Buenas a todos! Aquí estoy para traerles otra de mis experiencias. Antes que nada, agradecerles a todos los que me leen y me dejan tan bellos comentarios.
El relato de hoy se remonta a varios años atrás.
Era primavera y yo habia descubierto los placeres del sexo hacía no demasiado tiempo. Había estado de novia por algunos meses y él habia sido el primer novio con el que tenía sexo, por ende venía acostumbrada a una "rutina sexual" bastante constante, pero a la vez un tanto monótona.
Pocos días antes, habíamos decidido con Alan que lo nuestro no iba mas, y que lo mejor era cortar las cosas. Nos queriamos, estaba todo bien, pero creo que ambos estabamos buscando descubrir cosas nuevas con gente nueva y estabamos un poco cansados de la monotonía.
Yo iba a un colegio secundario en el que usabamos el típico uniforme de colegiala. Pollera a cuadros, camisa blanca. Para aquel momento mi cuerpo ya era similar a lo que es hoy en día, por lo cual tenía lo mío para mostrar y provocar. Empecé a acortarme un poco la pollera, y eventualmente me desabrochaba algun botón demás de la camisa, todo fuera para calentar a mis compañeros de clase. No se si buscaba particularmente cogermelos, sino que me encantaba ver como se ponian al palo viendo como se asomaba el lateral de mis tetas, o mostrándoles más pierna que lo normal.
Entre los pibes de mi división, la mayoría tenian demasiada pinta de pendejos todavia, y se comportaban como tales, lo cual no me atraía demasiado. Yo ya me sentía una mina madura lista para entregarme a quien quiciese disfrutarme y hacerme disfrutar.
Pero entre la tanda de boludos que se paseaban por mi aula cada día, había un distinto. Nicolás era flaco, alto, jugaba al rugby (lo cual lo habia dotado de un gran cuerpo). Casi no tenia relación con él, no nos hablabamos, a lo sumo nos saludabamos algun día pero no iba más allá de eso.
Aquel día de primavera iban a pasar cosas que me iban a cambiar la vida.
Estabamos en pleno recreo, cual pendejas, chusmeaando de cualquier pelotudez con mis amigas mientras los pibes jugaban al futbol. Mientras hablabamos, un pelotazo violento viajó desde la canchita improvisada de los pibes derechito hacia el hemisferio derecho de mi cara. Por supuesto ante tremendo pelotazo, entre el susto y el dolor me largue a llorar como una condenada. Al toque Se acercaron un par de los chicos a ver que me pasaba, mientras el resto de los presentes en el patio se meaban de risa de la pobre pelotuda a la que habian peloteado.Entre los que se acercaron estaba Nicolás, quien empezó a disculparse ya que habia sido él quien me había sacudido la cabeza con ese pelotazo. Vinieron un par de preeptores, me llevaron a enfermería, me revisaron, no tenía nada asi que me mandaron devuelta a clase.
A la salida del colegio, Nicolás volvió a acercarse. "Estas bien Mel?", "Sí, fue mas susto que el golpe en sí" le dije, haciendome la que no me importaba. Me dijo "Me siento como el orto, te deje en ridículo adelante de todos". "No te preocupes Nico, ya fue, esta todo bien". "Dejame acompañarte hasta tu casa por lo menos, se que vivis aca a un par de cuadras.". Acepté. No supe mucho en qué iba a cambiar las cosas, pero yo vivía literalmente a 3 cuadras del colegio por lo cual no iban a ser más de 5 minutos.
Mientras caminabamos, Nico fue sacando diversos temas de conversación. Se notaba que la situación era incómoda, no habiamos hablado casi nunca, no sabiamos casi nada de la vida del otro... Entre una cosa y otra, eventualmente llegamos al tema del noviazgo. Él me contó que habia estado de novio el año anterior pero que la había cagado a la novia varias veces y finalmente la novia terminó por engancharlo y lo mando a la mierda. "Me aburría demasiado tener sexo siempre con la misma mina" me dijo. Yo me quede perpleja. Días antes yo había cortado con mi ex, y esa era una de las principales razones. Por algun motivo me sentí aliviada, me sentí menos ninfómana, menos enferma, había alguien más que pensaba como yo...
Entonces me largué a hablar y le conté sobre mi ex y la razón por la que habiamos cortado. Entonces me dijo "La verdad, te lo tengo que decir, desde que cortaste con tu ex no se que hiciste, pero estas el doble de buena". "Qué???" le contesté. No me lo esperaba. No de el. Él no era así, no lo habia escuchado decir jamás algo así. Primero tuve ganas de putearlo, pero en algun punto me calentó lo que me dijo. Sólo atiné a responder con un histeriqueo "ay boludo, no me digas eso que me pongo colorada!". Me sonrió y yo naturalmente sonreí también. Nada era lógico, pero los 2 nos entendíamos perfecto. Cuando me dí cuenta estabamos en la puerta de mi casa ya hablando hacia como 15 minutos. Entonces le dije, que me tenía que ir, que me tenía que ir al médico (era cierto...) y le agradecí por acompañarme. No me dijo nada. Me miró y me estampó un beso, fue la primera vez que me besaban con esa pasión, con ese fuego. Mientras me besaba me apretó contra su cuerpo. Sentí como mis tetas se frotaban contra su torso, y su pija, por demás dura ya, se apoyaba en mi vientre. No debe haber durado más de 20 segundos, pero para mi fue una eternidad. Sentí que se encendían dentro mío millones de hogueras que me incendiaban el cuerpo. Luego, me soltó y me dijo "nos vemos mañana!". Y yo me quede parada como una estupida, mirandolo embobado mientras se iba. Me habia dado vuelta la cabeza.
Esa tarde después de volver del médico, me encerré en mi pieza y comencé a tocarme, me acariciaba todo el cuerpo pensando en el. Lentamente mi mano fue bajando y mis dedos comenzaron a rozar mi suave y sensible conchita. La exploraba, acariciaba cada centímetro de mi sexo, jugaba con mi clítoris lo que me generaba pequeños espasmos de placer, luego sentí curiosidad por meterme un dedo, lo hice, el placer fue inmenso, Lo movía lentamente dentro de mi conchita buscando los puntos de mayor placer. Luego un segundo dedo se incorporó al juego, mientras tanto mi mano izquierda se aferraba a mis pezones, los acariciaba, los pellizcaba. Pocos minutos despues sentí como si me prendieran fuego nuevamente, como lo había hecho Nicolás. Pensaba en él, pensaba en su cuerpo, pensaba en su boca, en su pija, lo deseaba. Aceleré el ritmo y casi instantaneamente mi concha se llenó de jugos que comenzaron a derramarse lentamente por entre mis dedos. Era la primera vez que me masturbaba con todas las letras.
Al día siguiente me levanté y fui al colegio, tenía la expectativa de que Nico se acercara a mí, que juguetearamos, que me propusiera algo. Nada. Ni nos saludamos, no me dirigió ni una sola mirada en todo el día. Salimos del colegio y yo fui para el lado de casa. Cuando había hecho una cuadra, derrepente alguien me agarró el brazo desde atrás. Me di vuelta, asustada, y era él, Nico. Lo miré, se me cortó la respiración. No pude decir nada. Él tampoco dijo nada. Me besó, tan apasionadamente como el día anterior. Me agarró la mano y me dijo "vení, en casa no hay nadie hasta las 8". Yo no entendia nada, más bien, si entendía, lo que no podía creer era lo que estaba haciendo. Me divertía hacerme la puta y calentar a todos, pero esto estaba más allá. Fuimos casi corriendo hasta su casa. El vivia a 10 cuadras para el otro lado. Fueron las 10 cuadras más eternas que caminé/corrí en mi vida. Mientras corría mis tetas se agitaban para arriba y para abajo. Los pezones rozaban la camisa a través de la fina tela de mi corpiño lo que hacía que se endurecieran. Estaba absolutamente caliente, excitada en cada rincón de mi cuerpo. Llegamos, abrió la puerta y me hizo pasar. Ahí nomás ni bien entramos, tiró su mochila al piso, yo hice lo mismo y nos entrelazamos en un beso eterno. Nuestras lenguas se encontraban, se recorrían. Nuestras manos, casi con desesperación trataban de recorrer todo el cuerpo del otro, como si quisieramos tener suficientes manos para tocar todo a la vez. Se sentó en una silla del comedor y me sentó a mi encima. Mi pollera, que ya estaba corta por demás, se levantó dejando expuesta mi conchita contra su pija. Nos frotamos un rato largo con la ropa puesta. Era como si ninguro se animara a dar el paso de desnudarnos. Entonces él me empezó a desabrochar la camisa. Le dije "No, pera, vamos a tu cuarto" A lo que me contestó "Te voy a hacer conocer toda la casa...". Dios mío, me volvió loca. Tenía un miedo bárbaro de que alguien entrara pero al mismo tiempo eso le agregaban adrenalina a la situación y me calentaba mucho mas.
Me arrancó la camisa y empezó a lamer mis tetas, me bajo el corpiño y mis duros y puntiagudos pezones quedaron expuestos a merced de sus lamidas. Mientras tanto nos seguiamos frotando, su pija cada vez mas dura, mi conchita cada vez mas mojada. Entonces me levantó de encima suyo, y se sacó el jogging y el boxer. Quedo expuesta una hermosa pija, no era enorme, era simplemente hermosa. Perfecta. Me quizo volver a sentar encima pero me zafé a la fuerza. Entonces me arrodille y sin dejar de mirarlo a los ojos me metí toda su pija en la boca. La tragué por completo. No paraba de mirarlo y él tampoco a mi. Teniamos los ojos clavados como dagas en la mirada del otro. Mientras, su pija se llenaba se saliva y yo cada vez la chupaba mas rapido y con mayor succión. Entonces casi con violencia me agarró, me alzó y me llevó contra una pared, puso mi espalda contra ella y con su mano derecha acomodo su pija en la entrada de mi joven conchita. Me dejó caer suavemente sobre toda la extensión de su pija que se introducía lentamente dentro mio. Podía sentir como toda esa carne dura presionaba contra los lados de mi concha llenándola por completo e inundándome de placer. Mientras me sostenía contra la pared su pija se clavaba cada vez más adentro, haciendome emitir unos intensos grititos de placer. Nuestras respiraciones estaban aceleradas y las gotas de sudor se escurrían entre nuestros cuerpos. Entonces me bajó, y me alzó llevándome hasta la mesa del living. Me acostó allí y abrió mis piernas para iniciar un periplo con su lengua en toda mi mojhada conchita. Me chupaba suavemente, introduciendo su lengua en mi conchita y sacandola para saborear mi clitoris. Estaba sintiendo cosas que no habia sentido jamás. En mi cuerpo se debatían el placer, la desesperación, y el deseo. Entonces me arrimó hacia el borde de la mesa y volvio a penetrarme por completo. Ahora con más firmeza, con mas brutalidad, arremetiendo con su pija contra mi conchita, haciendome gemir cada vez mas fuerte. "No pares Nico, cogeme así que me encanta" le decía, y el se volvía loco.
Luego de varios minutos de cogerme como loco sobre la mesa, volvió a alzarme y me llevó a la escalera que subia al entrepiso donde estaba su habitación. Me dijo "inclinate para adelante y arrodillate". Yo hice exactamente lo que me dijo. Estaba entregada a él, entregada al placer absoluto. Ni bien termine de arrodillarme, volvio a meter su pija dentro mio. Empezó a cogerme cada vez mas fuerte. Mi culo chocaba contra su vientre generando un ritmo continuo que acompañaba a ese garche infernal que me estaba regalando. Me agarraba de la cintura con una fuerza increible. Metía y sacaba toda su pija y yo sentía que mi clitoris estaba a punto de estallar. Jamás habia sentido tal placer en mi vida. Ese día descubrí que mi posición favorita era que me cojan en cuatro.
Siguió arremetiendo contra mi concha hasta que, casi involuntariamente, gemí de una manera infernal mientras mis piernas comenzaron a temblar y mis brazos tambien. Mi concha se mojó como nunca antes, sentía como todos esos jugos recorrían mi interior para salir deslizandose entre su pija mi cuerpo. Pero él no frenó ni por un segundo. Siguió cogiendome cada vez mas fuerte, entonces le dije "todavia tomo pastillas, quiero que me acabes adentro". Su cara se iluminó, y a la vez se enloqueció. Me empezó a coger mas y mas fuerte entonces me la sacó violentamente. me agarró y me puso con las manos contra la pared. Volvió a buscar con su pija mi conchita y otra vez todo su cuerpó se abalanzó sobre mi espalda, acompañando a su pija que se deslizaba con facilidad dentro de mi concha. "Acabame todo, Nico. Quiero que me dejes toda la concha acabada". Fue casi instantaneo. Me agarró con mas fuerza que nunca y arremetió una última vez soltando una inmensa bocanada de aire. Se quedo adentro mio mientras su pija latía y los chorros de leche se agolpaban contra el fondo de mi concha. hizo más presión contra mi todavia, largando una segunda tanda de chorros. Él se sentó en el sillón y le pregunte donde estaba el baño, fui a limpiarme y vi como las gotas de leche se escurrían por mi conchita y caían al piso. Me limpié, y volví al living.
Nos quedamos en silencio casi 2 horas, en el sillón, acariciandonos. Yo no sabia que decir. Estaba atónita. Estaba aturdida de placer. Al rato Nico me dijo "Mis viejos van a caer en cualquier momento, no queres vestirte?" Entonces le di un beso, me lo devolvió con creces. Me nalgueó un par de veces y me dijo "dale, que nos van a agarrar". Nos vestimos, me acompañó a la puerta y antes de despedirme me dijo "Me encantaría que sigas viniendo a ser mi putita". Otra vez estuve al borde de ofenderme, pero a quién le iba a mentir?... "Me muero de ganas" le dije.
Nos vimos unas 5 o 6 veces mas en las semanas siguientes. El sexo fue cada vez mejor. Yo me iba de su casa cada vez con más ganas de volver una próxima. Eventualmente llegó el verano, no nos vimos por 3 meses y cuando nos reencontramos, él estaba de novio y yo estaba saliendo con alguien, por lo que no volvimos a reincidir en nuestros encuentros.
Pero sin dudas, Nico fue el responsable de que descubriera mi profunda adicción al buen sexo.
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Este es mi primer post que se va a publicar en la pagina principal (creo...). Así que para todos los nuevos lectores, les dejo a continuación los links a mis otros relatos. Espero que los disfruten tanto como yo disfruté escribiéndolos y recordándolos.
Mi primera vez con 2 pijas! --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2480704/Mi-primera-vez-con-2-pijas-y-mi-primer-post.html
Consolando a Lara (Mi primera experiencia lésbica) --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2480910/Consolando-a-Lara-Mi-primera-experiencia-lesbica.html
Cogida por una bestia en las sierras cordobesas...--> http://www.poringa.net/posts/relatos/2481239/Cogida-por-una-bestia-en-las-sierras-cordobesas.html
Nada como un buen polvo en los medanos...--> http://www.poringa.net/posts/relatos/2481533/Nada-como-un-buen-polvo-en-los-medanos.html
H.S.A. (Hermoso Sexo Atipico). Capitulo I.--> http://www.poringa.net/posts/relatos/2483522/H-S-A-Hermoso-Sexo-Atipico-Capitulo-I.html
H.S.A. (Hermoso Sexo Atipico). Capitulo II. --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2484193/H-S-A-Hermoso-Sexo-Atipico-Capitulo-II.html
La vorágine de una aventura pasajera. --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2491852/La-voragine-de-una-aventura-pasajera.html
El relato de hoy se remonta a varios años atrás.
Era primavera y yo habia descubierto los placeres del sexo hacía no demasiado tiempo. Había estado de novia por algunos meses y él habia sido el primer novio con el que tenía sexo, por ende venía acostumbrada a una "rutina sexual" bastante constante, pero a la vez un tanto monótona.
Pocos días antes, habíamos decidido con Alan que lo nuestro no iba mas, y que lo mejor era cortar las cosas. Nos queriamos, estaba todo bien, pero creo que ambos estabamos buscando descubrir cosas nuevas con gente nueva y estabamos un poco cansados de la monotonía.
Yo iba a un colegio secundario en el que usabamos el típico uniforme de colegiala. Pollera a cuadros, camisa blanca. Para aquel momento mi cuerpo ya era similar a lo que es hoy en día, por lo cual tenía lo mío para mostrar y provocar. Empecé a acortarme un poco la pollera, y eventualmente me desabrochaba algun botón demás de la camisa, todo fuera para calentar a mis compañeros de clase. No se si buscaba particularmente cogermelos, sino que me encantaba ver como se ponian al palo viendo como se asomaba el lateral de mis tetas, o mostrándoles más pierna que lo normal.
Entre los pibes de mi división, la mayoría tenian demasiada pinta de pendejos todavia, y se comportaban como tales, lo cual no me atraía demasiado. Yo ya me sentía una mina madura lista para entregarme a quien quiciese disfrutarme y hacerme disfrutar.
Pero entre la tanda de boludos que se paseaban por mi aula cada día, había un distinto. Nicolás era flaco, alto, jugaba al rugby (lo cual lo habia dotado de un gran cuerpo). Casi no tenia relación con él, no nos hablabamos, a lo sumo nos saludabamos algun día pero no iba más allá de eso.
Aquel día de primavera iban a pasar cosas que me iban a cambiar la vida.
Estabamos en pleno recreo, cual pendejas, chusmeaando de cualquier pelotudez con mis amigas mientras los pibes jugaban al futbol. Mientras hablabamos, un pelotazo violento viajó desde la canchita improvisada de los pibes derechito hacia el hemisferio derecho de mi cara. Por supuesto ante tremendo pelotazo, entre el susto y el dolor me largue a llorar como una condenada. Al toque Se acercaron un par de los chicos a ver que me pasaba, mientras el resto de los presentes en el patio se meaban de risa de la pobre pelotuda a la que habian peloteado.Entre los que se acercaron estaba Nicolás, quien empezó a disculparse ya que habia sido él quien me había sacudido la cabeza con ese pelotazo. Vinieron un par de preeptores, me llevaron a enfermería, me revisaron, no tenía nada asi que me mandaron devuelta a clase.
A la salida del colegio, Nicolás volvió a acercarse. "Estas bien Mel?", "Sí, fue mas susto que el golpe en sí" le dije, haciendome la que no me importaba. Me dijo "Me siento como el orto, te deje en ridículo adelante de todos". "No te preocupes Nico, ya fue, esta todo bien". "Dejame acompañarte hasta tu casa por lo menos, se que vivis aca a un par de cuadras.". Acepté. No supe mucho en qué iba a cambiar las cosas, pero yo vivía literalmente a 3 cuadras del colegio por lo cual no iban a ser más de 5 minutos.
Mientras caminabamos, Nico fue sacando diversos temas de conversación. Se notaba que la situación era incómoda, no habiamos hablado casi nunca, no sabiamos casi nada de la vida del otro... Entre una cosa y otra, eventualmente llegamos al tema del noviazgo. Él me contó que habia estado de novio el año anterior pero que la había cagado a la novia varias veces y finalmente la novia terminó por engancharlo y lo mando a la mierda. "Me aburría demasiado tener sexo siempre con la misma mina" me dijo. Yo me quede perpleja. Días antes yo había cortado con mi ex, y esa era una de las principales razones. Por algun motivo me sentí aliviada, me sentí menos ninfómana, menos enferma, había alguien más que pensaba como yo...
Entonces me largué a hablar y le conté sobre mi ex y la razón por la que habiamos cortado. Entonces me dijo "La verdad, te lo tengo que decir, desde que cortaste con tu ex no se que hiciste, pero estas el doble de buena". "Qué???" le contesté. No me lo esperaba. No de el. Él no era así, no lo habia escuchado decir jamás algo así. Primero tuve ganas de putearlo, pero en algun punto me calentó lo que me dijo. Sólo atiné a responder con un histeriqueo "ay boludo, no me digas eso que me pongo colorada!". Me sonrió y yo naturalmente sonreí también. Nada era lógico, pero los 2 nos entendíamos perfecto. Cuando me dí cuenta estabamos en la puerta de mi casa ya hablando hacia como 15 minutos. Entonces le dije, que me tenía que ir, que me tenía que ir al médico (era cierto...) y le agradecí por acompañarme. No me dijo nada. Me miró y me estampó un beso, fue la primera vez que me besaban con esa pasión, con ese fuego. Mientras me besaba me apretó contra su cuerpo. Sentí como mis tetas se frotaban contra su torso, y su pija, por demás dura ya, se apoyaba en mi vientre. No debe haber durado más de 20 segundos, pero para mi fue una eternidad. Sentí que se encendían dentro mío millones de hogueras que me incendiaban el cuerpo. Luego, me soltó y me dijo "nos vemos mañana!". Y yo me quede parada como una estupida, mirandolo embobado mientras se iba. Me habia dado vuelta la cabeza.
Esa tarde después de volver del médico, me encerré en mi pieza y comencé a tocarme, me acariciaba todo el cuerpo pensando en el. Lentamente mi mano fue bajando y mis dedos comenzaron a rozar mi suave y sensible conchita. La exploraba, acariciaba cada centímetro de mi sexo, jugaba con mi clítoris lo que me generaba pequeños espasmos de placer, luego sentí curiosidad por meterme un dedo, lo hice, el placer fue inmenso, Lo movía lentamente dentro de mi conchita buscando los puntos de mayor placer. Luego un segundo dedo se incorporó al juego, mientras tanto mi mano izquierda se aferraba a mis pezones, los acariciaba, los pellizcaba. Pocos minutos despues sentí como si me prendieran fuego nuevamente, como lo había hecho Nicolás. Pensaba en él, pensaba en su cuerpo, pensaba en su boca, en su pija, lo deseaba. Aceleré el ritmo y casi instantaneamente mi concha se llenó de jugos que comenzaron a derramarse lentamente por entre mis dedos. Era la primera vez que me masturbaba con todas las letras.
Al día siguiente me levanté y fui al colegio, tenía la expectativa de que Nico se acercara a mí, que juguetearamos, que me propusiera algo. Nada. Ni nos saludamos, no me dirigió ni una sola mirada en todo el día. Salimos del colegio y yo fui para el lado de casa. Cuando había hecho una cuadra, derrepente alguien me agarró el brazo desde atrás. Me di vuelta, asustada, y era él, Nico. Lo miré, se me cortó la respiración. No pude decir nada. Él tampoco dijo nada. Me besó, tan apasionadamente como el día anterior. Me agarró la mano y me dijo "vení, en casa no hay nadie hasta las 8". Yo no entendia nada, más bien, si entendía, lo que no podía creer era lo que estaba haciendo. Me divertía hacerme la puta y calentar a todos, pero esto estaba más allá. Fuimos casi corriendo hasta su casa. El vivia a 10 cuadras para el otro lado. Fueron las 10 cuadras más eternas que caminé/corrí en mi vida. Mientras corría mis tetas se agitaban para arriba y para abajo. Los pezones rozaban la camisa a través de la fina tela de mi corpiño lo que hacía que se endurecieran. Estaba absolutamente caliente, excitada en cada rincón de mi cuerpo. Llegamos, abrió la puerta y me hizo pasar. Ahí nomás ni bien entramos, tiró su mochila al piso, yo hice lo mismo y nos entrelazamos en un beso eterno. Nuestras lenguas se encontraban, se recorrían. Nuestras manos, casi con desesperación trataban de recorrer todo el cuerpo del otro, como si quisieramos tener suficientes manos para tocar todo a la vez. Se sentó en una silla del comedor y me sentó a mi encima. Mi pollera, que ya estaba corta por demás, se levantó dejando expuesta mi conchita contra su pija. Nos frotamos un rato largo con la ropa puesta. Era como si ninguro se animara a dar el paso de desnudarnos. Entonces él me empezó a desabrochar la camisa. Le dije "No, pera, vamos a tu cuarto" A lo que me contestó "Te voy a hacer conocer toda la casa...". Dios mío, me volvió loca. Tenía un miedo bárbaro de que alguien entrara pero al mismo tiempo eso le agregaban adrenalina a la situación y me calentaba mucho mas.
Me arrancó la camisa y empezó a lamer mis tetas, me bajo el corpiño y mis duros y puntiagudos pezones quedaron expuestos a merced de sus lamidas. Mientras tanto nos seguiamos frotando, su pija cada vez mas dura, mi conchita cada vez mas mojada. Entonces me levantó de encima suyo, y se sacó el jogging y el boxer. Quedo expuesta una hermosa pija, no era enorme, era simplemente hermosa. Perfecta. Me quizo volver a sentar encima pero me zafé a la fuerza. Entonces me arrodille y sin dejar de mirarlo a los ojos me metí toda su pija en la boca. La tragué por completo. No paraba de mirarlo y él tampoco a mi. Teniamos los ojos clavados como dagas en la mirada del otro. Mientras, su pija se llenaba se saliva y yo cada vez la chupaba mas rapido y con mayor succión. Entonces casi con violencia me agarró, me alzó y me llevó contra una pared, puso mi espalda contra ella y con su mano derecha acomodo su pija en la entrada de mi joven conchita. Me dejó caer suavemente sobre toda la extensión de su pija que se introducía lentamente dentro mio. Podía sentir como toda esa carne dura presionaba contra los lados de mi concha llenándola por completo e inundándome de placer. Mientras me sostenía contra la pared su pija se clavaba cada vez más adentro, haciendome emitir unos intensos grititos de placer. Nuestras respiraciones estaban aceleradas y las gotas de sudor se escurrían entre nuestros cuerpos. Entonces me bajó, y me alzó llevándome hasta la mesa del living. Me acostó allí y abrió mis piernas para iniciar un periplo con su lengua en toda mi mojhada conchita. Me chupaba suavemente, introduciendo su lengua en mi conchita y sacandola para saborear mi clitoris. Estaba sintiendo cosas que no habia sentido jamás. En mi cuerpo se debatían el placer, la desesperación, y el deseo. Entonces me arrimó hacia el borde de la mesa y volvio a penetrarme por completo. Ahora con más firmeza, con mas brutalidad, arremetiendo con su pija contra mi conchita, haciendome gemir cada vez mas fuerte. "No pares Nico, cogeme así que me encanta" le decía, y el se volvía loco.
Luego de varios minutos de cogerme como loco sobre la mesa, volvió a alzarme y me llevó a la escalera que subia al entrepiso donde estaba su habitación. Me dijo "inclinate para adelante y arrodillate". Yo hice exactamente lo que me dijo. Estaba entregada a él, entregada al placer absoluto. Ni bien termine de arrodillarme, volvio a meter su pija dentro mio. Empezó a cogerme cada vez mas fuerte. Mi culo chocaba contra su vientre generando un ritmo continuo que acompañaba a ese garche infernal que me estaba regalando. Me agarraba de la cintura con una fuerza increible. Metía y sacaba toda su pija y yo sentía que mi clitoris estaba a punto de estallar. Jamás habia sentido tal placer en mi vida. Ese día descubrí que mi posición favorita era que me cojan en cuatro.
Siguió arremetiendo contra mi concha hasta que, casi involuntariamente, gemí de una manera infernal mientras mis piernas comenzaron a temblar y mis brazos tambien. Mi concha se mojó como nunca antes, sentía como todos esos jugos recorrían mi interior para salir deslizandose entre su pija mi cuerpo. Pero él no frenó ni por un segundo. Siguió cogiendome cada vez mas fuerte, entonces le dije "todavia tomo pastillas, quiero que me acabes adentro". Su cara se iluminó, y a la vez se enloqueció. Me empezó a coger mas y mas fuerte entonces me la sacó violentamente. me agarró y me puso con las manos contra la pared. Volvió a buscar con su pija mi conchita y otra vez todo su cuerpó se abalanzó sobre mi espalda, acompañando a su pija que se deslizaba con facilidad dentro de mi concha. "Acabame todo, Nico. Quiero que me dejes toda la concha acabada". Fue casi instantaneo. Me agarró con mas fuerza que nunca y arremetió una última vez soltando una inmensa bocanada de aire. Se quedo adentro mio mientras su pija latía y los chorros de leche se agolpaban contra el fondo de mi concha. hizo más presión contra mi todavia, largando una segunda tanda de chorros. Él se sentó en el sillón y le pregunte donde estaba el baño, fui a limpiarme y vi como las gotas de leche se escurrían por mi conchita y caían al piso. Me limpié, y volví al living.
Nos quedamos en silencio casi 2 horas, en el sillón, acariciandonos. Yo no sabia que decir. Estaba atónita. Estaba aturdida de placer. Al rato Nico me dijo "Mis viejos van a caer en cualquier momento, no queres vestirte?" Entonces le di un beso, me lo devolvió con creces. Me nalgueó un par de veces y me dijo "dale, que nos van a agarrar". Nos vestimos, me acompañó a la puerta y antes de despedirme me dijo "Me encantaría que sigas viniendo a ser mi putita". Otra vez estuve al borde de ofenderme, pero a quién le iba a mentir?... "Me muero de ganas" le dije.
Nos vimos unas 5 o 6 veces mas en las semanas siguientes. El sexo fue cada vez mejor. Yo me iba de su casa cada vez con más ganas de volver una próxima. Eventualmente llegó el verano, no nos vimos por 3 meses y cuando nos reencontramos, él estaba de novio y yo estaba saliendo con alguien, por lo que no volvimos a reincidir en nuestros encuentros.
Pero sin dudas, Nico fue el responsable de que descubriera mi profunda adicción al buen sexo.
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Este es mi primer post que se va a publicar en la pagina principal (creo...). Así que para todos los nuevos lectores, les dejo a continuación los links a mis otros relatos. Espero que los disfruten tanto como yo disfruté escribiéndolos y recordándolos.
Mi primera vez con 2 pijas! --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2480704/Mi-primera-vez-con-2-pijas-y-mi-primer-post.html
Consolando a Lara (Mi primera experiencia lésbica) --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2480910/Consolando-a-Lara-Mi-primera-experiencia-lesbica.html
Cogida por una bestia en las sierras cordobesas...--> http://www.poringa.net/posts/relatos/2481239/Cogida-por-una-bestia-en-las-sierras-cordobesas.html
Nada como un buen polvo en los medanos...--> http://www.poringa.net/posts/relatos/2481533/Nada-como-un-buen-polvo-en-los-medanos.html
H.S.A. (Hermoso Sexo Atipico). Capitulo I.--> http://www.poringa.net/posts/relatos/2483522/H-S-A-Hermoso-Sexo-Atipico-Capitulo-I.html
H.S.A. (Hermoso Sexo Atipico). Capitulo II. --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2484193/H-S-A-Hermoso-Sexo-Atipico-Capitulo-II.html
La vorágine de una aventura pasajera. --> http://www.poringa.net/posts/relatos/2491852/La-voragine-de-una-aventura-pasajera.html
26 comentarios - Descubriendo mi adicción...
Muuuy caliente!
Me encanta como escribis!
Gracias por compartir
me re gusto!
van puntos.