Perdí una apuesta (VII) Se rompió

VII

Abrí los ojos, no sabía qué hora era pero era de día. Rafa dormía de costado con su mano sujetándome una teta, lo empujo con suavidad para que no se despierte, ya boca arriba lo miro, hermoso, su cuerpo es hermoso pienso y me toco la conchita, tenía la verga medio despierta, decidí despertarlo con un pete. Se la chupe un rato largo hasta sentir su mano en mis nalgas – vacíamela – me dice y así lo hice, se la exprimí y se la limpie hasta dejarla lustrada. Me levanté y fui al baño a enjuagarme la boca se vino atrás mío – salgo un rato, vuelvo enseguida - porque?! - le pregunto, - sorpresa, pero tenía que ir descargado, así que buenísimo el pete! me da un chirlo, sale y se va.
No pasó mucho rato y ya estaba de vuelta, se tira al sol en el camastro y me llama. Me acerco, subo, no estaba excitada pero me calenté al toque que sentí su mano acariciándome el muslo los cachetes, él la tenía dormida se la puso para arriba sobre la panza y me pidió que me siente sobre la verga y se la masturbe, me encanto!!!!
Me senté como me pidió y comencé a recorrerla con los labios abiertos y el clítoris, me prendí fuego en un minuto!!!!, Me agarro de los cachetes del culo y manejo el ritmo a la par me comía las tetas, yo le agarre la cabeza para que me las coma, todo era muy caliente. Quiero ver cómo te entra toda – me dice, la agarre me la puse en la puerta de la conchita, el primer contacto me dejo al borde del orgasmo, cuando la tuve adentro, acabe!!! con un gemido suave pero notorio y clavándole las uñas en los hombros.
Subía y bajaba lento al principio, él me agarraba las tetas, las apretaba y mordisqueaba los pezones, empiezo a arquear la espalda, todo era placer. Me suelta las tetas, agarra las cachas y acelera el ritmo de bombeo. Los gemidos de los dos se cruzaban y el ritmo se aceleraba, sentía como metía los dedos en el hoyo para estirarlo, no me importaba, estaba tan caliente que casi no los sentía. Los pezones se pusieron más duros estaba por acabar, él acelera más el ritmo de bombeo largo un ramillete de gemidos y le araño los pectorales, él no había acabado todavía así que siguió bombeando y estirándome el hoyito que a esa altura ya era un hoyo jijiji.
Escucho una voz grave, profunda y con un acento raro atrás mío, le hablaba a Rafa, mire como pude, era un negro como de dos metros de esos que venden relojes en la calle, le preguntaba por algo de la pileta, yo me quería tapar con algo, lo tenía a Rafa adentro de todas las formas posibles y a la vista del negro. Rafa le respondió y el negro desapareció, Rafa se preparaba para acabarme adentro, me clavaba la pija con cada chorro, el cuerpo se le ponía tenso, hasta la última gota, como siempre la dejo hasta que salió sola – déjame ver como se te sale la lechita – me dice – Quien es este negro!? – le grito y le pego – viene a limpiar – y a mí que! y si no están ustedes yo que hago con este tipo acá y si me hace algo, yo me vio en pelotas, cogiendo, con vos adentro y el culo abierto! – no pasa nada – me dice riéndose – cuando viene avisa porque nosotros le pagamos y si te vio coger que!? A mí no me jode, me calienta y no lo hice en la calle y basta!! Me grita – se acabó la historia, ahora hace lo que te pedí!!. A regañadientes le hice caso mientras le digo – quiero decidir eso yo también, no solo vos – mientras yo pague yo decido sobre vos, cuando esto termine lo charlamos! – algo enojado se acomodó vio lo que quería, se levantó y se fue a bañar. Yo también estaba enojada y decidí esperar a que él termine para ir a bañarme.-
No nos hablamos hasta la noche en que decidimos, si decidimos, ir comer sushi, cuando me empezaba a vestir se aparece con un plug y sin hacerme demasiadas preguntas, me pone en cuatro patas sobre la cama, me lo mete y me pide que no use ropa interior.
En el restaurant estaba incomoda con el vibrador me tenía que sentar de costado pero la vibración me ponía a punto caramelo. Los enojos habían pasado. Cuando nos estábamos por ir, entra a pedir un par de botellas de champagne y nos vamos. Me calentaba mucho la situación, sabía que esa noche me hacía el culo, que lo perdía.
Llegamos, fue a la cocina yo me quede en el living, volvió con copas, le pedí que me sacara el vibrador, ni registro el pedido, me dio una copa con champagne – porque te duela poco – dijo guiñanadome el ojo, como brindis…me hizo reír.
Se sentó en el sillón me sentó a upa, ahí empezó una franela infernal, caliente, las manos se le multiplicaban las piernas los muslos la conchita, las nalgas, pasaba de las tetas a la conchita de ida y vuelta, me desnudo, me chupo los pezones, los mordisqueo un poco, seguimos con el champagne y la franela, me chupo la conchita, la abrió y me cogía con la lengua AHHHHHHHHHH!!!!! Le tiraba unos chorritos de champagne y chupaba más ahhhhhhhhhhh!!!!!!!! Puto me vas a matar!!!! – le digo tocándome las tetas, estaba en llamas, se paró se sacó la ropa – besame el culo – me dice con los ojos vidriosos, abrió las piernas, casi me explota el cuerpo, se había depilado!!!!!, le pase la lengua como loca, desde las bolas hasta el hoyo apretado, cerrado, con esas nalgas de hierro, - relájate gordo – le digo, me mira – mándame un dedo, así estamos igual – me reí a carcajadas – iguales!! – le digo nos reímos y seguimos con el champagne.
Me costó un montón porque lo tenía muy cerrado, lo llene de saliva y después de un rato de acariciarlo, se lo hundo como pude trate de serruchárselo como hacía él conmigo, la verga se le puso dura como un garrote y los gemidos se le escapaban a gritos –ayyy putita como me la voy a cobrar – jadeó, yo no podía más de la calentura, lo quería tener adentro mío ya!!!.
Le saque le dedo y me subí para cabalgarlo – así no – me dice, se para con la verga más dura que nunca me pone en perrito con las piernas tan abiertas que no necesite abrirme las cachas, se abrieron solas, comienza a sacarme el plug, despacio, lo mete y lo saca varias veces, después lo cambia por sus dedos llenos de lubricante, uno, dos, lengua, dos, tres, me pajea la conchita que no paraba de expulsar jugos, mando los pulgares para estirar más el hoyo, los gemidos se transformaron en gritos de placer y dolor, llenaron la casa, se paró, me paro bien el culo, abrió bien las nalgas y apoyo la cabeza, sentir ese puerteo me hizo acabar otra vez, pero seguía caliente hizo fuerza, más fuerza, la cabeza se resbaló – relájate – susurró, la volvió a acomodar y empujo con más fuerza que las veces anteriores, el grito de dolor tapo a todos los otros – entro la cabeza – dice – me duele, sacala! Ayyyyyyyy!!!!!! – le pido, nada. Siguió empujando, un poquito más, bombeo despacito, sentía que se me rajaba el cuerpo el medio – ya entro la mitad – me dice jadeando – me estas partiendo al medio!!!! – no me contesto, la saco hasta la cabeza tiro otro chorro de lubricante y bombeo despacio, la paja que me estaba haciendo mezclaba los gemidos con los gritos de dolor, pronto se juntaron, sentía como un tronco interminable entraba por mi hoyo sin prisa pero sin pausa, arquee la espalda el placer creció pero me dolía todavía ya lo tenía adentro y hasta que no la metiera toda no iba a parar, lo sabía.
Respire hondo y trate de relajarme me dio un pequeño chirlo en el clítoris y me dijo al oído, relájate hermosa, no falta nada - con un jadeo que nunca le había escuchado, me excito más, él bombeó lento, despacio, sentía que me estaba serruchando al medio como un mago, comencé a gemir despacito así acabe!!!!! otra vez, había perdido la cuenta, frenó el bombeo y empujo más sentí las bolas cerca de las nalgas, bombeo otra vez un rato después empujo por última vez las bolas se aplastaron contra mis nalgas – entro toda – me dijo al oído – se quedó quieto un momento y comenzó un bobeo suave pero intenso, sentía que me descosía hasta la concha, los gemidos aumentaron en cantidad y volumen, también la paja, los gemidos de él aumentaron y también el bombeo, las bolas empezaron a golpearse contra mis nalgas, la sensación fue única, éramos un incendio, jadeantes, transpirados, excitados calientes, acabé una vez más, el dolor estaba ahí pero la calentura era tan grande que no me importo, todo aumento los jadeos, el bombeo, los gemidos, lo agarraba de la cabeza le comía la boca le chupaba el cuello los labios, todo todo, sentía como se le iba tensando el cuerpo, pronto acabaría dentro mío, acabe una vez más!!!!!, esta vez con un poco de pis, no lo pude frenar tampoco quería me explotaba el cuerpo por la calentura y lo que tenía en el culo, un momento después me abrazo fuerte, el bombeo se detuvo y apretó fuerte la pija contra el fondo del orto sentí un líquido caliente adentro ya sabía lo que era claro, dos, tres cinco no se las veces los hizo y como otras veces siguió bombeando hasta que se ablandó y salió sola, me besaba la nuca, la boca las tetas todo lo que encontró.
La sacó, se sentó en el sillón – que puta hermosa sos la concha de tu madre!!!! Me rompes la cabeza!! – me dijo agitado se agarró la verga y subió. Lo quise seguir pero las piernas no me respondían y me dolía todo el cuerpo hasta creo que me salía humo del culo, porque era oficial me había roto el orto con todas las letras, un rato después volvió, bañado me llevo a arriba me metió en la bañera caliente, me dejo ahí se fue de nuevo.

Aclaración: El número del capitulo y el contenido son coincidencias, no lo planee