(Me borraron la primera parte 😞 desps la subiré)
Después de una experiencia que a pocos les podrÃa pasar, una experiencia sexual con alguien de mi propia sangre, me toco devolver ese placer ocasionado.
Ya habÃan pasado un par de meses de mi experiencia subida de tono con mi hermana mayor y pensé que aquella noche tan maravillosa habÃa quedado en eso, algo maravilloso pero como no hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague, mi hermana me pidió satisfacerla como ella lo hizo conmigo.
Al igual que en mi primera vez con esa mujer, estaba cuidándonos a mi hermana menor y a mà en mi casa, estábamos conversando los tres en el living y ya más menos tarde me levanto del sillón y digo que me iré a dormir porque estaba un poco cansado y además la conversa era un poco fome a mi gusto, ya que conversaban de tips de belleza y cosas asÃ. Comienzo de despedirme de mis hermanas como lo hago siempre, con su besito, me despido de mi hermana menor y al ir a despedirme de mi hermana mayor, me dice al oÃdo una frase que me dejo pensativo.
- No te duermas todavÃa, quiero que me pagues lo que me debes.
Subiendo a mi dormitorio iba pensando que significaba lo que me habÃa dicho, hasta que recordé ese dÃa en el cual gozamos los dos, que tenÃa que hacerla acabar… Algo que no tenÃa planeado que ocurriera, y menos en tan poco tiempo de lo que habÃa sucedido, pero como nunca me ha gustado quedar mal, me prepare psicológicamente para tal acontecimiento.
Estando en mà dormitorio esperaba a que llegara mi hermana, pasaba el tiempo y no llegaba, hasta llegue a pensar que me estaba alterando la psiqui. Ya me estaba quedando dormido cuando siento que abren la puerta muy despacio, y era ella, con una cara muy sensual me mira y me pregunta
- Estas dormido??
- No, pero ya casi pegaba los ojos.
- Entonces llegue justo a tiempo.
- Jajaja creo que sÃ, y que onda por qué te demoraste tanto??
- Nuestra hermana no querÃa irse a dormir, según ella estaba muy buena la conversa.
Mientras soltaba una risita al terminar la última frase se acercaba a mi cama, con un caminar que anunciaba que se vendrÃan cosas muy ricas. Estaba con su pijama, un pijama que jamás en mi vida podre olvidar, una especie de baby doll semi transparente, de color blanco que hacia relucir sus grandes pezones, con unos tirantes que no sé como sostenÃan sus enormes senos. Yo estaba solo con la parte de debajo de mi pijama y al verla caminar hacia con tan atuendo mi pene empezó a cobrar vida. Mi hermana se para frente a mà mientras yo me sentaba en mi cama, ella gira para que la observara yo no decÃa nada, mi mirada estaba fija sobre su hermoso cuerpo, la recorrÃa de pies a cabeza.
- No me dirás como me veo??
- Sorry, me quede pegado en eso mismo.
- Te gusta??
- Me encanta, te ves súper bien, si no fueras mi hermana te harÃa muchas cosas…
Me interrumpe poniendo su mano en mi boca, me mira fijamente y me dice al oÃdo con una voz que me estremeció
- Hoy no quiero que pienses eso, seré una mujer más en tu vida pero no me entregare del todo.
Yo la abrazo y empiezo a recorrer su espalda con mis manos, ella al sentir mis manos recorrer su cuerpo se sienta en mis piernas y comienza a realizar lo mismo, sentà una sensación muy genial, sentir sus uñas recorrer mi espalda que me empezaban a dejar sus leves marcas fue algo que me éxito. Cuando llego a la base de su espalda y comienzo a acariciar su trasero, me doy cuenta de que llevaba puesto un colales, la miro a los ojos y le digo
- Y esto?? Pensé que no usabas colales muy seguido.
- Si los uso, pero más en ocasiones especiales como esta. Me gusta pasarla bien y que la pasen bien asà que no es malo, no crees??
- Para nada, pero no los he visto.
Sin más se pone de pie y se gira frente dejando su gran culo frente de mi rostro, ver ese colales de encaje de color rojos hizo que la excitación que comenzaba a sentir llegara a todo su potencial, mi verga en pocos segundos se puso bien dura que hasta me incomodaba el pijama. Lo único que atino es a tocarles sus grandes nalgas, las masajeo por unos segundos, juego con ellas, se las abro y las aprieto. Siento que mi hermana comienza a excitarse ya que le comienzo a escuchar unos leves gemidos, ese fue mi detonante, preparo rápidamente mi mano y le doy una nalgada, escuchar un gemido de tal calibre me llevo al mismo cielo. Luego de darme ese gustito empiezo a besarle sus ricas nalgas, la excitación nos estaba llevando al siguiente nivel, comenzábamos a sentir la lujuria correr por nuestro cuerpo, no quitaba mis manos de ese enorme culo que tenÃa enfrente cuando ella se incorpora a tocarse sus nalgas.
Yo no aguantaba más mi calentura, estaba que explotaba de pasión y mientras ella se tocaba sus nalgas yo la tomo de la cintura y la dirijo a la cama, sin decirle nada se acuesta y comienza a masturbarse por encima de su ropa interior yo sin tiempo que perder me posiciono encima de ella para tocarles su grandes senos, esos grandes senos que me volvÃan loco, se tocaba despacio luego fuerte y noto que sus pezones los tenÃa demasiado erectos, yo solo la miro y empiezo a sacarle su baby doll para dejar descubiertos esas grandes montañas y enseguida abordo sus pezones, comienzo a mamarlos, chuparlos, en realidad les hacÃa de todo hasta se los mordÃa y eso la excitaba mucho, me acariciaba el cabello para que no parara mientras ella seguÃa masturbándose.
Estuvimos asà unos minutos, disfrutando el momento que nos hacia delirar hasta el más infinito morbo, hasta que ella me dice que está por acabar y yo detengo mi jugueteo con sus pechos y me dirijo a su vagina que para ese momento estaba muy mojada, le saco su colales y empiezo a lamerla, su clÃtoris estaba súper grande y mi lengua se encargaba de darle placer, me encanta hacer sexo oral asà que me sentÃa que vivÃa un sueño morboso hecho realidad, ver como mi propia hermana disfrutaba lo que le hacÃa me encendÃa aun más, mirar a esa mujer encorvar su espalda porque no daba más de placer, no tiene palabras para describir lo que sentÃa en ese minuto. Saco mi lengua de su clÃtoris y le hago que chupe dos dedos de mi mano, esa sensación me hizo recordar cuando me chupo mi verga la vez anterior, luego de que dejara mis dedos bien mojados los pongo en su clÃtoris y juego con el otro momento más y sin previo aviso le meto los dos dedos hasta el fondo, el grito de placer que dio me dejo anonadado, simplemente ambos querÃamos más. Comencé a meter mis dedos bien adentro, rápido y fuerte hasta que en un gemido intenso explota dejando toda mi mano empapada de sus jugos vaginales. Me quedo unos segundos observándola como juntaba sus piernas por el orgasmo que habÃa tenido.
- Uff, que rico lo que me hiciste.
- Y eso que todavÃa no he terminado.
Me acerco a su mojada vagina y le comienzo a lamer su clÃtoris, saborear esos jugos vaginales era todo un éxtasis y a la vez empiezo a meter, no 2 sino 3 dedos, e inicio ese rica masturbación hacia mi hermana suavemente y con delicadeza para luego ir subiendo de intensidad hasta llegar a hacerlo bien rápido y con mucha fuerza.
No paso mucho tiempo y mi hermana menciona nuevamente que esta por acabar, yo con un poco de maldad por el morbo que estaba viviendo, comienzo a jugar con mi lengua más rápido y más intenso, y en un segundo su mojada vagina estalla dejando salir un lÃquido tan delicioso que empapo todo mi rostro, llenando mi boca de ese exquisito néctar suyo. Teniendo un poco de su rico néctar en mi boca me acerco a sus pechos y se lo empiezo a esparcir sobre ellos y ella como si supiera lo que querÃa, comenzó a tocarlos y a jugar con sus pezones, los apretaba y los tiraba con fuerza. Simplemente estábamos embriagados de placer, lujuria y pasión por el otro.
La miro fijamente a los ojos y le digo bien calentón
- Espero haya cumplido bien mi parte.
- Con creces hermanito, me encanto mucho y de verdad con mucha vergüenza te digo, esto si o si se tiene que repetir. Me encanta hacer estas cosas contigo, se que suena raro pero me calientas mucho.
Me quede pensando un momento, ya que mi hermana me ofrecÃa a seguir con esta morbosidad
- Esta bien, pero las siguientes tienen que ser con mucha más entrega, sabes a lo que me refiero.
- Claro, me calientas mucho asà que harÃa cualquier cosa en la cama contigo asà que empieza a prepararte.
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Comenten en buena onda si les gusto
Pronto se vendrán más historias
Saludos
Después de una experiencia que a pocos les podrÃa pasar, una experiencia sexual con alguien de mi propia sangre, me toco devolver ese placer ocasionado.
Ya habÃan pasado un par de meses de mi experiencia subida de tono con mi hermana mayor y pensé que aquella noche tan maravillosa habÃa quedado en eso, algo maravilloso pero como no hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague, mi hermana me pidió satisfacerla como ella lo hizo conmigo.
Al igual que en mi primera vez con esa mujer, estaba cuidándonos a mi hermana menor y a mà en mi casa, estábamos conversando los tres en el living y ya más menos tarde me levanto del sillón y digo que me iré a dormir porque estaba un poco cansado y además la conversa era un poco fome a mi gusto, ya que conversaban de tips de belleza y cosas asÃ. Comienzo de despedirme de mis hermanas como lo hago siempre, con su besito, me despido de mi hermana menor y al ir a despedirme de mi hermana mayor, me dice al oÃdo una frase que me dejo pensativo.
- No te duermas todavÃa, quiero que me pagues lo que me debes.
Subiendo a mi dormitorio iba pensando que significaba lo que me habÃa dicho, hasta que recordé ese dÃa en el cual gozamos los dos, que tenÃa que hacerla acabar… Algo que no tenÃa planeado que ocurriera, y menos en tan poco tiempo de lo que habÃa sucedido, pero como nunca me ha gustado quedar mal, me prepare psicológicamente para tal acontecimiento.
Estando en mà dormitorio esperaba a que llegara mi hermana, pasaba el tiempo y no llegaba, hasta llegue a pensar que me estaba alterando la psiqui. Ya me estaba quedando dormido cuando siento que abren la puerta muy despacio, y era ella, con una cara muy sensual me mira y me pregunta
- Estas dormido??
- No, pero ya casi pegaba los ojos.
- Entonces llegue justo a tiempo.
- Jajaja creo que sÃ, y que onda por qué te demoraste tanto??
- Nuestra hermana no querÃa irse a dormir, según ella estaba muy buena la conversa.
Mientras soltaba una risita al terminar la última frase se acercaba a mi cama, con un caminar que anunciaba que se vendrÃan cosas muy ricas. Estaba con su pijama, un pijama que jamás en mi vida podre olvidar, una especie de baby doll semi transparente, de color blanco que hacia relucir sus grandes pezones, con unos tirantes que no sé como sostenÃan sus enormes senos. Yo estaba solo con la parte de debajo de mi pijama y al verla caminar hacia con tan atuendo mi pene empezó a cobrar vida. Mi hermana se para frente a mà mientras yo me sentaba en mi cama, ella gira para que la observara yo no decÃa nada, mi mirada estaba fija sobre su hermoso cuerpo, la recorrÃa de pies a cabeza.
- No me dirás como me veo??
- Sorry, me quede pegado en eso mismo.
- Te gusta??
- Me encanta, te ves súper bien, si no fueras mi hermana te harÃa muchas cosas…
Me interrumpe poniendo su mano en mi boca, me mira fijamente y me dice al oÃdo con una voz que me estremeció
- Hoy no quiero que pienses eso, seré una mujer más en tu vida pero no me entregare del todo.
Yo la abrazo y empiezo a recorrer su espalda con mis manos, ella al sentir mis manos recorrer su cuerpo se sienta en mis piernas y comienza a realizar lo mismo, sentà una sensación muy genial, sentir sus uñas recorrer mi espalda que me empezaban a dejar sus leves marcas fue algo que me éxito. Cuando llego a la base de su espalda y comienzo a acariciar su trasero, me doy cuenta de que llevaba puesto un colales, la miro a los ojos y le digo
- Y esto?? Pensé que no usabas colales muy seguido.
- Si los uso, pero más en ocasiones especiales como esta. Me gusta pasarla bien y que la pasen bien asà que no es malo, no crees??
- Para nada, pero no los he visto.
Sin más se pone de pie y se gira frente dejando su gran culo frente de mi rostro, ver ese colales de encaje de color rojos hizo que la excitación que comenzaba a sentir llegara a todo su potencial, mi verga en pocos segundos se puso bien dura que hasta me incomodaba el pijama. Lo único que atino es a tocarles sus grandes nalgas, las masajeo por unos segundos, juego con ellas, se las abro y las aprieto. Siento que mi hermana comienza a excitarse ya que le comienzo a escuchar unos leves gemidos, ese fue mi detonante, preparo rápidamente mi mano y le doy una nalgada, escuchar un gemido de tal calibre me llevo al mismo cielo. Luego de darme ese gustito empiezo a besarle sus ricas nalgas, la excitación nos estaba llevando al siguiente nivel, comenzábamos a sentir la lujuria correr por nuestro cuerpo, no quitaba mis manos de ese enorme culo que tenÃa enfrente cuando ella se incorpora a tocarse sus nalgas.
Yo no aguantaba más mi calentura, estaba que explotaba de pasión y mientras ella se tocaba sus nalgas yo la tomo de la cintura y la dirijo a la cama, sin decirle nada se acuesta y comienza a masturbarse por encima de su ropa interior yo sin tiempo que perder me posiciono encima de ella para tocarles su grandes senos, esos grandes senos que me volvÃan loco, se tocaba despacio luego fuerte y noto que sus pezones los tenÃa demasiado erectos, yo solo la miro y empiezo a sacarle su baby doll para dejar descubiertos esas grandes montañas y enseguida abordo sus pezones, comienzo a mamarlos, chuparlos, en realidad les hacÃa de todo hasta se los mordÃa y eso la excitaba mucho, me acariciaba el cabello para que no parara mientras ella seguÃa masturbándose.
Estuvimos asà unos minutos, disfrutando el momento que nos hacia delirar hasta el más infinito morbo, hasta que ella me dice que está por acabar y yo detengo mi jugueteo con sus pechos y me dirijo a su vagina que para ese momento estaba muy mojada, le saco su colales y empiezo a lamerla, su clÃtoris estaba súper grande y mi lengua se encargaba de darle placer, me encanta hacer sexo oral asà que me sentÃa que vivÃa un sueño morboso hecho realidad, ver como mi propia hermana disfrutaba lo que le hacÃa me encendÃa aun más, mirar a esa mujer encorvar su espalda porque no daba más de placer, no tiene palabras para describir lo que sentÃa en ese minuto. Saco mi lengua de su clÃtoris y le hago que chupe dos dedos de mi mano, esa sensación me hizo recordar cuando me chupo mi verga la vez anterior, luego de que dejara mis dedos bien mojados los pongo en su clÃtoris y juego con el otro momento más y sin previo aviso le meto los dos dedos hasta el fondo, el grito de placer que dio me dejo anonadado, simplemente ambos querÃamos más. Comencé a meter mis dedos bien adentro, rápido y fuerte hasta que en un gemido intenso explota dejando toda mi mano empapada de sus jugos vaginales. Me quedo unos segundos observándola como juntaba sus piernas por el orgasmo que habÃa tenido.
- Uff, que rico lo que me hiciste.
- Y eso que todavÃa no he terminado.
Me acerco a su mojada vagina y le comienzo a lamer su clÃtoris, saborear esos jugos vaginales era todo un éxtasis y a la vez empiezo a meter, no 2 sino 3 dedos, e inicio ese rica masturbación hacia mi hermana suavemente y con delicadeza para luego ir subiendo de intensidad hasta llegar a hacerlo bien rápido y con mucha fuerza.
No paso mucho tiempo y mi hermana menciona nuevamente que esta por acabar, yo con un poco de maldad por el morbo que estaba viviendo, comienzo a jugar con mi lengua más rápido y más intenso, y en un segundo su mojada vagina estalla dejando salir un lÃquido tan delicioso que empapo todo mi rostro, llenando mi boca de ese exquisito néctar suyo. Teniendo un poco de su rico néctar en mi boca me acerco a sus pechos y se lo empiezo a esparcir sobre ellos y ella como si supiera lo que querÃa, comenzó a tocarlos y a jugar con sus pezones, los apretaba y los tiraba con fuerza. Simplemente estábamos embriagados de placer, lujuria y pasión por el otro.
La miro fijamente a los ojos y le digo bien calentón
- Espero haya cumplido bien mi parte.
- Con creces hermanito, me encanto mucho y de verdad con mucha vergüenza te digo, esto si o si se tiene que repetir. Me encanta hacer estas cosas contigo, se que suena raro pero me calientas mucho.
Me quede pensando un momento, ya que mi hermana me ofrecÃa a seguir con esta morbosidad
- Esta bien, pero las siguientes tienen que ser con mucha más entrega, sabes a lo que me refiero.
- Claro, me calientas mucho asà que harÃa cualquier cosa en la cama contigo asà que empieza a prepararte.
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Comenten en buena onda si les gusto
Pronto se vendrán más historias
Saludos
2 comentarios - Segunda Vez Con Mi Hermana Mayor