Crecí en una familia de lo más normal; mi papá pasaba mucho tiempo fuera de casa por su trabajo y mi mami se encargaba de la casa y de mí, la única hija del matrimonio.
Todo iba sobre ruedas hasta que un día mi papá se fue de casa, con el tiempo supe que con otra mujer. Yo me quedé con mi mama y apenas veía a mi papi ya que por motivos de trabajo tuvo que mudarse a río cuarto una ciudad a casi cuatro horas de Córdoba capital.
Yo tenía entonces once años y mi relación con mi papi se limitaba a estar con él unos días en vacaciones y muchas llamadas al celu. Me sentía querida por él, pero no podía evitar tenerle odio por haber separado la familia que yo creía que éramos antes. Sobre todo culpaba a su actual mujer de todo, ya que me era más fácil.
Poco a poco mi mama fue rehaciendo su vida, con unas nuevas amigas, eso coincidió con que mi papa y su nueva familia volvieron a vivir a Córdoba , y al final con dieciséis años empecé a pasar más tiempo en casa de mi padre y su familia.
Con claudia su actual pareja simplemente no me llevaba, para ella era un estorbo en su familia en la que para ella solo cabían su hijísimo y mi padre; pero digamos que con el tiempo aprendimos a tolerarnos por un bien común; Aunque no peleábamos tampoco teníamos relación ni trató.
Con su hijo la relación tampoco era buena, pero como estaba poco en casa ya que estudiaba fuera tampoco había mucho lio
Así pasaron los años de mi adolescencia, terminé los estudios, encontré un trabajo y me fui a vivir con mi novio a nueva Córdoba...
La relación con mi papa era en ese entonces la de cualquier chica de 18 con el suyo y como hija de padres separados intentaba repartir mi tiempo entre mi papa mi mamá y mi novio.
Con mi papa a pesar de amarlo nuestra relación había empeorado porque yo a pesar de entender mejor la separación de mis padres, seguía culpándola a Claudia su actual mujer, supongo que porque tampoco ella hacia nada por cambiar mi imagen de ella y no ocultaba su desagrado hacia mí.
Entonces cuando lo tenía todo controlado, me pelee con mi novio y tuve que recurrir a mi pa
Papi: -Me pelee con Juan y me fui del depto, no tengo donde quedarme hasta que junte plata para alquilar de nuevo, me puedo quedar en tu casa? –le pedí llorando-
-Claro mi amor, ¿qué pasó?
Le conté la pelea al igual que el ofrecimiento de mama, pero allí no podía quedarme ya que no había lugar era un mono ambiente y ya vivían 3. En cambio ellos vivían en una casa en el ccuntry la recerva (que para los que conocen cordoba es cerca de kempes) muy grande y facundo el hijo de Claudia tampoco vivía ahi.
-Consúltalo con ella, no te lo pediría si hubiera otra opción
- no hay nada que preguntar, sos mi hija y es mi casa
Sonreí satisfecha ante la batalla ganada frente a ella. En unos días me mudé.
-¿Vas a quedarte mucho?-me dijo Claudia sin ocultar su enojo-
-Un par de meses, tengo un departamento arreglado de palabra con una amiga para septiembre.
Se fue a la cocina y me lancé al cuello de mi padre.
-Gracias papi, espero que esto no te traiga quilombo...
-Ya esta hija no pasa nada
Aunque intentara ocultarlo me di cuenta en los días sucesivos que ella apenas le hablaba y que estaba siempre con mala onda.
La cosa empeoró unas semanas después cuando Facundo su hijo vino a pasar un fin de semana.
-Vaya “hermanita” te veo bien –dijo en el tono de siempre-
-Hola Facundo.
Claudia estaba feliz detrás de su hijito y más lejos aún de mi papá y de mí, me planteé irme porque odiaba ver a mi papi así por mi culpa.
-Papi una amiga me hace lugar en su departamento asique me voy, no quiero complicarte la vida
-vos no te vas esta es mi casa y no quiero dar mi brazo a torcer en esto
No necesité más, claro que iba a quedarme, quería quedarme.
Al día siguiente Facu me invitó a salir con él y sus amigos a los boliches del chateau esa zona donde están todos los boliches chetos, acepté. Claudia se quería matar!
-Tu mamá no se puso muy contenta con que me invites he!
-Nunca lo está, mira que no aguanta a mi novia y hoy me dijo que recuerde que tengo novia.
Extrañamente la pase bárbaro con Facu fuimos a Carreras justo esa noche tocaba Agapornis, asique estaba el boliche llenisimo, se quedó toda la noche a mi lado para no dejarme colgada. Tipo seis de la madrugada lo buscó para irnos y lo encuentro charlando con uno de sus amigos
-Boludooo tu hermanita esta mas buena que comer pollo con la mano ¿me vas ha decir que no te morís por culiartela?-
-Más vale boludoo, al principio no quería compartir nada con ella, la odiaba porque creía que con siete años menos, podía venir y usurpar todo, pero mi impresión cambio a medida que le crecieron las tetas –dijo Facu y supe que hablaban de mi-
-Yo llevo toda la noche con ganas de arrinconarla, subirle ese vestidito y metérsela hasta los huevos mientras le sobo esas tetas –dijo su amigo
Lo llamé y le pedí si nos íbamos, nos despedimos y salimos del boliche. Tomamos una taxi y cuando llegamos ya me había pegado el fresquito de la mañana sumado a lo que había tomado y casi me caigo en la puerta de casa cuando justo me agarró de la cintura. Entramos directamente a la cocina y apoyándome en el desayunador sacó un vaso de agua y me lo pasó.
-Gracias
-De nada hermosa–dijo sorprendiéndome-
-No me mires así es cierto
-Andaaa, si no me soportas –le dije con voz pastosa y juguetona-
-Eso era cuando éramos chicos nunca me gustó compartir. Aunque te aseguro que hace años que no te veo como esa odiosa nena–dijo animado por el alcohol-
Instintivamente crucé los brazos escondiendo mis tetas de su mirada hambrienta.
-No te tapes –dijo acercándome y soltando mis brazos a los lados-
-para boludo , ¿te acordas que tenes novia?
-Intento, pero mira como me tenés-dijo agarrándome la mano y llevándome hasta la pija-
-Anda y hacete una paja, basta
-No hables así, además ya me he hecho mil pajas pensando en tus tetas
Se acercó a mí aprisionándome contra la heladera...
-No pongas esa cara, es verdad.
-No quiero cojer con vos, salii –le dije-
-¿Seguro?-dijo metiendo su muslo entre mis piernas-
Instintivamente me froté contra su pierna.
-Mientes, puedo notar el calor de tu conchita a través de la tela, putita
-No quiero complicarme la vida –le dije con el ultimo poco de cordura-
-Yo tampoco, quiero a mi novia, pero ahora solo puedo pensar en cojerte de una vez por todas
Metió la mano entre su muslo y miconchita y con dos dedos frotó mi tanga rozandome el clitoris. Yo gemí al notar como me mojaba con su caricia y todo se descontroló.
Apartó mi tanga y buscando la entrada empujó dos de sus dedos dentro de mi vagina, jadee y moví las caderas.
-Deseas esto tanto como yo putita –dijo subiéndome a la mesada
A toda prisa con una sola mano se desabrocho el cinturón, el botón y sacó su dura y larga pija,
Me corrió la tanga a un costadito, pasó la mano por detrás de mí y con el ante brazo me puso al borde de la mesaday con la otra la llevó donde habían estado sus dedos y me la metió de una hasta el fondo
-Uf putita que placer, las veces que me pajeo pensando en esto! pero estas tan caliente y mojada…(aclaró para los que no saben soy squirter)
Ne cojio sin parar entrando y saliendo rápido cada vez más.
-Haces que de nuevo me sienta como cuando tenía veintitrés y tu dieciséis, estoy tan caliente que no puedo creer lo dura que me pones la pija decía mientras su frente se cubría de sudor-
-No pares –le dije entre gemidos
Me exitaba y me exita mucho que me hablen sucio que me digan puta que me traten como una prostituta eso me vuelve loca...
Acabe con las piernas alrededor de sus caderas y el culo apenas apoyado en la mesada
Desabrochó mi camisa con prisas y algún botón salto por los aires, abrió la camisa y sacó mis pechos del corpiño y los estrujó.
Volví a acabar y se quedó sorprendido por la rapidez con la que volvía hacerlo y de la forma en que salían chorros de mi flujo
-mira vos mi “hermanita” no imaginaba que fueras tan putita. Me tienes loco perdido –dijo con rabia ahora-
Supe que odiaba perder el control y ahora no tenía ni un poco y yo disfrutaba sabiendo eso.
Movi las caderas en circulo y salió rápidamente.
-casi haces que me corra puta. ¡Ponte de rodillas!
Bajé y me arrodillé ante el con cara de nenita buena
El agarrándome del pelo con una mano me acercó la pija a la cara
-A ver como la chupas hermanos, quiero que te la tragues toda..
Separé los labios y su mano me instó a acercarme, el movió las caderas y me la metió hasta la campanilla, apenas podía respirar pero no hice ademan de pararlo.
Aflojó sin soltar mi pelo y empecé a lamer toda su pija, luego pasé la lengua por el pequeño orificio e hice círculos con mi lengua antes de succionar su glande.
-pero que bien hermanos sos toda una chupa pijas!!!
Empujó de nuevo y agarrándome ahora con ambas manos se se estaba cojiendo mi boca, los ojos se me llenaron de lágrimas por la brusquedad y la fuerza. Estaba enojado, totalmente descontrolado la sacó y pajeandose me lleno de lechita bien calentita la boca y hasta un par de gotas cayeron en mis tetas...
Metió la pija en su pantalón sin dejar de mirarme y me lanzó una servilleta de papel.
-Estas divina con la cara y tetas llenas de mi leche. Límpiate y vamos a dormir –dijo visiblemente arrepentido-
Cuando salí de la cocina diez minutos después meencontre de frente a mi papi, me revise mentalmente y avergonzada levanté la mirada.
-Hola hija veo que llegaron! –dijo con voz rara-
-Sí, hace un ratito. Me voy a la cama
Me fui a la cama, la cabeza me daba vueltas tras la última loca media hora. Tras la breve charla con mi padre pensé que podía habernos oído, pero rechacé la idea pensando y diciéndome que se lo habría notado, no creo que le gustara ver a su hija en esa situación.
Si les gusta esta parte hay más! Espero sus comentarios y sus puntos!
Todo iba sobre ruedas hasta que un día mi papá se fue de casa, con el tiempo supe que con otra mujer. Yo me quedé con mi mama y apenas veía a mi papi ya que por motivos de trabajo tuvo que mudarse a río cuarto una ciudad a casi cuatro horas de Córdoba capital.
Yo tenía entonces once años y mi relación con mi papi se limitaba a estar con él unos días en vacaciones y muchas llamadas al celu. Me sentía querida por él, pero no podía evitar tenerle odio por haber separado la familia que yo creía que éramos antes. Sobre todo culpaba a su actual mujer de todo, ya que me era más fácil.
Poco a poco mi mama fue rehaciendo su vida, con unas nuevas amigas, eso coincidió con que mi papa y su nueva familia volvieron a vivir a Córdoba , y al final con dieciséis años empecé a pasar más tiempo en casa de mi padre y su familia.
Con claudia su actual pareja simplemente no me llevaba, para ella era un estorbo en su familia en la que para ella solo cabían su hijísimo y mi padre; pero digamos que con el tiempo aprendimos a tolerarnos por un bien común; Aunque no peleábamos tampoco teníamos relación ni trató.
Con su hijo la relación tampoco era buena, pero como estaba poco en casa ya que estudiaba fuera tampoco había mucho lio
Así pasaron los años de mi adolescencia, terminé los estudios, encontré un trabajo y me fui a vivir con mi novio a nueva Córdoba...
La relación con mi papa era en ese entonces la de cualquier chica de 18 con el suyo y como hija de padres separados intentaba repartir mi tiempo entre mi papa mi mamá y mi novio.
Con mi papa a pesar de amarlo nuestra relación había empeorado porque yo a pesar de entender mejor la separación de mis padres, seguía culpándola a Claudia su actual mujer, supongo que porque tampoco ella hacia nada por cambiar mi imagen de ella y no ocultaba su desagrado hacia mí.
Entonces cuando lo tenía todo controlado, me pelee con mi novio y tuve que recurrir a mi pa
Papi: -Me pelee con Juan y me fui del depto, no tengo donde quedarme hasta que junte plata para alquilar de nuevo, me puedo quedar en tu casa? –le pedí llorando-
-Claro mi amor, ¿qué pasó?
Le conté la pelea al igual que el ofrecimiento de mama, pero allí no podía quedarme ya que no había lugar era un mono ambiente y ya vivían 3. En cambio ellos vivían en una casa en el ccuntry la recerva (que para los que conocen cordoba es cerca de kempes) muy grande y facundo el hijo de Claudia tampoco vivía ahi.
-Consúltalo con ella, no te lo pediría si hubiera otra opción
- no hay nada que preguntar, sos mi hija y es mi casa
Sonreí satisfecha ante la batalla ganada frente a ella. En unos días me mudé.
-¿Vas a quedarte mucho?-me dijo Claudia sin ocultar su enojo-
-Un par de meses, tengo un departamento arreglado de palabra con una amiga para septiembre.
Se fue a la cocina y me lancé al cuello de mi padre.
-Gracias papi, espero que esto no te traiga quilombo...
-Ya esta hija no pasa nada
Aunque intentara ocultarlo me di cuenta en los días sucesivos que ella apenas le hablaba y que estaba siempre con mala onda.
La cosa empeoró unas semanas después cuando Facundo su hijo vino a pasar un fin de semana.
-Vaya “hermanita” te veo bien –dijo en el tono de siempre-
-Hola Facundo.
Claudia estaba feliz detrás de su hijito y más lejos aún de mi papá y de mí, me planteé irme porque odiaba ver a mi papi así por mi culpa.
-Papi una amiga me hace lugar en su departamento asique me voy, no quiero complicarte la vida
-vos no te vas esta es mi casa y no quiero dar mi brazo a torcer en esto
No necesité más, claro que iba a quedarme, quería quedarme.
Al día siguiente Facu me invitó a salir con él y sus amigos a los boliches del chateau esa zona donde están todos los boliches chetos, acepté. Claudia se quería matar!
-Tu mamá no se puso muy contenta con que me invites he!
-Nunca lo está, mira que no aguanta a mi novia y hoy me dijo que recuerde que tengo novia.
Extrañamente la pase bárbaro con Facu fuimos a Carreras justo esa noche tocaba Agapornis, asique estaba el boliche llenisimo, se quedó toda la noche a mi lado para no dejarme colgada. Tipo seis de la madrugada lo buscó para irnos y lo encuentro charlando con uno de sus amigos
-Boludooo tu hermanita esta mas buena que comer pollo con la mano ¿me vas ha decir que no te morís por culiartela?-
-Más vale boludoo, al principio no quería compartir nada con ella, la odiaba porque creía que con siete años menos, podía venir y usurpar todo, pero mi impresión cambio a medida que le crecieron las tetas –dijo Facu y supe que hablaban de mi-
-Yo llevo toda la noche con ganas de arrinconarla, subirle ese vestidito y metérsela hasta los huevos mientras le sobo esas tetas –dijo su amigo
Lo llamé y le pedí si nos íbamos, nos despedimos y salimos del boliche. Tomamos una taxi y cuando llegamos ya me había pegado el fresquito de la mañana sumado a lo que había tomado y casi me caigo en la puerta de casa cuando justo me agarró de la cintura. Entramos directamente a la cocina y apoyándome en el desayunador sacó un vaso de agua y me lo pasó.
-Gracias
-De nada hermosa–dijo sorprendiéndome-
-No me mires así es cierto
-Andaaa, si no me soportas –le dije con voz pastosa y juguetona-
-Eso era cuando éramos chicos nunca me gustó compartir. Aunque te aseguro que hace años que no te veo como esa odiosa nena–dijo animado por el alcohol-
Instintivamente crucé los brazos escondiendo mis tetas de su mirada hambrienta.
-No te tapes –dijo acercándome y soltando mis brazos a los lados-
-para boludo , ¿te acordas que tenes novia?
-Intento, pero mira como me tenés-dijo agarrándome la mano y llevándome hasta la pija-
-Anda y hacete una paja, basta
-No hables así, además ya me he hecho mil pajas pensando en tus tetas
Se acercó a mí aprisionándome contra la heladera...
-No pongas esa cara, es verdad.
-No quiero cojer con vos, salii –le dije-
-¿Seguro?-dijo metiendo su muslo entre mis piernas-
Instintivamente me froté contra su pierna.
-Mientes, puedo notar el calor de tu conchita a través de la tela, putita
-No quiero complicarme la vida –le dije con el ultimo poco de cordura-
-Yo tampoco, quiero a mi novia, pero ahora solo puedo pensar en cojerte de una vez por todas
Metió la mano entre su muslo y miconchita y con dos dedos frotó mi tanga rozandome el clitoris. Yo gemí al notar como me mojaba con su caricia y todo se descontroló.
Apartó mi tanga y buscando la entrada empujó dos de sus dedos dentro de mi vagina, jadee y moví las caderas.
-Deseas esto tanto como yo putita –dijo subiéndome a la mesada
A toda prisa con una sola mano se desabrocho el cinturón, el botón y sacó su dura y larga pija,
Me corrió la tanga a un costadito, pasó la mano por detrás de mí y con el ante brazo me puso al borde de la mesaday con la otra la llevó donde habían estado sus dedos y me la metió de una hasta el fondo
-Uf putita que placer, las veces que me pajeo pensando en esto! pero estas tan caliente y mojada…(aclaró para los que no saben soy squirter)
Ne cojio sin parar entrando y saliendo rápido cada vez más.
-Haces que de nuevo me sienta como cuando tenía veintitrés y tu dieciséis, estoy tan caliente que no puedo creer lo dura que me pones la pija decía mientras su frente se cubría de sudor-
-No pares –le dije entre gemidos
Me exitaba y me exita mucho que me hablen sucio que me digan puta que me traten como una prostituta eso me vuelve loca...
Acabe con las piernas alrededor de sus caderas y el culo apenas apoyado en la mesada
Desabrochó mi camisa con prisas y algún botón salto por los aires, abrió la camisa y sacó mis pechos del corpiño y los estrujó.
Volví a acabar y se quedó sorprendido por la rapidez con la que volvía hacerlo y de la forma en que salían chorros de mi flujo
-mira vos mi “hermanita” no imaginaba que fueras tan putita. Me tienes loco perdido –dijo con rabia ahora-
Supe que odiaba perder el control y ahora no tenía ni un poco y yo disfrutaba sabiendo eso.
Movi las caderas en circulo y salió rápidamente.
-casi haces que me corra puta. ¡Ponte de rodillas!
Bajé y me arrodillé ante el con cara de nenita buena
El agarrándome del pelo con una mano me acercó la pija a la cara
-A ver como la chupas hermanos, quiero que te la tragues toda..
Separé los labios y su mano me instó a acercarme, el movió las caderas y me la metió hasta la campanilla, apenas podía respirar pero no hice ademan de pararlo.
Aflojó sin soltar mi pelo y empecé a lamer toda su pija, luego pasé la lengua por el pequeño orificio e hice círculos con mi lengua antes de succionar su glande.
-pero que bien hermanos sos toda una chupa pijas!!!
Empujó de nuevo y agarrándome ahora con ambas manos se se estaba cojiendo mi boca, los ojos se me llenaron de lágrimas por la brusquedad y la fuerza. Estaba enojado, totalmente descontrolado la sacó y pajeandose me lleno de lechita bien calentita la boca y hasta un par de gotas cayeron en mis tetas...
Metió la pija en su pantalón sin dejar de mirarme y me lanzó una servilleta de papel.
-Estas divina con la cara y tetas llenas de mi leche. Límpiate y vamos a dormir –dijo visiblemente arrepentido-
Cuando salí de la cocina diez minutos después meencontre de frente a mi papi, me revise mentalmente y avergonzada levanté la mirada.
-Hola hija veo que llegaron! –dijo con voz rara-
-Sí, hace un ratito. Me voy a la cama
Me fui a la cama, la cabeza me daba vueltas tras la última loca media hora. Tras la breve charla con mi padre pensé que podía habernos oído, pero rechacé la idea pensando y diciéndome que se lo habría notado, no creo que le gustara ver a su hija en esa situación.
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