Mi primera vez en un telo (relato gay)

Les paso a contar lo que me pasó hoy, fue mi primera vez en un telo. Había salido del boliche con amigos, comimos algo, paseamos un rato y después me alcanzaron en auto hasta la estación de Once (serían las 11 o 11.30 de la mañana) yo había tomado bastante, seguía mareado, pero bien. Entro a la estación para tomar el tren y tuve ganas de ir al baño, por todo lo que había tomado, pelo la verga, hago lo mio y cuando la estoy por guardar se me pone al lado un tipo de unos 30 años, alto con una pija gorda y empieza a hacerse la paja, me la tocó un poco y se fue, eso me dejó re caliente y mi pija ya se estaba poniendo dura. La gente entraba y salía y se me pone al lado un pibe morocho, de pelo corto, alto, (24 años me dijo) normal, nada especial, pero con una linda pija, también normal. Se hace la paja mirando mi pija y yo igual, hasta que me dice "vení, vamos a hacer algo" sin responderle solo lo seguí, caminamos algunas cuadras hablando de estupideces y entramos a un telo, pide el cuarto paga y entramos. Nunca había ido a uno, me daban "rechazo" y pensaba que eran como una habitación salida de la película de Silent Hill (? pero no, era bastante lindo, la habitación grande igual que la cama y me sentí cómodo. No nos dimos ni un solo beso, nos empezamos a desvestir, se acostó y empecé a chuparle la pija. Primero pasaba la lengua por el tronco, le chupaba las bolas, después lamía la cabeza y después me la metía toda hasta la garganta, el no se movía, me dejaba petearlo bien como me gusta a mi, me ahogaba con su pija y a el le gustaba, acostado con los brazos atrás de la cabeza me miraba y eso me hacía chuparla todavía más rapido, me volvía loco. Le levanté las piernas, le chupaba las bolas y el orto, le encantaba, después de un rato se pone un forro y me dice "sentate arriba" bien directo, no lo dudé y me senté de una, entró toda sin problema, lo estuve cabalgando un buen rato hasta que me da vuelva, me acuesta, me levanta las piernas y empieza a cojerme piernas al hombro, eso me volvía loco y yo gemía bastante, me encantaba como entraba esa pija. Me pone en cuatro y me rompe el orto un rato más, hasta que vuelvo a cabalgar y me dice que está por acabar, escuché como gemía y como le latía la verga largando la leche, eso me volvió loco pero no acabé, ni siquiera me toqué, solo quería concentrarme en cabalgar bien al machito. Nos quedamos acostados, me abrazó y le empiezo a acariciar la verga ya dormida, hablamos un poco más (me dijo su nombre, edad, y esas cosas que no me importaban en el momento) le pasé mi celular y al rato salimos, nos despedimos y cada uno para su lado.