No hubo tiempo para buscar siquiera un forro. Ella saltaba encima mío, gemia, gozaba, me cabalgaba como ninguna otra. Yo veía como la claridad de la ventana caía por sobre sus tetas que saltaban a su ritmo. Me abraza y me besaba, el sabor a leche se mantenía en su boca y se mezclaba con el alcohol.
Me cabalgaba cada vez más fuerte, más intenso y disfrutaba de cada guarrada que decía "Soy tu putita, toda tu putita, dame toda la leche" me decía al oído y luego me pasaba la lengua. Yo tomaba sus tetas y las acariciaba mientras veia su carita tan putona. En un momento me tomó de la cabeza y me la apretó fuerte sobre sus pechos "chupame las tetas o no te cojo más". Se las empecé a lamer desaforadamente, luego a chuparlas y a meterme lo más que podía en la boca, ella me apretaba más fuerte y me cogía cada vez más, gritaba del placer. Estábamos los dos muy calientes disfrutando del momento. Dsp de bastante chupar y cojer, la tome del pelo, la tire para atrás y le escupí las tetas. Tanto le calentó que en ese momento gimió acabando encima mío una cantidad impresionante de flujo. Sentí toda mi pija, mis huevos y hasta mi año húmedo de tanto liquido.
Sin descanso se volvió a agachar para chuparme la pija llena de su sabor a conchita. Todo lo que hacía me calentaba más y más. Mi pija seguía durísima y con ganas de seguir acabando.
Sin soltar su pelo, la levante y la tire sobre el sillón obligándola a ponerse en 4. No lo dudó ni un instante, así que le empecé a chupar toda la concha bien fuerte. Jugueteaba con mi lengua y mi nariz, viajando del clitoris hasta el culito, que por la posición podía ver que no era para nada virgen. Seguí chupandosela mientras con la nariz empujaba su ano. Ella gozaba y se tomaba del apoyabrazos con fuerte mientras me seguía mojando la cara.
"Cojeme, quiero toda tu leche adentro". Sucumbí a su pedido, me incorpore y de una estocada se la metí toda. Grito de placer y me pidió que la cojiera muy fuerte. La tome de la cintura y empecé a cojerla cada vez más fuerte, mientras más fuerte le daba, me pedía más y más. Entonces la agarre del pelo y la cogí lo más fuerte que pude. En breve y con las piernas casi acalambradas le largue toda mi leche adentro. Ella acabó nuevamente al sentir la lechita calentita que abarcaba todo su interior y cayó rendida sobre el sillón, la di vuelta acostada y volví a chupar su conchita que chorreaba leche y jugo, ella me acariciaba la cabeza mientras tanto. Después de un rstito de acumular líquidos en mi boca. Me acosté a su lado, me abrazo y nuevamente nos besamos compartiendo ese saborbviscoso y excitante de tantos flujos calientes.
Todos sudados y cojidos nos quedamos recostados. " Mi novio llega dsp del mediodia, quiero que duermas conmigo" dijo y se durmió. Me quede viendola. Era hermosa, putita, y de otro, por la ventana el sol ya había despuntado. Con mi pija entre sus piernas, mi mano en su cola, me deje dormir.
Me cabalgaba cada vez más fuerte, más intenso y disfrutaba de cada guarrada que decía "Soy tu putita, toda tu putita, dame toda la leche" me decía al oído y luego me pasaba la lengua. Yo tomaba sus tetas y las acariciaba mientras veia su carita tan putona. En un momento me tomó de la cabeza y me la apretó fuerte sobre sus pechos "chupame las tetas o no te cojo más". Se las empecé a lamer desaforadamente, luego a chuparlas y a meterme lo más que podía en la boca, ella me apretaba más fuerte y me cogía cada vez más, gritaba del placer. Estábamos los dos muy calientes disfrutando del momento. Dsp de bastante chupar y cojer, la tome del pelo, la tire para atrás y le escupí las tetas. Tanto le calentó que en ese momento gimió acabando encima mío una cantidad impresionante de flujo. Sentí toda mi pija, mis huevos y hasta mi año húmedo de tanto liquido.
Sin descanso se volvió a agachar para chuparme la pija llena de su sabor a conchita. Todo lo que hacía me calentaba más y más. Mi pija seguía durísima y con ganas de seguir acabando.
Sin soltar su pelo, la levante y la tire sobre el sillón obligándola a ponerse en 4. No lo dudó ni un instante, así que le empecé a chupar toda la concha bien fuerte. Jugueteaba con mi lengua y mi nariz, viajando del clitoris hasta el culito, que por la posición podía ver que no era para nada virgen. Seguí chupandosela mientras con la nariz empujaba su ano. Ella gozaba y se tomaba del apoyabrazos con fuerte mientras me seguía mojando la cara.
"Cojeme, quiero toda tu leche adentro". Sucumbí a su pedido, me incorpore y de una estocada se la metí toda. Grito de placer y me pidió que la cojiera muy fuerte. La tome de la cintura y empecé a cojerla cada vez más fuerte, mientras más fuerte le daba, me pedía más y más. Entonces la agarre del pelo y la cogí lo más fuerte que pude. En breve y con las piernas casi acalambradas le largue toda mi leche adentro. Ella acabó nuevamente al sentir la lechita calentita que abarcaba todo su interior y cayó rendida sobre el sillón, la di vuelta acostada y volví a chupar su conchita que chorreaba leche y jugo, ella me acariciaba la cabeza mientras tanto. Después de un rstito de acumular líquidos en mi boca. Me acosté a su lado, me abrazo y nuevamente nos besamos compartiendo ese saborbviscoso y excitante de tantos flujos calientes.
Todos sudados y cojidos nos quedamos recostados. " Mi novio llega dsp del mediodia, quiero que duermas conmigo" dijo y se durmió. Me quede viendola. Era hermosa, putita, y de otro, por la ventana el sol ya había despuntado. Con mi pija entre sus piernas, mi mano en su cola, me deje dormir.
2 comentarios - Acabamos la noche (cont)