Mi mejor amiga, Agustina, festejaba sus 18 años el fin de semana. Nos juntamos a comer en su casa y después nos fuimos a bailar. "Mis 18 los recibo con tu hermano, si o si" me había dicho el día anterior. Le pregunté cómo iba a hacer, ya que entre los invitados había varios muertos de su placard (algunos compartidos entre las dos) que iban a querer hacerle la "fiesta". "Cuando se te junta el ganado, se elige por tamaño de pija y como te cogen. Y tu hermano gana en los 2", me dijo mientras me guiñaba el ojo. Demasiada data para mi, pero bueno.
Todavía hacía calor, así que me fui con poca ropa. Pollerita de jean ajustada, y una remera que dejaba al aire toda mi espalda. En la casa estaba la familia de Agus, por lo que la cena y la previa fueron bastante tranquilas. Yo quedé sentada entre Martín y Seba charlando (con Seba tenía una "relación" semi-formal, y con el otro de vez en cuando si pintaba algo, nos dábamos). Cuando Martín se paró para ir al baño, me lo empecé a comer a Seba. Paramos cuando volvió.
Agus me miraba y me preguntaba por mi hermano. Yo rodeada de mis 2 amigos empezaba a calentarme porque se me venían a la cabeza las cosas que habíamos hecho. Encaramos para el boliche. Nos tomamos un taxi. Yo me subí atrás, y los 2 pibes no perdieron oportunidad, y me dejaron al medio. Empecé a sentir como sus dedos empezaban a recorrer disimuladamente mis muslos. Yo me hacía la distraída y no decía nada.
Quería ver hasta donde llegaban, pero no fueron muy lejos. Si bien la relación con Seba iba un poco más en serio, él no tenía ningún problema en compartirme con sus amigos. Aunque después se arrepentía y venían las escenas de celos.
En el boliche se dio al revés, quedamos solos Martín y yo. Empezamos a besarnos y él aprovecho la poca luz para meterme la mano por abajo de la pollera. Casi me la levantó a la mitad de la cola, pero a esa altura ya no me importaba nada. Nos alejamos del grupo donde estaban todos y nos pusimos a chapar en un rincón. Al rato volvimos a aparecer. Seba se dio cuenta, seguramente y lo dejaba ver en su cara.
Lo que tomamos esa noche fue impresionante. A las 4 estábamos ya muy felices. Agus estaba tranzando con uno de los chicos. Era el segundo que le veía.
- Te olvidaste de mi hermano ya?
- Ni loca boluda, estoy precalentando. En media hora me pasa a buscar.- yo ni enterada que ya tenía todo arreglado con él.
En toda la noche, no me pude sacar de encima a Martín y Seba. Sin duda que la idea de estar con los 2 me calentaba y mucho, pero el poco de razonamiento lógico que me quedaba indicaba que iba a ser imposible porque no teníamos un lugar donde ir. Mis pensamientos los interrumpió Agustina:
- Llegó Dani. Dice si querés que te llevemos
- Ehh?? y a donde piensan ir??
- A un telo, que se yo!! pero dice que te alcanza a tu casa!
- A mi casa?? Boluda yo quiero coger también! Los tengo a estos dos franeleando desde tu casa!
- Jaja, si vi... bueno, vení con nosotros igual!
- Estás en pedo!
- Si... pero te digo en serio, vení! se bajan en el telo y van a otra habitación, no seas boluda dale! Lo único... vas a tener que elegir uno... - me dijo con una sonrisita, porque sabía que me re cabía la idea de enfiestarme con ambos.
Recordé la enseñanza de mi amiga... Coger, me cogieron muy bien los dos. Pero Seba era portador de una pija no tan larga pero más ancha y fue el ganador. Me acerqué disimuladamente, y mientras me despedía, le dije en el oído que lo esperaba en la puerta. A Martín le dije que me iba con mi hermano, que otro día la seguíamos.
Cuando subo al auto, le dije a mi hermano que espere. Se dio vuelta y me miró sonriendo mientras Agus totalmente borracha gritaba que esperábamos a mi chongo. Al rato, apareció Seba. Se quedó duro al ver que era el auto de mi hermano (lo conocía). Al oído le expliqué como venía la mano y lo qué íbamos a hacer.
Mientras íbamos andando, lo empecé a besar, con toda la calentura acumulada por la franeleada que nos habíamos pegado en el boliche. "Ey, loco.. aflojá, es mi hermana" gritó mi hermano desde el volante. Agus y yo nos empezamos a cagar de risa, no tanto Seba que encima de estar bastante borracho, entendía cada vez menos. Le agarré la cara y me lo estampé contra la mía.
Llegamos a uno de los telos cerca de la terminal (para los que conocen Rosario). Agus entró en el auto con mi hermano, y Seba y yo caminando por la puerta. A nosotros nos hicieron pasar enseguida, mi hermano todavía debía estar estacionando. Mejor, la verdad que la situación me ponía un poco incómoda.
Cuando entramos, Seba se tiró en la cama. Yo me trepé arriba suyo y lo empecé a desvestir. Me agarró el culo y levantando mi pollera arriba de la cintura, me empezó a manosear y pegar en los cachetes. Saqué su pantalón. Su pija estaba media muerta todavía. Me acerqué y con la lengua empecé a rodear su cabeza. La reacción fue inmediata. Su verga se fue engrosando en mis manos y mi boca. Se la chupaba cada vez con más ganas. Sentir como se agranda una pija mientras la chupo me calienta mucho.
Cuando la tuvo bien firme, me levanté y me senté arriba, moviendo mi clítoris por el tronco de su pija. Me levanté un poquito, la agarré de la base y me la clavé. Me fui clavando la pija, casi sin problemas, porque estaba súper mojada. Empecé la cabalgata, mientras ponía mis tetas en la boca de mi chico. Él se aferraba fuerte de mi cola, y con la lengua me lamía los pezones alternadamente.
Seba me levantó y me puso en 4. Me la puso de una, arrodillándose atrás mío. Levantaba mi cola y abría lo más que podía mis piernas. Me agaché hasta apoyar mi cara en la cama, mientras él seguía martillándome de atrás. Empezó a acelerar el ritmo, me agarró de los pelos y me levantó de golpe. Pegué un grito desaforada, me excitaba mucho como me tenía agarrada. Mi espalda no podía arquearse más.
Se detuvo y y yo seguí moviéndome sola. "Mirá como te movés, no podés ser tan puta!" me decía... Volví a tirar mi cuerpo para adelante. Hasta que sacó su pija y me acabó en la espalda. La calentura no me había hecho dar cuenta que yo seguía con la pollera puesta. Y si: un poco fue a la espalda, y el resto a la pollera. Riesgos del oficio.
Nos tiramos en la cama. Nos quedamos recuperando el aliento, hasta que Seba habló.
- che.. y a tu hermano no le jode? Digo... como que te hizo todo fácil para que cojas.-
- Si, no pasa nada. Es re piola mi hermano. Además no puede decir mucho, se garchó está garchando a mi mejor amiga.
Mi celular empezó a sonar. Era un mensaje de Agus. "Amiga, donde están? ... nosotros en la 25". No podía creer que la tarada mental de mi amiga me mandaba ese mensaje. "Boludaaaa!!! nosotros en la 12, en el primer piso. cuidamelo a mi hermanito eh jaja" le respondí, aunque con su respuesta me arrepentí: "quedate tranquila, no sabes como lo estoy cuidando. y él a mi también... de premio me tome toda la.." antes de terminar de leer, tiré el teléfono en la cama. Con Seba nos reímos un rato de los mensajes, hasta que arrancamos de nuevo.
Me acosté y abrí mis piernas. Mi amigo le dedicó varios hermosos minutos a chuparmela, meterme los dedos, jugar con su lengua en la entrada de mi concha; hasta levantó mis piernas y pasó su lengua por mi culo. Todo eso lo fue aprendiendo conmigo. Me encantaba que cada vez lo hacía mejor.
"Me querés romper la colita, hijo de puta, no?" le dije. Seba siempre me pedía romperme la cola, pero no se la entregaba tan fácil. No tanto porque no lo disfrutara, más para tenerlo pendiente y rogando atrás mío. "Hoy estoy buena.. partimelo al medio con tu pijón dale". No terminé de decir esto, que tenía su pija en mi boca. Yo seguía acostada, y él arrodillado arriba mío mientras yo se la chupaba.
Se puso entre mis piernas de nuevo, pero esta vez con su pija babeada lista para trabajar. De un saque la clavó y empezó a moverse. Se tiró arriba mío, y agarrándome del pelo tiró mi cabeza hacia atrás. El contraste era hermoso: sus besos tiernos, en mis mejillas, mi boca, mi cuello y su cogida feroz, salvaje. Me encantaba.
Me di vuelta y me subí arriba. Empecé a cabalgar cada vez más fuerte. Sentía como venían orgasmos uno atrás de otro. No podía parar. Estaba descontrolada. "Meteme el dedo en la colaaa" le gritaba, desesperada. Me enterró el dedo y dejé escapar un suspiro de placer, bajando un poco el ritmo de la cabalgata para que se acomode.
Seba no aguantó más y me puso en 4. Pero esta vez el destino era otro: mi colita. Sus dedos ya habían hecho un buen trabajo y me había dilatado bien. Me relajé y empecé a sentir como mi macho iba empujando la verga cada vez más adentro. "Movete despacio", le supliqué. Pero fue solo un rato, hasta que sentí como su pija era parte de mi. "Ufff", exclamó Seba cuando su cuerpo chocó contra mi cola, y no quedaban dudas que la tenía toda entera adentro.
Él la sacaba y metía despacio, disfrutando como mi culo hacía desaparecer su poronga. Fui yo la que empezó a moverse más rápido. Quedé con la cabeza contra la cama, el culo levantado y Seba parado arriba mío taladrándome sin piedad. Me agarraba de la almohada soportando cada embestida. No aguantó mucho ese ritmo. Cuando sacó su pija para acabar, me di vuelta rápido, para recibir la descarga en mi panza.
Le pedí que me la chupara un rato, hasta hacerme acabar de nuevo. Yo seguía re caliente. Bajó hasta mi conchita, todavía húmeda, y me la chupó bien suave, metiendo 2 dedos adentro. Mientras yo me acariciaba el cuerpo, desparramando la leche. Su lengua no paraba. Cada vez se movía más rápido.
Mi respiración empezaba a aumentar, cada vez más. Empecé a gemir. Después a gritar. Con mis manos agarré su cabeza y lo aplasté contra mi concha. Lo agarré fuerte del pelo sin importarme si le hacía mal, a él tampoco le importó. Después de acabar, sin soltarle los pelos, lo levanté y le regalé un beso de lengua profundo y caliente. Aún tenía en su boca el gustito de mi concha.
Otra vez mi teléfono. Agustina me estaba llamando.
- Que pasó?
- Juli, nos pedimos otro turno.
- Pará y yo como vuelvo!! - si bien vivía cerca, no tenía ganas de volver en taxi. Escuché que mi hermano le decía algo.
- Dice tu hermano que renueven el turno ustedes también que si él se la banca, tu chico que tiene 6 años menos más
- jaja, decile que es un taradoooo!!! Le tengo que avisar a mi vieja!! No da! - Agus le pasó el teléfono a mi hermano.
- Ey... escuchame. Ahora llamo a mamá, le digo que las pasé a buscar y nos fuimos a desayunar, ya fue. Dale.
Y me terminaron convenciendo. Me quedé otro turno más con Seba, y hasta tuvimos tiempo de ir al jacuzzi (ni enterados que había) donde se ganó un pete.
Salimos con el sol que nos partía la cara. Mi hermano lo llevó a Seba a la casa y después a mi dejando a Agustina para el final. No conforme con todo lo que había hecho, seguro que el guacho le iba a entrar de nuevo. La carita de feliz cumpleaños de Agustina era impresionante. La mía no creo que haya estado muy lejos.
Me bajé del auto. Entré a mi casa. Mis viejos ya estaba despiertos. "Y tu hermano?", preguntaron. "La fue a llevar a Agus a la casa". No podía creer que se hayan conformado así nomás. Si yo hubiese sido la que mandaba el mensaje avisando que iba a desayunar, se me armaba flor de quilombo. Pero bueno, yo tenía mis antecedentes también.
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Todavía hacía calor, así que me fui con poca ropa. Pollerita de jean ajustada, y una remera que dejaba al aire toda mi espalda. En la casa estaba la familia de Agus, por lo que la cena y la previa fueron bastante tranquilas. Yo quedé sentada entre Martín y Seba charlando (con Seba tenía una "relación" semi-formal, y con el otro de vez en cuando si pintaba algo, nos dábamos). Cuando Martín se paró para ir al baño, me lo empecé a comer a Seba. Paramos cuando volvió.
Agus me miraba y me preguntaba por mi hermano. Yo rodeada de mis 2 amigos empezaba a calentarme porque se me venían a la cabeza las cosas que habíamos hecho. Encaramos para el boliche. Nos tomamos un taxi. Yo me subí atrás, y los 2 pibes no perdieron oportunidad, y me dejaron al medio. Empecé a sentir como sus dedos empezaban a recorrer disimuladamente mis muslos. Yo me hacía la distraída y no decía nada.
Quería ver hasta donde llegaban, pero no fueron muy lejos. Si bien la relación con Seba iba un poco más en serio, él no tenía ningún problema en compartirme con sus amigos. Aunque después se arrepentía y venían las escenas de celos.
En el boliche se dio al revés, quedamos solos Martín y yo. Empezamos a besarnos y él aprovecho la poca luz para meterme la mano por abajo de la pollera. Casi me la levantó a la mitad de la cola, pero a esa altura ya no me importaba nada. Nos alejamos del grupo donde estaban todos y nos pusimos a chapar en un rincón. Al rato volvimos a aparecer. Seba se dio cuenta, seguramente y lo dejaba ver en su cara.
Lo que tomamos esa noche fue impresionante. A las 4 estábamos ya muy felices. Agus estaba tranzando con uno de los chicos. Era el segundo que le veía.
- Te olvidaste de mi hermano ya?
- Ni loca boluda, estoy precalentando. En media hora me pasa a buscar.- yo ni enterada que ya tenía todo arreglado con él.
En toda la noche, no me pude sacar de encima a Martín y Seba. Sin duda que la idea de estar con los 2 me calentaba y mucho, pero el poco de razonamiento lógico que me quedaba indicaba que iba a ser imposible porque no teníamos un lugar donde ir. Mis pensamientos los interrumpió Agustina:
- Llegó Dani. Dice si querés que te llevemos
- Ehh?? y a donde piensan ir??
- A un telo, que se yo!! pero dice que te alcanza a tu casa!
- A mi casa?? Boluda yo quiero coger también! Los tengo a estos dos franeleando desde tu casa!
- Jaja, si vi... bueno, vení con nosotros igual!
- Estás en pedo!
- Si... pero te digo en serio, vení! se bajan en el telo y van a otra habitación, no seas boluda dale! Lo único... vas a tener que elegir uno... - me dijo con una sonrisita, porque sabía que me re cabía la idea de enfiestarme con ambos.
Recordé la enseñanza de mi amiga... Coger, me cogieron muy bien los dos. Pero Seba era portador de una pija no tan larga pero más ancha y fue el ganador. Me acerqué disimuladamente, y mientras me despedía, le dije en el oído que lo esperaba en la puerta. A Martín le dije que me iba con mi hermano, que otro día la seguíamos.
Cuando subo al auto, le dije a mi hermano que espere. Se dio vuelta y me miró sonriendo mientras Agus totalmente borracha gritaba que esperábamos a mi chongo. Al rato, apareció Seba. Se quedó duro al ver que era el auto de mi hermano (lo conocía). Al oído le expliqué como venía la mano y lo qué íbamos a hacer.
Mientras íbamos andando, lo empecé a besar, con toda la calentura acumulada por la franeleada que nos habíamos pegado en el boliche. "Ey, loco.. aflojá, es mi hermana" gritó mi hermano desde el volante. Agus y yo nos empezamos a cagar de risa, no tanto Seba que encima de estar bastante borracho, entendía cada vez menos. Le agarré la cara y me lo estampé contra la mía.
Llegamos a uno de los telos cerca de la terminal (para los que conocen Rosario). Agus entró en el auto con mi hermano, y Seba y yo caminando por la puerta. A nosotros nos hicieron pasar enseguida, mi hermano todavía debía estar estacionando. Mejor, la verdad que la situación me ponía un poco incómoda.
Cuando entramos, Seba se tiró en la cama. Yo me trepé arriba suyo y lo empecé a desvestir. Me agarró el culo y levantando mi pollera arriba de la cintura, me empezó a manosear y pegar en los cachetes. Saqué su pantalón. Su pija estaba media muerta todavía. Me acerqué y con la lengua empecé a rodear su cabeza. La reacción fue inmediata. Su verga se fue engrosando en mis manos y mi boca. Se la chupaba cada vez con más ganas. Sentir como se agranda una pija mientras la chupo me calienta mucho.
Cuando la tuvo bien firme, me levanté y me senté arriba, moviendo mi clítoris por el tronco de su pija. Me levanté un poquito, la agarré de la base y me la clavé. Me fui clavando la pija, casi sin problemas, porque estaba súper mojada. Empecé la cabalgata, mientras ponía mis tetas en la boca de mi chico. Él se aferraba fuerte de mi cola, y con la lengua me lamía los pezones alternadamente.
Seba me levantó y me puso en 4. Me la puso de una, arrodillándose atrás mío. Levantaba mi cola y abría lo más que podía mis piernas. Me agaché hasta apoyar mi cara en la cama, mientras él seguía martillándome de atrás. Empezó a acelerar el ritmo, me agarró de los pelos y me levantó de golpe. Pegué un grito desaforada, me excitaba mucho como me tenía agarrada. Mi espalda no podía arquearse más.
Se detuvo y y yo seguí moviéndome sola. "Mirá como te movés, no podés ser tan puta!" me decía... Volví a tirar mi cuerpo para adelante. Hasta que sacó su pija y me acabó en la espalda. La calentura no me había hecho dar cuenta que yo seguía con la pollera puesta. Y si: un poco fue a la espalda, y el resto a la pollera. Riesgos del oficio.
Nos tiramos en la cama. Nos quedamos recuperando el aliento, hasta que Seba habló.
- che.. y a tu hermano no le jode? Digo... como que te hizo todo fácil para que cojas.-
- Si, no pasa nada. Es re piola mi hermano. Además no puede decir mucho, se garchó está garchando a mi mejor amiga.
Mi celular empezó a sonar. Era un mensaje de Agus. "Amiga, donde están? ... nosotros en la 25". No podía creer que la tarada mental de mi amiga me mandaba ese mensaje. "Boludaaaa!!! nosotros en la 12, en el primer piso. cuidamelo a mi hermanito eh jaja" le respondí, aunque con su respuesta me arrepentí: "quedate tranquila, no sabes como lo estoy cuidando. y él a mi también... de premio me tome toda la.." antes de terminar de leer, tiré el teléfono en la cama. Con Seba nos reímos un rato de los mensajes, hasta que arrancamos de nuevo.
Me acosté y abrí mis piernas. Mi amigo le dedicó varios hermosos minutos a chuparmela, meterme los dedos, jugar con su lengua en la entrada de mi concha; hasta levantó mis piernas y pasó su lengua por mi culo. Todo eso lo fue aprendiendo conmigo. Me encantaba que cada vez lo hacía mejor.
"Me querés romper la colita, hijo de puta, no?" le dije. Seba siempre me pedía romperme la cola, pero no se la entregaba tan fácil. No tanto porque no lo disfrutara, más para tenerlo pendiente y rogando atrás mío. "Hoy estoy buena.. partimelo al medio con tu pijón dale". No terminé de decir esto, que tenía su pija en mi boca. Yo seguía acostada, y él arrodillado arriba mío mientras yo se la chupaba.
Se puso entre mis piernas de nuevo, pero esta vez con su pija babeada lista para trabajar. De un saque la clavó y empezó a moverse. Se tiró arriba mío, y agarrándome del pelo tiró mi cabeza hacia atrás. El contraste era hermoso: sus besos tiernos, en mis mejillas, mi boca, mi cuello y su cogida feroz, salvaje. Me encantaba.
Me di vuelta y me subí arriba. Empecé a cabalgar cada vez más fuerte. Sentía como venían orgasmos uno atrás de otro. No podía parar. Estaba descontrolada. "Meteme el dedo en la colaaa" le gritaba, desesperada. Me enterró el dedo y dejé escapar un suspiro de placer, bajando un poco el ritmo de la cabalgata para que se acomode.
Seba no aguantó más y me puso en 4. Pero esta vez el destino era otro: mi colita. Sus dedos ya habían hecho un buen trabajo y me había dilatado bien. Me relajé y empecé a sentir como mi macho iba empujando la verga cada vez más adentro. "Movete despacio", le supliqué. Pero fue solo un rato, hasta que sentí como su pija era parte de mi. "Ufff", exclamó Seba cuando su cuerpo chocó contra mi cola, y no quedaban dudas que la tenía toda entera adentro.
Él la sacaba y metía despacio, disfrutando como mi culo hacía desaparecer su poronga. Fui yo la que empezó a moverse más rápido. Quedé con la cabeza contra la cama, el culo levantado y Seba parado arriba mío taladrándome sin piedad. Me agarraba de la almohada soportando cada embestida. No aguantó mucho ese ritmo. Cuando sacó su pija para acabar, me di vuelta rápido, para recibir la descarga en mi panza.
Le pedí que me la chupara un rato, hasta hacerme acabar de nuevo. Yo seguía re caliente. Bajó hasta mi conchita, todavía húmeda, y me la chupó bien suave, metiendo 2 dedos adentro. Mientras yo me acariciaba el cuerpo, desparramando la leche. Su lengua no paraba. Cada vez se movía más rápido.
Mi respiración empezaba a aumentar, cada vez más. Empecé a gemir. Después a gritar. Con mis manos agarré su cabeza y lo aplasté contra mi concha. Lo agarré fuerte del pelo sin importarme si le hacía mal, a él tampoco le importó. Después de acabar, sin soltarle los pelos, lo levanté y le regalé un beso de lengua profundo y caliente. Aún tenía en su boca el gustito de mi concha.
Otra vez mi teléfono. Agustina me estaba llamando.
- Que pasó?
- Juli, nos pedimos otro turno.
- Pará y yo como vuelvo!! - si bien vivía cerca, no tenía ganas de volver en taxi. Escuché que mi hermano le decía algo.
- Dice tu hermano que renueven el turno ustedes también que si él se la banca, tu chico que tiene 6 años menos más
- jaja, decile que es un taradoooo!!! Le tengo que avisar a mi vieja!! No da! - Agus le pasó el teléfono a mi hermano.
- Ey... escuchame. Ahora llamo a mamá, le digo que las pasé a buscar y nos fuimos a desayunar, ya fue. Dale.
Y me terminaron convenciendo. Me quedé otro turno más con Seba, y hasta tuvimos tiempo de ir al jacuzzi (ni enterados que había) donde se ganó un pete.
Salimos con el sol que nos partía la cara. Mi hermano lo llevó a Seba a la casa y después a mi dejando a Agustina para el final. No conforme con todo lo que había hecho, seguro que el guacho le iba a entrar de nuevo. La carita de feliz cumpleaños de Agustina era impresionante. La mía no creo que haya estado muy lejos.
Me bajé del auto. Entré a mi casa. Mis viejos ya estaba despiertos. "Y tu hermano?", preguntaron. "La fue a llevar a Agus a la casa". No podía creer que se hayan conformado así nomás. Si yo hubiese sido la que mandaba el mensaje avisando que iba a desayunar, se me armaba flor de quilombo. Pero bueno, yo tenía mis antecedentes también.
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46 comentarios - El cumple de Agustina
me dejaste la pija babeando hermosa!
Son las dos más grande q hay...
como seran esas charlass.... no me quiero ni imaginar (q ya exploto)...
Besos a las doss!!
Tremendo!!
Excelente!
Gracias por compartir
gracias por comentar 🙂
gracias por comentar
y si estaban en la terminal y tenia 25 habitaciones era el casas no? jajaja.. anda al le nid que esta enfrente de bonita, juega como loco 😉
gracias por pasar!
P.D: el le nid me contaron una vez, que esta piola! 😛
al principio costo dialogar por mp
pero desp nos entendimos un poco mas.
te mando un beso grande y buen domingo.
tu nuevo amigo de poringa.
Exelente como siempre 😉
Saludos, uno de tus seguidores! jaja
me alegro qe te gusten!! gracias por comentar!
gracias por comentar!
Te dejo 10+ en este post también!!!
Besitos!
Juli, tremendo el cumple d etu amiga jejej
"disfrutando como mi culo hacía desaparecer su poronga" ya fue ahi se despidio de su pi.. xD