Me llamo Marcos, tengo 24 años, mi hermana se llama Laura y tiene 29 esta historia ocurrio hace un par de meses atras cuando salia con Claudio de unos 32 años.
Era normal que mis viejo no estén los fines de semana ya que agarraban el auto y se iban a pasear, mi hermana aprovechaba y traía al su chongo de turno para garcharselo.
Ella es una morocha de 1,75, piel bien blanca y unos ojos hermosos color verde y un pelo largo lacio hasta la hermosa cola que tiene bien manzanita, sus pechos son bien paraditos y grandes.
Es hermosa, no solo porque lo digo yo, sino que me lo decían mis compañeros del cole cuando se venían a quedar a dormir, nos hacíamos varias pajas pensando en ella. Su novio un negro feo pero con pija larga, por eso salia con él, ella no salia con pitos mas chicos que 18 cm, era exigente la putita
Yo sabia todo eso porque era normal que espié por el agujerito de la puerta cuando cogían.
Ese finde como yo estaba jugando a la play en mi pieza ellos decidieron cerrar mi puerta y garchar en el living, Yo vivo, sin hacer ruido abrí la puerta y me escondí para ver todo lo que hacían.
veía como él la sentó encima con la ropa puesta tocaba su orto mientras le comía la boca.
Después vi como el le saco su remera y vi su corpiño negro que contrastaba muy bien con su blanca piel, y casi no podía sujetar esos hermosos pechos que tenia. desajusto el corpiño, sus tetas inmóvil se quedaron mirando fijamente al negro feo ese, como pidiéndole ser comidas se le abalanzaron a su boca. él no dudo en empezar a tocar, chupar y morder esos pezones.
Ella caliente le saco la remera a él, y mientras el estaba entretenido con sus pechos ella metía mano dentro del pantalón de él. Mientras de apoco con la otra mano se bajaba el pantalón dejando a la luz esa tanguita negra que deslumbraba con ese culo hermoso.
Mi pantalón empezaba a crecer dejando en evidencia que me estaba calentando con toda la situación.Pierdo el equilibrio, y sin querer hago ruido, mi hermana me descubre y enloquecida me grita:
-Que haces pajero de mierda! Sos un enfermo sabias, Ahora vas a ver en primera fila como un hombre de verdad se garcha a una mujer, espero que aprendas, putito!
Trague saliva, Claudio me miro, se bajo los pantalones y dejo al aire libre sus 23 cm de poronga negra. me quede inmóvil, no sabia que hacer, mi hermana se reía.
mi hermana se sienta en el sillón, con una mano agarra la pija y se la lleva a la boca y la empieza a chupar, la hace desaparecer dentro de su boca. con la otra me agarra la cara y hace que no deje de mirar lo que estaba pasando, tenia la chota de ese negro a pocos centímetros de distancia, estaba muy nervioso.
Una vez que estaba bien lubricada esa enorme verga, mi puta hermana se arrodilla en el sillón y me obliga que me quede desnudo, quería ver como acababa viendo como la cogían.
Yo ya desnudo, con las manos a los costados escuchaba a Laura gemir de placer y veía que el negro hacia desaparecer en la concha esa enorme pija. se notaba que los dos estaban muy calientes, ya le temblaban las patitas a mi hermana y le dice a su novio.
-Gordo quiero que me llenes de leche el culo como tanto te gusta, quiero sentir esa bestia palpitando en mi culito.
-Te voy a llenar el tanque puta! te va a chorrear leche hasta la semana que viene.
Yo no podía creer lo trola que era mi hermana. y sabia que esa pija no podía entrar en su culo, pero me equivocaba no paso mucho tiempo para no ver mas esa pija, había entrado toda.
Siento que esa situación me había sobrepasado y sentía mi propia leche recorriendo mi pierna.
Laura se da cuenta y se acerca, se arrodilla en el piso y lame toda mi leche...
-Viste como se coje a una mujer putito!Ahora te toca a vos.
El novio se me acerca me agarra la cabeza y mete su pija dentro de mi boca, yo me estaba ahogando y mi hermana me dice.
-No hagas fuerza putito, si te portas bien dejo que me cojas.
No podía mas, sentía que era demasiada pija para mi boca, no entendía como lo había hecho mi hermana, la rara situación me hacia excitar, mi hermana lo sabia y se reía. Entendí que si me portaba bien no serian crueles conmigo. Comencé a lamer la pija de Claudio, mientras que acariciaba las bolas con mis manos. la pija parecía cada vez mas grande.
Laura se acuesta en el sillón y dice:
-Dejalo que venga un rato a chuparme la concha.
Claudio me suelta, veo su chota que chorreaba leche, me arrodillo y empiezo a chuparle la concha a mi hermana, no paso ni un minuto y siento que me tocaban la cola y que no solo era tocada, sino que Claudio empezaba a meter un dedo húmedo en mi ano.
Me recorrió un escalofrío por la espalda, que de a poco se hacia placentero y se ve que empezaba a poner cara de goloso, porque mi hermana se dio cuenta y me decía ves putito lo lindo que se siente tener un hombre como la gente encima.
Cuando me quise dar cuenta, me doy cuenta que el negro estaba enfilando su enorme pija a mi culito virgen. Solo atine a gritar:
-Nooooooooooooooooooooooooooo cuidado es mi primera vez me vas a desgarrraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaar.
Ahí ya fui, no me dejo decir nada más, ya estaba bombeandome su enorme pija dentro mio, yo lagrimeaba de dolor, pero no podía parar, se hacia cada vez as placentero.
Cuando me di cuenta había llenado de leche el cuerpo de mi hermana que se pasaba la mano y se la llevaba a la boca saboreando mi cálida leche.
A mi lado se sentó el negro y me dijo al oido.
-Siempre supe que ese culito depilado iba a ser mio, tu hermana nunca me creyó que eras tan puto.
Desde ese día, chongo que trae La trola de hermana, no se va sin que yo al menos le haga un pete.
Era normal que mis viejo no estén los fines de semana ya que agarraban el auto y se iban a pasear, mi hermana aprovechaba y traía al su chongo de turno para garcharselo.
Ella es una morocha de 1,75, piel bien blanca y unos ojos hermosos color verde y un pelo largo lacio hasta la hermosa cola que tiene bien manzanita, sus pechos son bien paraditos y grandes.
Es hermosa, no solo porque lo digo yo, sino que me lo decían mis compañeros del cole cuando se venían a quedar a dormir, nos hacíamos varias pajas pensando en ella. Su novio un negro feo pero con pija larga, por eso salia con él, ella no salia con pitos mas chicos que 18 cm, era exigente la putita
Yo sabia todo eso porque era normal que espié por el agujerito de la puerta cuando cogían.
Ese finde como yo estaba jugando a la play en mi pieza ellos decidieron cerrar mi puerta y garchar en el living, Yo vivo, sin hacer ruido abrí la puerta y me escondí para ver todo lo que hacían.
veía como él la sentó encima con la ropa puesta tocaba su orto mientras le comía la boca.
Después vi como el le saco su remera y vi su corpiño negro que contrastaba muy bien con su blanca piel, y casi no podía sujetar esos hermosos pechos que tenia. desajusto el corpiño, sus tetas inmóvil se quedaron mirando fijamente al negro feo ese, como pidiéndole ser comidas se le abalanzaron a su boca. él no dudo en empezar a tocar, chupar y morder esos pezones.
Ella caliente le saco la remera a él, y mientras el estaba entretenido con sus pechos ella metía mano dentro del pantalón de él. Mientras de apoco con la otra mano se bajaba el pantalón dejando a la luz esa tanguita negra que deslumbraba con ese culo hermoso.
Mi pantalón empezaba a crecer dejando en evidencia que me estaba calentando con toda la situación.Pierdo el equilibrio, y sin querer hago ruido, mi hermana me descubre y enloquecida me grita:
-Que haces pajero de mierda! Sos un enfermo sabias, Ahora vas a ver en primera fila como un hombre de verdad se garcha a una mujer, espero que aprendas, putito!
Trague saliva, Claudio me miro, se bajo los pantalones y dejo al aire libre sus 23 cm de poronga negra. me quede inmóvil, no sabia que hacer, mi hermana se reía.
mi hermana se sienta en el sillón, con una mano agarra la pija y se la lleva a la boca y la empieza a chupar, la hace desaparecer dentro de su boca. con la otra me agarra la cara y hace que no deje de mirar lo que estaba pasando, tenia la chota de ese negro a pocos centímetros de distancia, estaba muy nervioso.
Una vez que estaba bien lubricada esa enorme verga, mi puta hermana se arrodilla en el sillón y me obliga que me quede desnudo, quería ver como acababa viendo como la cogían.
Yo ya desnudo, con las manos a los costados escuchaba a Laura gemir de placer y veía que el negro hacia desaparecer en la concha esa enorme pija. se notaba que los dos estaban muy calientes, ya le temblaban las patitas a mi hermana y le dice a su novio.
-Gordo quiero que me llenes de leche el culo como tanto te gusta, quiero sentir esa bestia palpitando en mi culito.
-Te voy a llenar el tanque puta! te va a chorrear leche hasta la semana que viene.
Yo no podía creer lo trola que era mi hermana. y sabia que esa pija no podía entrar en su culo, pero me equivocaba no paso mucho tiempo para no ver mas esa pija, había entrado toda.
Siento que esa situación me había sobrepasado y sentía mi propia leche recorriendo mi pierna.
Laura se da cuenta y se acerca, se arrodilla en el piso y lame toda mi leche...
-Viste como se coje a una mujer putito!Ahora te toca a vos.
El novio se me acerca me agarra la cabeza y mete su pija dentro de mi boca, yo me estaba ahogando y mi hermana me dice.
-No hagas fuerza putito, si te portas bien dejo que me cojas.
No podía mas, sentía que era demasiada pija para mi boca, no entendía como lo había hecho mi hermana, la rara situación me hacia excitar, mi hermana lo sabia y se reía. Entendí que si me portaba bien no serian crueles conmigo. Comencé a lamer la pija de Claudio, mientras que acariciaba las bolas con mis manos. la pija parecía cada vez mas grande.
Laura se acuesta en el sillón y dice:
-Dejalo que venga un rato a chuparme la concha.
Claudio me suelta, veo su chota que chorreaba leche, me arrodillo y empiezo a chuparle la concha a mi hermana, no paso ni un minuto y siento que me tocaban la cola y que no solo era tocada, sino que Claudio empezaba a meter un dedo húmedo en mi ano.
Me recorrió un escalofrío por la espalda, que de a poco se hacia placentero y se ve que empezaba a poner cara de goloso, porque mi hermana se dio cuenta y me decía ves putito lo lindo que se siente tener un hombre como la gente encima.
Cuando me quise dar cuenta, me doy cuenta que el negro estaba enfilando su enorme pija a mi culito virgen. Solo atine a gritar:
-Nooooooooooooooooooooooooooo cuidado es mi primera vez me vas a desgarrraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaar.
Ahí ya fui, no me dejo decir nada más, ya estaba bombeandome su enorme pija dentro mio, yo lagrimeaba de dolor, pero no podía parar, se hacia cada vez as placentero.
Cuando me di cuenta había llenado de leche el cuerpo de mi hermana que se pasaba la mano y se la llevaba a la boca saboreando mi cálida leche.
A mi lado se sentó el negro y me dijo al oido.
-Siempre supe que ese culito depilado iba a ser mio, tu hermana nunca me creyó que eras tan puto.
Desde ese día, chongo que trae La trola de hermana, no se va sin que yo al menos le haga un pete.
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