Hola!, interrumpí un poco la serie Adoptado para contarles esto que viví el otro día...que lo disfruten mientras sigo escribiendo el capitulo 6 de la serie.
Respondieron el aviso y la verdad, no les tenía fe...muchos responden y no pasa nada, muchas veces son fantasías del marido pero queda todo ahí.
Pero con estos concreté...se dio...y fue una experiencia alucinante!!!
Vinieron a mi gabinete, así que jugaba de local, pude preparar todo como a mi me gusta.
Dos futones para masajes en el piso me daban una superficie de 3 m x 2 m para estar cómodos los tres.
Velas, luces cálidas, hornillos con aceites esenciales, música de mantras...todo especialmente preparado para que solo exista el disfrute.
Una pareja muy agradable de cuarenta y pico. Ella rellenita pero con hermosas curvas, lindo par de tetas y una cola para el recuerdo! (como me puede la cola de una mujer!!!)
El flaco pero fornido, buen cuerpo dotación normal...
Suelo hacer este tipo de masaje oriental de manera naturista, o sea, los tres desnudos, puede que prefiera la pareja que yo comience vestido y lo acepto, pero este no era el caso, así que nos desvestimos los tres y los dispuse boca abajo uno a cada lado mio, con la cabeza girada para mirarse y ver como goza el otro del masaje...en este masaje especial, todos los sentidos juegan un papel preponderante, se trata de disfrutar al máximo y ver a su pareja gozar es uno de esos placeres.
Comencé por ella, relajando su espalda, sus hombros, firmes masajes y suaves caricias para sacar todas las tensiones acumuladas... su cara de relajada me confirmaban que iba por el buen camino...ahora el, con el mismo tratamiento, mi mano firme desataba sus nudos y sus tensiones... en la mirada de ella percibía como disfrutaba de mi contacto hacia su marido...y recién había comenzado...
Pero mejor cara puso cuando llegué a su cola y sus piernas, mis caricias hacían su delicia y él también disfrutaba de ver gozar a su mujer... su suave piel me incitaba a seguir... cuando pasaba por la cara interna de sus muslos paraba la cola dejándome su conchita a mi alcance...pero todavía no era el momento, debía ir muy lento para que el goce fuera grande.
Ahora él, su cola y sus piernas, pasar rozando sus huevos, acariciar la parte interna de sus muslos...él disfrutaba y ella también al vernos así...se ve que era su fantasía, ver a su marido con otro hombre. Podía adivinar su erección aunque estuviera boca abajo, la música hipnotizante, los aromas, la luz cálida y las caricias pueden hacer maravillas.
Terminadas las relajaciones vino la parte de las caricias...Mis manos acariciaban los dos cuerpos a la vez, sus suspiros ya eran mas fuertes...sin tocar zonas erógenas mis dedos erotizaban con suavidad su piel...los hacían desear...querían sexo ya pero aun faltaba mucho para ello...
Ambos paraban sus colas cuando pasaba por ahí, ofreciéndome sus calientes sexos para que me haga cargo de ellos, pero los hacia desear y apenas los rozaba sacandoles los mas profundos suspiros... después si, comencé a acariciar lo huevos de el haciéndolo estremecer mientras su mujer me servia su conchita en bandeja para que la roce con mis dedos...estaban como locos...y los tenía a mi merced.
Después los hice poner boca arriba, él tenía una erección mayúscula y ella su entrepierna mojada, estaban a full, los tenía como quería.
Acaricié sus panzas, su pecho, rocé los pezones de ambos, jugué con ellos...fui para abajo, acaricié la pija de él mientras perdí mis dedos dentro de la concha de ella...ambos suspiraron y no podían creer como hacia gozar al otro...
Mientras metí el dedo indice y mayor dentro de su concha, con el pulgar comencé a jugar con su clítoris, a él solo le acariciaba la pija, no quería que acabe para que no se detenga el juego, a ella si, quería hacerla acabar un par de veces así...y lo logré, se sacudía entre fuertes espasmos mientras él gozaba con esa visión y mis caricias...
Ya era hora de que pudieran gozar entre ellos y los deje acariciarse, muy suave, toda la piel, mientras yo lo hacía también. Toda la energía sexual que recorría su cuerpo estalló cuando se tocaron, había logrado aumentar sus deseos a un punto que jamas habían logrado, o quizás si, pero ya habían olvidado, envueltos en la rutina. Que bueno que una pareja se permita estas cosas para acrecentar su pasión, si muchas parejas se permitiera aventuras como estas, su pasión siempre estaría encendida.
Cuando las caricias pasaron a mayores me retiré un poco para observar la escena. Manos, piel, bocas, lenguas....placer y deseo!!!
Y luego si, ella me agarró de la pija y me invitó a sumarme. Nos chupó la pija a los dos y después pidió las dos en la boca a la vez.
Luego acostó a su marido de espalda y lo montó...cogieron así un rato y después parando la cola me pidió que vaya por atrás. De imaginar entrarle por esa hermosa cola estaba como loco, pero no, no era eso lo que quería....quería las dos pijas en su concha!!!!!
Nunca lo había hecho y se me derritió el cerebro. Me acomodé, (primero me puse un forro) y deslicé mi pija sobre la de su marido hasta entrar en su muy caliente y golosa concha.
Como explicarles lo que sentí...estaba en la gloria!!!! muy caliente, tanto que no duré mucho, pero esos minutos los disfruté de una manera especial...escuchar sus gemidos de placer por tener la concha llena con dos pijas fue tremendo....
Quedamos los tres desparramados en los futones, felices por la experiencia.
Prometieron volver...y me voy a tener que esmerar para la próxima...
Respondieron el aviso y la verdad, no les tenía fe...muchos responden y no pasa nada, muchas veces son fantasías del marido pero queda todo ahí.
Pero con estos concreté...se dio...y fue una experiencia alucinante!!!
Vinieron a mi gabinete, así que jugaba de local, pude preparar todo como a mi me gusta.
Dos futones para masajes en el piso me daban una superficie de 3 m x 2 m para estar cómodos los tres.
Velas, luces cálidas, hornillos con aceites esenciales, música de mantras...todo especialmente preparado para que solo exista el disfrute.
Una pareja muy agradable de cuarenta y pico. Ella rellenita pero con hermosas curvas, lindo par de tetas y una cola para el recuerdo! (como me puede la cola de una mujer!!!)
El flaco pero fornido, buen cuerpo dotación normal...
Suelo hacer este tipo de masaje oriental de manera naturista, o sea, los tres desnudos, puede que prefiera la pareja que yo comience vestido y lo acepto, pero este no era el caso, así que nos desvestimos los tres y los dispuse boca abajo uno a cada lado mio, con la cabeza girada para mirarse y ver como goza el otro del masaje...en este masaje especial, todos los sentidos juegan un papel preponderante, se trata de disfrutar al máximo y ver a su pareja gozar es uno de esos placeres.
Comencé por ella, relajando su espalda, sus hombros, firmes masajes y suaves caricias para sacar todas las tensiones acumuladas... su cara de relajada me confirmaban que iba por el buen camino...ahora el, con el mismo tratamiento, mi mano firme desataba sus nudos y sus tensiones... en la mirada de ella percibía como disfrutaba de mi contacto hacia su marido...y recién había comenzado...
Pero mejor cara puso cuando llegué a su cola y sus piernas, mis caricias hacían su delicia y él también disfrutaba de ver gozar a su mujer... su suave piel me incitaba a seguir... cuando pasaba por la cara interna de sus muslos paraba la cola dejándome su conchita a mi alcance...pero todavía no era el momento, debía ir muy lento para que el goce fuera grande.
Ahora él, su cola y sus piernas, pasar rozando sus huevos, acariciar la parte interna de sus muslos...él disfrutaba y ella también al vernos así...se ve que era su fantasía, ver a su marido con otro hombre. Podía adivinar su erección aunque estuviera boca abajo, la música hipnotizante, los aromas, la luz cálida y las caricias pueden hacer maravillas.
Terminadas las relajaciones vino la parte de las caricias...Mis manos acariciaban los dos cuerpos a la vez, sus suspiros ya eran mas fuertes...sin tocar zonas erógenas mis dedos erotizaban con suavidad su piel...los hacían desear...querían sexo ya pero aun faltaba mucho para ello...
Ambos paraban sus colas cuando pasaba por ahí, ofreciéndome sus calientes sexos para que me haga cargo de ellos, pero los hacia desear y apenas los rozaba sacandoles los mas profundos suspiros... después si, comencé a acariciar lo huevos de el haciéndolo estremecer mientras su mujer me servia su conchita en bandeja para que la roce con mis dedos...estaban como locos...y los tenía a mi merced.
Después los hice poner boca arriba, él tenía una erección mayúscula y ella su entrepierna mojada, estaban a full, los tenía como quería.
Acaricié sus panzas, su pecho, rocé los pezones de ambos, jugué con ellos...fui para abajo, acaricié la pija de él mientras perdí mis dedos dentro de la concha de ella...ambos suspiraron y no podían creer como hacia gozar al otro...
Mientras metí el dedo indice y mayor dentro de su concha, con el pulgar comencé a jugar con su clítoris, a él solo le acariciaba la pija, no quería que acabe para que no se detenga el juego, a ella si, quería hacerla acabar un par de veces así...y lo logré, se sacudía entre fuertes espasmos mientras él gozaba con esa visión y mis caricias...
Ya era hora de que pudieran gozar entre ellos y los deje acariciarse, muy suave, toda la piel, mientras yo lo hacía también. Toda la energía sexual que recorría su cuerpo estalló cuando se tocaron, había logrado aumentar sus deseos a un punto que jamas habían logrado, o quizás si, pero ya habían olvidado, envueltos en la rutina. Que bueno que una pareja se permita estas cosas para acrecentar su pasión, si muchas parejas se permitiera aventuras como estas, su pasión siempre estaría encendida.
Cuando las caricias pasaron a mayores me retiré un poco para observar la escena. Manos, piel, bocas, lenguas....placer y deseo!!!
Y luego si, ella me agarró de la pija y me invitó a sumarme. Nos chupó la pija a los dos y después pidió las dos en la boca a la vez.
Luego acostó a su marido de espalda y lo montó...cogieron así un rato y después parando la cola me pidió que vaya por atrás. De imaginar entrarle por esa hermosa cola estaba como loco, pero no, no era eso lo que quería....quería las dos pijas en su concha!!!!!
Nunca lo había hecho y se me derritió el cerebro. Me acomodé, (primero me puse un forro) y deslicé mi pija sobre la de su marido hasta entrar en su muy caliente y golosa concha.
Como explicarles lo que sentí...estaba en la gloria!!!! muy caliente, tanto que no duré mucho, pero esos minutos los disfruté de una manera especial...escuchar sus gemidos de placer por tener la concha llena con dos pijas fue tremendo....
Quedamos los tres desparramados en los futones, felices por la experiencia.
Prometieron volver...y me voy a tener que esmerar para la próxima...
15 comentarios - Masaje hot a una pareja (los placeres de mi profesión)
Felicitaciones amigo...!!! 👏 👏 👏