A pedido de algunos usuarios a quienes por lo visto gustan mucho de mis relatos.
Les cuento que hace una semana atrás debí por cuestiones profesionales viajar a Comodoro Rivadavia, ciudad, para quienes no leyeron mis relatos previos, es mi ciudad de origen y en la cual viví una de la más hermosas historias de mi vida. . . . Recomiendo leer los relatos previos para ir encadenando la historia y entender este capítulo. http://www.poringa.net/posts/relatos/2125168/Como-me-enganche-con-una-comodorense.html
Resumiendo, y concatenando con lo previo, Claudia en su momento, mediados del 2012, decidió unilateralmente cortar nuestra “relación”. Supuestamente el marido había encontrado un mensaje de texto mío y se había armado la podrida. Claudia me cortó, me pidió que no la llame ni la contacte mas. . .y aunque me dolió mucho, pude entender su postura, y con mucho pesar, cerré ese capítulo, eliminándola de mi face, de mi teléfono, y de cualquier canal en el que hubiese contacto.
Pasó un año y medio, y cuando ya creía que estaba todo sepultado en el pasado, me entra en el verano un mensaje de texto, del cual reconocí inmediatamente el número, rápidamente le respondí y restablecimos el nexo. Ahí me entero que su matrimonio finalmente se había desmoronado y ella había decidido separarse. Pero para su pesar, le comento que estoy con mi pareja en una etapa de restablecer la relación y de reencontrarnos, motivo por el cual no le aseguraba nada, a lo que me respondió que por el momento le interesaba restablecer la comunicación, y que vayamos viendo el día a día y paso a paso.
Bueno, hubieron algunas llamadas, mensajes, etc, y siempre el tema al que llegábamos siempre es cuando nos deseábamos, cuanto anhelábamos volver a vibrar juntos…… por lo que empecé a elucubrar de que manera podía fugarme a Comodoro. . . recuerden que mi pareja en su momento me enganchó trampeando mal, y que había decidido luego de mucho hablar darme otra oportunidad, por lo que la tarea de piratear, tenía una doble dificultad, ya que imaginarán que la confianza hay que volver a construirla.
En fin, la cosa es que logre aunar un viaje por trabajo y un trámite que debía hacer en Comodoro por una sucesión de mi finada madre. . . ., así que el lunes 16 de junio a la mañana, tome el avión a Comodoro y me fui para allá. Comentario al margen. Ella estaba por someterse a una intervención. Se estaba por ligar las trompas, por lo que peligraba nuestro encuentro, ya que el doctor podía intervenirla el mismo día que yo viajaba. . . . por suerte los planetas se me alinearon, ya que la operaron una semana después, asi que viajé, aprovechando un vuelo de mi laburo que iba para el sur.
Como me alojaba en el mismo lugar al que iba por trabajo, y no en los departamentos que habitualmente alquilaba, no íbamos a tener la libertad de vernos como hubiésemos querido. De todos modos apenas llegué le avisé de mi situación y quedamos en vernos a la noche.
A la tarde me fui a visitar a la mamá de mi mejor amigo, quien me invito a cenar, ya que hacia como dos años que no nos veíamos. Charla va y charla viene, Claudia me llama y pronto coordinamos para vernos en la esquina de Urquiza y Ameghino a las diez de la noche en punto.
Cuando se hizo la hora, encaré para la esquina, (ya que estaba a solo media cuadra) y oh sorpresa!, veo una camioneta parada, y una cabellera que me resultaba más que conocida (Algo que me fascino y calentó siempre de esta mujer, era esa cabellera hermosa, larga, con muchos rulos, onda Beatriz Salomón en sus mejores épocas) . . . Subir a la camioneta y darnos un beso largo y profundo fue un solo acto, como asimismo sentir mi verga que empezaba a crecer bajo mi bóxer, buscando acomodarse entre los pliegues de mi jean. El beso fue largo, profundo, con nuestras lenguas entrelazadas, explorándonos mutuamente y mordiéndonos los labios! Al mismo tiempo que ella mordía y estiraba mi labio inferior, haciéndome provocar piel erección, mis dedos exploraban y masajeaban esos pezones que a pesar del sostén, asomaban turgentes en su blusa! (Párrafo aparte, no nos veíamos desde hace dos años, pero la sensación de reencontrarnos tiene el efecto de habernos visto ayer nomás!)
Luego de comernos las bocas, volver a reconocernos y explorarnos, después de unos cinco o diez minutos, arrancó la camioneta y salimos en la búsqueda de un telo. . . . Iba a ser realmente una búsqueda, ya que yo al no vivir más allá, digamos que desconocía el panorama, y ella que supuestamente no conocía ninguno, estábamos al horno. La direccioné al Ismarú, pero no funciona mas. . . así que recordé un lugar llamado Internacional, yendo por Avenida Rivadavia hacia la Sociedad Rural, así que para ese lado fuimos. En el ínterin me conto de su nueva vida de divorciada, y de lo feliz que estaba de su nueva situación.
Nos pasamos de largo el Internacional, pero divisamos a un par de cuadras otro telo llamado Las Torres, adonde pronto paramos y bajamos. Averiguamos si había habitación y pronto pedimos una matrimonial por una noche. Luego de registrarnos, supimos que podíamos guardar la camioneta en cochera, por lo que Claudia se fue a guardar su vehículo y yo me adelante a la habitación, la cual era bastante carachenta, con manchas de humedad, paredes descascaradas, y cuando me senté en la cama, la misma chirriaba! En fin, me dije, al fin y al cabo no es para quedarse a vivir!.
Me estoy sacando la campera y empezando a ponerme cómodo, cuando recuerdo algo importante que ella me había pedido. Preservativos. Nunca los habíamos usado, de hecho a ninguno de los dos nos gustan, pero en este momento en particular, ella no estaba tomando ninguna píldora ni nada por el estilo, por lo que me rogó encarecidamente que los use, ya que no quería correr ningún riesgo de embarazo. Asi que rápidamente me puse la campera y baje nuevamente, nos reencontramos en el vestíbulo del conserje, le doy la llave a Claudia y le pregunto a la chilena que nos atendió adonde tenía un kiosco cerca. Me dio una dirección a dos cuadras y pronto salí para allá, mientras en el camino llame a casa a ver como andaba todo y como estaba mi gordito, y también para avisar que ya me iba a dormir, ya que realmente había tenido un día intenso. Pronto volví con mis preservativos y una botella de agua y subí!.
Que les puedo contar que no sepan ya? . . . Volver a tenernos solo para nosotros, sin interferencias del mundo exterior, volver a encerrarnos en nuestra burbujita de amor y de sexo es algo que me transporta realmente a otra dimensión.
Puse llave a la puerta y pronto nos abrazamos y nos dimos un beso muy profundo. . . Como esta iba a ser nuestra única noche, y teníamos tiempo limitado, me dispuse a disfrutarla y a disfrutarnos. Me comi esa boca, volvimos a ser dos adolescentes transando, mordiéndonos los labios, explorando y entrelazando nuestras lenguas, nuestras lenguas recorriendo nuestras orejas, cuellos. . . la bese, la bese con pasión, sin dejar ningún centímetro de su rostro sin besar y sin acariciar. . . . . hacíamos una pequeña pausa para recuperar el aire, mirarnos a los ojos y decirnos cuanto nos extrañábamos y cuanto queríamos repetir estos encuentros.
Como nos habíamos quedado de pie, y la tenia arrinconada, pronto me senté al borde de la cama, y la traje hacia mí, manteniéndola de pie, levanté su blusa y comencé a besar su vientre, y girándola termine besando su espalda. . . mientras lamia, besaba y mordía la parte baja de su espalda, desabroché su sostén y pronto mis manos se habían apoderado de esos preciosos melones y comenzaron a masajearlos!
Minutos después la tenia enfrentada a mi, torso desnudo y esos pechos preciosos en mi boca! Me dedique a saborear, comerme, morder esos deliciosos pezones de areola grande y rosada!. . . Cada mordida, lamida arrancaba de su boca un profundo gemido mientras nuestras miradas no dejaban de buscarse . . . . Claudia, como adoro tu mirada de hembra caliente. . . . Me enloquece!. . . Mientras me comía sus pechos, mis manos recorrían su vientre, su espalda, masajeaba esas tetas y volvían a su espalda. . . . Pronto ella se sentó al lado mío, se descalzó y se sacó los pantalones, quedando solo con la tanguita. . . Yo, mientras tanto, seguía sentado en el mismo lugar, y pronto la traje hacia mi, abrazandola y recostándola sobre mis piernas, rodee con mi brazo izquierdo su cuello y traje su boca hacia mi, mientras mi mano derecha fue directo su entrepierna. . . . y comencé a acariciarla por sobre la tanga, moviendo mis dedos en círculos sobre su clítoris y luego bajando y recorriendo presionando a lo largo toda su entrepierna, que ya se notaba muy mojadita. . . y volviendo otra vez a su clítoris. . . Mientras hacia este trabajo manual, no dejábamos de mirarnos, besarnos y decirnos cuanto nos extrañábamos y deseábamos. . . . en un momento dado le saqué la tanga y ya era su sexo y mis dedos sin intermediarios, por lo que le regale una paja hermosa. . . . ya que masajee, acaricie y estimule cada milímetro de esa vulva hermosa, la cual, como ella sabe mis gustos, ya venía convenientemente depilada! Asi que mis dedos volvieron a reconocer cada pliegue, ese botoncito que latía cada vez mas febrilmente, y también busqué en su interior buscando su punto G. . . mi Dios! Como ardía eso! Ardía y latía! . . . Asi que mirándola y besándola le pregunte si le gustaba mi tratamiento, lo que me respondió con unos profundos gemidos que delataban lo inminente de su orgasmo, el cual noté que se venía cuando empezó a mover su pelvis con movimientos ascendentes y descendentes, acompañando el ritmo de mis dedos!, hasta que estallo en un orgasmo maravilloso, lo que se veía reflejado en su sonrisa. . . .Pronto se colocó a horcajadas de mi cara, lo que me permitió disfrutar del néctar de su sexo, mientras ella comenzó a regalarme una deliciosa fellatio. . . . Mamita! Como adoro esa boca! . . .
Cuando pensé que se avecinaba un rico y exquisito 69, se salió y se acostó en el centro de la cama . . . Puta madre, evidentemente el sexo oral no es su fuerte. . . me debe haber dado cinco o seis chupadas de pija y me dejo! Shit! Pero bueno, no importa . . . . al momento que ella se acostó, ataque su entrepierna y le regale una hermosa y profunda chupada de concha que todavía debe estar delirando! Ella gemía y se retorcía y me pedía TE QUIERO DENTRO MIO!. . . Le dije, nena, conmigo tenés que ser bien chanchita. . . romanticismos en este momento no! A mi me decís HIJO DE PUTA, METEME ESA PIJA Y COGEME! . . . Ella me decía DALE PORFA, TE QUIERO DENTRO MIO!!! . . . yo no le di bola y le seguí comiendo la concha, que a esta altura era un mar de flujo! . . . . Mientras no dejaba de comerme esa delicia, empecé a rebuscar entre la ropa que estaba revoleada en el piso, y pronto encontré la cajita de PRIME!. . . Asi que si dejar de saborear ese manjar, fui a tientas enfundando el preservativo, de manera tal de acomodarme entre sus piernas y mandársela a guardar de un tirón! . . . .
Y si, pronto me arrodille entre sus piernas y acomode el glande entre sus labios, los cuales parecían querer engullir mi pija . . . . lentamente se la fui dando, . . . que emocionante, poder ver como cada centímetro al ir abriéndose camino se veían reflejados en la expresión de sus ojos y el tono de sus gemidos! Fui abriéndome camino hasta que calzó toda y sentí la cabeza de mi pija chocándole el útero!
Comencé un trabajo de vaivén que sé que la enloquece, alternando fuerza y profundidad, con suavidad y lentitud, . . como así también movimientos circulares de mi pelvis. . . . Un detalle que con ella en particular me gusta es colocarme entre sus piernas y garcharla muy fuerte, para lo cual me apoyo sobre mis puños colocando mis brazos a los costados de su cuello, lo cual impide que ante cada embestida, por la acción de la inercia su cuerpo se deslice también en la misma dirección. . . . no, no, me gusta que la sientan bien profundo, para lo cual la tengo bien atrapada! . .
Fue un polvo riquísimo, largo . . . . como me gustan a mí. . . alternado. . . fuerte, suave, circular, . . . Pronto me acomodé encima de ella, siempre cogiéndola, me apoye en mis codos, y con mis manos aprisioné sus muñecas por sobre su cabeza. . . y nuestras bocas volvieron a unirse en un beso dulce y profundo, mientras nuestros sexos sincronizaban su búsqueda. . . La habitación estaba en total silencio, roto éste por el plaf plaf de nuestros sexos y de nuestros gemidos roncos. . . . Me pidió que acabe, que quería verme acabar, ya que le fascinaba verme mis gestos al acabar . . . NO HERMOSA. . . HOY TE VOY A DISFRUTAR MUCHO! . . . . seguimos cogiendo en esa posición, cuando ahí si ella se soltó y me comenzó a decir PAPITO HERMOSO! QUE RICO QUE ME COJES CON ESA PIJA!!!
Pronto la tuve en la posición del perrito, y tuve que tener mucho autocontrol, ya que mi orgasmo comenzó a gestarse, por lo que nuevamente fui alternando la velocidad y profundidad de mis embestidas. . . En un momento dado, ella se recostó hacia adelante bajando su pelvis, siempre sin separarnos, y ahí comenzó ella a moverse . . . y créanme que me enloqueció como con sus movimientos pélvicos ella me cogía a mi! Realmente delicioso! Mis manos aprovecharon este momento para solazarse con ese culo hermoso, acariciando, apretándolo, amasándolo!
Cuando vi que mi orgasmo era inminente, cambiamos de posición nuevamente, y otra vez se acostó conmigo entre sus piernas, envaine mi pedazo en esa delicia de argolla, y comencé a darle con alma y vida. . . . caian de mi frente y corrían por mi pecho y espalda ríos de sudor, mientras sus manos me recorrían la espalda y me acariciaban integro! Increíblemente, las ganas de acabar se me habían ido, así que le regale cinco hermosos minutos de coger fuerte, frenético, profundo, fascinado por el bamboleo de esas tetazas que acompañaban violentamente cada embestida . . .ya sus gemidos se estaban convirtiendo en gritos, cuando sentí el orgasmo que empezó a crecer en la punta de mi pija, con una corriente que iba a mis huevos y volvía, en un crescendo delicioso y ardiente . . . Paré solo para asegurarme que el preservativo estaba bien, y ahí si, le di diez o quince embestidas y mi orgasmo explotó de una manera vibrante! Hermosa! Deliciosa!
Nos quedamos arrobados, abrazados, besándonos, riéndonos de felicidad de poder disfrutarnos una vez mas . . . y ahí Claudita me regalo algo que me fascina. . . con su concha me apretaba la pija como exprimiéndola! Me encantan las minas que pueden tener ese control de los músculos de la vagina! . . .
Charlamos . . . nos quedamos dormidos un rato, abrazados como dos gatitos . . . Pero lamentablemente la realidad nos llama a veces de manera dura. . . . Ella se tenía que ir. . . y en ese momento me planteó que sería la última vez que nos veríamos. . . ya que ella no se banca el vernos tan espaciadamente, y aparte también por mi situación de pareja. . . .
Me dejó en el centro, donde yo estaba alojado y quedamos en mantenernos en contacto.
Al otro día, cuando completé mis trámites, me fui a la terminal y conseguí boleto a Bahia Blanca para casi ese mismo instante, así que le mando un mensaje de texto que era una suerte de despedida. . . A lo cual me respondió que no quería despedirse, no quiere que cortemos mas, . . . y que está dispuesta a que sigamos viéndonos de este modo, pero que no quiere dejar de poder disfrutarme. No voy a negarlo, la noticia me satisfizo, ya que me encanta y disfruto mucho mis encuentros con ella,. . . . . Asi que seguramente, mis amig@s poringuer@s, creo que habrá mas relatos de Claudita!
Besos y abrazos a la comunidad!
Les cuento que hace una semana atrás debí por cuestiones profesionales viajar a Comodoro Rivadavia, ciudad, para quienes no leyeron mis relatos previos, es mi ciudad de origen y en la cual viví una de la más hermosas historias de mi vida. . . . Recomiendo leer los relatos previos para ir encadenando la historia y entender este capítulo. http://www.poringa.net/posts/relatos/2125168/Como-me-enganche-con-una-comodorense.html
Resumiendo, y concatenando con lo previo, Claudia en su momento, mediados del 2012, decidió unilateralmente cortar nuestra “relación”. Supuestamente el marido había encontrado un mensaje de texto mío y se había armado la podrida. Claudia me cortó, me pidió que no la llame ni la contacte mas. . .y aunque me dolió mucho, pude entender su postura, y con mucho pesar, cerré ese capítulo, eliminándola de mi face, de mi teléfono, y de cualquier canal en el que hubiese contacto.
Pasó un año y medio, y cuando ya creía que estaba todo sepultado en el pasado, me entra en el verano un mensaje de texto, del cual reconocí inmediatamente el número, rápidamente le respondí y restablecimos el nexo. Ahí me entero que su matrimonio finalmente se había desmoronado y ella había decidido separarse. Pero para su pesar, le comento que estoy con mi pareja en una etapa de restablecer la relación y de reencontrarnos, motivo por el cual no le aseguraba nada, a lo que me respondió que por el momento le interesaba restablecer la comunicación, y que vayamos viendo el día a día y paso a paso.
Bueno, hubieron algunas llamadas, mensajes, etc, y siempre el tema al que llegábamos siempre es cuando nos deseábamos, cuanto anhelábamos volver a vibrar juntos…… por lo que empecé a elucubrar de que manera podía fugarme a Comodoro. . . recuerden que mi pareja en su momento me enganchó trampeando mal, y que había decidido luego de mucho hablar darme otra oportunidad, por lo que la tarea de piratear, tenía una doble dificultad, ya que imaginarán que la confianza hay que volver a construirla.
En fin, la cosa es que logre aunar un viaje por trabajo y un trámite que debía hacer en Comodoro por una sucesión de mi finada madre. . . ., así que el lunes 16 de junio a la mañana, tome el avión a Comodoro y me fui para allá. Comentario al margen. Ella estaba por someterse a una intervención. Se estaba por ligar las trompas, por lo que peligraba nuestro encuentro, ya que el doctor podía intervenirla el mismo día que yo viajaba. . . . por suerte los planetas se me alinearon, ya que la operaron una semana después, asi que viajé, aprovechando un vuelo de mi laburo que iba para el sur.
Como me alojaba en el mismo lugar al que iba por trabajo, y no en los departamentos que habitualmente alquilaba, no íbamos a tener la libertad de vernos como hubiésemos querido. De todos modos apenas llegué le avisé de mi situación y quedamos en vernos a la noche.
A la tarde me fui a visitar a la mamá de mi mejor amigo, quien me invito a cenar, ya que hacia como dos años que no nos veíamos. Charla va y charla viene, Claudia me llama y pronto coordinamos para vernos en la esquina de Urquiza y Ameghino a las diez de la noche en punto.
Cuando se hizo la hora, encaré para la esquina, (ya que estaba a solo media cuadra) y oh sorpresa!, veo una camioneta parada, y una cabellera que me resultaba más que conocida (Algo que me fascino y calentó siempre de esta mujer, era esa cabellera hermosa, larga, con muchos rulos, onda Beatriz Salomón en sus mejores épocas) . . . Subir a la camioneta y darnos un beso largo y profundo fue un solo acto, como asimismo sentir mi verga que empezaba a crecer bajo mi bóxer, buscando acomodarse entre los pliegues de mi jean. El beso fue largo, profundo, con nuestras lenguas entrelazadas, explorándonos mutuamente y mordiéndonos los labios! Al mismo tiempo que ella mordía y estiraba mi labio inferior, haciéndome provocar piel erección, mis dedos exploraban y masajeaban esos pezones que a pesar del sostén, asomaban turgentes en su blusa! (Párrafo aparte, no nos veíamos desde hace dos años, pero la sensación de reencontrarnos tiene el efecto de habernos visto ayer nomás!)
Luego de comernos las bocas, volver a reconocernos y explorarnos, después de unos cinco o diez minutos, arrancó la camioneta y salimos en la búsqueda de un telo. . . . Iba a ser realmente una búsqueda, ya que yo al no vivir más allá, digamos que desconocía el panorama, y ella que supuestamente no conocía ninguno, estábamos al horno. La direccioné al Ismarú, pero no funciona mas. . . así que recordé un lugar llamado Internacional, yendo por Avenida Rivadavia hacia la Sociedad Rural, así que para ese lado fuimos. En el ínterin me conto de su nueva vida de divorciada, y de lo feliz que estaba de su nueva situación.
Nos pasamos de largo el Internacional, pero divisamos a un par de cuadras otro telo llamado Las Torres, adonde pronto paramos y bajamos. Averiguamos si había habitación y pronto pedimos una matrimonial por una noche. Luego de registrarnos, supimos que podíamos guardar la camioneta en cochera, por lo que Claudia se fue a guardar su vehículo y yo me adelante a la habitación, la cual era bastante carachenta, con manchas de humedad, paredes descascaradas, y cuando me senté en la cama, la misma chirriaba! En fin, me dije, al fin y al cabo no es para quedarse a vivir!.
Me estoy sacando la campera y empezando a ponerme cómodo, cuando recuerdo algo importante que ella me había pedido. Preservativos. Nunca los habíamos usado, de hecho a ninguno de los dos nos gustan, pero en este momento en particular, ella no estaba tomando ninguna píldora ni nada por el estilo, por lo que me rogó encarecidamente que los use, ya que no quería correr ningún riesgo de embarazo. Asi que rápidamente me puse la campera y baje nuevamente, nos reencontramos en el vestíbulo del conserje, le doy la llave a Claudia y le pregunto a la chilena que nos atendió adonde tenía un kiosco cerca. Me dio una dirección a dos cuadras y pronto salí para allá, mientras en el camino llame a casa a ver como andaba todo y como estaba mi gordito, y también para avisar que ya me iba a dormir, ya que realmente había tenido un día intenso. Pronto volví con mis preservativos y una botella de agua y subí!.
Que les puedo contar que no sepan ya? . . . Volver a tenernos solo para nosotros, sin interferencias del mundo exterior, volver a encerrarnos en nuestra burbujita de amor y de sexo es algo que me transporta realmente a otra dimensión.
Puse llave a la puerta y pronto nos abrazamos y nos dimos un beso muy profundo. . . Como esta iba a ser nuestra única noche, y teníamos tiempo limitado, me dispuse a disfrutarla y a disfrutarnos. Me comi esa boca, volvimos a ser dos adolescentes transando, mordiéndonos los labios, explorando y entrelazando nuestras lenguas, nuestras lenguas recorriendo nuestras orejas, cuellos. . . la bese, la bese con pasión, sin dejar ningún centímetro de su rostro sin besar y sin acariciar. . . . . hacíamos una pequeña pausa para recuperar el aire, mirarnos a los ojos y decirnos cuanto nos extrañábamos y cuanto queríamos repetir estos encuentros.
Como nos habíamos quedado de pie, y la tenia arrinconada, pronto me senté al borde de la cama, y la traje hacia mí, manteniéndola de pie, levanté su blusa y comencé a besar su vientre, y girándola termine besando su espalda. . . mientras lamia, besaba y mordía la parte baja de su espalda, desabroché su sostén y pronto mis manos se habían apoderado de esos preciosos melones y comenzaron a masajearlos!
Minutos después la tenia enfrentada a mi, torso desnudo y esos pechos preciosos en mi boca! Me dedique a saborear, comerme, morder esos deliciosos pezones de areola grande y rosada!. . . Cada mordida, lamida arrancaba de su boca un profundo gemido mientras nuestras miradas no dejaban de buscarse . . . . Claudia, como adoro tu mirada de hembra caliente. . . . Me enloquece!. . . Mientras me comía sus pechos, mis manos recorrían su vientre, su espalda, masajeaba esas tetas y volvían a su espalda. . . . Pronto ella se sentó al lado mío, se descalzó y se sacó los pantalones, quedando solo con la tanguita. . . Yo, mientras tanto, seguía sentado en el mismo lugar, y pronto la traje hacia mi, abrazandola y recostándola sobre mis piernas, rodee con mi brazo izquierdo su cuello y traje su boca hacia mi, mientras mi mano derecha fue directo su entrepierna. . . . y comencé a acariciarla por sobre la tanga, moviendo mis dedos en círculos sobre su clítoris y luego bajando y recorriendo presionando a lo largo toda su entrepierna, que ya se notaba muy mojadita. . . y volviendo otra vez a su clítoris. . . Mientras hacia este trabajo manual, no dejábamos de mirarnos, besarnos y decirnos cuanto nos extrañábamos y deseábamos. . . . en un momento dado le saqué la tanga y ya era su sexo y mis dedos sin intermediarios, por lo que le regale una paja hermosa. . . . ya que masajee, acaricie y estimule cada milímetro de esa vulva hermosa, la cual, como ella sabe mis gustos, ya venía convenientemente depilada! Asi que mis dedos volvieron a reconocer cada pliegue, ese botoncito que latía cada vez mas febrilmente, y también busqué en su interior buscando su punto G. . . mi Dios! Como ardía eso! Ardía y latía! . . . Asi que mirándola y besándola le pregunte si le gustaba mi tratamiento, lo que me respondió con unos profundos gemidos que delataban lo inminente de su orgasmo, el cual noté que se venía cuando empezó a mover su pelvis con movimientos ascendentes y descendentes, acompañando el ritmo de mis dedos!, hasta que estallo en un orgasmo maravilloso, lo que se veía reflejado en su sonrisa. . . .Pronto se colocó a horcajadas de mi cara, lo que me permitió disfrutar del néctar de su sexo, mientras ella comenzó a regalarme una deliciosa fellatio. . . . Mamita! Como adoro esa boca! . . .
Cuando pensé que se avecinaba un rico y exquisito 69, se salió y se acostó en el centro de la cama . . . Puta madre, evidentemente el sexo oral no es su fuerte. . . me debe haber dado cinco o seis chupadas de pija y me dejo! Shit! Pero bueno, no importa . . . . al momento que ella se acostó, ataque su entrepierna y le regale una hermosa y profunda chupada de concha que todavía debe estar delirando! Ella gemía y se retorcía y me pedía TE QUIERO DENTRO MIO!. . . Le dije, nena, conmigo tenés que ser bien chanchita. . . romanticismos en este momento no! A mi me decís HIJO DE PUTA, METEME ESA PIJA Y COGEME! . . . Ella me decía DALE PORFA, TE QUIERO DENTRO MIO!!! . . . yo no le di bola y le seguí comiendo la concha, que a esta altura era un mar de flujo! . . . . Mientras no dejaba de comerme esa delicia, empecé a rebuscar entre la ropa que estaba revoleada en el piso, y pronto encontré la cajita de PRIME!. . . Asi que si dejar de saborear ese manjar, fui a tientas enfundando el preservativo, de manera tal de acomodarme entre sus piernas y mandársela a guardar de un tirón! . . . .
Y si, pronto me arrodille entre sus piernas y acomode el glande entre sus labios, los cuales parecían querer engullir mi pija . . . . lentamente se la fui dando, . . . que emocionante, poder ver como cada centímetro al ir abriéndose camino se veían reflejados en la expresión de sus ojos y el tono de sus gemidos! Fui abriéndome camino hasta que calzó toda y sentí la cabeza de mi pija chocándole el útero!
Comencé un trabajo de vaivén que sé que la enloquece, alternando fuerza y profundidad, con suavidad y lentitud, . . como así también movimientos circulares de mi pelvis. . . . Un detalle que con ella en particular me gusta es colocarme entre sus piernas y garcharla muy fuerte, para lo cual me apoyo sobre mis puños colocando mis brazos a los costados de su cuello, lo cual impide que ante cada embestida, por la acción de la inercia su cuerpo se deslice también en la misma dirección. . . . no, no, me gusta que la sientan bien profundo, para lo cual la tengo bien atrapada! . .
Fue un polvo riquísimo, largo . . . . como me gustan a mí. . . alternado. . . fuerte, suave, circular, . . . Pronto me acomodé encima de ella, siempre cogiéndola, me apoye en mis codos, y con mis manos aprisioné sus muñecas por sobre su cabeza. . . y nuestras bocas volvieron a unirse en un beso dulce y profundo, mientras nuestros sexos sincronizaban su búsqueda. . . La habitación estaba en total silencio, roto éste por el plaf plaf de nuestros sexos y de nuestros gemidos roncos. . . . Me pidió que acabe, que quería verme acabar, ya que le fascinaba verme mis gestos al acabar . . . NO HERMOSA. . . HOY TE VOY A DISFRUTAR MUCHO! . . . . seguimos cogiendo en esa posición, cuando ahí si ella se soltó y me comenzó a decir PAPITO HERMOSO! QUE RICO QUE ME COJES CON ESA PIJA!!!
Pronto la tuve en la posición del perrito, y tuve que tener mucho autocontrol, ya que mi orgasmo comenzó a gestarse, por lo que nuevamente fui alternando la velocidad y profundidad de mis embestidas. . . En un momento dado, ella se recostó hacia adelante bajando su pelvis, siempre sin separarnos, y ahí comenzó ella a moverse . . . y créanme que me enloqueció como con sus movimientos pélvicos ella me cogía a mi! Realmente delicioso! Mis manos aprovecharon este momento para solazarse con ese culo hermoso, acariciando, apretándolo, amasándolo!
Cuando vi que mi orgasmo era inminente, cambiamos de posición nuevamente, y otra vez se acostó conmigo entre sus piernas, envaine mi pedazo en esa delicia de argolla, y comencé a darle con alma y vida. . . . caian de mi frente y corrían por mi pecho y espalda ríos de sudor, mientras sus manos me recorrían la espalda y me acariciaban integro! Increíblemente, las ganas de acabar se me habían ido, así que le regale cinco hermosos minutos de coger fuerte, frenético, profundo, fascinado por el bamboleo de esas tetazas que acompañaban violentamente cada embestida . . .ya sus gemidos se estaban convirtiendo en gritos, cuando sentí el orgasmo que empezó a crecer en la punta de mi pija, con una corriente que iba a mis huevos y volvía, en un crescendo delicioso y ardiente . . . Paré solo para asegurarme que el preservativo estaba bien, y ahí si, le di diez o quince embestidas y mi orgasmo explotó de una manera vibrante! Hermosa! Deliciosa!
Nos quedamos arrobados, abrazados, besándonos, riéndonos de felicidad de poder disfrutarnos una vez mas . . . y ahí Claudita me regalo algo que me fascina. . . con su concha me apretaba la pija como exprimiéndola! Me encantan las minas que pueden tener ese control de los músculos de la vagina! . . .
Charlamos . . . nos quedamos dormidos un rato, abrazados como dos gatitos . . . Pero lamentablemente la realidad nos llama a veces de manera dura. . . . Ella se tenía que ir. . . y en ese momento me planteó que sería la última vez que nos veríamos. . . ya que ella no se banca el vernos tan espaciadamente, y aparte también por mi situación de pareja. . . .
Me dejó en el centro, donde yo estaba alojado y quedamos en mantenernos en contacto.
Al otro día, cuando completé mis trámites, me fui a la terminal y conseguí boleto a Bahia Blanca para casi ese mismo instante, así que le mando un mensaje de texto que era una suerte de despedida. . . A lo cual me respondió que no quería despedirse, no quiere que cortemos mas, . . . y que está dispuesta a que sigamos viéndonos de este modo, pero que no quiere dejar de poder disfrutarme. No voy a negarlo, la noticia me satisfizo, ya que me encanta y disfruto mucho mis encuentros con ella,. . . . . Asi que seguramente, mis amig@s poringuer@s, creo que habrá mas relatos de Claudita!
Besos y abrazos a la comunidad!
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