Aclaracion: Todos los personajes involucrados en actos sexuales son mayores de edad. Con respecto a los demas, se reserva la informacion.
Puede contener lenguaje ofensivo y situaciones maduras (ademas de las sexuales)
Capitulo anterior: http://www.poringa.net/posts/relatos/2806113/La-semilla-inutil---Capitulo-13-La-pintora.html
Las clases de pintura se fueron sucediendo una tras otra, sesiones de sólo sexo. Debo confesar, en honor a la verdad, que al principio me preocupaba el asunto de que Patricia estuviera casada, y se lo hice saber en la segunda clase, donde perfeccioné mi técnica de chupar conchas.
- Ahhh, mi amor. Mi bebé, olvídate de mi marido. Ya estamos separados y pronto ay tendré mi divorcio..., sí, ahí, ahí... es un impotente de mierda. En cambio tú eres todo un semental... Ufff, cuando me de la menopausia espero que sigas igual de vigoroso.
Por aquel entonces me encontraba llevando cursos del séptimo ciclo, con mi fiel guitarra a cuestas, cuando una chica me detuvo en el pasillo.
- Disculpe, usted me podría decir dónde se dicta el laboratorio de teatro.
Hablaba vocalizando muy bien. El acento no era nacional. Era una chica de piel negra, no morena, no mulata: negra, completamente negra, delgada.
- En el primer piso, estas en el sexto.
- Gracias. Usted va de bajada, verdad. Me puede acompañar.
Asentí. No fue necesario hacer tema de conversación: era una parlanchina terrible.
- Seguro usted pensará de dónde salió está negra -me dijo-, me llamo Caricia. Caricia Trujillo, soy de Colombia. He venido como alumna de intercambio.
Tenía un cuerpo muy hermoso y, como toda muchacha de color serio, tenía un trasero inmenso. «Como sería por dentro?, pensé (if you know what i mean)».
Caricia tenia una facilidad de palabra abismal, todo lo contrario a mi.
- Julián, a usted le gusta el teatro. Parece que sí, tiene usted un lado histriónico.
Se reía de buena gana. Cuando no hablaba, cantaba. Y también gesticulaba mucho.
Me la crucé varias veces a la salida. Vivía en una pensión para mochileros bastante cerca de la U.
- Las chicas de mi clase me miran raro, Julián. Usted no sabrá por qué.
No usaba interrogantes jamás. Era bastante curiosa. Me gustaba, lo reconozco. Quería tirarmela: era negra, no iría a decir que no (lo sé, en ese entonces era yo muy joven y estúpido, con la mente muy cuadriculada: pronto entendería mi error).
No fue dificil hacerme su amigo.
La llevé a conocer la ciudad un sábado en la noche. Ella estaba fascinada por la arquitectura de Lima. Fuimos al teatro y luego a cenar.
- Usted me llevará de vuelta a casa -, me dijo- ya se hizo un poco tardecico.
«Estudiante de quinto ciclo de arte dramático?, pensé. Hasta parece egresada»
Llegamos en medio de la lluvia, una torrencial y de las largas.
- Una vez visité Macondo y llovía más que acá, pero igual está fuerte. Mejor pase y quédese o pescará un resfrío.
Bendije mi buena suerte. Fuimos a su cuarto, yo estaba full pilas y no pensaba dejar que Caricia se me escapara. La tomé de la cintura y la atraje hacia mí para besarla.
- Oiga, qué le pasa a usted si aún ni se ha declarado ni nada.
Hubiera sido como un baldazo de agua fría si ella no se hubiera reído, divertida.
- Usted no me puede tomar así, de buenas a primeras. Seguro quiere primero besarme y luego hacerme el amor. Soy virgen, sabrá usted.
Comprendí que actuaba: éso me ayudó a no estallar en carcajadas. Decidí actuar también. Le dije que la quería y que me dejara besarla.
- Eso está mejor. Venga con Caricia.
Nos besamos suavemente. Mi pinga ya se insinuaba entre los pliegues de mi pantalón, pugnando por tomar un poco de aire. Me fui hacia la cama con ella.
- Oiga mi amor, que usted se va con todo. Son todos iguales en Lima? Ya le dije que soy virgen.
Nos desvestimos hasta quedar en ropa íntima. Besé cada centímetro de su oscura piel.
- Se nota que a usted le gusta el chocolate.
Nos reímos. Me saqué el boxer dejando que mi verga se luzca en toda su dimensión. Caricia la miró, sorprendida.
- Que piensa hacer usted con eso.
Acaricié con mi dura verga su entrepierna por encima de su calzón color celeste, simulando una penetración.
- Ay, ay. Que rico, Julián. Nunca había sentido algo semejante. Dígame que me ama, al menos.
Nos abrazados mientras mi pene buscaba entrar, aunque sea rompiendo su calzón:
-Te amo -le dije al oído.
- Te amo, Julián -me respondió.
Mi pinga se alojó entre los pliegues de su concha, metiendo parte del glande con la tela de su ropa.
- Ahhh, ahhh -gimió- qué rico...
Apretaba más y más cada vez. Traté de empujar a un lado su calzón para que me dejara entrar en ella pero no me lo permitió. Me conformé con eso, cuando sentí que la tela cedió un poco más.
- Ay, me la metió. Por que no duele tanto.
Le informé, a través de un boletín de última hora, que sólo había logrado entrar unos milímetros más. Nos volvimos a reír y a continuar en nuestro simulacro de sexo cuando, sin metersela, eyaculé sobre su vientre y su pierna.
- Ahhh, diablos. Usted estaba como toro en primavera -dijo, mientras con un dedo esparcía mi semen sobre su abdomen.
Se limpió y me permitió dormir con ella, lado a lado.
A la mañana siguiente le sugerí ducharnos juntos, pero se negó.
- No tengo ducha personal, Julián. Estoy en una pensión, no en un hotel. Ahorita se despiertan todos y sería mejor que nos retiremos ya.
Fuimos a desayunar fuera, y luego nos despedimos como buenos amigos. Mientras la veía alejarse meneando ese culo enorme, me dije a mí mismo que no había nada de malo en divertirme con Caricia y con Patricia: ellas nunca sabrían que estaba con ambas a la vez.
Porque total: no estaba con ninguna de ellas.
Continuara...
Otra co-protagonista? Y en paralelo? Julian debe estar loco...
Bueno, tenemos nueva co-protagonista, desde la linda Colombia (quien no se ha enamorado, aunque sea platonicamente, de una colombiana?)
El proximo capitulo lleva por titulo "La venganza que no pedi". Nos leemos el proximo domingo (mas temprano, si Afrodita y Eros lo permiten)
Logro desbloqueado: capitulo sin creampie
Me tomo unas lineas para agradecer a todos los lectores de "La semilla inutil". Gracias por los minutos invertidos leyendo las memorias del gordo virg..., digo de Julian.
Si te gustó, comparte el post. Hasta el proximo domingo, tengan mucho sexo pero siempre con proteccion
Puede contener lenguaje ofensivo y situaciones maduras (ademas de las sexuales)
Capitulo anterior: http://www.poringa.net/posts/relatos/2806113/La-semilla-inutil---Capitulo-13-La-pintora.html
Las clases de pintura se fueron sucediendo una tras otra, sesiones de sólo sexo. Debo confesar, en honor a la verdad, que al principio me preocupaba el asunto de que Patricia estuviera casada, y se lo hice saber en la segunda clase, donde perfeccioné mi técnica de chupar conchas.
- Ahhh, mi amor. Mi bebé, olvídate de mi marido. Ya estamos separados y pronto ay tendré mi divorcio..., sí, ahí, ahí... es un impotente de mierda. En cambio tú eres todo un semental... Ufff, cuando me de la menopausia espero que sigas igual de vigoroso.
Por aquel entonces me encontraba llevando cursos del séptimo ciclo, con mi fiel guitarra a cuestas, cuando una chica me detuvo en el pasillo.
- Disculpe, usted me podría decir dónde se dicta el laboratorio de teatro.
Hablaba vocalizando muy bien. El acento no era nacional. Era una chica de piel negra, no morena, no mulata: negra, completamente negra, delgada.
- En el primer piso, estas en el sexto.
- Gracias. Usted va de bajada, verdad. Me puede acompañar.
Asentí. No fue necesario hacer tema de conversación: era una parlanchina terrible.
- Seguro usted pensará de dónde salió está negra -me dijo-, me llamo Caricia. Caricia Trujillo, soy de Colombia. He venido como alumna de intercambio.
Tenía un cuerpo muy hermoso y, como toda muchacha de color serio, tenía un trasero inmenso. «Como sería por dentro?, pensé (if you know what i mean)».
Caricia tenia una facilidad de palabra abismal, todo lo contrario a mi.
- Julián, a usted le gusta el teatro. Parece que sí, tiene usted un lado histriónico.
Se reía de buena gana. Cuando no hablaba, cantaba. Y también gesticulaba mucho.
Me la crucé varias veces a la salida. Vivía en una pensión para mochileros bastante cerca de la U.
- Las chicas de mi clase me miran raro, Julián. Usted no sabrá por qué.
No usaba interrogantes jamás. Era bastante curiosa. Me gustaba, lo reconozco. Quería tirarmela: era negra, no iría a decir que no (lo sé, en ese entonces era yo muy joven y estúpido, con la mente muy cuadriculada: pronto entendería mi error).
No fue dificil hacerme su amigo.
La llevé a conocer la ciudad un sábado en la noche. Ella estaba fascinada por la arquitectura de Lima. Fuimos al teatro y luego a cenar.
- Usted me llevará de vuelta a casa -, me dijo- ya se hizo un poco tardecico.
«Estudiante de quinto ciclo de arte dramático?, pensé. Hasta parece egresada»
Llegamos en medio de la lluvia, una torrencial y de las largas.
- Una vez visité Macondo y llovía más que acá, pero igual está fuerte. Mejor pase y quédese o pescará un resfrío.
Bendije mi buena suerte. Fuimos a su cuarto, yo estaba full pilas y no pensaba dejar que Caricia se me escapara. La tomé de la cintura y la atraje hacia mí para besarla.
- Oiga, qué le pasa a usted si aún ni se ha declarado ni nada.
Hubiera sido como un baldazo de agua fría si ella no se hubiera reído, divertida.
- Usted no me puede tomar así, de buenas a primeras. Seguro quiere primero besarme y luego hacerme el amor. Soy virgen, sabrá usted.
Comprendí que actuaba: éso me ayudó a no estallar en carcajadas. Decidí actuar también. Le dije que la quería y que me dejara besarla.
- Eso está mejor. Venga con Caricia.
Nos besamos suavemente. Mi pinga ya se insinuaba entre los pliegues de mi pantalón, pugnando por tomar un poco de aire. Me fui hacia la cama con ella.
- Oiga mi amor, que usted se va con todo. Son todos iguales en Lima? Ya le dije que soy virgen.
Nos desvestimos hasta quedar en ropa íntima. Besé cada centímetro de su oscura piel.
- Se nota que a usted le gusta el chocolate.
Nos reímos. Me saqué el boxer dejando que mi verga se luzca en toda su dimensión. Caricia la miró, sorprendida.
- Que piensa hacer usted con eso.
Acaricié con mi dura verga su entrepierna por encima de su calzón color celeste, simulando una penetración.
- Ay, ay. Que rico, Julián. Nunca había sentido algo semejante. Dígame que me ama, al menos.
Nos abrazados mientras mi pene buscaba entrar, aunque sea rompiendo su calzón:
-Te amo -le dije al oído.
- Te amo, Julián -me respondió.
Mi pinga se alojó entre los pliegues de su concha, metiendo parte del glande con la tela de su ropa.
- Ahhh, ahhh -gimió- qué rico...
Apretaba más y más cada vez. Traté de empujar a un lado su calzón para que me dejara entrar en ella pero no me lo permitió. Me conformé con eso, cuando sentí que la tela cedió un poco más.
- Ay, me la metió. Por que no duele tanto.
Le informé, a través de un boletín de última hora, que sólo había logrado entrar unos milímetros más. Nos volvimos a reír y a continuar en nuestro simulacro de sexo cuando, sin metersela, eyaculé sobre su vientre y su pierna.
- Ahhh, diablos. Usted estaba como toro en primavera -dijo, mientras con un dedo esparcía mi semen sobre su abdomen.
Se limpió y me permitió dormir con ella, lado a lado.
A la mañana siguiente le sugerí ducharnos juntos, pero se negó.
- No tengo ducha personal, Julián. Estoy en una pensión, no en un hotel. Ahorita se despiertan todos y sería mejor que nos retiremos ya.
Fuimos a desayunar fuera, y luego nos despedimos como buenos amigos. Mientras la veía alejarse meneando ese culo enorme, me dije a mí mismo que no había nada de malo en divertirme con Caricia y con Patricia: ellas nunca sabrían que estaba con ambas a la vez.
Porque total: no estaba con ninguna de ellas.
Continuara...
Otra co-protagonista? Y en paralelo? Julian debe estar loco...
Bueno, tenemos nueva co-protagonista, desde la linda Colombia (quien no se ha enamorado, aunque sea platonicamente, de una colombiana?)
El proximo capitulo lleva por titulo "La venganza que no pedi". Nos leemos el proximo domingo (mas temprano, si Afrodita y Eros lo permiten)
Logro desbloqueado: capitulo sin creampie
Me tomo unas lineas para agradecer a todos los lectores de "La semilla inutil". Gracias por los minutos invertidos leyendo las memorias del gordo virg..., digo de Julian.
Si te gustó, comparte el post. Hasta el proximo domingo, tengan mucho sexo pero siempre con proteccion
0 comentarios - La semilla inutil - Capitulo 14: Habla, jugador