MI ESPOSA COGIDA POR SUS AMIGOS Y YO, ESPERAMOS PUNTOS Y COMENTARIOS.
Mi esposa es cogida frente a mí, sin mi consentimiento, y según yo, sin el de ella. Pero las cosas tomaron un giro distinto al final.
Esto es verdaderamente insólito para mi. Pero no puedo dejar de contar lo que paso una noche en nuestra casa después de su fiesta de cumpleaños.
Ya que todos describen a sus esposas, allí les va. Bronceada, 87, 60, 88. 1.58 metros de estatura, se parece a una modelo Colombiana, Catalina Aristizabal, solo que bajita. Daniela realmente es un monumento. Además mantiene la concha rasurada y, o usa hilo dental, o nada………….esto es para complacerme solamente a mi.
Resulta que para su cumpleaños hizo un almuerzo e invitó a un tumulto de gente. Nunca había invitado tanta gente y como a las 10 pm se comenzaron a ir los invitados. Durante toda la tarde me había estado coqueteando, cosa que me encantaba, y se ponía en posiciones comprometedoras para que la mirara yo y de plano la controlaron algunos de sus compañeros de colegio. Como estaba en mini algunas veces se le miraban las nalgas y si ella quería de vez en cuando se agachaba y me enseñaba su braguita. En algún momento escuché que uno de ellos le dijo jugueteando que como estaba de bien, que era la mejor de la clase. Realmente no se si en el colegio tuvo rollo con alguno de ellos, pero lo deje ir por alto. Según yo ella solamente había sido mía. Total que se fueron todos y quedaron Rubén, Renzo y Juan Carlos. Renzo era un tipazo tipo italiano, alto y cuerpo de modelo. JC musculoso y también bien parecido, y Rubén normal no tan bien parecido.
Ya a esas horas después de las copas y toda una tarde de insinuaciones y coqueteos, te querés ir a coger a tu mujer! Pero de repente surgió la idea de jugar un juego y a mi esposa se le ocurrió uno de cartas eróticas que tenemos. La verdad me extrañé mucho pero estaba caliente y pensé………….que puede pasar?
Nos entramos a la sala y comenzó el juego, y sugerí quitar las cartas muy atrevidas (las de desnudarse y tocar los genitales y lamerlos y hacer striptease, etc) y lógicamente accedieron.y que sale una carta de besale el cuello y que ella se lo besa a Renzo, y después acariciale la espalda y JC se la acaricia a mi esposa, y Rubén le lame las orejas a ella y que yo bailo pegado un minuto con ella, y así se fue el juego y ya estábmos todos bastante calientes cuando de repente sale una carta "prohibida".
La carta decia:"subite la falda y te sentás sobre el de la derecha y te movés en círculos". Yo me puse frío y furioso pero a la vez caliente. Mi esposa me volvió a ver y con su mirada me pidió permiso. Yo accedí y le dije a Renzo que no la tocara. Al sentarse sobre él cual fue mi sorpresa que no tenía sus braguitas. No dejo que observaran porque se sentó rápido pero me imagino que sintió el gran bulto de Renzo en esa posición. Comenzó a girar y se le salió un gemido de placer. Me imagino que su conchita, como estaba desnuda, sintió roce directo en su capuyo. En ese momento Renzo la tomo de la cintura y le paso sus manos por la entrepierna y como estaba sentada de espaldas a él y viéndonos a nosotros, le subió la falda y pudimos observar todos su concha rapada y bien mojada.
Me alteré un poco y le reclamé a Renzo y la soltó al instante, mientras los otros dos estaban boquiabiertos y sobándose la polla. Les confieso que tuve una sensación extrañísima, porque estaba enfadado pero nunca me había excitado tanto, ni siquiera aún cuando mi esposa me seducía para cogerme. "No te enojes Pedro, es que tu mujer es lo mejor que cualquiera de nosotros pudo haber tenido y no me resistí. No volverá a pasar". A todo esto mi esposa ni se había dado cuenta que le habíamos visto el coño. Si le agradó que Renzo le tocara la entrepierna y la cintura, pero también al instante se quitó de encima.
Un par de rondas más y tocó que me amarrara a la silla mientras me hacía un baile provocativo. Accedí y comenzó a bailar para deleite de los tres! Me pasaba sus pechos en la cara y los miraba a través de su brasier de encaje, y se dio la vuelta se subió en la silla y me mostró su conchita, bien humedecida. Ví de reojo a los demás y estaban atentísimos a sus movimientos, incluso al ella subirse en la silla, hasta se agacharon para disfrutar del espectáculo. Se comenzó a desabotonar la blusa y me miraba con una mirada que nunca le había visto. Se mojaba los labios y gemía. De pronto veo dos manos extrañas que le empiezan a sobar las tetas!
No! Les dije, era Rubén que se había colocado detrás de ella. Ella al sentir esas manos extrañas paró de moverse y se volteó y les dijo que eso no estaba permitido en el juego. A lo que Rubén le dijo: "Ya nos tenés tan calientes que te queremos coger los tres. Y tu marido va a ver lo que es bueno!" Yo me quede mudo……….y como estaba amarrado a la silla no pude oponerme a lo que viene!
En ese instante JC y Renzo la tomaron de los brazos y la recostaron en el sillón frente a mi. Mi esposa no se creía lo que sus amigos estaban por hacerle. Se negaba pero no forcejeaba mucho. En ese momento ví en sus ojos que realmente deseaba tener a los tres! Le brillaban y los abría como nunca.
No la violen por favor.
Si no la vamos a violar, Pedro. Esto le va a gustar a ella tanto como a ti.
Suéltenme por favor.
No chicos, no lo hagan, era solo un juego. Yo nunca lo he hecho con nadie mas que con Pedro.
Esto los puso a mil a los tres, y la verdad me estaba calentando!
Pues veras que delicioso es tener otra polla dentro de ti.
No chicos por favor.
Muchachos, no lo hagan, no a la fuerza.
En mi mente pasaban mil cosas pero una de ellas resaltó.
Esta bien háganlo pero con cuidado, con amor, no la desgarren y pónganse protección.
Mi esposa accedió a hacerlo con consentimiento, siempre y cuando me soltaran. Pero ellos se negaron a soltarme hasta que estuviera calmado. A todo esto ya tenían a mi esposa desnuda sobre el sillón. JC y Renzo le lamían cada uno una teta. Tenía tan erectos sus pezones! Rubén le estaba besando las piernas y se las abría y yo miraba todo su interior. El le subía las piernas y le lamía hasta el culito, cosa que a ella no le gustaba. Sosténganme las piernas les dijo a los otros. Y lo hicieron. Mi mujer estaba más abierta que nunca y bien lamida de sus partes. Realmente no se si era saliva o sus propios jugos.
Se turnaron los tres para lamerle su coñito y ya ella dejo de oponerse. Yo también deje de forcejear y me dedique a ver como disfrutaban de mi esposa. Los tres procedieron a desnudarse y ya tenían bien erectas sus pollas. JC y Rubén eran grandes como de 9 pulgadas, pero Renzo era inmenso! La tenía como de 14. Creo que ni en películas había visto una así. Además gruesísima.
A ver nena come un poco de polla.
No quiero. No me gusta. Solo la de mi marido.
Pues así será entonces. A ver Pedro.- y Rubén me la fue a sacar.-
Ya la tenés hinchada. Como que estas caliente. Te queres coger a tu mujercita? Te vamos a complacer ya que esta algo calientita y te quiere a vos.
Eso me tranquilizó un poco, ya que pensé que solo querían tocarla y lamerla y ver que yo me la cogiera. Pero no me desamarraron. Rubén procedió a pajeármela, cosa que sentí rarísimo pero yo ya estaba a mil. Ya con mi polla bien erecta me acercaron a mi esposa y la cargaron y la pusieron a escasos centímetros de mi polla. Así de cerca miraba como le goteaba, y si, eran sus jugos. Ya comenzaban a hincharse sus labios y su capullo estaba rojizo, pero no salía del capuchón. En eso comienza JC a penetrarla con sus dedos. Los otros la sostenían sin problema en el aire. Tenía ese espectáculo a escasos centímetros de mi sin poder hacer nada.
Le metió hasta tres y luego procedió Ruben y Renzo. Todo lo que hacían se lo hacían en turnos. Le dijeron que me pajeara mientras le metían los dedos. Ella bramaba. Tuvo unos dos o tres orgasmos en unos 10 minutos que no pararon de metérselos, uno tras del otro. De pronto le comienzan a follar el culo con dedos también. Como estaba bien lubricada entraron hasta dos sin problema. Le abrieron el culito, le dieron vuelta y me la sentaron en mi polla. Sentí delicioso ya que siempre había querido cogérmela por el culo y nunca había accedido. Ella ni hacía esfuerzo ya que los dos más fornidos la subían y bajaban. Era un espectáculo ver como la penetraba por tan ansiado agujero.
De pronto me desamarraron y pronto comencé a tocarle las tetas y los pezones. La puse de perrito y le dí todo lo que tenía.
Ves que no tenías de que preocuparte Pedro.
Bien que está rica tu mujer. Y si que la vamos a disfrutar. Pero con tu consentimiento. Para que ella también lo disfrute.
Si mi amor. Cogeme mas profundo por favor. Maas, maaasss.- y uno tras otro orgasmo!
A todo esto les estaba mamando las pollas a los tres mientras yo seguía disfrutando de ese culito. Y a eso de los tres minutos comence a correrme. Que delicioso! Acabe toneladas.
-Ahora nos toca a nosotros Pedro.- Se sacaron sus preservativos y comenzaron uno por uno por el culo. Como ya estaba abierto por mis embestidas las de Rubén y JC entraron bien. Me preocupaba la de Renzo. Hicieron lo suyo los dos y acabaron junto con mi esposa las dos veces. –Es mi turno.- dijo Renzo. Se acostó en la alfombra y el mástil era descomunal! –Sentate nena- y mi mujer casi sin fuerzas la tuvieron que ayudar los otros. Definitivamente si no la hubiéramos penetrado antes no le hubiera entrado siquiera la cabeza! Trajeron lubricante, que lo sacaron no se de donde, y bañaron la super polla de Renzo. Ahora si entró ese monstruo. Solo llevaba la cuarta parte y mi mujercita lloraba del dolor. Me quise levantar y me detuvieron los otros. –Ya pasará- Y comenzó a entrar despacio pero a ritmo contínuo. No lo podía creer. Estaban las 14 pulgadas dentro de su culito! Y ahora comenzó a disfrutar del sube y baja. Su conchita se le miraba hinchadísima. Y había desaparecido el espacio entre el culo y la concha. Era tan grande que mi mujercita la agarró con sus dos manos porque una no le llegaban los dedos.
La tuvo así durante unos dos minutos y se la sacó. Mi mujer tuvo como otros dos orgasmos. Sin embargo Renzo no acabó. La dejaron tendida en el piso. -Vete a lavar la pinga que ahora viene la mejor parte.- Pensé que esto terminaría en que se cogieron a mi esposa por el culo únicamente. Bueno pensé al menos no le regaron su leche en su conchita. Eso si no quería yo.
Me fui a lavar y cuando regresé encontré una sorpresa aún mayor. La tenían sobre la mesa y se la estaban comiendo los tres al mismo tiempo. La masturbaban y comían una y otra vez. Ya se le notaba un poco el capullo fuera del capuchón. En eso Rubén le pone la punta en la entrada y se la soba y la pajea con la punta. En eso noté que no tenía preservativo puesto. Y cuando iva a reclamar, se la mete entera! Ya Daniela estaba recuperada y sube sus piernas y recibe con gusta esa polla. Mientras JC le mete los dedos por el culo y Renzo le pone en la boca el mástil. Yo me acerque y me la agarro con la otra mano. Después JC le pide permiso a Rubén y procede a follar como nunca, con una velocidad increíble. – Te quiero a ti- me dice mi esposa. JC se hace a un lado y se la meto yo. El coño estaba tan lubricado que entró con gran facilidad. Les pido que no le acaben adentro cuando se corran y me dicen que esta bien.
Pasamos tres rondas los tres y Renzo solamente dejaba que se la mamara.
-Cuando sería tu turno Renzo? Me da miedo tu torre. Me podés partir en dos.
-Paciencia que te estan preparando.
La cambiamos de misionero, a perrito. Nos sentábamos en el sillón y ella sobre nosotros. Muchas poses. Todos aguantamos sin corrernos, y a los 15 minutos de estar cogiendo magistralmete, dijo Renzo: "Es hora, llevemosla al dormitorio."
La subimos al dormitorio, Daniela se tendió sobre la cama y no quedamos quietos. Abrió sus piernas tanto como pudo. Renzo le lamió sus jugos y le echó mas saliva suya y comenzó a penetrar. Con la punta sobre su entrada no se le miraba nada! Cubría toda la concha y hasta el culo! Poco a poco presionaba y presionaba hasta que vi como entraba.
Tardo en meterla unos 2 minutos y solamente entró la mitad! Gritaba de dolor y lloraba. Pero quería sentirla toda. Entraba y salía y miraba como sus labios desaparecían de lo estirados que estaban. Su capullo estaba todo salido y rozaba directamente contra el cuerpo de esa super polla. El dolor se convirtió en placer y luego vinieron los orgasmos. Eran incontables.
Así metida se la sentó encima. Quedaba prácticamente en el aire. La tuvimos que ayudar a montarlo. Se lo estaba disfrutando! Después se la sentó de espaldas viéndonos a nosotros. Los tres estábamos con la boca abierta. Seguido la puso de perrito y mientras la bombeaba le introducía dos dedos en el culito. Sus tetitas se movían con un vaivén aceleradísimo. A pesar que eran pequeñas aun así se movían por la fuerza de las embestidas. Era seguro que la polla de Renzo topaba al fondo de la concha de mi esposa, y por eso las grandes sacudidas junto con orgasmos y grandes cantidades de líquido que supuse era de mi esposa ya que los tres prometieron no acabar adentro.
Pasaron cogiendo unos 15 minutos más y la cambió de nuevo recostada en la cama. Mi esposa gritaba y pedía más como nunca la había visto.
Me gusta papi, así fuerte, que grandota la tenés, me llena completita! No parés de cogerme. Nunca había sentido tanto placer en mi vida! Maaaasss, maaaaaas, duro,duro.
Me corro, me corro!- y bombeaba como perro!
Sacala Renzo, sacala!- le dije.
Y veo como mi esposa le agarra la espalda, porque de tan larga no le llegaban las manos a las nalgas, y viéndome a mi le dice:
Acabame adentro! Quiero sentir tu leche, tu semen delicioso dentro de mi. Rebalsame. Mi amor quiero sentir semen de otro dentro mio. Porfavor dejame. Ya me penetraron mi vagina sin protección, dejame que me acaben adentro!
Sentí un dolor en el estómago aún mas fuerte que cuando la penetraron en su concha. Pero cuando escuche sus palabras, mi excitación fue tal que hasta sentí que me brotaba el semen de mi polla.
No, no lo hagas Renzo.-
Pero era demasiado tarde. Como me encontraba prácticamente detrás de ellos solo ví como salía de los bordes de la concha de mi esposa leche blanca y espesa. Salía y salía. Y el bombeo se tornó más violento. Mi esposa gritaba acabando una tras otra. Y Renzo no paraba de acabar. Ya nada podía hacer más que disfrutar ese momento. Tenía tanta rabia pero al mismo tiempo tan excitado de ver como se corrían juntos y jadeaban y después ella besó a Renzo en la boca apasionadamente mientras todavía seguían moviéndose en una coordinación perfecta. Parecía que Renzo acababa por segunda vez! Y volvió a decirlo, y mi esposa quería mas leche.
Se retiró por fin y la vista era impresionante. Se miraba todo el interior de su vagina como una cueva. Podía ver hasta adentro. Ríos de semen brotaban de su interior y sus labios y su capullo estaban rojos e hinchados como nunca podrían estar. Se miraba todo el capullo fuera del capuchón. Eso nunca lo había visto en mi vida. Entonces solo pude desplomarme en el sillón del dormitorio y quedé como embrutecido.
Rubén con la polla que le estallaba se acercó le lamió el capullo a lo cual Daniela brincó y la penetró. Unas treinta embestidas y estaba acabando adentro también. Luego JC ocupó su lugar y otras cincuenta embestidas y acabó. De la polla de Renzo seguía saliendo semen y Daniela se lo comía lentamente. Ella ya no se movía. Sólo recibía pija dura y semen. Estaba feliz.
Pasaron unos cuatro o cinco minutos y Renzo tenía otra erección. No podía creerlo. La volteó, le puso una almohada bajo el vientre, le separó las piernas y se la cogió tendida en la cama boca abajo. La vista era realmente espectacular. Me moría de los celos pero estaba excitadísimo. Quería seguir viendo como prácticamente violaban a mi esposa los tres. Luego se pusieron de lado con Daniela de espaldas a Renzo. Le levantó una pierna y seguía bombeando. Luego la puso sobre él siempre de espaldas y continuó. Después la puso de perro y de nuevo se corrió dentro de ella.
Pensé que había visto todo y ya no me importaba cuanta leche le echaran adentro. Rubén y JC se habían recuperado. De pronto se puso JC en la esquina de la cama sentado. Rubén tomo a Daniela y la puso sobre JC abrazándolo cara a cara. JC se la metió en su concha y Daniela comenzó a saltar! Todavía le quedaban fuerzas a la zorra! Lo besaba apasionadamente mientras brincaba sobre el. Deduje que con las pollas de ellos si podía menearse a su antojo porque eran más pequeñas.
En eso JC se recuesta y la hala hacia él, quedando expuesto su ano dilatado y brilloso escurrido de semen y jugo vaginal. Se acerca Ruben y le ensarta su polla en el culo mientras JC le llena la concha! Una doble penetración ni en sueños! Daniela dio un grito de placer y gimió. – Que delicia, que rico los dos a la vez!-
Se movían los tres con un ritmo abrumador. Yo estaba sentado justo frente al espectáculo, viendo como era penetrada doblemente. Era una vista increíble y yo quería participar. Me paré y moví a Rubén. Introduje mi miembro en su dilatado culo y comencé a bombear.
Mi amor! Que bueno que te uniste. Quería sentirte a ti también. No quería que te quedaras sin disfrutarme.-
Mientras nos movíamos JC y yo, Rubén lamía los pezones y Renzo le lamía los alrededores de la concha. Como se metió allí abajo………..quien sabe! Todos estábamos en acción. Ahora Rubén nos movió y pidió la concha. Bueno, pensé. JC va a querer culo, pues me moví y volví al sillón mientras me pajeaba.
Rubén ocupo el lugar de JC, siempre él boca arriba, pero pusieron a Daniela sobre Rubén también boca arriba. Le metió su polla en la concha y comenzó a bombear. JC se acercó mientras me decía que viniera a ver. Lamió su capullo con la polla de Rubén metida, levantó las piernas de Daniela, las abrió y para mi sorpresa procedió a penetrar también su concha! Era una doble penetración dentro de la concha! Increíble!
Había una frotación de pollas dentro de la concha de mi esposa y se las estaba tragando a las dos. El placer en ella era descomunal. No paraba de tener orgasmos. De pronto Rubén dice que se corre y JC también y mi esposa también. Era un espectáculo ver los tres acabando simultáneamente. El semen salía casi como cuando Renzo acabó dentro de ella. Yo quería participar de esto.
Quité a JC e introduje mi polla en ese mismo lugar. Estaba tan caliente allí adentro. Tan lubricado, y el roce con la polla de Rubén era delicioso. Comencé mi bombeo y realmente no aguante mucho. Unas veinte bombeadas rápidas y yo también me corrí.
Seguido nos levantamos y Renzo que estaba sentado en el sillón pidió una última cogida a lo que Daniela accedió y se sentó sobre él. Después de tener dos pollas juntas dentro de su concha ya fue fácil la entrada de Renzo. Ahora si disfrutó mi esposa a Renzo. Se pudo mover con más facilidad y ella tomó la iniciativa del movimiento. A todo esto pasamos los tres a que nos lamiera nuestras pollas hasta dejarlas limpias. Para que tuviera mejor alcance a nuestras pollas Renzo la movió de perrito y así continuó el deleite de Daniela. Renzo pudo bombear rápidamente en esta ocasión. Mi esposa se corrió unas tres veces más mientras nos trataba de parar de nuevo nuestras pollas.
Renzo acabó de una vez por todas dándole de nuevo gran cantidad de leche, y yo pedí por el culo ya que me hacía falta por allí. Renzo se movió y en esa misma posición, de perrito la penetré en su ano. Que delicia. Estaba tan caliente y lubricado, lleno de semen de sus amigos. Bombeé con una fuerza increíble y parecía ya no dolerle más. Sólo experimentaba placer. De pronto sentí que me acariciaban mis huevos.
Vaya última sorpresa! Mientras me follaba el culo de mi mujer, los tres tipos lamían su coño, mis huevos, mi culo y el tronco de mi polla a la vez! Quien lamía que, no lo se, pero fue fenomenal. Como estaba como ido con tanto placer, solo sentí que Renzo se puso detrás de mi, pasó su gran polla debajo de mis huevos, me pidió que abriera mis piernas, y entró por la concha de mi mujer! Valla tamaño para poder alcanzar por allí a mi esposa! Comenzó a bombear y sólo le entraba la punta. Lo cual sentía delicioso por el roce con mi polla dentro del culo de Daniela. Además tenía vista suficiente para ver la penetración. Rubén lamía por debajo las tetas de Daniela y JC lamía el tronco de Renzo y mis huevos. Renzo agarraba mi tronco cada vez que salía del culo de mi esposa y con la otra mano me sobaba las nalgas. De pronto Renzo sacó de inmediato su polla y acabó en mis nalgas abriéndolas un poco para que cayera en mi ano.
No se que pretendían estos tíos pero iba a disfrutar aún más! Yo seguía bombeando el trasero de Daniela. JC me pidió que me pusiera con mi pecho pegado a la espalda de Daniela. Con esta posición abrí aun más mis nalgas. JC comenzó a lamerme el ano y mis huevos! Rubén seguía lamiendo tetas y concha de Daniela. Daniela estaba feliz y más aún sintiéndome en su trasero y que yo lo estaba disfrutando. En eso siento unos dedos en mi ano queriendo penetrar. Era JC y con el semen de Renzo logró buena lubricación. Luego introdujo su polla en mi culo y formamos un tren increíble. Yo no me creía que estaba sintiendo tan rico ser penetrado por un macho en mi culo. Pero el éxtasis fue mayor. Renzo se acostó debajo de Daniela y logró penetrarla de nuevo en su concha. No más le entró la punta Daniela bramaba mas que nunca. Rubén por su lado se fue a la boca de mi esposa, mientras Renzo que estaba debajo de ella le lamía los huevos y el tronco y la boca de mi mujer.
No parábamos de bombearnos todos cuando fue hora de la última explosión. Simultáneamente acabé dentro del culo de Daniela, JC dentro de mi culo, Renzo dentro de la concha de Daniela y Rubén en la boca de Daniela y Renzo. Ya todos estábamos llenos de todo! Realmente había un charco de semen en esa habitación. Nos levantamos, nos metimos a la ducha todos y allí fuimos besando y lamiendo los cuatro, el cuerpo de Daniela bien satisfecho por la cogida de su vida!
Mi esposa es cogida frente a mí, sin mi consentimiento, y según yo, sin el de ella. Pero las cosas tomaron un giro distinto al final.
Esto es verdaderamente insólito para mi. Pero no puedo dejar de contar lo que paso una noche en nuestra casa después de su fiesta de cumpleaños.
Ya que todos describen a sus esposas, allí les va. Bronceada, 87, 60, 88. 1.58 metros de estatura, se parece a una modelo Colombiana, Catalina Aristizabal, solo que bajita. Daniela realmente es un monumento. Además mantiene la concha rasurada y, o usa hilo dental, o nada………….esto es para complacerme solamente a mi.
Resulta que para su cumpleaños hizo un almuerzo e invitó a un tumulto de gente. Nunca había invitado tanta gente y como a las 10 pm se comenzaron a ir los invitados. Durante toda la tarde me había estado coqueteando, cosa que me encantaba, y se ponía en posiciones comprometedoras para que la mirara yo y de plano la controlaron algunos de sus compañeros de colegio. Como estaba en mini algunas veces se le miraban las nalgas y si ella quería de vez en cuando se agachaba y me enseñaba su braguita. En algún momento escuché que uno de ellos le dijo jugueteando que como estaba de bien, que era la mejor de la clase. Realmente no se si en el colegio tuvo rollo con alguno de ellos, pero lo deje ir por alto. Según yo ella solamente había sido mía. Total que se fueron todos y quedaron Rubén, Renzo y Juan Carlos. Renzo era un tipazo tipo italiano, alto y cuerpo de modelo. JC musculoso y también bien parecido, y Rubén normal no tan bien parecido.
Ya a esas horas después de las copas y toda una tarde de insinuaciones y coqueteos, te querés ir a coger a tu mujer! Pero de repente surgió la idea de jugar un juego y a mi esposa se le ocurrió uno de cartas eróticas que tenemos. La verdad me extrañé mucho pero estaba caliente y pensé………….que puede pasar?
Nos entramos a la sala y comenzó el juego, y sugerí quitar las cartas muy atrevidas (las de desnudarse y tocar los genitales y lamerlos y hacer striptease, etc) y lógicamente accedieron.y que sale una carta de besale el cuello y que ella se lo besa a Renzo, y después acariciale la espalda y JC se la acaricia a mi esposa, y Rubén le lame las orejas a ella y que yo bailo pegado un minuto con ella, y así se fue el juego y ya estábmos todos bastante calientes cuando de repente sale una carta "prohibida".
La carta decia:"subite la falda y te sentás sobre el de la derecha y te movés en círculos". Yo me puse frío y furioso pero a la vez caliente. Mi esposa me volvió a ver y con su mirada me pidió permiso. Yo accedí y le dije a Renzo que no la tocara. Al sentarse sobre él cual fue mi sorpresa que no tenía sus braguitas. No dejo que observaran porque se sentó rápido pero me imagino que sintió el gran bulto de Renzo en esa posición. Comenzó a girar y se le salió un gemido de placer. Me imagino que su conchita, como estaba desnuda, sintió roce directo en su capuyo. En ese momento Renzo la tomo de la cintura y le paso sus manos por la entrepierna y como estaba sentada de espaldas a él y viéndonos a nosotros, le subió la falda y pudimos observar todos su concha rapada y bien mojada.
Me alteré un poco y le reclamé a Renzo y la soltó al instante, mientras los otros dos estaban boquiabiertos y sobándose la polla. Les confieso que tuve una sensación extrañísima, porque estaba enfadado pero nunca me había excitado tanto, ni siquiera aún cuando mi esposa me seducía para cogerme. "No te enojes Pedro, es que tu mujer es lo mejor que cualquiera de nosotros pudo haber tenido y no me resistí. No volverá a pasar". A todo esto mi esposa ni se había dado cuenta que le habíamos visto el coño. Si le agradó que Renzo le tocara la entrepierna y la cintura, pero también al instante se quitó de encima.
Un par de rondas más y tocó que me amarrara a la silla mientras me hacía un baile provocativo. Accedí y comenzó a bailar para deleite de los tres! Me pasaba sus pechos en la cara y los miraba a través de su brasier de encaje, y se dio la vuelta se subió en la silla y me mostró su conchita, bien humedecida. Ví de reojo a los demás y estaban atentísimos a sus movimientos, incluso al ella subirse en la silla, hasta se agacharon para disfrutar del espectáculo. Se comenzó a desabotonar la blusa y me miraba con una mirada que nunca le había visto. Se mojaba los labios y gemía. De pronto veo dos manos extrañas que le empiezan a sobar las tetas!
No! Les dije, era Rubén que se había colocado detrás de ella. Ella al sentir esas manos extrañas paró de moverse y se volteó y les dijo que eso no estaba permitido en el juego. A lo que Rubén le dijo: "Ya nos tenés tan calientes que te queremos coger los tres. Y tu marido va a ver lo que es bueno!" Yo me quede mudo……….y como estaba amarrado a la silla no pude oponerme a lo que viene!
En ese instante JC y Renzo la tomaron de los brazos y la recostaron en el sillón frente a mi. Mi esposa no se creía lo que sus amigos estaban por hacerle. Se negaba pero no forcejeaba mucho. En ese momento ví en sus ojos que realmente deseaba tener a los tres! Le brillaban y los abría como nunca.
No la violen por favor.
Si no la vamos a violar, Pedro. Esto le va a gustar a ella tanto como a ti.
Suéltenme por favor.
No chicos, no lo hagan, era solo un juego. Yo nunca lo he hecho con nadie mas que con Pedro.
Esto los puso a mil a los tres, y la verdad me estaba calentando!
Pues veras que delicioso es tener otra polla dentro de ti.
No chicos por favor.
Muchachos, no lo hagan, no a la fuerza.
En mi mente pasaban mil cosas pero una de ellas resaltó.
Esta bien háganlo pero con cuidado, con amor, no la desgarren y pónganse protección.
Mi esposa accedió a hacerlo con consentimiento, siempre y cuando me soltaran. Pero ellos se negaron a soltarme hasta que estuviera calmado. A todo esto ya tenían a mi esposa desnuda sobre el sillón. JC y Renzo le lamían cada uno una teta. Tenía tan erectos sus pezones! Rubén le estaba besando las piernas y se las abría y yo miraba todo su interior. El le subía las piernas y le lamía hasta el culito, cosa que a ella no le gustaba. Sosténganme las piernas les dijo a los otros. Y lo hicieron. Mi mujer estaba más abierta que nunca y bien lamida de sus partes. Realmente no se si era saliva o sus propios jugos.
Se turnaron los tres para lamerle su coñito y ya ella dejo de oponerse. Yo también deje de forcejear y me dedique a ver como disfrutaban de mi esposa. Los tres procedieron a desnudarse y ya tenían bien erectas sus pollas. JC y Rubén eran grandes como de 9 pulgadas, pero Renzo era inmenso! La tenía como de 14. Creo que ni en películas había visto una así. Además gruesísima.
A ver nena come un poco de polla.
No quiero. No me gusta. Solo la de mi marido.
Pues así será entonces. A ver Pedro.- y Rubén me la fue a sacar.-
Ya la tenés hinchada. Como que estas caliente. Te queres coger a tu mujercita? Te vamos a complacer ya que esta algo calientita y te quiere a vos.
Eso me tranquilizó un poco, ya que pensé que solo querían tocarla y lamerla y ver que yo me la cogiera. Pero no me desamarraron. Rubén procedió a pajeármela, cosa que sentí rarísimo pero yo ya estaba a mil. Ya con mi polla bien erecta me acercaron a mi esposa y la cargaron y la pusieron a escasos centímetros de mi polla. Así de cerca miraba como le goteaba, y si, eran sus jugos. Ya comenzaban a hincharse sus labios y su capullo estaba rojizo, pero no salía del capuchón. En eso comienza JC a penetrarla con sus dedos. Los otros la sostenían sin problema en el aire. Tenía ese espectáculo a escasos centímetros de mi sin poder hacer nada.
Le metió hasta tres y luego procedió Ruben y Renzo. Todo lo que hacían se lo hacían en turnos. Le dijeron que me pajeara mientras le metían los dedos. Ella bramaba. Tuvo unos dos o tres orgasmos en unos 10 minutos que no pararon de metérselos, uno tras del otro. De pronto le comienzan a follar el culo con dedos también. Como estaba bien lubricada entraron hasta dos sin problema. Le abrieron el culito, le dieron vuelta y me la sentaron en mi polla. Sentí delicioso ya que siempre había querido cogérmela por el culo y nunca había accedido. Ella ni hacía esfuerzo ya que los dos más fornidos la subían y bajaban. Era un espectáculo ver como la penetraba por tan ansiado agujero.
De pronto me desamarraron y pronto comencé a tocarle las tetas y los pezones. La puse de perrito y le dí todo lo que tenía.
Ves que no tenías de que preocuparte Pedro.
Bien que está rica tu mujer. Y si que la vamos a disfrutar. Pero con tu consentimiento. Para que ella también lo disfrute.
Si mi amor. Cogeme mas profundo por favor. Maas, maaasss.- y uno tras otro orgasmo!
A todo esto les estaba mamando las pollas a los tres mientras yo seguía disfrutando de ese culito. Y a eso de los tres minutos comence a correrme. Que delicioso! Acabe toneladas.
-Ahora nos toca a nosotros Pedro.- Se sacaron sus preservativos y comenzaron uno por uno por el culo. Como ya estaba abierto por mis embestidas las de Rubén y JC entraron bien. Me preocupaba la de Renzo. Hicieron lo suyo los dos y acabaron junto con mi esposa las dos veces. –Es mi turno.- dijo Renzo. Se acostó en la alfombra y el mástil era descomunal! –Sentate nena- y mi mujer casi sin fuerzas la tuvieron que ayudar los otros. Definitivamente si no la hubiéramos penetrado antes no le hubiera entrado siquiera la cabeza! Trajeron lubricante, que lo sacaron no se de donde, y bañaron la super polla de Renzo. Ahora si entró ese monstruo. Solo llevaba la cuarta parte y mi mujercita lloraba del dolor. Me quise levantar y me detuvieron los otros. –Ya pasará- Y comenzó a entrar despacio pero a ritmo contínuo. No lo podía creer. Estaban las 14 pulgadas dentro de su culito! Y ahora comenzó a disfrutar del sube y baja. Su conchita se le miraba hinchadísima. Y había desaparecido el espacio entre el culo y la concha. Era tan grande que mi mujercita la agarró con sus dos manos porque una no le llegaban los dedos.
La tuvo así durante unos dos minutos y se la sacó. Mi mujer tuvo como otros dos orgasmos. Sin embargo Renzo no acabó. La dejaron tendida en el piso. -Vete a lavar la pinga que ahora viene la mejor parte.- Pensé que esto terminaría en que se cogieron a mi esposa por el culo únicamente. Bueno pensé al menos no le regaron su leche en su conchita. Eso si no quería yo.
Me fui a lavar y cuando regresé encontré una sorpresa aún mayor. La tenían sobre la mesa y se la estaban comiendo los tres al mismo tiempo. La masturbaban y comían una y otra vez. Ya se le notaba un poco el capullo fuera del capuchón. En eso Rubén le pone la punta en la entrada y se la soba y la pajea con la punta. En eso noté que no tenía preservativo puesto. Y cuando iva a reclamar, se la mete entera! Ya Daniela estaba recuperada y sube sus piernas y recibe con gusta esa polla. Mientras JC le mete los dedos por el culo y Renzo le pone en la boca el mástil. Yo me acerque y me la agarro con la otra mano. Después JC le pide permiso a Rubén y procede a follar como nunca, con una velocidad increíble. – Te quiero a ti- me dice mi esposa. JC se hace a un lado y se la meto yo. El coño estaba tan lubricado que entró con gran facilidad. Les pido que no le acaben adentro cuando se corran y me dicen que esta bien.
Pasamos tres rondas los tres y Renzo solamente dejaba que se la mamara.
-Cuando sería tu turno Renzo? Me da miedo tu torre. Me podés partir en dos.
-Paciencia que te estan preparando.
La cambiamos de misionero, a perrito. Nos sentábamos en el sillón y ella sobre nosotros. Muchas poses. Todos aguantamos sin corrernos, y a los 15 minutos de estar cogiendo magistralmete, dijo Renzo: "Es hora, llevemosla al dormitorio."
La subimos al dormitorio, Daniela se tendió sobre la cama y no quedamos quietos. Abrió sus piernas tanto como pudo. Renzo le lamió sus jugos y le echó mas saliva suya y comenzó a penetrar. Con la punta sobre su entrada no se le miraba nada! Cubría toda la concha y hasta el culo! Poco a poco presionaba y presionaba hasta que vi como entraba.
Tardo en meterla unos 2 minutos y solamente entró la mitad! Gritaba de dolor y lloraba. Pero quería sentirla toda. Entraba y salía y miraba como sus labios desaparecían de lo estirados que estaban. Su capullo estaba todo salido y rozaba directamente contra el cuerpo de esa super polla. El dolor se convirtió en placer y luego vinieron los orgasmos. Eran incontables.
Así metida se la sentó encima. Quedaba prácticamente en el aire. La tuvimos que ayudar a montarlo. Se lo estaba disfrutando! Después se la sentó de espaldas viéndonos a nosotros. Los tres estábamos con la boca abierta. Seguido la puso de perrito y mientras la bombeaba le introducía dos dedos en el culito. Sus tetitas se movían con un vaivén aceleradísimo. A pesar que eran pequeñas aun así se movían por la fuerza de las embestidas. Era seguro que la polla de Renzo topaba al fondo de la concha de mi esposa, y por eso las grandes sacudidas junto con orgasmos y grandes cantidades de líquido que supuse era de mi esposa ya que los tres prometieron no acabar adentro.
Pasaron cogiendo unos 15 minutos más y la cambió de nuevo recostada en la cama. Mi esposa gritaba y pedía más como nunca la había visto.
Me gusta papi, así fuerte, que grandota la tenés, me llena completita! No parés de cogerme. Nunca había sentido tanto placer en mi vida! Maaaasss, maaaaaas, duro,duro.
Me corro, me corro!- y bombeaba como perro!
Sacala Renzo, sacala!- le dije.
Y veo como mi esposa le agarra la espalda, porque de tan larga no le llegaban las manos a las nalgas, y viéndome a mi le dice:
Acabame adentro! Quiero sentir tu leche, tu semen delicioso dentro de mi. Rebalsame. Mi amor quiero sentir semen de otro dentro mio. Porfavor dejame. Ya me penetraron mi vagina sin protección, dejame que me acaben adentro!
Sentí un dolor en el estómago aún mas fuerte que cuando la penetraron en su concha. Pero cuando escuche sus palabras, mi excitación fue tal que hasta sentí que me brotaba el semen de mi polla.
No, no lo hagas Renzo.-
Pero era demasiado tarde. Como me encontraba prácticamente detrás de ellos solo ví como salía de los bordes de la concha de mi esposa leche blanca y espesa. Salía y salía. Y el bombeo se tornó más violento. Mi esposa gritaba acabando una tras otra. Y Renzo no paraba de acabar. Ya nada podía hacer más que disfrutar ese momento. Tenía tanta rabia pero al mismo tiempo tan excitado de ver como se corrían juntos y jadeaban y después ella besó a Renzo en la boca apasionadamente mientras todavía seguían moviéndose en una coordinación perfecta. Parecía que Renzo acababa por segunda vez! Y volvió a decirlo, y mi esposa quería mas leche.
Se retiró por fin y la vista era impresionante. Se miraba todo el interior de su vagina como una cueva. Podía ver hasta adentro. Ríos de semen brotaban de su interior y sus labios y su capullo estaban rojos e hinchados como nunca podrían estar. Se miraba todo el capullo fuera del capuchón. Eso nunca lo había visto en mi vida. Entonces solo pude desplomarme en el sillón del dormitorio y quedé como embrutecido.
Rubén con la polla que le estallaba se acercó le lamió el capullo a lo cual Daniela brincó y la penetró. Unas treinta embestidas y estaba acabando adentro también. Luego JC ocupó su lugar y otras cincuenta embestidas y acabó. De la polla de Renzo seguía saliendo semen y Daniela se lo comía lentamente. Ella ya no se movía. Sólo recibía pija dura y semen. Estaba feliz.
Pasaron unos cuatro o cinco minutos y Renzo tenía otra erección. No podía creerlo. La volteó, le puso una almohada bajo el vientre, le separó las piernas y se la cogió tendida en la cama boca abajo. La vista era realmente espectacular. Me moría de los celos pero estaba excitadísimo. Quería seguir viendo como prácticamente violaban a mi esposa los tres. Luego se pusieron de lado con Daniela de espaldas a Renzo. Le levantó una pierna y seguía bombeando. Luego la puso sobre él siempre de espaldas y continuó. Después la puso de perro y de nuevo se corrió dentro de ella.
Pensé que había visto todo y ya no me importaba cuanta leche le echaran adentro. Rubén y JC se habían recuperado. De pronto se puso JC en la esquina de la cama sentado. Rubén tomo a Daniela y la puso sobre JC abrazándolo cara a cara. JC se la metió en su concha y Daniela comenzó a saltar! Todavía le quedaban fuerzas a la zorra! Lo besaba apasionadamente mientras brincaba sobre el. Deduje que con las pollas de ellos si podía menearse a su antojo porque eran más pequeñas.
En eso JC se recuesta y la hala hacia él, quedando expuesto su ano dilatado y brilloso escurrido de semen y jugo vaginal. Se acerca Ruben y le ensarta su polla en el culo mientras JC le llena la concha! Una doble penetración ni en sueños! Daniela dio un grito de placer y gimió. – Que delicia, que rico los dos a la vez!-
Se movían los tres con un ritmo abrumador. Yo estaba sentado justo frente al espectáculo, viendo como era penetrada doblemente. Era una vista increíble y yo quería participar. Me paré y moví a Rubén. Introduje mi miembro en su dilatado culo y comencé a bombear.
Mi amor! Que bueno que te uniste. Quería sentirte a ti también. No quería que te quedaras sin disfrutarme.-
Mientras nos movíamos JC y yo, Rubén lamía los pezones y Renzo le lamía los alrededores de la concha. Como se metió allí abajo………..quien sabe! Todos estábamos en acción. Ahora Rubén nos movió y pidió la concha. Bueno, pensé. JC va a querer culo, pues me moví y volví al sillón mientras me pajeaba.
Rubén ocupo el lugar de JC, siempre él boca arriba, pero pusieron a Daniela sobre Rubén también boca arriba. Le metió su polla en la concha y comenzó a bombear. JC se acercó mientras me decía que viniera a ver. Lamió su capullo con la polla de Rubén metida, levantó las piernas de Daniela, las abrió y para mi sorpresa procedió a penetrar también su concha! Era una doble penetración dentro de la concha! Increíble!
Había una frotación de pollas dentro de la concha de mi esposa y se las estaba tragando a las dos. El placer en ella era descomunal. No paraba de tener orgasmos. De pronto Rubén dice que se corre y JC también y mi esposa también. Era un espectáculo ver los tres acabando simultáneamente. El semen salía casi como cuando Renzo acabó dentro de ella. Yo quería participar de esto.
Quité a JC e introduje mi polla en ese mismo lugar. Estaba tan caliente allí adentro. Tan lubricado, y el roce con la polla de Rubén era delicioso. Comencé mi bombeo y realmente no aguante mucho. Unas veinte bombeadas rápidas y yo también me corrí.
Seguido nos levantamos y Renzo que estaba sentado en el sillón pidió una última cogida a lo que Daniela accedió y se sentó sobre él. Después de tener dos pollas juntas dentro de su concha ya fue fácil la entrada de Renzo. Ahora si disfrutó mi esposa a Renzo. Se pudo mover con más facilidad y ella tomó la iniciativa del movimiento. A todo esto pasamos los tres a que nos lamiera nuestras pollas hasta dejarlas limpias. Para que tuviera mejor alcance a nuestras pollas Renzo la movió de perrito y así continuó el deleite de Daniela. Renzo pudo bombear rápidamente en esta ocasión. Mi esposa se corrió unas tres veces más mientras nos trataba de parar de nuevo nuestras pollas.
Renzo acabó de una vez por todas dándole de nuevo gran cantidad de leche, y yo pedí por el culo ya que me hacía falta por allí. Renzo se movió y en esa misma posición, de perrito la penetré en su ano. Que delicia. Estaba tan caliente y lubricado, lleno de semen de sus amigos. Bombeé con una fuerza increíble y parecía ya no dolerle más. Sólo experimentaba placer. De pronto sentí que me acariciaban mis huevos.
Vaya última sorpresa! Mientras me follaba el culo de mi mujer, los tres tipos lamían su coño, mis huevos, mi culo y el tronco de mi polla a la vez! Quien lamía que, no lo se, pero fue fenomenal. Como estaba como ido con tanto placer, solo sentí que Renzo se puso detrás de mi, pasó su gran polla debajo de mis huevos, me pidió que abriera mis piernas, y entró por la concha de mi mujer! Valla tamaño para poder alcanzar por allí a mi esposa! Comenzó a bombear y sólo le entraba la punta. Lo cual sentía delicioso por el roce con mi polla dentro del culo de Daniela. Además tenía vista suficiente para ver la penetración. Rubén lamía por debajo las tetas de Daniela y JC lamía el tronco de Renzo y mis huevos. Renzo agarraba mi tronco cada vez que salía del culo de mi esposa y con la otra mano me sobaba las nalgas. De pronto Renzo sacó de inmediato su polla y acabó en mis nalgas abriéndolas un poco para que cayera en mi ano.
No se que pretendían estos tíos pero iba a disfrutar aún más! Yo seguía bombeando el trasero de Daniela. JC me pidió que me pusiera con mi pecho pegado a la espalda de Daniela. Con esta posición abrí aun más mis nalgas. JC comenzó a lamerme el ano y mis huevos! Rubén seguía lamiendo tetas y concha de Daniela. Daniela estaba feliz y más aún sintiéndome en su trasero y que yo lo estaba disfrutando. En eso siento unos dedos en mi ano queriendo penetrar. Era JC y con el semen de Renzo logró buena lubricación. Luego introdujo su polla en mi culo y formamos un tren increíble. Yo no me creía que estaba sintiendo tan rico ser penetrado por un macho en mi culo. Pero el éxtasis fue mayor. Renzo se acostó debajo de Daniela y logró penetrarla de nuevo en su concha. No más le entró la punta Daniela bramaba mas que nunca. Rubén por su lado se fue a la boca de mi esposa, mientras Renzo que estaba debajo de ella le lamía los huevos y el tronco y la boca de mi mujer.
No parábamos de bombearnos todos cuando fue hora de la última explosión. Simultáneamente acabé dentro del culo de Daniela, JC dentro de mi culo, Renzo dentro de la concha de Daniela y Rubén en la boca de Daniela y Renzo. Ya todos estábamos llenos de todo! Realmente había un charco de semen en esa habitación. Nos levantamos, nos metimos a la ducha todos y allí fuimos besando y lamiendo los cuatro, el cuerpo de Daniela bien satisfecho por la cogida de su vida!
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