Por fin se durmieron mis hijos y mi marido, tarde pero seguro voy a seguir contando lo que me pasó el Martes!!!
Para los y las que no leyeron la primer parte, recomiendo que la lean así entienden lo que tuve que soportar!
http://www.poringa.net/posts/relatos/2723277/Tengo-un-fetiche-con-mi-cola-foto.html#comment-120450
A las 9.30 de la mañana, sin pegar un ojo en toda la noche, y con la colita hirviendo por las quemaduras y los besos de la pendeja ( de la depiladora), me voy para la clínica. Generalmente atiendo de 9.30 o 10hs hasta las 17hs...
A pesar de las quemaduras que sentía. La verdad es que me sentía más limpia. La nena me había pasado la lenguita por casi todo el cuerpo y se había chupado todo el flujo del toqueteo de la noche anterior. Y además ya estaba completamente depilada, sin un pelito que me molestara. Igual seguía en un estado de lujuria total... La veterana que estaba segunda en la fila nos había interrumpido justo cuando estaba por frotarme a la nena. La verdad ya no sabía distinguir si lo que me estaba pasando era bueno o malo...
Con cara de zombie entro a la clínica, voy para el area de Kineseología, saludo a las chicas de recepción haciendome un poco la boluda y me encierro en mi consultorio a la espera del primer paciente (que seguramente iba a ser una persona de tercera edad en recuperación, eso me iba a bajar el líbido)...
En el baño del consultorio generalmente dejo algunas tanguitas, unas remeras y algún vestido para casos como estos. Así que decidí cambiarme y de paso me miraba un poquito la cola porque la verdad es que ni bien me senté me empezó a arder. Desnuda en el baño, me pongo frente al espejo y confirmo lo que realmente pensaba: tenía todo el culito al rojo vivo, al parecer la pendeja me había quemado en serio (ni hablar que me voy a vengar y será otra historia)
A los segundos siento que golpean la puerta, era la secretaria confirmandome que había gente en la sala de espera. Le dije que pasen en 5 que me estaba "arreglando"...
Me puse un poquito de cubre ojeras y agarré un poquito de crema de los estantes. Me la pasé por las piernas, por la conchita y me puse mucha mucha crema en la colita. Inclusive me metí un dedito porque sentía un poco de ardor en la parte interna (Quizá me lo había abierto tanto que me entró cera) O quizá cómo dice mi marido "estaba pidiendo pista". Me puse un pantalon un poquito suelto y me fui para el escritorio a esperar al paciente.
Acá voy a poner un stop: En lo laboral soy super responsable, son contadas las veces que no pude contener los impulsos de mi colita dentro de mi consultorio. La verdad es que fueron experiencias aisladas y contadas con los dedos de la mano: con algún residente, con uno o dos pacientes, con un visitador médico y con algunos de mis colegas...Me tomo muy en sero mi trabajo, inclusive viajo a Chicago y a Barcelona habitualmente a congresos o conferencias. Doy clases en una importante Universidad y realizo muchas interconsultas con clinicas y hospitales del interior, en fin... (que tenga la colita mojada todo el día no significa que no sea una buena profesional)
Generalmente los turnos de la mañana son pacientes de tercera edad, y esta no fue la excepción. Abrí la puerta y mi paciente era un señor mayor, al cual ya habia atendido y venía a continuar sus sesiones de terapia ultrasónica. Había tenido un fuerte golpe en la espalda, producto de una caida y teníamos que desinflarmar la zona lumbar....No es de mala, pero con lo que había vivido el abuelito me parecía un exagerado...
Los casos que se continuaron durante la mañana fueron bastante similares. Yo por mi parte sentía todo el tiempo una mezcla de ardor y calor en la cola. Me ponía crema entre paciente y paciente y sentía cómo mi culito se dilataba y se contraía. (Sentía como pulsasiones en la cola) Durante toda la mañana lo único que realmente me había calmado eran los lenguetazos de la pendeja en el box de depilación...
Tipo 12.30hs decidí tomar un brake. Me fui a la cafetería a comer una ensaladita de fruta, y de paso intentaba distraerme un poco. Para mi suerte encontré dentro del bar a una médica clinica amiga, media putona como yo. Le conté un poco lo que ustedes conocen y lo primero que hizo la turra fue pedirme el número de la depiladora...
-Boluda pasame el numero yaaa. No tengo el culo que tenés vos pero tengo otras cosas...
-No Marce en serio, dame una solución. Estoy en un estado orgámisco hace 16 horas, cansada, sucia, ojerosa, super caliente y con la cola hirviendo...
-No se amor, vos te las buscas. (si te gusta el durazno...) Queres que te mande un pendejo de los residentes para que te baje un poco la ansiedad.
-No no, lo único que me falta es tener que desvirgar un nene. Hoy me depilé, mi marido sabe. A las 7 ya me espera preparado para darme bomba hasta la madrugada...
-Bueno nena, entonces cancelá los turnos, tomate un analgesico y andate a dormir una siesta!!
(En fin, vieron cómo somos las mujeres, un poquito envidiosas. Mi amiguchis no me tiró soluciones reales, ni la mejor de las ondas. Se ve que le molestó que una pendeja divina se me haya prendido del culo cómo una garrapata...)
Terminamos de charlar y me volví al consultorio. Me quedaban tres horas de turnos continuos y sinceramente me sentía acalorada y la cola me ardía más que nunca.
Se me ocurrió una idea brillante: Fui al baño, me puse un poquito de perfume, me saqué el pantalón y me cambié nuevamente la tanga llena de crema por una seca. Me saqué la remera y me dejé solo el corpiño. Quedé practicamente desnuda (tanga y corpiño), cubierta solamente con el guardapolvo. Al intstante sentí un alivio bastante importante, el roze del pantalon me estaba matando...
(cuando era más joven, a veces medio en broma medio en serio, con otras colegas mientras trabajabamos en verano en unos box de mala muerte sin aire acondicionado, atendiamos solo con el guardapolvo y una tanguita abajo) A veces se nos escapaba una teta, o nos veían la rajita y se volvían locos (ya van a conocer esas historias)
Termino de cambiarme y le aviso a mi secretaria que haga pasar al próximo. Segundos después, entran al consultorio una mamá y su hija. Nos presentamos, nos ponemos a charlar un poquito y la madre me cuenta que ella es abogada y que Candela, su hija, se había esguinzado el tobillo andando en rollers por Palermo...
Las dos eran muy lindas, muy finas. Igual a la madre se le notaba que era abogada, tenía una actitud media putona y parecía bastante estricita. Lllevaba puesto un trajecito entallado color negro, unas botas y no paraba de mirar su iphone en todo momento.
La hija, Candela, me contó que tenía 18 años y que este era su último año en la secundaria. Yo por mi parte al lado de ellas me sentía media incomoda, re putona, no se realmente que impresión se habrán llevado cuando me vieron por primera vez. El gurdapolvo era bastante cortito y abajo practicamente no tenía nada. Cada vez que me inclinaba un poco, asomaba la tanguita...
En mi consultorio tengo un escritorio, algunas maquinas y varios aparatos de kineseología (una bicicleta fija, una cama de enlongación tipo pilates, una camilla y una cinta pequeña para caminar. La madre se quedó sentada en las sillas del escritorio hablando por el celular y yo me lleve a la nena a la camilla. Ella quedó dandonos las espalda...
Candela era una bebota super tierna, muy delicada. Era flaquita, bien ejercitada pero se notaba por las tetas que todavía le faltaban unos añitos de desarrollo. La cola era increible, la verdad es que al ver ese culito me sentí un poco vete. Tenía puesto un topcito que le llegaba al ombligo y una calza negra de lycra muy ajustada al cuerpo, y le marcaba toda la conchita. La acosté en la camilla, le saqué una de las zapatillas y el vendeja. Cuando retire el vendaje, me quedé con su pie en la mano y fue la perdición. Tenía un olorcito medio fuerte que me mató, hermoso. Tenía el pie apenas transpirado...
Le empecé a hacer unos mimos, después avancé con masajes en los deditos, en la curva del pie, se ve que le gustaban porque se empezó a poner un poquito colorada. Cuando le pasaba las uñas se arqueba un poquito aguantando las cosquillas. La situación de tener esa pendeja a mi piacere me empezó a calentar. Ya venía acumulando una tensión insoportable. De todas maneras tenía la madre muy cerca, además era imposible que esa criatura virginal se suba al juego de una vieja morbosa como yo...
De repente me pide un poquito de masajes en el otro pie. Eso no me lo esperaba ( por dentro pensé: que turra esta nena, soy kineseologa no masajista). Le respondo, esperame dos segundos que voy a buscar una crema con aloe vera y propiedades anestésicas, te va a desinflamar un poquito el talon. Ni bien temrino de decir eso, la pendeja me dice:
-Me vas a manchar las calzas nuevas, me las SACO!
Al escuchar eso me quedé atónita. Sentí de repente que mi conchita se empezó a abrir. Me colita empezó a arder, sentía nuevamente esas mini contraciones que me habían molestado toda la mañana. Estaba nuevamente a pasos de cometer otra lucura...
Voy al baño por la crema y vuelvo a la camilla. Lo que veían mis ojos no tenía explicación. La nena estaba depilada de pies a cabeza, con una tanguita satinada blanca que apensas le cubría los labios vajinales. Si Yamila (la depiladora) era una princesa, esta era un regalo de los dioses...
Mi cuerpo en esos 5 segundos sufrió una transformación abismal, por lo pronto la tanga ya la tenía empapada. Las tetas hinchadas, preparadas para amamantar a esa criatura y para colmo el guardapolvo no disimulaba para nada mis pezones parados.
Por suerte la madre, ni enterada de lo que pasaba en mi cabeza y en en mi cola, salió del consultorio para atender un llamado.
Empecé a masajearle los pies, de reojo me deleitaba con esa conchita virgen y lampiña. Me imagina cerca, comiendosela a lenguetazos. Pasaban los segundos y me transformaba en un monstruo cada vez más peligroso. A la nena se le empezo a poner la piel de gallina, la sentía. Sabía que estaba calentita...Subí los masajes a la pantorilla y de ahí a las rodillas...
Le abrí un poquito las piernas, y le dije que cerrara los ojos y me arriesgué!
Empecé a pasarle las manos por los muslos, le empujaba la sangre hacia arriba. Subía y bajaba. De las rodillas hacia la ingle...Y llegaba cada vez mas cerca de su conchita. Ella se empezó a poner un poco nervisa, su piel hervía. Los masajes terminaban en un rose entre mi dedo gordo y los bordes de su bombachita. Alla miraba para arriba, y se arqueba rigida en cada enbestida. La esta violando, estaba jugando cómo jugaron conmigo...
Empecé a masajearle el muslo derecho con la mano derech, rozandole la conchita en cada terminación. Con mi otra mano, cuando la nena miraba para arriba me sacaba la tanga de adentro o me tocaba un poquito...
Durante unos segundos empezó a mirarme fijo a los ojos...Tenía un color hermoso, la sangre le estaba circulando a mil. De repente empezó a mirarme las tetas, veía cómo se movía en cada subida y bajada./ Abrío un poco la boquita, tenía mucha saliva, le costaba respirar...Había claras señales de que estaba disfrutando.
Siento un movimiento en la puerta, y entra la madre del prepo. La nena se espanta y junta las piernas. Yo acomodo rapidamente mis tetas, me bajo el guardapolvo y bajo al tobillo nuevamente...
-Y doctora cómo está el tobillo de Cande? Cómo te sentís hijita?
-Bien mami, no me duele tanto ahora.
-(La nena no me delato, estaba en el cielo) Ya terminamos los masajes vamos a hacer unos ejercicios en la cinta, vamos a usar la bicicleta y luego la plancha de pilates.
-Barbaro, que serán 20 minutos?
-Si mas o o menos, depende como trabaje los ejercicios Cande.
(Otra vez una veterana malcojida me estaba dejando sin premio, increible lo que me estaba pasando. Encima fue directo a instalarse al escritorio)
Yo seguía en un estado de lujuría, a tal punto, que de forma inconsiente la llamé para que venga a caminar en la cinta del siguiente modo:
-BEBE vení acercate a la cinta que tenemos otro ejercicio.
(Cuando caí que le había dicho bebe delante de la madre me quería morir)
Ella estaba toda coloradita. De todas maneras me dí cuenta que era bastante putita, sin ponerse las calzas se subió a la cinta y empezó a caminar sacando colita. Seguía sin poder creer lo que estaba viendo. La madre de espaldas, mirando el celular (seguramente hablando con un chongo por what app), la nena caminando entangada en la cinta y yo como una leona, vestida de prostituta, queriendomela comer...
Salgo por un momento de ese estado de exitación, le doy unas instrucciones a Cande y me encierro un momento en el baño. Transpiraba y tenía toda la tanga mojada. Empecé a tocarme un poquito y a masajearme el culito. El celular que lo tenía en el bolsillo del guardapolvos y vibraba, lo miro y era mi amiga médica. Ya está pensé!
Le mandó un mensaje:
-Gorda te hago una consulta, seguís teniendo problemas con tu ex?
-Si, es un enfermo, por qué? Está en la clínica?
-No no al contrario. Tengo una abogada en mi consultorio, vení urgente, le hablo para que te asesore.
-mmm, ahora no puedo estoy complicada
-CONCHUDA VENÍ O TE MATO, DESPUÉS TE EXPLICO
-Qué pasa?
-Vení por favor, tomate un cafe con esta mujer te va a servir a vos y a mi.
-Bueno che, que maltrato voy para allá
Increible pensé. Sos una genia Andre. Sos una genia!
Sabiendo lo que se venía, me saqué la tanga y el corpiño y me quedé solamente con el guardapolvo. Practicamente saltaba de la alegría, no me importaba nada. Salí del baño, bien aputasada con una sonrisa de orja a oreja, me senté en el escritorio frente a la abogada. Y le comenté que estaba por pasar una colega amiga que necesitaba urgente asesoramiento legal. Condimenté un poco la historia, y lo hice quedar al ex cómo un sacado...Ella sin dudarlo me dijo que si, que no tenía inconvenientes en conversar, de paso hacía tiempo y conseguía una nueva clienta.
Quedamos frente a frente esperando a mi amiga, pasaron los minutos y yo relojeaba de arriba a bajo el cuerpito de la beba que me estaba por comer. La hija de puta se había subido un poquito la tanga, movía la colita, arqueaba la espalda, me relojeaba. Se había soltado el pelo...
Al rato golpean la puerta, mi colega pasa, las presento y mi amiga me hace caras raras cómo preguntando que pasa aca? Que hace esta nena en bolas? Y vos con las tetas al aire? Yo le hago señas de un cafe. Entiende todo y se la lleva!!!!!!
Se cierra esa maldita puerta, le pongo llaves y me la llevo a Cande a la maquina de pilates. Sin decir nada deja de caminar en la cinta...
-Bebe, tu mamá se fue a tomar un café con una medica que tiene unos problemas. Seguimos solas te parece?
-Me puedo sacar la remera que estoy toda transpirada?
-Obvio linda (Estaba todo dicho. La pendeja no era ni santa, ni virgen. Tenía actitud para bancarse a una veterana cómo yo)
La senté en bombachita y en corpiño en la maquina de pilates. Y le mostré unos ejercicios de elongación. Ella me acota diciendome que hacía yoga, y que tenía bastante elasticidad. Me puse detrás de ella y empecé a empujarle suvemente por la espalda, a la vez que le tocaba la cintura, y la cola. La acaricié muy sutilmente varios minutos. Le hice unos masajes en el cuello, y le desabroché el corpiño. Ella sin resistencia lo deja caer.
(Tener a esa criatura desnuda, cubierta apenas con una tanguita de saten, haciendo ejercicios en una maquina de pilates fue una de las imagenes más memorables que tuve en toda mi carrera profesional...)
La di vuelta, la puse boca abajo y le pedí que apoyara las manos en la plataforma , que baje la cabeza y levante la cola formando un triangulo. Ella sin chistar repondió armando un triangulo perfecto, Dejandome la colita bien parada hacia arriba.
Me acerco, empiezo a tocarle las piernas, empiezo a besarle los bordes de la bombacha. Levanta más la colita, le toco el clitoris, se pone firme, enpieza a suspirar...
Le pido que afloje, le pido su mano. Lentamente la voy sacando de la maquina, mi instinto materno me alertaba sobre la posibilidad de que se lastime. Abro un placar, saco una colchoneta y una esfera grande de silicona.
La recuesto en la alfombra, me desabrocho el guardapolvos, me recuesto, apoyo mis lolas sobre sus tetitas. Quedan los labios cerca. Le como la boca, ella me la come a mi. Nos besamos desaforadamente, me chupa la lengua, le meto la lengua. Su boca tiene un gustito exquisito. Es pura, casi virgen. Ella me abraza muy tiernamente, yo le doy besos en el cuello, le paso la lengua por las tetas, le muerdo despacito los pezones. Soy una loba, estoy desesperada, estoy empapada, estoy en el infierno con un angel. Por fin voy a acabar.
Estamos las dos en el piso, yo arriba. Me la estoy cogiendo cómo me enseñó mi marido. Apoyo mi conchita media vaqueta sobre su conchita casi virgen. La froto cada vez mas fuerte. Le chupo la oreja. Ella apoya sus manos en mi cola. Mi colaaa, en mi cola NO!. Empiezo a sentir los deditos de la pendeja jugar con mi culo quemado. Acabooo. Me mojo toda, la mojo toda. Esta ves estuve viva.
-Vení bebe parate. Te voy a enseñar algo. Yo te lo hago primero y después si te animás me lo hacés a mi.
(Se para, siempre obedece, pienso que bien educadas y que putas vienen las pendejas)
Traigo la esfera de silicona, esa grande que usan en algunos programas de fitness. Pongo a la nena boca a bajo recostada sobre el globo. Casi en cuatro, solo que con la colita mirando hacia arriba. Ella se deja, cae sobre la esfera y encuentra el equilibrio. Le corro un poquito la tanguita, siempre se la dejo puesta. Le doy unos besitos en las piernes y en los cachetes de la cola. Le clavo un poquito las uña. Junto un poquito de aire y le empiezo a violar el culito con la lengua. Por primera vez soy un poco violenta, y le tiro mis años y mis vicios encima...
Ella por primera vez se incomoda. Me afirmo a su cola tratando que no se me escape, se la abro un poquito. Le paso la lengua del clitoris hasta el agujerito del culo. Ahí vuelve a relajarse. La tengo, es mía nuevamente. Yo estoy practicamente en el cielo chupando una ostra...Me trago cada jugo que roba mi lengua. La chupo, la chupo cada vez con más placer. Acabo nuevamente chupandosela.
Ella entiende el juego y usando la bola empieza a moverse. Quiebra la cintura, mueve su culito de arriba hacia abajo, de atras hacia delante. Comprendo que quiere acabar. Suspira cada vez mas fuerte, muerde la esfera y grita con verguenza como una perrita que extraña. Le entierro la lengo, le meto dos deditos y le chupo el clitoris. Empiezan a salir los juguitos, se los chupo.
-Bebe acabame en la boca, dale bebe, acabame en la cara. Movete!
Se mueve cada vez más rápido. Le muevo los dedos dentro de la conchita que ya era agua, alcnzo a tocar esa parte rugosa que nos vuelve locas. Vuelvo a pegarle un lenguetazo a esa colita virgen. Grita, grita por primera vez y acaba.
Sale aguita a borbotones, me chupo los dedos, le paso la lengua y me tomó toda esa acabada salada. Una hermosura. Se viene hacia mi, la garro de los pelos y chapamos. Se rie, por primera vez se rie y me mira a los ojos tiernamente. Nos abrazamos. Yo no quiero terminar. Se anima a tocarme y libero mi fetiche:
-Dulce, tengo un problema
-Que pasa? (con carita de asustada)
-No te asustes. Me duele la colita, hoy temprano fui a depilarme y me quemaron. Y unos besitos tuyos pueden calmarme por un ratito. Cuando te acoste en la esfera, te dije que si te animabas podías hacerme lo mismo...
(Me interrumpe, se arrodilla, me agarra de la cintura y me "acomoda" en el globo)
Quedé con mi lolas apoyadas en la silicona, casi en posición perrio con la esfera en la panza y el culo super abierto. (SOÑABA CON ESTO DESDE EL MOMENTO EN QUE ENTRÓ POR LA PUERTA)
La nena empieza a darme besos en las piernas, en los cachetes de la cola. Siento sus deditos tocando mi conchita. Nuevamente me encontraba con el culo al aire, toda acabada delante de otra pendeja (no me digan que la vida no es increible)
-Tenés colorado Andre
-Si, me arde, ahí necesito unos besitos
-Así?
-Si bebe, así...
-Te gusta?
-Me encanta..
Empiezo a sentir la lenguita en el culo. Empiezo a sentir la saliba. Empiezo a sentir que me bajaba todo.
-Dale bebe dale no pares, meteme mas la lenguita
Ella hacía caso en todo. Sentí que la cola se me abría, y que tenía la mitad de la lengua adentro. Me afirmé bien a la bola con la mano izquierda. Y con la derecha me empecé a toquetear el clitoris. Estaba en una posición sublime. Estaba completamente arqueda sobre la bola, con las tetas al aire, el guardapolvo desprendido, y tenía a una pendeja divina enterrada en mi colita...
Estaba cerca de liberar toda la tensión de las ultimas 20 horas. Me empecé a poner un poco loquita porque lo que se venía era grande, lo sentía. Esta criatura eligó el peor momento para desvirgarse con una mujer.
Empecé a moverme mas rápido, me puse un poquito violenta. Le refregaba cada vez mas fuerte el culo en la cara. Mientras aceleraba empecé a gritarle:
-Dale putita que ya me tenés
-Dale pendeja virgen
-Dale bebe, chupale el culo a la vieja, no pares.
Me movía cada vez más fuerte, gritaba y la borrega se la estaba bancando sin chistar. Eso me daba todavía más ganas de llenarle la cara de flujo
-Dale turra que viene tu mamá y te va a ver con toda la cara sucia
-Dale puta de mierda!
-Pendeja puta, Dale pendeja, ni te te ocurra pararrr
-Dale Puta! Chupá que viene tu mamá y te quiero acabar...
Dejé de tocarme el clitoris con la mano derecha, la agarré de los pelos y le puse la cara bien adentro del culo. Ella segui sin chistar, chupaba y chupaba. Y se sostenía de mis piernas.
-Te gusta el olor a culo
-Dale bebe, dale que termino, ya pasa
-Aguantá bebé, aguantá bebé
Empecé a moverme cada vez más y más fuerte. Sentía la nariz de ella en mi cola. La lengua, la boca...Estaba en la gloria. Pocas veces me chuparon el culo de esa manera.
Sentí que el cuerpo se me desmoronaba. Que me desmayaba, que perdía el equilibrio. Y la pendeja en vez de aflojar, abría más la bocar y me metía la lengua.
-Puta
-Pendeja Puta
-Te acabo, te acabooo
Empezaron a saltar cantidades increbles de fluidos. Yo gritaba cómo una desquiciada y le apretaba con fuerza la cara y me la pegaba más y más a mi cola. Ella en cambio de resistirse empezó a chupar y a tragar todo lo que le llegaba, y todo lo que salía de mi cuerpo. Inclusive hasta un poquito de orina...
Estaba rendida, fundida. No seantía los musculos, no tenía reflejos. Me desplomé. Y la dulzura esa me seguía besando, ahora con más sutileza, me limpiaba, me pasaba la lengua cómo si fuera un gatito.
Había agua en el piso, en la bola, en mi guardapolvo...
Estuve dos o tres minutos casi inconsciente abrazando la esfera...
Me recuperé, la miré a Cande y se reía con los labios hinchados. Se empezó a cambiar, fui a buscarle papel, le dije que vaya al baño. Me abroché el guardapolvo, los pechos me estallaban...
Acomodé un poquito el consultorio, tiré desodorante de ambiente, limpié un pocos los pisos para tratar de disimular. Pero finalmente no esperamos a que venga la madre. No adelantamos, nos cambiamos y nos fuimos las dos juntas a la confitería 9 porque la verdad el olor a sexo era imposible de disimular)
Caminando por los pasillos le pregunto dulcemente cómo estaba el tobillo, y la turra me dijo que ahora le dolía los labios. Nos reimos y agedamos para el Martes que viene, el segundo encuentro.
Lllegamos a la confitería, no encontramos a la madre ni a mi amiga. Nos pedimos unos jugos y nos quedamos esperando...
Seguramente se imaginan una de las posibilidades de por que mi amiga, y la madre no estaban. En un ratito me contará durante el almuerzo.
FIN...
Espero que hayan disfrutado, la locura que viví el día Martes. es casi imposible ponerla en palabras...
Para los que me pidieron fotos paso algunas fotitos más de mi amiga médica y yo en su pileta. de todas maneras, en breve vuelan. tengo miedo que algún cónocido me reconozca...
Para los y las que no leyeron la primer parte, recomiendo que la lean así entienden lo que tuve que soportar!
http://www.poringa.net/posts/relatos/2723277/Tengo-un-fetiche-con-mi-cola-foto.html#comment-120450
A las 9.30 de la mañana, sin pegar un ojo en toda la noche, y con la colita hirviendo por las quemaduras y los besos de la pendeja ( de la depiladora), me voy para la clínica. Generalmente atiendo de 9.30 o 10hs hasta las 17hs...
A pesar de las quemaduras que sentía. La verdad es que me sentía más limpia. La nena me había pasado la lenguita por casi todo el cuerpo y se había chupado todo el flujo del toqueteo de la noche anterior. Y además ya estaba completamente depilada, sin un pelito que me molestara. Igual seguía en un estado de lujuria total... La veterana que estaba segunda en la fila nos había interrumpido justo cuando estaba por frotarme a la nena. La verdad ya no sabía distinguir si lo que me estaba pasando era bueno o malo...
Con cara de zombie entro a la clínica, voy para el area de Kineseología, saludo a las chicas de recepción haciendome un poco la boluda y me encierro en mi consultorio a la espera del primer paciente (que seguramente iba a ser una persona de tercera edad en recuperación, eso me iba a bajar el líbido)...
En el baño del consultorio generalmente dejo algunas tanguitas, unas remeras y algún vestido para casos como estos. Así que decidí cambiarme y de paso me miraba un poquito la cola porque la verdad es que ni bien me senté me empezó a arder. Desnuda en el baño, me pongo frente al espejo y confirmo lo que realmente pensaba: tenía todo el culito al rojo vivo, al parecer la pendeja me había quemado en serio (ni hablar que me voy a vengar y será otra historia)
A los segundos siento que golpean la puerta, era la secretaria confirmandome que había gente en la sala de espera. Le dije que pasen en 5 que me estaba "arreglando"...
Me puse un poquito de cubre ojeras y agarré un poquito de crema de los estantes. Me la pasé por las piernas, por la conchita y me puse mucha mucha crema en la colita. Inclusive me metí un dedito porque sentía un poco de ardor en la parte interna (Quizá me lo había abierto tanto que me entró cera) O quizá cómo dice mi marido "estaba pidiendo pista". Me puse un pantalon un poquito suelto y me fui para el escritorio a esperar al paciente.
Acá voy a poner un stop: En lo laboral soy super responsable, son contadas las veces que no pude contener los impulsos de mi colita dentro de mi consultorio. La verdad es que fueron experiencias aisladas y contadas con los dedos de la mano: con algún residente, con uno o dos pacientes, con un visitador médico y con algunos de mis colegas...Me tomo muy en sero mi trabajo, inclusive viajo a Chicago y a Barcelona habitualmente a congresos o conferencias. Doy clases en una importante Universidad y realizo muchas interconsultas con clinicas y hospitales del interior, en fin... (que tenga la colita mojada todo el día no significa que no sea una buena profesional)
Generalmente los turnos de la mañana son pacientes de tercera edad, y esta no fue la excepción. Abrí la puerta y mi paciente era un señor mayor, al cual ya habia atendido y venía a continuar sus sesiones de terapia ultrasónica. Había tenido un fuerte golpe en la espalda, producto de una caida y teníamos que desinflarmar la zona lumbar....No es de mala, pero con lo que había vivido el abuelito me parecía un exagerado...
Los casos que se continuaron durante la mañana fueron bastante similares. Yo por mi parte sentía todo el tiempo una mezcla de ardor y calor en la cola. Me ponía crema entre paciente y paciente y sentía cómo mi culito se dilataba y se contraía. (Sentía como pulsasiones en la cola) Durante toda la mañana lo único que realmente me había calmado eran los lenguetazos de la pendeja en el box de depilación...
Tipo 12.30hs decidí tomar un brake. Me fui a la cafetería a comer una ensaladita de fruta, y de paso intentaba distraerme un poco. Para mi suerte encontré dentro del bar a una médica clinica amiga, media putona como yo. Le conté un poco lo que ustedes conocen y lo primero que hizo la turra fue pedirme el número de la depiladora...
-Boluda pasame el numero yaaa. No tengo el culo que tenés vos pero tengo otras cosas...
-No Marce en serio, dame una solución. Estoy en un estado orgámisco hace 16 horas, cansada, sucia, ojerosa, super caliente y con la cola hirviendo...
-No se amor, vos te las buscas. (si te gusta el durazno...) Queres que te mande un pendejo de los residentes para que te baje un poco la ansiedad.
-No no, lo único que me falta es tener que desvirgar un nene. Hoy me depilé, mi marido sabe. A las 7 ya me espera preparado para darme bomba hasta la madrugada...
-Bueno nena, entonces cancelá los turnos, tomate un analgesico y andate a dormir una siesta!!
(En fin, vieron cómo somos las mujeres, un poquito envidiosas. Mi amiguchis no me tiró soluciones reales, ni la mejor de las ondas. Se ve que le molestó que una pendeja divina se me haya prendido del culo cómo una garrapata...)
Terminamos de charlar y me volví al consultorio. Me quedaban tres horas de turnos continuos y sinceramente me sentía acalorada y la cola me ardía más que nunca.
Se me ocurrió una idea brillante: Fui al baño, me puse un poquito de perfume, me saqué el pantalón y me cambié nuevamente la tanga llena de crema por una seca. Me saqué la remera y me dejé solo el corpiño. Quedé practicamente desnuda (tanga y corpiño), cubierta solamente con el guardapolvo. Al intstante sentí un alivio bastante importante, el roze del pantalon me estaba matando...
(cuando era más joven, a veces medio en broma medio en serio, con otras colegas mientras trabajabamos en verano en unos box de mala muerte sin aire acondicionado, atendiamos solo con el guardapolvo y una tanguita abajo) A veces se nos escapaba una teta, o nos veían la rajita y se volvían locos (ya van a conocer esas historias)
Termino de cambiarme y le aviso a mi secretaria que haga pasar al próximo. Segundos después, entran al consultorio una mamá y su hija. Nos presentamos, nos ponemos a charlar un poquito y la madre me cuenta que ella es abogada y que Candela, su hija, se había esguinzado el tobillo andando en rollers por Palermo...
Las dos eran muy lindas, muy finas. Igual a la madre se le notaba que era abogada, tenía una actitud media putona y parecía bastante estricita. Lllevaba puesto un trajecito entallado color negro, unas botas y no paraba de mirar su iphone en todo momento.
La hija, Candela, me contó que tenía 18 años y que este era su último año en la secundaria. Yo por mi parte al lado de ellas me sentía media incomoda, re putona, no se realmente que impresión se habrán llevado cuando me vieron por primera vez. El gurdapolvo era bastante cortito y abajo practicamente no tenía nada. Cada vez que me inclinaba un poco, asomaba la tanguita...
En mi consultorio tengo un escritorio, algunas maquinas y varios aparatos de kineseología (una bicicleta fija, una cama de enlongación tipo pilates, una camilla y una cinta pequeña para caminar. La madre se quedó sentada en las sillas del escritorio hablando por el celular y yo me lleve a la nena a la camilla. Ella quedó dandonos las espalda...
Candela era una bebota super tierna, muy delicada. Era flaquita, bien ejercitada pero se notaba por las tetas que todavía le faltaban unos añitos de desarrollo. La cola era increible, la verdad es que al ver ese culito me sentí un poco vete. Tenía puesto un topcito que le llegaba al ombligo y una calza negra de lycra muy ajustada al cuerpo, y le marcaba toda la conchita. La acosté en la camilla, le saqué una de las zapatillas y el vendeja. Cuando retire el vendaje, me quedé con su pie en la mano y fue la perdición. Tenía un olorcito medio fuerte que me mató, hermoso. Tenía el pie apenas transpirado...
Le empecé a hacer unos mimos, después avancé con masajes en los deditos, en la curva del pie, se ve que le gustaban porque se empezó a poner un poquito colorada. Cuando le pasaba las uñas se arqueba un poquito aguantando las cosquillas. La situación de tener esa pendeja a mi piacere me empezó a calentar. Ya venía acumulando una tensión insoportable. De todas maneras tenía la madre muy cerca, además era imposible que esa criatura virginal se suba al juego de una vieja morbosa como yo...
De repente me pide un poquito de masajes en el otro pie. Eso no me lo esperaba ( por dentro pensé: que turra esta nena, soy kineseologa no masajista). Le respondo, esperame dos segundos que voy a buscar una crema con aloe vera y propiedades anestésicas, te va a desinflamar un poquito el talon. Ni bien temrino de decir eso, la pendeja me dice:
-Me vas a manchar las calzas nuevas, me las SACO!
Al escuchar eso me quedé atónita. Sentí de repente que mi conchita se empezó a abrir. Me colita empezó a arder, sentía nuevamente esas mini contraciones que me habían molestado toda la mañana. Estaba nuevamente a pasos de cometer otra lucura...
Voy al baño por la crema y vuelvo a la camilla. Lo que veían mis ojos no tenía explicación. La nena estaba depilada de pies a cabeza, con una tanguita satinada blanca que apensas le cubría los labios vajinales. Si Yamila (la depiladora) era una princesa, esta era un regalo de los dioses...
Mi cuerpo en esos 5 segundos sufrió una transformación abismal, por lo pronto la tanga ya la tenía empapada. Las tetas hinchadas, preparadas para amamantar a esa criatura y para colmo el guardapolvo no disimulaba para nada mis pezones parados.
Por suerte la madre, ni enterada de lo que pasaba en mi cabeza y en en mi cola, salió del consultorio para atender un llamado.
Empecé a masajearle los pies, de reojo me deleitaba con esa conchita virgen y lampiña. Me imagina cerca, comiendosela a lenguetazos. Pasaban los segundos y me transformaba en un monstruo cada vez más peligroso. A la nena se le empezo a poner la piel de gallina, la sentía. Sabía que estaba calentita...Subí los masajes a la pantorilla y de ahí a las rodillas...
Le abrí un poquito las piernas, y le dije que cerrara los ojos y me arriesgué!
Empecé a pasarle las manos por los muslos, le empujaba la sangre hacia arriba. Subía y bajaba. De las rodillas hacia la ingle...Y llegaba cada vez mas cerca de su conchita. Ella se empezó a poner un poco nervisa, su piel hervía. Los masajes terminaban en un rose entre mi dedo gordo y los bordes de su bombachita. Alla miraba para arriba, y se arqueba rigida en cada enbestida. La esta violando, estaba jugando cómo jugaron conmigo...
Empecé a masajearle el muslo derecho con la mano derech, rozandole la conchita en cada terminación. Con mi otra mano, cuando la nena miraba para arriba me sacaba la tanga de adentro o me tocaba un poquito...
Durante unos segundos empezó a mirarme fijo a los ojos...Tenía un color hermoso, la sangre le estaba circulando a mil. De repente empezó a mirarme las tetas, veía cómo se movía en cada subida y bajada./ Abrío un poco la boquita, tenía mucha saliva, le costaba respirar...Había claras señales de que estaba disfrutando.
Siento un movimiento en la puerta, y entra la madre del prepo. La nena se espanta y junta las piernas. Yo acomodo rapidamente mis tetas, me bajo el guardapolvo y bajo al tobillo nuevamente...
-Y doctora cómo está el tobillo de Cande? Cómo te sentís hijita?
-Bien mami, no me duele tanto ahora.
-(La nena no me delato, estaba en el cielo) Ya terminamos los masajes vamos a hacer unos ejercicios en la cinta, vamos a usar la bicicleta y luego la plancha de pilates.
-Barbaro, que serán 20 minutos?
-Si mas o o menos, depende como trabaje los ejercicios Cande.
(Otra vez una veterana malcojida me estaba dejando sin premio, increible lo que me estaba pasando. Encima fue directo a instalarse al escritorio)
Yo seguía en un estado de lujuría, a tal punto, que de forma inconsiente la llamé para que venga a caminar en la cinta del siguiente modo:
-BEBE vení acercate a la cinta que tenemos otro ejercicio.
(Cuando caí que le había dicho bebe delante de la madre me quería morir)
Ella estaba toda coloradita. De todas maneras me dí cuenta que era bastante putita, sin ponerse las calzas se subió a la cinta y empezó a caminar sacando colita. Seguía sin poder creer lo que estaba viendo. La madre de espaldas, mirando el celular (seguramente hablando con un chongo por what app), la nena caminando entangada en la cinta y yo como una leona, vestida de prostituta, queriendomela comer...
Salgo por un momento de ese estado de exitación, le doy unas instrucciones a Cande y me encierro un momento en el baño. Transpiraba y tenía toda la tanga mojada. Empecé a tocarme un poquito y a masajearme el culito. El celular que lo tenía en el bolsillo del guardapolvos y vibraba, lo miro y era mi amiga médica. Ya está pensé!
Le mandó un mensaje:
-Gorda te hago una consulta, seguís teniendo problemas con tu ex?
-Si, es un enfermo, por qué? Está en la clínica?
-No no al contrario. Tengo una abogada en mi consultorio, vení urgente, le hablo para que te asesore.
-mmm, ahora no puedo estoy complicada
-CONCHUDA VENÍ O TE MATO, DESPUÉS TE EXPLICO
-Qué pasa?
-Vení por favor, tomate un cafe con esta mujer te va a servir a vos y a mi.
-Bueno che, que maltrato voy para allá
Increible pensé. Sos una genia Andre. Sos una genia!
Sabiendo lo que se venía, me saqué la tanga y el corpiño y me quedé solamente con el guardapolvo. Practicamente saltaba de la alegría, no me importaba nada. Salí del baño, bien aputasada con una sonrisa de orja a oreja, me senté en el escritorio frente a la abogada. Y le comenté que estaba por pasar una colega amiga que necesitaba urgente asesoramiento legal. Condimenté un poco la historia, y lo hice quedar al ex cómo un sacado...Ella sin dudarlo me dijo que si, que no tenía inconvenientes en conversar, de paso hacía tiempo y conseguía una nueva clienta.
Quedamos frente a frente esperando a mi amiga, pasaron los minutos y yo relojeaba de arriba a bajo el cuerpito de la beba que me estaba por comer. La hija de puta se había subido un poquito la tanga, movía la colita, arqueaba la espalda, me relojeaba. Se había soltado el pelo...
Al rato golpean la puerta, mi colega pasa, las presento y mi amiga me hace caras raras cómo preguntando que pasa aca? Que hace esta nena en bolas? Y vos con las tetas al aire? Yo le hago señas de un cafe. Entiende todo y se la lleva!!!!!!
Se cierra esa maldita puerta, le pongo llaves y me la llevo a Cande a la maquina de pilates. Sin decir nada deja de caminar en la cinta...
-Bebe, tu mamá se fue a tomar un café con una medica que tiene unos problemas. Seguimos solas te parece?
-Me puedo sacar la remera que estoy toda transpirada?
-Obvio linda (Estaba todo dicho. La pendeja no era ni santa, ni virgen. Tenía actitud para bancarse a una veterana cómo yo)
La senté en bombachita y en corpiño en la maquina de pilates. Y le mostré unos ejercicios de elongación. Ella me acota diciendome que hacía yoga, y que tenía bastante elasticidad. Me puse detrás de ella y empecé a empujarle suvemente por la espalda, a la vez que le tocaba la cintura, y la cola. La acaricié muy sutilmente varios minutos. Le hice unos masajes en el cuello, y le desabroché el corpiño. Ella sin resistencia lo deja caer.
(Tener a esa criatura desnuda, cubierta apenas con una tanguita de saten, haciendo ejercicios en una maquina de pilates fue una de las imagenes más memorables que tuve en toda mi carrera profesional...)
La di vuelta, la puse boca abajo y le pedí que apoyara las manos en la plataforma , que baje la cabeza y levante la cola formando un triangulo. Ella sin chistar repondió armando un triangulo perfecto, Dejandome la colita bien parada hacia arriba.
Me acerco, empiezo a tocarle las piernas, empiezo a besarle los bordes de la bombacha. Levanta más la colita, le toco el clitoris, se pone firme, enpieza a suspirar...
Le pido que afloje, le pido su mano. Lentamente la voy sacando de la maquina, mi instinto materno me alertaba sobre la posibilidad de que se lastime. Abro un placar, saco una colchoneta y una esfera grande de silicona.
La recuesto en la alfombra, me desabrocho el guardapolvos, me recuesto, apoyo mis lolas sobre sus tetitas. Quedan los labios cerca. Le como la boca, ella me la come a mi. Nos besamos desaforadamente, me chupa la lengua, le meto la lengua. Su boca tiene un gustito exquisito. Es pura, casi virgen. Ella me abraza muy tiernamente, yo le doy besos en el cuello, le paso la lengua por las tetas, le muerdo despacito los pezones. Soy una loba, estoy desesperada, estoy empapada, estoy en el infierno con un angel. Por fin voy a acabar.
Estamos las dos en el piso, yo arriba. Me la estoy cogiendo cómo me enseñó mi marido. Apoyo mi conchita media vaqueta sobre su conchita casi virgen. La froto cada vez mas fuerte. Le chupo la oreja. Ella apoya sus manos en mi cola. Mi colaaa, en mi cola NO!. Empiezo a sentir los deditos de la pendeja jugar con mi culo quemado. Acabooo. Me mojo toda, la mojo toda. Esta ves estuve viva.
-Vení bebe parate. Te voy a enseñar algo. Yo te lo hago primero y después si te animás me lo hacés a mi.
(Se para, siempre obedece, pienso que bien educadas y que putas vienen las pendejas)
Traigo la esfera de silicona, esa grande que usan en algunos programas de fitness. Pongo a la nena boca a bajo recostada sobre el globo. Casi en cuatro, solo que con la colita mirando hacia arriba. Ella se deja, cae sobre la esfera y encuentra el equilibrio. Le corro un poquito la tanguita, siempre se la dejo puesta. Le doy unos besitos en las piernes y en los cachetes de la cola. Le clavo un poquito las uña. Junto un poquito de aire y le empiezo a violar el culito con la lengua. Por primera vez soy un poco violenta, y le tiro mis años y mis vicios encima...
Ella por primera vez se incomoda. Me afirmo a su cola tratando que no se me escape, se la abro un poquito. Le paso la lengua del clitoris hasta el agujerito del culo. Ahí vuelve a relajarse. La tengo, es mía nuevamente. Yo estoy practicamente en el cielo chupando una ostra...Me trago cada jugo que roba mi lengua. La chupo, la chupo cada vez con más placer. Acabo nuevamente chupandosela.
Ella entiende el juego y usando la bola empieza a moverse. Quiebra la cintura, mueve su culito de arriba hacia abajo, de atras hacia delante. Comprendo que quiere acabar. Suspira cada vez mas fuerte, muerde la esfera y grita con verguenza como una perrita que extraña. Le entierro la lengo, le meto dos deditos y le chupo el clitoris. Empiezan a salir los juguitos, se los chupo.
-Bebe acabame en la boca, dale bebe, acabame en la cara. Movete!
Se mueve cada vez más rápido. Le muevo los dedos dentro de la conchita que ya era agua, alcnzo a tocar esa parte rugosa que nos vuelve locas. Vuelvo a pegarle un lenguetazo a esa colita virgen. Grita, grita por primera vez y acaba.
Sale aguita a borbotones, me chupo los dedos, le paso la lengua y me tomó toda esa acabada salada. Una hermosura. Se viene hacia mi, la garro de los pelos y chapamos. Se rie, por primera vez se rie y me mira a los ojos tiernamente. Nos abrazamos. Yo no quiero terminar. Se anima a tocarme y libero mi fetiche:
-Dulce, tengo un problema
-Que pasa? (con carita de asustada)
-No te asustes. Me duele la colita, hoy temprano fui a depilarme y me quemaron. Y unos besitos tuyos pueden calmarme por un ratito. Cuando te acoste en la esfera, te dije que si te animabas podías hacerme lo mismo...
(Me interrumpe, se arrodilla, me agarra de la cintura y me "acomoda" en el globo)
Quedé con mi lolas apoyadas en la silicona, casi en posición perrio con la esfera en la panza y el culo super abierto. (SOÑABA CON ESTO DESDE EL MOMENTO EN QUE ENTRÓ POR LA PUERTA)
La nena empieza a darme besos en las piernas, en los cachetes de la cola. Siento sus deditos tocando mi conchita. Nuevamente me encontraba con el culo al aire, toda acabada delante de otra pendeja (no me digan que la vida no es increible)
-Tenés colorado Andre
-Si, me arde, ahí necesito unos besitos
-Así?
-Si bebe, así...
-Te gusta?
-Me encanta..
Empiezo a sentir la lenguita en el culo. Empiezo a sentir la saliba. Empiezo a sentir que me bajaba todo.
-Dale bebe dale no pares, meteme mas la lenguita
Ella hacía caso en todo. Sentí que la cola se me abría, y que tenía la mitad de la lengua adentro. Me afirmé bien a la bola con la mano izquierda. Y con la derecha me empecé a toquetear el clitoris. Estaba en una posición sublime. Estaba completamente arqueda sobre la bola, con las tetas al aire, el guardapolvo desprendido, y tenía a una pendeja divina enterrada en mi colita...
Estaba cerca de liberar toda la tensión de las ultimas 20 horas. Me empecé a poner un poco loquita porque lo que se venía era grande, lo sentía. Esta criatura eligó el peor momento para desvirgarse con una mujer.
Empecé a moverme mas rápido, me puse un poquito violenta. Le refregaba cada vez mas fuerte el culo en la cara. Mientras aceleraba empecé a gritarle:
-Dale putita que ya me tenés
-Dale pendeja virgen
-Dale bebe, chupale el culo a la vieja, no pares.
Me movía cada vez más fuerte, gritaba y la borrega se la estaba bancando sin chistar. Eso me daba todavía más ganas de llenarle la cara de flujo
-Dale turra que viene tu mamá y te va a ver con toda la cara sucia
-Dale puta de mierda!
-Pendeja puta, Dale pendeja, ni te te ocurra pararrr
-Dale Puta! Chupá que viene tu mamá y te quiero acabar...
Dejé de tocarme el clitoris con la mano derecha, la agarré de los pelos y le puse la cara bien adentro del culo. Ella segui sin chistar, chupaba y chupaba. Y se sostenía de mis piernas.
-Te gusta el olor a culo
-Dale bebe, dale que termino, ya pasa
-Aguantá bebé, aguantá bebé
Empecé a moverme cada vez más y más fuerte. Sentía la nariz de ella en mi cola. La lengua, la boca...Estaba en la gloria. Pocas veces me chuparon el culo de esa manera.
Sentí que el cuerpo se me desmoronaba. Que me desmayaba, que perdía el equilibrio. Y la pendeja en vez de aflojar, abría más la bocar y me metía la lengua.
-Puta
-Pendeja Puta
-Te acabo, te acabooo
Empezaron a saltar cantidades increbles de fluidos. Yo gritaba cómo una desquiciada y le apretaba con fuerza la cara y me la pegaba más y más a mi cola. Ella en cambio de resistirse empezó a chupar y a tragar todo lo que le llegaba, y todo lo que salía de mi cuerpo. Inclusive hasta un poquito de orina...
Estaba rendida, fundida. No seantía los musculos, no tenía reflejos. Me desplomé. Y la dulzura esa me seguía besando, ahora con más sutileza, me limpiaba, me pasaba la lengua cómo si fuera un gatito.
Había agua en el piso, en la bola, en mi guardapolvo...
Estuve dos o tres minutos casi inconsciente abrazando la esfera...
Me recuperé, la miré a Cande y se reía con los labios hinchados. Se empezó a cambiar, fui a buscarle papel, le dije que vaya al baño. Me abroché el guardapolvo, los pechos me estallaban...
Acomodé un poquito el consultorio, tiré desodorante de ambiente, limpié un pocos los pisos para tratar de disimular. Pero finalmente no esperamos a que venga la madre. No adelantamos, nos cambiamos y nos fuimos las dos juntas a la confitería 9 porque la verdad el olor a sexo era imposible de disimular)
Caminando por los pasillos le pregunto dulcemente cómo estaba el tobillo, y la turra me dijo que ahora le dolía los labios. Nos reimos y agedamos para el Martes que viene, el segundo encuentro.
Lllegamos a la confitería, no encontramos a la madre ni a mi amiga. Nos pedimos unos jugos y nos quedamos esperando...
Seguramente se imaginan una de las posibilidades de por que mi amiga, y la madre no estaban. En un ratito me contará durante el almuerzo.
FIN...
Espero que hayan disfrutado, la locura que viví el día Martes. es casi imposible ponerla en palabras...
Para los que me pidieron fotos paso algunas fotitos más de mi amiga médica y yo en su pileta. de todas maneras, en breve vuelan. tengo miedo que algún cónocido me reconozca...
75 comentarios - Tengo un fetiche con mi cola 2 + foto
Hoy ya pude volver a usar pantalón!
Besotes
ME DEJASTE PARA REVENTAR 🤤 🤤 ✊ ✊ 💦
PD: hermosas fotos
Por dios, ya la busqué en Facebook y le mandé la solicitud de amistad!
Esa colita es tuya? Ojo, me gusta recibir pero también doy...No sabés cómo le dejé el culito a la nena!!
Te doy lengua todo el dia hasta que se me acalambre el estomago ! 😳
y una putita de la cola 😛
Muy buen relato, van 9 puntos y tu a favoritos para enterarme en cuanto publiques más relatos
No tenemos 18, (yo 29 y ella 27) pero nos gusta pensar que todavia calificamos como pendejos apatecibles!!!! jajajaja........................................y ahora tu relato nos generó la fantiasia de calentar a una vete divina como vosssssssssss
Besos muy buen relato!! nos calentó a los dos!!
Buena cola para sacudirle un chirlazo!!
A seguir con la lujuria medica, y con el cachondeo virtual y real