Luciana solo la miro, levanto una ceja y siguió empujando la cabeza de Jessie. La agarraba de las coletas de su cabello y hacia subir y bajar la cabeza.
Jazmín se arrodillo al lado de Jessie y comenzó a chupar mi verga junto a su hermana. Paso su lengua mirándome fijo con sus ojos gatunos.
-Eso no significa…- Paso de nuevo su lengua por todo mi tronco. -… Que vos no sigas siendo mi titere…- No estaba tan mal ser el juguete de las chicas...
Que manera extraña tenían de pensar. Aunque la verdad parecía extraño analizándolo fríamente, porque la verdad… la verdad no la estaba pasando mal... para nada... aunque con todo lo que estaba pasando no podía pensar bien...
Luciana llamo a Jessie. Jessie no queria irse, pero Luciana la tomo de la mano y la arrastro con ella. Quedo Jazmín en 4 patas mamando mi verga. Parecía que aun no terminaba su discurso.
-Es increíble que después de todo esto… nunca pudiste hacerme la cola… ¡Ja! esta virgen para quien de verdad la merezca…- Dijo divertida Jazmín dándose una nalgada a su misma.
Luciana se coloco detrás de Jazmín y comenzó a besar su cuello. Con sus manos recorrió su cuerpo, desde sus pechos por encima de la camisa hasta las piernas. Metió su mano bajo la falda de Jazmín y apretó en su vagina. Jazmín cerró los ojos y jadeo apretando mi verga. Jessie se coloco a los pies de Jazmín mientras trataba de taparse sus pechos, pero sin los botones de su camisa le era imposible. Me miro sin decir nada.
-Que linda orejita…- Decía Luciana pasando su lengua por la oreja de Jazmín. Ella jadeaba extasiada. Pasaba su lengua por mi verga y de deshacía antes las caricias de su hermana mayor.
De repente escuche un “click-click”. Jazmín abrió los ojos y miro hacia atrás. Luciana se paro con una sonrisa enorme en la cara. Jessie se alejo un poco de Jazmín. Sin que ella se diera cuenta –ni yo tampoco- Luciana había esposado a Jazmín. Tenia las manos en la espalda con una esposas policiales que quien sabe de donde saco. Jessie había atado sus tobillos juntos imposibilitándole todo movimiento.
Jazmín tenía cara asustada.
-Ay ay hermanita adorada ¿Creías que no íbamos a presenciar el estreno de tu culito?- Comento Luciana muy divertida mientras lubricaba nuevamente el cinturón con el consolador negro.
-¿Que vas a hacer? Mi culo es para mi nueva pareja, ya les dije…- Jazmín no estaba para nada divertida. -.. Soltame ahora…- Ordeno.
-Jaja… no no… tu culito es nuestro…- Luciana dejaba caer lubricante sobre el consolador negro que colgaba entre sus piernas. Era bastante grande y grueso.
-No te atrevas hija de puta…- Maldijo Jazmín. Eso si que era algo que no se veía todos los días. Jessie miraba todo a un costado sin decir nada con una leve sonrisa.
-¡Que boquita! Vamos a tener que enseñarte modales…- Luciana se arrodillo detrás de Jazmín. Ella quiso escapar pero no podía. Se tambaleo, perdió el equilibrio y cayo de costado en posición fetal. Luciana se sentó sobre las piernas de Jazmín. Levanto su pollera dejando su culo al descubierto. Jazmín tenía puesta lencería fina de color blanco. Luciana tiro hacia abajo la tanga y tiro lubricante sobre el virgen culo de su hermana.
-¡Basta! ¡No es gracioso!- Gritaba Jazmín pero Luciana que no era muy delicada, le metía dos dedos bastante brusca en el ano.
-¡Ahggg!…- Se quejo Jazmín. Luciana reía divertida sodomizando a su hermana.
-Nunca me dejaste meterte nada en la cola… ¡Hoy es el gran día!- Exclamo Luciana agarrando el consolador y poniéndolo en la entrada del ano de Jazmín. Esta se retorcía tratando de safarse.
Debo decir que la situación me estaba gustando. No podía evitar sonreír de ver lo que estaba pasando. Jessie miraba todo mordiéndose el labio inferior.
-¡Basta! ¡Para Luc…! ¡¡¡Aaaahhgg!!!…..- Jazmín no pudo termina su oración y dejo de moverse para quedar tensa. Así como estaba tirada de costado comenzó a recibir el gran consolador negro dentro de su ex virgen culo.
-¡¡Aahhh!! ¡¡¡Aahhh!!! ¡¡Bastaaa!!! ¡¡¡¡Arde!!!!...- Gritaba Jazmín pero Luciana no tenia ninguna piedad. Metía el consolador sin piedad, lenta e inexorablemente. Y no paro hasta que se lo enterró bien adentro, entero.
-Aahhgg.. dios… duele… me quema… aaahgg… mierda... sos una hija de puta... - Se quejaba Jazmín con la cara roja y sudando a raudales. Luciana tenía el consolador metido totalmente en el culo de su hermana sin moverlo. Jessie no se perdía detalle de lo que pasaba. Cuando la mire el ángel rubio me miro con una sonrisa picara.
-¡Tadaaannn! ¡Y el consolador a desaparecido!- Exclamo Luciana imitando a un mago. Solté una carcajada, era inevitable. Jessie se recostó contra mi espalda apoyando su cabeza en mi hombro. Esbozo una sonrisa sin dejar de mirar la enculada de su hermana.
-Bueno, a trabajar se ha dicho….- Dijo Luciana frotándose las manos. Se agarro de la cintura de Jazmín. Y comenzó a sacar el consolador. Jazmín gritaba y jadeaba.
-¡Para hija de puta! ¡Vas a ver! ¡¡¡Aahh!!!! ¡Te voy a matar!- Maldecía y gritaba. Y Luciana metía el consolador de golpe haciéndola callar. Lo volvía a sacar despacio y lo volvía a meter con todas sus fuerzas. Jazmín se quedaba sin aire a cada estocada.
-Aaahh… Aaaahgg… Huufff… Hugh…- Jazmín se resigno aparentemente luego de un rato de estar retorciéndose. Solo bufaba con toda la cara transpirada. Luciana seguía con el mete saca frenético. Se recostó sobre su hermana, la agarro de los pelos tirando su cabeza hacia atrás. Jazmín apretaba los dientes ante el brusco trato. Luciana reía mientras la culeaba con furia, lamia el cuello de su hermana y le mordía el hombro. Luego bajo sus manos hasta las pequeñas tetas de Jazmín y las estrujo. Comenzó a besarle el cuello salvajemente moviendo su cintura sin cesar.
-Te esta gustando putita… ¿Viste? Te gusta…- Decía Luciana sin parar de culearla. Con la otra mano frotaba el clítoris de Jazmín.
-¿Te gusta lo que ves?...-Pregunte a Jessie que miraba todo muy atenta. Sin dejar de observar como Jazmín desvirgada del culo me dijo:
-Es... es hipnotizante...- Me encantaba ver ese brillo de diablilla en sus ojos.
-Aaahhhg.. Mmmmm…. Aaaammm…- Jadeaba Jazmín sin decir anda y con los ojos cerrados. Su cara estaba totalmente colorada y tenia los pelos pegados a la cara por la transpiración. Luego comenzó a temblar, a jadear más fuerte pegando puñetazos al piso.
-¡¡¡Ahh!!! ¡¡¡¡¡Dios!!!!!! ¡¡¡¡¡La puta madre!!!!!...- Gritaba Jazmín mientras Luciana la culeaba mas rápido.
-¡Alguien esta acabando señoras y señores!...- Gritaba Luciana mientras Jazmín se retorcía de placer en un potente orgasmo. Ni bien termino el escándalo Luciana saco el consolador del culo y Jazmín quedo ahí, rendida y agitada en el piso.
-Es cansador trabajar tanto… jaja…- Bromeo Luciana y se fue hacia la cocina.
-¡Ey Jess! ¡Ya podes liberarlo!- Grito Luciana desde la cocina. Jessie me miro y sonrío. Parecía que esperaba esa orden. Se acerco a mí sin decir nada y comenzó a desatarme. Se la veía muy divertida.
-Bueno, esta quedo muerta- Dijo Luciana mirando a Jazmín al volver de la cocina tomando una lata de cerveza.
-Veo que aun el viagra hace efecto aun… ¡Estrénale la cola a Jazmín asi queda todo en orden!- Me dijo Luciana y la verdad tenia razón. No podía perderme la ocasión de probar el culito de Jazmín.
-Eh… no… basta... - Balbuceo Jazmín sin fuerzas. Jessie termino de desatarme. Acerco su boca a mi oreja y me susurro:
-… Bien fuerte... Que grite…- Y me beso en la mejilla. Las órdenes de Jessie eran canto angelical en mi oído. Me incorpore estirando mis brazos, me sentía como un esclavo recién liberado.
Luciana se preparo para la escena, tomo la cámara y se sentó muy cómoda en el sillón. Jessie también se sentó en otro sillón sosteniéndose la camisa para taparse sus pechos. Era evidente que se sentía muy interesada por lo que estaba por pasar.
-Bueno… le deseo lo mejor a vos y a tu nuevo novio…- Dije. -… Lastima que no va a tener nada que estrenar...- Jazmín me miro con algo de odio.
-No… no seas hijo de puta…-Se quejo Jazmín sin fuerzas mientras la acomodaba en cuatro patas. Puse un poco de lubricante en mi verga y la embardune bien. A pesar de todo Jazmín tampoco era que se resistía tanto. Apoye la cabeza de mi pene en la entrada de su culo. La agarre de las caderas.
-¡Acción!- Grito Luciana.
-Forro… ¡¡Aaaahhhhhhhh!!!...- Se la metí de un empujón sin piedad. Y así como entro, me moví hacia atrás y se la volví a meter haciéndole temblar los cachetes de la cola. Jazmín gritaba en cada estocada. Una y otra ves la fui penetrando sin piedad, abriéndome paso en su culito.
-¡¡Aaaahhh!! ¡¡¡Aahhh!!! ¡¡¡Aaaaagh!!!! …- Gritaba Jazmín en cada embestida. Era una culeada bien de película porno. Fuerte, sacándola casi por completo y enterrándola con toda la furia. Luciana aplaudía festejando a nuestro lado. Jessie miraba todo muy atentamente desde el sillón acariciando sus pechos excitada por la escena.
-¡Bravo! ¡Esta va a ser la culeada del año!- Luciana se acerco a nosotros con la cámara y grabo bien en detalle como entraba y salía mi verga del estrecho culito de Jazmín. Mire a Jessie, podía ver deseo en sus ojos. Me miraba con sus enormes ojos celestes y se mordía el labio sin parpadear.
-Quiero que le acabes en la cara…- Dijo Luciana detrás grabando desde mi hombro. Yo no iba a aguantar mucho más. Esta sudando a raudales haciendo toda la fuera posible en las embestidas.
-Aaagg… Hummm… Hufffff….- Jazmín se quejaba pero ya sin ninguna fuerza. Estaba completamente perdida en la culeada olímpica que le estaba dando. Un temblor me recorría la espalda. Estaba por acabar. Jazmín jadeaba cada vez mas fuerte. Conocía muy bien sus reacciones. Estaba acabando también. Saque mi verga y apunte hacia la cara Jazmín. Salieron tres chorros de leche directo a su cara. Uno en el mentón, otro en la nariz y otro en el ojo. Que puntería. Había acabado mucho y me estaba secando. Jazmín solo jadeaba acabando en su orgasmo. Creo que ni se dio cuenta de que le había acabado en la cara.
-Creo que tenemos un problema de provisiones...- Bromeo Luciana grabando todo. Jazmín quedo ahí tirada en el piso, con los ojos cerrados y respirando como si le faltara el aire. Tenía todos los pelos pegados a la cara por la transpiración y mi semen.
-Estoy muerto…- Dije sentándome en el sofá al lado de Jessie. Ella me miro y me dedico una sonrisa. Se acurruco a mi lado. Mi verga me ardía un poco y estaba súper sensible… y aun seguía dura.
-Me muero de sed…- Dije.
-¡Ahi te traigo algo! – Dijo Jessie y salio corriendo hacia la cocina. Volvió en un santiamén con un vaso de jugo. Me lo bebí entero de un solo trago.
-Creo que aun te queda un cartucho mas…- Dijo Luciana tirando lubricante en mi verga. Luego comenzó a masturbarme. Me dolía un poco pero me gustaba.
-Hacele unos mimos así no se queja tanto- Dijo Luciana a Jessie. Y la princesa de la casa se acerco a mí y comenzó a darme besitos en el cuello. No me podía resistir a ella. La atraje hacia mí y comenzamos a besarnos. Luciana sin dejar de masturbarme se sumo y comenzó a besarme también…
Luciana se monto sobre mí enterrándose mi verga en la concha. Comenzó a cabalgarme moviendo sus caderas en circulo. Me puso sus tetotas en la cara para chuparselas. No me negué, pase mi lengua por tremendos globos de carne. Luciana agarro la cabeza de Jessie y la atrajo hacia sus tetas. También tuvo que chuparselas para saciarla. Parecíamos dos cachorros amamantándose de su madre. Luego de un buen rato de cabalgarme comenzó a acabar a los gritos y se bajo de mí. Jessie tenía una carita de deseo increíble acurrucada a mi lado. Luciana la agarro y la acostó sobre ella, comenzó a besarla. Jessie parecía tener experiencia en eso porque beso a su hermana tan bien como lo hacia conmigo. Verlas besandose de esa manera tan apasionada me ponía a mil. Aproveche y me recosté sobre Jessie. Mi verga sola se ubico en su conchita y se fue metiendo despacio hasta entrar completamente. Jessie jadeaba como las diosas. Luciana bajo ella le mamaba las tetas y mordía los pezones de su hermana. Yo movía mis caderas besaba su cuello. Jessie no daba mas de placer.
Jazmín seguía ahí esposada en el piso. Nos miraba con cierto rencor al ver que disfrutábamos sin ella. Eso nos causaba mucha gracia aunque tampoco le prestábamos demasiada atención. Jessie comenzó a temblar, se abrazo a Luciana jadeando y gimiendo fuerte. Moví mas rápido mis caderas penetrándola con pasión. Acabo con un largo jadeo que la dejo sin aire. Luego cayo jadeando sobre Luciana recostando su cabeza en las enormes tetas.
-Chupamela como te enseñe Jess…- Saque mi verga de Jessie. Ella bajo hasta las piernas de su hermana. Y como perrita entrenada y comenzó a lamer el clítoris.
-Dame de comer esa verga vos… entre mis tetas…- Y sus deseos fueron órdenes. Me arrodille sobre Luciana. Apenas su podía agarrar tremendas tetas entre mis manos. Coloque mi verga entre esos globos y la aprisione. Se perdía entre semejantes piñatas de carne. Jessie sabia bien lo que hacia. Metía dos deditos en la raja de Luciana y lamia su clítoris sin parar. La más tetona de las hermanas no tardo mucho en acabar otra ves.
-¡¡Si!! ¡¡¡¡La puta madre!!! ¡¡¡¡Siiiiiiiiiiii!!!!- Gritaba Luciana acabando una ves mas. Y así como acabo Luciana me saco de encima. Agarro a Jessie y atrajo hacia ella. No parecía cansada ni nada la hermana mayor. Comenzó a besar a Jessie con la misma pasión de antes. La tenia agarrada de la nunca y le metía la lengua hasta la garganta.
Apenas tenia fuerzas para seguir, pero no quería parar. No podía parar. Me recosté sobre Jessie y esta ves dirigí mi verga hacia su culito. Mi verga ardía. Pero aun no podía descansar. Tenia que tomar ese culo de una vez por todas aunque muera en el intento. Con suavidad fui penetrándola. Mi verga se deslizo por el recto de Jessie con facilidad hasta que mis huevos chocaron con los cachetes de su cola.
-Ahhmmmmmmmmm... - Jadeo ella dulcemente. Con amor comencé a culear a Jessie. Ella besaba a su hermana, luego bajaba besando su cuello hasta llegar a sus enormes tetas y se quedaba ahí mamandolas. Metió su mano entre las piernas de Luciana y comenzó a masturbarla. Nos sincronizamos los tres dándonos placer. Jazmín ahí en el piso, mirando todo ofendida sin poder hacer nada.
Luciana comenzó a gritar y a maldecir a raudales. Jessie curvaba su cintura y temblaba abrazando a su hermana. Sentí el escalofrió en mi columna. Mientras ellas acababan no aguante más. Enterré mi verga en el culito de Jessie bien hasta el fondo y comencé a acabar. Sentí lanzar dos chorros, mis ojos se cerraron y caí rendido.

Capitulo Veintidós

Sentí un poco de frío. Me moví entre sueños y abrí lentamente los ojos. Estaba oscuro pero podía distinguir bien donde estaba. Era el living de la casa de las chicas. Los recuerdos vinieron a mi mente. Toda la situación de la noche anterior. Por un momento pensé que todo había sido un sueño. Pero no, por lo que veía a mí alrededor todo había sido bastante real. Aunque estaba solo. Acurrucado en el sillón tapado con una manta. Jazmín ya no estaba esposada en el suelo, tampoco estaba Luciana, y Jessie…
-Ay… ¿Te desperte?- Dijo Una voz a mi lado. Era Jessie en piyamas. Traía un vaso de juego en la mano. -… no te quería despertar y te deje dormir, te veías muy tranquilo…- Me dijo casi susurrando.
Me la quede mirando un rato sin decir nada. Ella se sentó a mi lado nerviosa.
-Debes pensar que soy una cosa asquerosa…- Me dijo balbuceando mirando el piso. Si mal no recordaba todo era una mentira…
-¿Nada fue verdad?- Pregunte y Jessie me miro fijamente con los ojos brillosos. Estaba a punto de llorar.
-No… si... no…- Balbuceaba. -… se que mentí, pero… pero vos me gustabas, me gustabas antes de todo esto. Y… cuando me dijeron de su plan… pensé que, que de otra manera no iba a poder estar con vos… y… yo quería estar con vos y acepte todo… por estar con vos y.. y yo…-
Unas lágrimas rodaron por sus mejillas y se me partió el corazón. Yo podré ser un hijo de puta y un chanta, pero era la primera vez en mi vida que escuchaba palabras tan sinceras.
No dije nada. Solo la abrase.
-Te elijo a vos…- Dije al oído.
Estuvimos un largo rato abrazados en silencio.
-Hoy… te podes quedar a dormir… conmigo, si queres...- Dijo Jessie dudosa.
-Me encantaría- Dije tomándola de la mano. Ella me regalo de esas tiernas sonrisas que derretían. Juntos subimos las escaleras hacia su cuarto. Nos metimos en la cama sin decirnos nada. Jessie se acurruco entre mis brazos y suspiro. Acerque mis labios a su oído y susurre:
-Te amo Jessie…- Ella giro un poco su cabeza mirándome a los ojos. Podía ver el brillo celeste en la oscuridad.
-Te Amo - Y sentí sus cálidos labios junto a los míos.

Epilogo

Esa noche fue la última noche que pude dormir en la casa. A los pocos días la noticia de que ya no era novio de Jazmín era un suceso. Pero seguía viendo a las chicas en otros lados. Sobre todo a Luciana y mas que nada a Jessie.
-La verdad es que no lo vas a poder creer... pero el novio de Jazmín es una chica... - Me comento Luciana sobre la nueva pareja de Jazmín.
-Mamá se escandalizo un poco al saber que Jazmín es lesbiana... Papá esta con el corazón roto, pero una vez comento que esa chica no se comparaba con vos…- Me comento Jessie un día que paseábamos por el Shopping. Me olvide de decir que, aunque es obvio, estaba de novio con Jessie desde aquella noche. Solo lo sabía Luciana y nadie más. Luciana estaba contenta con eso. Mientras siga haciendo lo que diga…
-Sabes que me gusta jugar con vos… y se bien que a mi hermanita no le molesta. No le molesta que garchemos solos, sin ella, o con ella o tantas otras cosas que probamos. Le gusta... la princesa es más sedienta de sexo que yo. Ella te ama y solo te quiere a vos. Daria su vida por vos. Así que jamás se te ocurra estar con otra chica ni la hagas sufrir de verdad. Una cosa son nuestros juegos, otra es forrearla. Ni se te ocurra, porque vas a saber lo que soy cuando me enojo…- Me dijo Luciana muy seria. Jamás la vi hablar con tanta seriedad.
A veces veo a Jazmín, pero parece estar decidida a ser una persona “normal”. Porque solo charlamos como buenos amigos. Esta bastante embobada con su novia. Incluso me la presento. Al menos tenia buen gusto, es una chica muy bonita. Pero algo ingenua, tanto que ella nunca le dijo que yo era su ex.
Mi relación con Jessie era cada vez mejor. Se la presente a mis padres y ellos quedaron maravillados. Jessie me tenia atontado. Contaba el tiempo que pasaba para volverla a ver. Pasaron muchas cosas ese año. Tantas… con ella, con Luciana y con… tal vez mas adelante cuente bien esa parte.
Pase una divertida navidad con las hermanas. Fue todo un plan maléfico para poder ver a Jessie a ocultas. Algún día tengo que contar sobre esa noche, fue algo épico.
En un abrir y cerrar de ojos Jessie ya estaba anotándose en la facultad. Sentí mucha nostalgia de que dejara de usar ese uniforme que tanto me gustaba. Pero ella jamás iba a dejar de ser mi colegiala.
Pocos días después de esto, Luciana, cuando no, no tuvo la mejor idea que decir una noche que cenaba con su familia:
-¿Sabían que Jessie esta de novia con el ex de Jazmín?- Jessie me llamo aterrada esa misma moche contándome todo.
La noticia cayo como una bomba. Al día siguiente tuve que ir a hablar con sus padres. La situación fue muy tensa. Pocas veces me sentí tan nervioso en mi vida. No quiero explayarme demasiado, pero la madre sonrío al verme. El padre no. Y fue mucho mejor de lo que podía imaginar. Jessie estaba a mi lado tomándome de la mano. Me comí un enorme sermón. Y de entre todo lo que dijo me quedo dando vueltas una frase en al cabeza.
-Te soy sincero. Siempre pensé que eras muy buen muchacho. Se ve que ella te quiere. Se que vas a cuidar de mi nena. Pero si le haces llorar, si mínimamente ella tiene alguna molestia por tu culpa, tengo una 38 en el cajón con dos balas directo a tu cabeza. ¿Fui claro?- Dijo el padre muy serio.
Era la segunda persona de esa familia que me amenazaba si llegaba a lastimar a Jessie.
-Que bueno tenerte en casa otra vez, estoy tan contenta- Me dijo la madre dándome un beso en la Mejilla.
-¡Mujer! ¡Hablamos de que tenemos que ser severos con esta situación!- Se enojo el padre. Jessie sonreía radiante como jamás la había visto.
-Somos novios oficiales…- Me dijo sonriendo radiante mientras el papá seguía discutiendo con su mujer sobre tratarme afectuosamente.
Que familia más extraña.
Detrás, en la puerta que daba al living estaba Luciana. Estuvo ahí todo el tiempo, escuchando cada palabra. Pero por su cara parecía que sabía desde antes lo que al final paso. Tenía una sonrisa muy divertida en la cara.

Todo volvía a comenzar. Me sentía en como en casa.


Esta historia es ficción,
Todos los personajes son inventados
Y nada tienen que ver con la realidad.
Cualquier similitud es pura coincidencia.


Partes Anteriores

Parte I

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Parte II

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Parte III

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Parte IV

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Parte V


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Parte VI


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Parte VII

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Parte VIII

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Parte IX

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