Mi tía Lili (1ra parte)

Esto pasó hace muchos años, yo era muy joven, las hormonas se me salían hasta por las orejas, aunque mayormente por la pija en forma de pajas, que eran repetidas hasta que casi no podía caminar.

Me llamaban la atención todas las mujeres, vecinas, compañeras de clase, madres de amigos, hermanas de amigos, todo era válido para encerrarme en algún lado, darle rienda suelta a la imaginación y cascármela como un mono. Pero la que se llevaba la mayoría de mi “amor propio” era mi tía Liliana

Lili, como le decíamos, debía tener en esa época 36 o 37 años, estaba casada con un primo hermano de mi padre, ya tenía dos hijos, pero era hermosísima (o con el enamoramiento que yo tenía la veía así)… era de baja estatura, rubia, terribles ojos azules, linda cola, y un par de melones que me enloquecían. Los veranos en la playa cuando andaba haciendo cosas de la casa en traje de baño provocaban mi deshidratación láctea

Algún verano atrás, ellos se habían ido de vacaciones y yo había quedado encargado de cuidar su casa, lo que me permitía con la excusa de ir a regar las plantas, mirar tele, leer libros para grandes, andar desnudo por el patio para cascármela cuando quisiera, o sea “living la vida loca”.
Una de esas tardes se me dio por revisar la cómoda de la habitación de mis tíos, y encontré lo que pensaba, mi tía había dejado algo de su ropa interior, y tuve por primera vez una bombacha bien chiquitita. Por supuesto estaba limpia, pero yo la olía y estaba seguro que tenía un poco de su aroma… jajajaja que tiempos aquellos, no se como no me salieron ampollas en la poronga

Para complicar más mi situación, Lili era especialmente cariñosa conmigo, creo que un poco se aprovechaba de mi cara de carnero degollado cuando la miraba, pero muchas veces me abrazaba y yo sentía que iba a estallar.

Muchas veces yo iba a su casa, porque tenían enciclopedias, y revistas, y me facilitaban las cosas para el estudio.
En aquellas épocas, en mi ciudad y en mi barrio durante el día no se cerraban las casas con llave, así que lo normal era que yo entrara directamente a su casa, hacía un poco de ruido para que se enteraran que entrara, sobre todo después de una vez que entré y la tía estaba solo en bombacha colgando ropa del tendal… pegó un grito cuando me vió y salió corriendo, yo me había quedado duro (en todos los sentidos) y me volví muy avergonzado (y muy caliente) a mi casa.
Al rato la llamó a mi vieja diciendo que quería hablar conmigo, yo estaba por morirme, pero me pidió que fuera a su casa, no le dijo nada a mi madre, cuando llegué toqué timbre, atendió muerta de risa y diciéndome, “antes tenías que tocar timbre, boludo, no ahora”
Yo seguía asustadísimo, y le pedía perdón, y le decía que había sido sin querer, y ella se reía y me ponía peor. En un momento me dice, “bueno, pará, parece que hubieras visto un monstruo”, nooo, le dije, que monstruo tía? Sos lindísima; ahí se puso seria y me dijo “gracias, corazón. Y te pido un favor, esto tiene que ser un secreto entre los dos, porque si se entera tu tío me mata. Me lo prometés? Ssssi tía, por supuesto.
Y todo quedó ahí. Yo a partir de ahí estaba el 80 % del tiempo recordando que linda se veía casi desnuda.
Pasó un tiempo y una tarde que voy a su casa, entro y la llamo (para ser justo, no demasiado fuerte, siempre esperaba que la tía estuviera colgando ropa otra vez), no contestó nadie, volví a llamar, entré a la cocina, ni un ruido se oía pero había algunas cosas tiradas, me asusté bastante. Llamé de nuevo y de pronto me pareció escuchar sollozos que venían de su cuarto. Fui con algo de temor y la encontré boca abajo en la cama llorando. Tía que te pasó? . Nada me dijo, y por que estás llorando? Porque soy una tarada. No seas tonta, que pasó?
Se dio vuelta refregándose los ojos y le ví una mejilla algo morada. Se sentó en la cama tapándose la cara y me dijo “pasa que tu tío es un hijo de puta; discutimos y me pegó… otra vez…”
Yo no lo podía creer, sabía que él tenía carácter fuerte, pero de ahí a pegar a una mujer, y su mujer; era una locura
Yo lo único a lo que atiné fue a abrazarla y ella apoyó la cabeza en mi hombro. A pesar de la situación no podía sacarle la vista a su escote. Tratando de hacerme el superado le decía que se calmara, que no valía la pena. Y de pronto comenzó a hablar sin parar, que ya no la quería, que hacía mucho tiempo que cuando tenían sexo parecía que la violaba, que era todo violencia, que aguantaba sólo por mis primos, que se sentía horrible, que ya no aguantaba más
Yo la seguía abrazando, ella levanta la cabeza, me dice gracias mi amor, y me da un beso en la mejilla y apenas se aparta, yo me quedé mirándole la boca como un estúpido, y en ese momento me besa en la boca suavemente. Yo no sabía que hacer, me tomó la cara entre sus manos y me preguntó si era virgen. Le dije que sí, je, a mi edad en esa época casi no había chances de no ser virgen.
Me dijo “hoy me decidí a cagarlo a tu tío, y me gustaría hacerlo con vos. Se que te gusto, que sabés guardar secretos y yo estoy desesperada porque me quieran. Querés ser mi amante?
No me caí de la cama de milagro. “yo estoy loco por vos, Lili; vivo pensando en la vez que te ví casi desnuda, claro que quiero ser tu amante (aunque no sabía muy bien que era eso)
- Cerrá con llave, y dejala puesta
Fui corriendo, volví y la tía me estaba esperando de pie, me quedé parado en el marco de la puerta y me dijo que fuera, que la abrazara fuerte, me rodeó el cuello con sus brazos, y comenzó a besarme. Primero suavemente y luego su lengua entró en mi boca, que cálida era, y supuse que yo tenía que hacer algo parecido, me acariciaba la nuca y gemía despacito (tan mal se ve que no lo estaba haciendo).

(continuará)