Inicios de una nueva vida - Parte 2

Colgue las letras por un tiempo largo, pero solo para juntar algunas otras experiencias que ya vendran....
Por ahora retomemos aquel relato con Claudia.
Tengo que confesar que cuando lo arranque a escribir, tenia como soporte los chatlogs, cosa que se ha perdido en el tiempo. Asi que la historia seguira sezgada por mi memoria.

Pasaron varias noches de charla virtual, ganando en intensidad, en picantez y complicidad. Hasta que finalmente el morbo se puso a tal nivel en que decidimos con Clau que no daba para mas la virtualidad y que habia que pasar al plano real . La primer salida con alguien que conoces por la red tiene un condimento especial...
Por un lado, llevabamos muchas horas enfrentados, y sabiamos que eramos compatibles para charlar, que nos calentabamos mutuamente y que, almenos segun un puñado de fotos, nos considerabamos "muy dables" mutuamente. Pero siempre hay riesgo, porque es facil esconderse atras de una compu, y boquear, googlear un par de fotos y ver que pasa...
Sin pensarlo demasiado, con actitud de adolecente, y solo armado de un nro de telefono, con el que solo nos habiamos mensajeado y una direccion sali a buscarla. Casi sin cambiar de calle, cruce media Capital de Palermo a Liniers, hasta que llegue al pasaje que buscaba.
De camino, en algun semaforo un par de textos empezaron a calentar la situacion. Era verano, y Edesur me daba una mano...

Claudia — "Estoy sin luz, salto la fase en toda la cuadra"
Bruno - "No te habia dicho que yo trabaje en la distribuidora. Se nota que a los muchachos les llego mi pedido, y me ayudaron a meterle ambiente"
Claudia — No me jodas, no te creo...
Bruno - "Bueno, no hacia falta que recalientes tanto. No te hagas drama, llego en 10 mins, y vamos a tomar algo que te baje la temperatura"

Efectivamente las ultimas cuadras fueron a contraluz. Al llegar cruce el auto, relojee un poco la cuadra, y mande el ultimo mensaje.
Bruno - "Estoy en tu vereda. Sali y sorprendeme"
Y asi fue, Clau salio, vestida simple pero para matar. Ojotas, piernas, muchas piernas, un minishort dorado, que arrancaba justo donde terminaria su ropa interior, y una remerita suelta, blanca posiblemente con algun estampado, pero dejando entreveer un corpiño negro, con algun detalle de encaje. Mas arriba, seguia algun collar grande, una sonrisa lujuriosa, y una maraña de rulos que invitaban a enriedarse.
En la cara algun razgo denotaba que Clau habia pasado las cuatro decadas, pero se peleaba con la parte que la hacia mas turra que una de Diecisiete...
Lunar y cigarrillo coronaban la escena.

El movimiento fue coreografico, Salio, me miro y sonrio. Se dio vuelta, le dio una ultima pitada al pucho, y lo apago mientras cerraraba la puerta de la casa, y aprovechaba para mostrarme terrible cola. Tambien con magistral sensualidad cruzo el camino desde la puerta hasta la reja, meneandose para lograr calentarme con tremenda sutileza.
Fueron posiblemente 5 segundos que en mi cabeza duraron una vida. Esos en los que repasas el plan de juego, como encarar, por donde....
El pensamiento fue rapidamente interrumpido. Apenas cruzo la reja, Clau se colgo de mi cuello y me clavo tremendo beso. Fue ella la que jugo la primer carta, y marco la cancha. Lo que arranco mordiendo un labio, rapidamente paso a lengua, cuello, manos y franeleo.
"Hola, te extrañe" -sentencio, antes de sugerir que era una buena idea arrancar.
Aprovechamos el viaje para hablar un poco mas, y confirmar que toda la calentura que habia juntado, era solo el comienzo. Meti misterio del destino, y arranque por la Gral. Paz, hacia donde de vuelta jugaria de local.
Despues de un rato, de auto, mi mano dejo la palanca de cambios y se paso primero a su brazo, y despues a su rodilla. 2 o 3 caricias despues. Habia quimica y habia piel. Podria haber volanteado al primer telo rutero, pero decidi seguir en control. Despues de todo, en ese momento es donde se construye el placer.
Llegamos a destino. Bar con onda, privado. De esos que de afuera son solo una puerta, pero adentro hay un mesas bajas, velitas y ambiente. Consegui el objetivo de meter expectativa esperando en una puerta negra. Despues de cierta impaciencia por no saber a donde entraba, me miro, y me dio espacio para que sea yo el que le coma la boca. Despacito, ganando intensidad. Empatamos el partido.
El trago fue Campari con Naranja, corrieron varias vueltas y empezabamos a entonarnos. A pesar de que habia bastante mas gente, y de que acuso cierta timidez, el entorno hizo que se animara, y nos chuponearamos en varias ocaciones. En la ultima ya estabamos franealeando a tal nivel que era incomodo estar en una banqueta, asi que decidimos irnos a otro lado. Salimos del bar, asumiendo que estaba todo definido.
Llegamos al auto, y afrontamos el terrible "Donde vamos?". De la loba en celo que salio del bar, de golpe no quedo ni un cachorro de labrador. Su cara migro a panico, y cruzo alguna que otra lagrima, mientras me confesaba el tiempo que habia estado sin estar con un hombre. Era un punto critico. Aprovechando la intimidad del polarizado recline la butaca, cambie deseo por ternura, y le corri las lagrimas para cambiarlas por un pico. "No pasa nada, es como andar en bicicleta. Creeme que en 5 minutos vas a estar queriendo ir mas rapido".
Siempre fui bueno con el humor y doble sentido, y garpa para salir de esos momentos tensos. Dos chistes despues, pasamos a una confesion sobre su primera vez, y acto seguido nos chapamos violentamente. Baje su mano para que sienta lo que habia conseguido en mi entrepierna. El manotazo la termino de despertar, ahora si saliendo del papel de quinceañera, para volver a la MILF que realmente era. Mi mano tambien bajo a la borde de su minishort, y deslizandose por la corniza pesco el borde de una divina tanguita. Empezaba la guerra.
Tarde algo asi como 45 segundos en cruzar las cuadras que nos separaban del telo mas proximo. Alardeando de lo estrategicamente bien elegido que estaba el lugar donde habiamos bebido, entramos solo para que nos digan que No habia lugar.
"Que te pasa Buenos Aires? Porque no queres dejar enfiestarnos. Ella lo necesita"
Salimos de la opcion A, y sin que pudiera siquiera pensar en otra cosa encare para otro telo cercano. Estacionamiento a full, y mi cabeza a otro tanto. Tanto, que hubo que hacer magia para usar la unica plaza disponible en el estacionamiento. Esas que tienen la columna, el matafuego y la trampa de osos...
Tanta espera tenia que repagar, de lo lindo.
Subimos a la habitacion, y empezamos a repagar viejas apuestas. Pasamos por El desfile de modas de ropa interior, a que quede a mi merced en la cama. Habia pedido ser sometida, y era el momento.
Arranque por las piernas, besandola mientras subia por la parte interna. Llegue al bode de la tanga rosa, y me quede jugando con la lengua, mientras Claudia se contorsionaba al grito de
"No puedo mas pendejo". Con cierto sadismo, mientras se veia como la humedad de la raja empezaba a marcarse en la tanga, me retire y subi a comerle los pechos y la boca.
"No puedo mas pendejo" insitia. "Haceme tuya". Ahi fue cuando recordo que queria primero que arrancara con los dedos, y antes de dejarme bajar el boxer, se sento, me agarro la mano, y empezo a usar mi mano para acariciarse, Entro el primer dedo, ese que siente todo el calor, lo siguieron muy rapidamente dos, tres, mientras sentia como sus labios me hacian presion.
Susurrando, con una voz muy felina, me desafio, "Si la metes toda, tenes premio".
El cuarto dedo se coló de inmediato. Media palma adentro, rozando la rugosidad de su ser ya la estaban haciendo jadear. despues de trabajar un poco, entro el pulgar, y con el mi cara cambio. Se ddibujo una sonrisa sadica de esas que no puedo sacar cuando quiero, simplemente salen.
Casi inmediatamente claudia temblaba de placer en mi puño.
Solo la deje tomar dos bocanadas de aire, antes de darla vuelta. "Ahora me toca divertirme a mi" le dije mientras estando boca abajo le corria la bombachita, que estaba totalmente perdida entre su cola. Arranque despacito, pero al ver que Clau estaba totalmente entregada, decidi cargarla con fuerza. Mi cabeza volaba, mientras mi pija entraba y salia violentamente. Estaba convencido que acabaria rapidisimo, cuando Claudia empezo a tener otro espasmo. La argolla se le contraia al ritmo que se obdulaba, y asi consiguio ordeñarme al tiempo que acababa.
Mi leche la inundaba, y le traia la memoria emotiva del placer compartido.
Nos tomamos 5 minutos para recuperar el aire, ella prendio un pucho mientras yo recuperaba liquidos de un vaso. Terminado el faso, le acerque mi pija que empezaba a recuperarse. "Vas a seguir fumando" le dije mientras mis manos se agarraban de sus rulos. Le baje la cabeza y la obligue que se coma mi miembro. Me mostro toda la experiencia que tenia en un pete magistral, recorriendome la pija con la lengua, y mordisqueando sutilmente la puntita. No deben haber pasado mas de 5 minutos antes de entrar en extasis de nuevo. Mi leche ahora le llenaba la boca, y caia desbordada por entre sus labios, chorreandole el pecho entero..
"No me voy a poder olvidar de esto nene" cerro mientras se trataba de salir del personaje de puta que tan bien habia compuesto por un par de horas. "Voy a querer mas"
Asi empezabamos a cerrar la noche, abriendo un capitulo que prometia tener mucho mas para dar