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Una estudiante avanzada... Puede ser verdad o ficción...

QUE ALUMNA MÁS CALIENTE

Todo comenzó cuando entregaba las calificaciones del primer bimestre a mis estudiantes de un parasistema, un viernes en horas de la noche

En las postrimerías de la reunión, entró Sofía una de mis mejores alumnas.

Sofía, tenía un pantalón bien ajustado a su cuerpo, una blusa muy elegante y muy subjetiva, me llamó la atención la forma de vestir..

Sofía, se disculpo por su atraso, ya que venía de una diligencia.

Contesté, no te preocupe Sofía. Por el contrario deseo felicitarte, eres una de mis mejores estudiantes.

Muchas gracias profesor, dijo Sofía.

Eres muy disciplina y excelente alumna.

A la par entran otras estudiantes a saludarme. Las alumnas que habían llegado al salón, luego de saludarme, se colocaron en fondo del salón donde continuaron conversando.

Yo observaba disimuladamente a Sofía, a pesar que sus compañeras también lucían atractivas, era Sofía la que me llamaba la atención.

Al concluir el tiempo dispuesto por el parasistema, decidí cerrar el salón y retirarme.

Diciendo, al grupo reducido de alumnas que habían quedado en el salón, Dije, quieren que

las lleves a casa, es un poco tarde.

Solo quedaba Sofía y dos amigas más. Las tres aceptaron.

Al entrar al auto, Sofía se sentó al lado mío. Puede dejarme de última, vivo por un poco cerca de su casa. No hay problema, contesté.

Cuando quedamos los dos solo. Dije, Sofía me dejaste con la boca abierta hoy.

¿ Porque? Contestó, con ese pantalón que tienes puestos cualquiera te puede secuestrar.

¿ Usted cree?

Claro que sí. Con esa ropa aparentas más edad.

Muy mayor. Dijo. No tanto, pero puedes pasar fácilmente como una chica de 22 años.

Pero solo tengo 18 años. Eso lo sé, pero cualquier persona puede confundirse.

¿ Le gustó, como me veo profesor. ?

Dije, mejor no preguntes. ¿ Porque no?. Estas muy guapa. Le gusta solo mi ropa o yo.

Té vez muy me bien. Espero que tu novio no sea celoso. No tengo novio.

Entonces, no saben lo que se pierden.

Usted, lo sabe. Dije, no. ¿ Como sabe lo que se pierden. ?

Quieres que te lo diga.

Sí, contestó.

Si yo fuera tu novio, no me separaría de ti en ningún instante

Estas seguro.. – Te digo que sí, te ves muy bien.

Quiere que te diga la verdad Sofía.

Contestó. Sí, por favor, estoy intrigada.

Tengo que reconocer que no me había fijado en ti hasta esta noche, quizás por estar ocupado y con el uniforme que usan, no se aprecia todo como ahora y muchas veces engañan, como hoy. ¿ Yo le engañe. ?

Sí, contesté. Una cosa es verte en uniforme y otra es verte como estas ahora.

Sofía sé hecha a reír, puedo contarle algo profesor.

¿ Que? . Voy a decirle un secreto.

¿ Cual? Desde que lo vi el primer día, me gustó mucho y cuando comenzó a dar sus clases, me gustó más. ¿ Cómo así respondí,?

Me agrada como viste, como da sus clases y sobretodo me gusta como hombre.

Sabes que soy casado. Si eso lo sé, pero no pierdo mis esperanzas con Usted, y es que

Me gusta mucho.

Ya antes té a pasado con otros profesores. No.

Quizás, algunos me llaman la atención, pero no tanto como Usted.

Tienes algo que me pone la piel de gallina, cuando estos cerca de Usted, y me mira.

La verdad que se me hace difícil explicarlo.

Pregunte. ¿ Que es lo mas té gustados de mí.? No sé, pienso que todo

Sofía, te entiendo y eres joven. Pronto hallaras uno de tú edad y me olvidaras, ya veras.

Es probable que eso ocurra. Pero le diré algo, ahora mismo no estoy pensando en eso sino en Usted. Quiero que lo sepas.

Dije, gracias por decírmelo. Cuando, llegamos a su casa antes de salir del auto,

Dijo, me gustaría que me diera un besito en la boca.

No tienes miedo que nos vea alguien. No.

Nos acercamos y la bese, ella abrió su boca, deleitándome con la lengua que me ofrecía, yo disfrute con sus labios húmedos y carnosos, apretándole suavemente los senos con una mano, volvimos a repetir el beso, esta vez con mas intensidad.

Nos separamos, ella salió del carro. Dijo, buenas noches profesor y se fue.

Todo había ocurrido tan rápido, no podía dar crédito de lo que había pasado. Arranque mi

Auto, dirigiéndome hacía mi casa. Volvería a verla el lunes.

El lunes, en horas del recreo volvimos a vernos en mi salón. Sofía, me saludos diciendo

¿ Que como tal el fin de semana.?

Contesté, bien y tú, mas o menos, no pude olvidar el besito del viernes. Me gusto mucho

Espero que se repita pronto

Dije, yo también.

Luego, fue a su banca a buscar su bolso, sacando dos emparedados y un par de bebidas, sentándose cerca de mi escritorio, ofreciéndome uno.

Muchas gracias, por acordarse de su profesor consejero.

Probé el emparedado. Dije. Están muy buenos. ¿ Le gustan.? Sí.

Al terminar. Dije, Sofía parece que todo lo haces bien.

¿Cómo así.?

Primero ese beso ardiente del viernes y hoy el emparedado.

Sé hecho a reír. Profesor, cuando volvemos a repetirlo. ¿ Qué? ? El beso profesor.

Sofía, soy casado. Ya lo sé, no pretendo que dejes a tu mujer, solo que quisiera besarte nuevamente.

Contesté, a mí también.

Ahora tengo unas horas en las noches aquí en el colegio. Se me hace más difícil.

Puedo hacerle una visita una de estas noches en sus clases nocturnas y Usted, se ausenta unas horitas, así, nadie se entera.

Tengo que hacer una investigación en la biblioteca del colegio. Esa sería mi escusa para que no me echen en falta unas cuantas horas.

Dije, todo lo tienes planeado Sofía, cuando deseas algo. Así es profesor.

Bueno tú dirás cuando. Conteste. Buscare el mejor momento y vendrá buscarlo

Sofía, el tiempo dirá cuando. Así es y se fue.

Pasaron un par de semanas y cuando menos lo tenía previsto la vi una noche en el pasillo, donde dictaba clases. Tenía puesta la falda del colegio y una blusa ceñida al pecho.

Al terminar la clase, salí a conversar con ella.

Bueno, aquí estoy profesor.

Dije, espérame afuera del Colegio cerca de mi auto, voy a ir a pedir un permiso, para no volver a la última hora.

Al salir, la vi cerca del auto, Ven, dije y subió al carro.

Me traslade a un paraje de enamorados a orillas del mar que yo conocía, no éramos los únicos autos, busque un lugar un poco alejado y oscuro.

Cuando me estacioné, comenzamos a besamos uniendo nuestras lenguas con mucha pasión, mientras le oprimía suavemente los senos con mi mano, mi lengua recorría su cuello y las orejas, ella se apretaba más a mí, pero la palanca de los cambios del auto, impedía sentir su cuerpo cerca de mío.

Dije, espera un momento. Baje el asiento de ella en forma horizontal accionando una palanca y me traslade hacía su lado, ella se acomodó contra la puerta, de esa forma mi pene tenía contacto con su pelvis. Mis manos comenzaron a sobarle las nalgas por encima de su falda, no quería apresurar las cosas.

Continuamos los besos, cada vez más ardientes, Sofía, trataba de pegar su cuerpo contra mi pene erecto dentro de mi pantalón. Deseaba sentirme cada vez más cerca.

Metí mi mano debajo de su blusa, moví hacía arriba el sujetador para poder tocarle los senos, abrí un poco más la blusa para besarle los senos, se lo lamía aprisionándole el pezón con mi boca, los mordía suavemente uno primero y luego el otro, Sofía suspiraba de placer, siiiiii, uuuuuuu siiiiiiiiisssssssss. que rico. Ssssigueeee sigueee. Sí sissiiiiiis rico.

Dije, te gusta. Si, mucho, continué besándole los senos y la boca alternadamente, mientras

Subía poco a poco la falda, para llegar con mis manos a sus muslos. Sofía, no se resistía.

Dije, abre las piernas, así pude llegar con mi mano a su concha, tenía el panti húmedo.

Ahora gemía mas agudamente mientras, pasaba mi mano por encima de su panti y presionando su raja mojada

Moví el panti hacía un lado y llegando a su concha velluda.

Dijo, hhhhooooo, rico no pares, que rico sigue, si sigue OHOHOHOUMMMMUUUUU. Sigue, sigue, me vas a volver loca, ahora movía mis dedos de arriba abajo por toda su raja mojada, al llegar a su clítoris, la sobaba con toda la palma de mi mano abierta.

Entonces Sofía, apretaba sus piernas contra mi mano. Decía, espera espera un momento retorciendo las caderas OOOOHHOO, sigue ahora, si ahora, no pares, no pares sigue, volviendo abrir las piernas, pasando nuevamente mi mano a lo largos de su raja, y restregándole el clítoris, volvía a contornear todo el cuerpo apretando las piernas, luego se estremecía y decía

Rico sí ricooooo. Sí ahahhhhhh uuuuuuuuummumummumumm. Que rico, siiiisiii

Te gusta, sí mucho Sí. Sigue. Me acomode en el asiento boca arriba, saque mi pene adolorido de su encierro. Quiero que lo toque con tu mano, lo agarro y le fui indicando como hacerlo, moviendo su mano comenzó a mastúrbame lentamente.

Dijo, es la primera vez que tengo uno en mi mano. ¿Que te parece? Pregunté Es grande. ¿Te gusta,? Si me gusta.

Quiero cogerte Sofía, yo también quiero, pero aquí no, me da mucho miedo y no me siento segura en este lugar.

Tiene razón, la verdad es que estamos incómodos y alguien puede vernos. Tendremos que dejarlo para otra ocasión.

No te vas a molestar. Contesté, no-amor, hay tiempo, creo que para ser la primera vez lo hemos disfrutado. Es verdad. Debemos planearlo para vernos pronto. Contesté

Dijo, eso espero.

Nos acomodamos la ropa, coloque el asiento en su posición normal y nos retiramos, eran las 10 de la noche, así que la lleve rápidamente a su casa, nos dimos un beso de despedida, nos vemos mañana.

Contesté, sí profesor

Continuara.......

Agradecemos todos los comentarios recibidos... Si desea intercambiar experiencias sexuales... Con mucho gusto le contesto... Solo a las mujeres, sin importar la edad... Todas son bellas... chao

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