Hola amigos, esta vez no hay imágenes para mostrarles, pero quiero compartir con ustedes una experiencia super caliente que pasó esta semana....
Tengo un amigo que vive en el interior y una vez por mes viene a B.A. por trabajo, y como no tiene familia acá, se queda a dormir en casa, nos conocemos desde hace mil años.
Hace rato que vengo maquinando la idea de tratar de fomentar una noche de lujuria para hacer un trío con mi esposa y mi amigo.
Mi amigo tiene una buena pija (lo sé porque hemos compartido muchos vestuarios de futbol en la juventud), así que imagino que a mi esposa le gustaría ser penetrada por esa verga.
Además, como nos conocemos desde hace tantos años, le tengo mucha confianza, y sé que no solo la trataría muy gentilmente y "cariñosamente", sino que además solo se repetiría la experiencia si yo presto mi consentimiento, y en caso contrario él respetaría la decisión.
Para colmo está separado desde hace unos 6 meses, así que no tiene ataduras y vive caliente!!!!
Mi esposa, como ya lo habrán sabido apreciar, es muy atractiva, y cualquiera que fantasee con ella indefectiblemente acabará con la pija dura y queriendo cogerla, así que nunca tuve dudas que si le planteábamos el tema a mi amigo, seguro se prendería gustoso.
La cuestión es que el Martes pasado vino mi amigo, y yo me dije a mi mismo que esa noche debía ser LA NOCHE!!!
Cenamos juntos, obviamente con bastante alcohol para todos, mi esposa no está muy acostumbrada así que enseguida se puso alegre. Como hacía mucho calor ella estaba con un vestidito bien suelto y bastante corto, que dejaba ver bien sus piernas.
Luego de la cena (todavía yo no había blanqueado mis intenciones con ninguno de los dos), nos sentamos en el living, en el piso que estaba fresco, y seguimos tomando unos tragos.
Para mi absoluta sorpresa mi esposa de pronto se sentó con en posición de "indio" con las piernas cruzadas, probablemente por el efecto del alcohol, y no se dio cuenta que con las piernas así separadas, su corto vestido dejaba ver tu tanga.
Solo al ver eso mi pija se endureció.
Parecía que iba a ser mi noche de suerte, porque me dí cuenta que mi amigo (que estaba sentado justo frente a ella), también notó el exquisito paisaje que ella nos estaba mostrando.
Y si bien se hacía el boludo, no podía sacarle los ojos de encima a su entrepierna.
En una de esas, cuando me miraba de reojo para asegurarse que yo no me diera cuenta que él estaba encandilado con la imagen de mi esposa abierta de piernas, le guiñé el ojo en un gesto cómplice, que él entendió de inmediato (ya dije que nos conocemos mucho y nos entendemos sin hablarnos).
La charla siguió un rato, pero intencionalmente empecé a preguntarle a mi amigo por su vida sexual en estos meses de soltería y él hábilmente empezó a contarnos algunas cosas con lujo de detalles.
Al principio mi esposa me miró como diciéndome "que desubicado!!!!" pero después fue cambiando la expresión y me di cuenta que los relatos de mi amigo la estaban calentando, porque hacía preguntas que normalmente no haría y pedía más detalles....
Yo me dije, bueno... es esta noche... me levanté de mi lugar y me senté detrás de mi esposa, bien cerca, para que ella notara mi pija dura contra su cola... cosa que hizo porque me miró con cara de calentura. Empecé a masajear sus hombros, y mientras mi amigo seguía contando sus aventuras, yo le besaba la nuca a mi esposa, que ladeaba la cabeza para recibir mis besos cada vez más intensos.
Luego, muy sutilmente, le levanté aún más la falta del vestido al acariciar suavemente sus muslos, para ofrecerle a mi amigo una vista inmejorable.
Quedó prácticamente con el vestido levantado hasta la cintura, dejando a la vista completamente su tanga, que a esa altura ya se notaba húmeda entre sus piernas. Yo me asomaba desde atrás a ver ese panorama y no podía creer lo que estaba pasando.
Mi amigo viendo esta escena no pudo evitar tocarse el bulto, mi esposa y yo podíamos apreciar fácilmente que estaba hinchado, evidencia de que él tenía la pija muy dura.
Cómo no hubo reacción negativa de mi mujer, él hizo más evidente sus caricias, agarrándose la pija con fuerza a través del pantalón.
Yo estaba que volaba de calentura, y saqué mis manos de sus muslos para ir subiendo por su cintura hasta llegar a sus tetas, mientras ella no le sacaba los ojos de encima al bulto de mi amigo.
Siempre sentado detrás de ella apoyándola muy sugestivamente, le agarré la tetas, se dio vuelta, me miró y me dijo "nos estamos yendo a la mierda"... yo me hice el boludo y le dije "relajate y disfrutá de las caricias que estamos entre amigos", pero ella se paró de golpe y dijo que estaba muy cansada y que se quería ir a acostar... a lo que obviamente le contesté "vamos los tres y la seguimos en la cama?"... pero ella ella se puso colorada y no contestó...
Nos dijo "buenas noches", dio media vuelta y enfiló hacia la habitación.
Mi amigo y yo nos quedamos mirándonos sorprendidos y calientes a full.
Le dije que me esperara, que iba a ir a la habitación a ver si la convencía a mi esposa de entregarse a los dos. La verdad que esa era la primera vez que pasábamos por una situación como esa, y sinceramente no sabía si aquello era una invitación de mi esposa para que la cogiéramos como nunca antes entre los dos o si realmente había arrugado y no quería saber nada.
Apenas amagué a darme vuelta, y él se desabrochó el pantalón, y peló la verga, bien parada y lista para cogerse a mi esposa.
Verlo así de caliente con mi mujer me calentaba aún más a mí, no sé quién de los dos estaba más excitado.
Tuve que convencerlo que me esperara, que no fuera así de una a la habitación, porque se podía estropear en un instante todo el laburo fino que habíamos estado haciendo y porque no tenía claro que quería mi esposa, pero a toda costa él quería ir a cogerla.
Tardé un rato en frenarlo, y finalmente lo dejé con la pija dura en la mano y entré a la habitación. Mi esposa estaba en la cama, ni se había cambiado, estaba con el mismo vestido de antes, evidentemente había tomado demasiado, porque parecía que se había quedado dormida apenas se recostó en la cama, como si se hubiera desmayado ahí nomás.
Traté de despertarla con muchos mimos y caricias, pero no hubo caso... el alcohol la había volteado.
A todo esto, había quedado acostada boca arriba con las piernas completamente abiertas.
Yo no podía más de calentura, también había pelado mi verga dura para tentarla al entrar a la habitación y no podía parar de hacerme la paja.
No pude resistir la tentación de subirle nuevamente el vestido y suavemente le corrí la tanguita hacia un costado dejando su conchita empapada a la vista, no podía creer lo mojada que estaba, realmente se había calentado mucho con toda esa situación.
Me dí vuela y estaba mi amigo en la puerta de la habitación, pajeándose como loco. Se acercó y él tampoco podía creer lo que veía.
Estaba claro que hace rato que le tenía ganas a mi mujer por como estaba, y esa concha empapada demostraba que ella también se había excitado mucho.
Le hice un gesto con la cabeza que no iba a pasar nada, y le dije en voz baja que hasta ahí iba a llegar la cosa, pero no obstante eso, no podíamos sacarle los ojos de encima a esa mojada conchita deliciosa que tiene mi esposa.
Fue la mejor paja que me hice en mi vida, y ver a mi amigo pajearse frenéticamente y derramar su leche con tanta excitación solo por observar a mi esposa sin poder siquiera tocarla fue probablemente la experiencia MAS CALIENTE de mi vida.
Aunque ambos nos quedamos con todas las ganas de cogerla, nos fuimos al living a tomar una cerveza fría, calmarnos y prometimos que volveremos a intentarlo el mes próximo.
A todo esto, a la mañana siguiente, muy temprano porque teníamos que ir todos a trabajar, mi esposa se despertó con la tanga aún corrida, pero se acomodó y se hizo la boluda. Dijo que no se acordaba nada. Me preguntó con cara de sorpresa que había pasado, dijo que no se acordaba ni siquiera como había llegado hasta la cama y comentó que le había caído mal lo que tomó. Yo le dije que no había pasado nada, mientras la miraba fijo, intentando detectar si era cierto que no recordaba nada, pero desgraciadamente no pude darme cuenta si mentía o no.... Mientras tanto, solo de recordar lo sucedido la noche anterior, yo ya tenía nuevamente la pija dura....
Tengo un amigo que vive en el interior y una vez por mes viene a B.A. por trabajo, y como no tiene familia acá, se queda a dormir en casa, nos conocemos desde hace mil años.
Hace rato que vengo maquinando la idea de tratar de fomentar una noche de lujuria para hacer un trío con mi esposa y mi amigo.
Mi amigo tiene una buena pija (lo sé porque hemos compartido muchos vestuarios de futbol en la juventud), así que imagino que a mi esposa le gustaría ser penetrada por esa verga.
Además, como nos conocemos desde hace tantos años, le tengo mucha confianza, y sé que no solo la trataría muy gentilmente y "cariñosamente", sino que además solo se repetiría la experiencia si yo presto mi consentimiento, y en caso contrario él respetaría la decisión.
Para colmo está separado desde hace unos 6 meses, así que no tiene ataduras y vive caliente!!!!
Mi esposa, como ya lo habrán sabido apreciar, es muy atractiva, y cualquiera que fantasee con ella indefectiblemente acabará con la pija dura y queriendo cogerla, así que nunca tuve dudas que si le planteábamos el tema a mi amigo, seguro se prendería gustoso.
La cuestión es que el Martes pasado vino mi amigo, y yo me dije a mi mismo que esa noche debía ser LA NOCHE!!!
Cenamos juntos, obviamente con bastante alcohol para todos, mi esposa no está muy acostumbrada así que enseguida se puso alegre. Como hacía mucho calor ella estaba con un vestidito bien suelto y bastante corto, que dejaba ver bien sus piernas.
Luego de la cena (todavía yo no había blanqueado mis intenciones con ninguno de los dos), nos sentamos en el living, en el piso que estaba fresco, y seguimos tomando unos tragos.
Para mi absoluta sorpresa mi esposa de pronto se sentó con en posición de "indio" con las piernas cruzadas, probablemente por el efecto del alcohol, y no se dio cuenta que con las piernas así separadas, su corto vestido dejaba ver tu tanga.
Solo al ver eso mi pija se endureció.
Parecía que iba a ser mi noche de suerte, porque me dí cuenta que mi amigo (que estaba sentado justo frente a ella), también notó el exquisito paisaje que ella nos estaba mostrando.
Y si bien se hacía el boludo, no podía sacarle los ojos de encima a su entrepierna.
En una de esas, cuando me miraba de reojo para asegurarse que yo no me diera cuenta que él estaba encandilado con la imagen de mi esposa abierta de piernas, le guiñé el ojo en un gesto cómplice, que él entendió de inmediato (ya dije que nos conocemos mucho y nos entendemos sin hablarnos).
La charla siguió un rato, pero intencionalmente empecé a preguntarle a mi amigo por su vida sexual en estos meses de soltería y él hábilmente empezó a contarnos algunas cosas con lujo de detalles.
Al principio mi esposa me miró como diciéndome "que desubicado!!!!" pero después fue cambiando la expresión y me di cuenta que los relatos de mi amigo la estaban calentando, porque hacía preguntas que normalmente no haría y pedía más detalles....
Yo me dije, bueno... es esta noche... me levanté de mi lugar y me senté detrás de mi esposa, bien cerca, para que ella notara mi pija dura contra su cola... cosa que hizo porque me miró con cara de calentura. Empecé a masajear sus hombros, y mientras mi amigo seguía contando sus aventuras, yo le besaba la nuca a mi esposa, que ladeaba la cabeza para recibir mis besos cada vez más intensos.
Luego, muy sutilmente, le levanté aún más la falta del vestido al acariciar suavemente sus muslos, para ofrecerle a mi amigo una vista inmejorable.
Quedó prácticamente con el vestido levantado hasta la cintura, dejando a la vista completamente su tanga, que a esa altura ya se notaba húmeda entre sus piernas. Yo me asomaba desde atrás a ver ese panorama y no podía creer lo que estaba pasando.
Mi amigo viendo esta escena no pudo evitar tocarse el bulto, mi esposa y yo podíamos apreciar fácilmente que estaba hinchado, evidencia de que él tenía la pija muy dura.
Cómo no hubo reacción negativa de mi mujer, él hizo más evidente sus caricias, agarrándose la pija con fuerza a través del pantalón.
Yo estaba que volaba de calentura, y saqué mis manos de sus muslos para ir subiendo por su cintura hasta llegar a sus tetas, mientras ella no le sacaba los ojos de encima al bulto de mi amigo.
Siempre sentado detrás de ella apoyándola muy sugestivamente, le agarré la tetas, se dio vuelta, me miró y me dijo "nos estamos yendo a la mierda"... yo me hice el boludo y le dije "relajate y disfrutá de las caricias que estamos entre amigos", pero ella se paró de golpe y dijo que estaba muy cansada y que se quería ir a acostar... a lo que obviamente le contesté "vamos los tres y la seguimos en la cama?"... pero ella ella se puso colorada y no contestó...
Nos dijo "buenas noches", dio media vuelta y enfiló hacia la habitación.
Mi amigo y yo nos quedamos mirándonos sorprendidos y calientes a full.
Le dije que me esperara, que iba a ir a la habitación a ver si la convencía a mi esposa de entregarse a los dos. La verdad que esa era la primera vez que pasábamos por una situación como esa, y sinceramente no sabía si aquello era una invitación de mi esposa para que la cogiéramos como nunca antes entre los dos o si realmente había arrugado y no quería saber nada.
Apenas amagué a darme vuelta, y él se desabrochó el pantalón, y peló la verga, bien parada y lista para cogerse a mi esposa.
Verlo así de caliente con mi mujer me calentaba aún más a mí, no sé quién de los dos estaba más excitado.
Tuve que convencerlo que me esperara, que no fuera así de una a la habitación, porque se podía estropear en un instante todo el laburo fino que habíamos estado haciendo y porque no tenía claro que quería mi esposa, pero a toda costa él quería ir a cogerla.
Tardé un rato en frenarlo, y finalmente lo dejé con la pija dura en la mano y entré a la habitación. Mi esposa estaba en la cama, ni se había cambiado, estaba con el mismo vestido de antes, evidentemente había tomado demasiado, porque parecía que se había quedado dormida apenas se recostó en la cama, como si se hubiera desmayado ahí nomás.
Traté de despertarla con muchos mimos y caricias, pero no hubo caso... el alcohol la había volteado.
A todo esto, había quedado acostada boca arriba con las piernas completamente abiertas.
Yo no podía más de calentura, también había pelado mi verga dura para tentarla al entrar a la habitación y no podía parar de hacerme la paja.
No pude resistir la tentación de subirle nuevamente el vestido y suavemente le corrí la tanguita hacia un costado dejando su conchita empapada a la vista, no podía creer lo mojada que estaba, realmente se había calentado mucho con toda esa situación.
Me dí vuela y estaba mi amigo en la puerta de la habitación, pajeándose como loco. Se acercó y él tampoco podía creer lo que veía.
Estaba claro que hace rato que le tenía ganas a mi mujer por como estaba, y esa concha empapada demostraba que ella también se había excitado mucho.
Le hice un gesto con la cabeza que no iba a pasar nada, y le dije en voz baja que hasta ahí iba a llegar la cosa, pero no obstante eso, no podíamos sacarle los ojos de encima a esa mojada conchita deliciosa que tiene mi esposa.
Fue la mejor paja que me hice en mi vida, y ver a mi amigo pajearse frenéticamente y derramar su leche con tanta excitación solo por observar a mi esposa sin poder siquiera tocarla fue probablemente la experiencia MAS CALIENTE de mi vida.
Aunque ambos nos quedamos con todas las ganas de cogerla, nos fuimos al living a tomar una cerveza fría, calmarnos y prometimos que volveremos a intentarlo el mes próximo.
A todo esto, a la mañana siguiente, muy temprano porque teníamos que ir todos a trabajar, mi esposa se despertó con la tanga aún corrida, pero se acomodó y se hizo la boluda. Dijo que no se acordaba nada. Me preguntó con cara de sorpresa que había pasado, dijo que no se acordaba ni siquiera como había llegado hasta la cama y comentó que le había caído mal lo que tomó. Yo le dije que no había pasado nada, mientras la miraba fijo, intentando detectar si era cierto que no recordaba nada, pero desgraciadamente no pude darme cuenta si mentía o no.... Mientras tanto, solo de recordar lo sucedido la noche anterior, yo ya tenía nuevamente la pija dura....
21 comentarios - Fantasía cumplida: Mi amigo se masturba con mi esposa !!!!
Pero ese trabajo ni es de un día pa otro buen relatob