el tren de ida

Hace un tiempo viajaba todos los dias en tren a capital por razones laborales, como es de publico conocimiento es agotador dada las demoras del electrici y el pesimo funcionamiento de las formaciones, en fin pasado ya varias semanas de viajar todos los dias habia muchas caras q veia con frecuencia, entre esas una chica muy bonita de nomas de veintetres años, una belleza de mujer q atraia muchas miradas, rubia, delgada, bonitos pechos, una cadera muy sensual al igual que sus piernas, llebava puesto una blusa blanca que transparentaba su brassier, una falda negra bien pegada a su figura resaltando una hermosa y redonda.cola, tacos negros haciendo juego con su falda.
Ante la demora ya rutinaria del tren me deleitaba apreciando a pocos metros tan hermosa figura, encendi un cigarrillo para calmar las ansias de la espera mientras seguia mirandola, de pronto veo q sus ojos se quedan fijadia en mi y seguido noto una sonrisa picara con esa carita de nenita angelical, sonrio y con un leve gesto ofresco un cigarrillo, ella asintio con su cabeza y empezo a caminar lentamente hacia mi, moviendo esas piernas delgadas excelentemente torneadas, la veia y nno podia dejar de pensar en ver ese precioso cuerpo desnudo, llega a mi y convido el cigarrillo ofrecido, lo cual ella agradece, le pregunto cual era el nombre de tan hermosa silueta y tan hermosi rostro a lo q responde sonriente gracias soy rocio y vos?.
-yo: pablo, para donde vas rocio?
-ro: a once a trabajar y vos?
-y: igual q vos, hasta once y de ahi subte para ir a trabajar.
La charla continuo varios minutos contandonos de los trabajos y de dobde vivia cada uno, en eso llega el tan esperado tren, como de costumbre lleno de personas el anden que se matan por subir, subimos y quedamos bastante apretados, cosa q a mi no me molestaba, estabamos de frente casi con los cuerpos pegados, a mi me excitaba demasiado la situacion y trataba de simular no estarlo, charlabamos pero a cada movimiento o frenada en estacion nuestros cuerpos quedaban aun mas apretados, seguimos varias estaciones hasta q en una bajo mucha gente y subio mucha mas, quedando esta vez de espaldas a mi, la situacion era mas excitante que antes, podia sentir el roce de sus nalgas a la vez que le hablaba muy cerca del oido, sentia esa fragancia que emanaba se perfume de mujer, en un momento, de tanto movimiento mi ereccion se hizo evidente cuando el tren frena y sin quererlo apoyo toda mi ereccion en sus nalgas, ells reacciono diciendome en voz baja, parece que tu amigo se desperto, quede inmovil y solamente sonrei, al cabo de unos minutos llegamos a nuestro destino, bajamos yo ocultando mi ereccion con la mano en el bolsillo, ella sonreia picaramente mientras caminabamos y charlabamos, a es mi ereccion disminuyo, nos despedimos y me dice la pase muy bien en el viaje con vos, le dije que lo podiamos continuar yendo a tomar algo por ahi a lo que contestó que no podia llegar tarde a su trabajo y que si nos volviamos a encontrar en una de esas podia ser y se despidio de mi saludandome con un beso en la mejilla.
Estuve todo el dia pensando en lo ocurrido y excitado por esa situacion pero a la vez apenado por no llegar a concretar nada, despues de una jornada intensa de trabajo en la oficina retomo mi camino de vuelta a casa, cansado y fastidiado, esperanzado en ver a rocio otra vez, pero tal cosa no paso, los dias siguientes esperaba con ansias verla pero ella no aparecia, con el correr de losdiad mis esperanzas se esfumaban quedando en mi solamente aquel viaje excitante y ese recuerdo fugaz de aquella germosa muchacha, habian transcurrido casi veinte dias de esa vez, llego esa mañana a la estacion y a lo lejos la veo, mi rostro se ilumino y mi adrenalina comenzo a subir rapidamente, comienzo a acercarme y noto que esta conversando con un hombre asi que decido seguir caminando y quedarme cerca, dude en ese momento que haya notado mi presencia, llego el tren y subi al mismo vagon que ellos, no podia dejar de mirarla su belleza me embriagaba, de repente me mira y sonrie, no sabia que hacer si saludarla o hacerme el otro, asi que opte solamente por sonreirle, cuando llegamos a la estacion y bajaron todos veo que ella habla con su acompañante y este asiente con la cabeza y sigue su paso, ella queda parada mirandome, me acerco y la saludo, ella correspondio el saludo pero con un beso en mis labios el cual me hizo generar mucha confusion la situacion y le pregunte que si su novio la veia se iba a armar quilombo, ella riendo me dice es mi hermano tonto, xq no vamos a tomar algo ya q lo tenemos pendiente, ni hablar me debes por tanto tiempo de espera, me conto que habia salido de vacaciones por eso no la habia vuelto a ver, salimos de la estacion y nos fundimos en un apasionado y excitante beso, al oido le dije quevayaramos a un telo que me estaba matando la excitacion y me dice aa mi tambien bombon, llegamos al hotel, en el cuarto me dispuse a q ese momento fuera unico, la besaba y recorria con mis manos ese cuerpo sensual, esa piel suave y sedosa, ahi estabamos los dos, desvistiendonos lentamente entre besos y caricia, nuestros cuerpos se juntaban nuestros labios se derretian ante el calor de la agitada respiracion, las manos parecian tentaculos cubriendo cada rincon de nuestro cuerpo, nuestras miradas se fijaban como si nos conocieramos de años, eramod uuno dentro de ese cuarto de hotel testigo de una mañana de lujiria que solamente dos amantes conocen, parados recorri dulcemente cada rincon de su cuerpo, sus pechos redondos con los pezones rosados erectos hacian que mi boca se sumerjiera en ellos provocando en ella una extrema excitación, recorria su abdomen besandolo suavemente mientras mis manos no dejaban de recorrer sus piernas, fue asi que llegue a su sexo, ahi estaba perfectamente depilado, rosado, lubricado de la excitacion, lo bese, lo lami, lo hice mio, sentia el placer q le generaba, su cuerpo se retorcia, ella suspiraba, senti su intenso orgasmo recorrer mis labios y lengua.
Comence a subir lentamente, bese sus labios, sus ojos entrecerrados, senti sus manos recorrer mi cuerpo, comenzo a masturbarme mientras q sl oido decia quiero tenerte dentro mio, asi fue que quede arriba de ella penetrandola sutilmente, disfrutando cada movielmiento, cada roce y mirada, nos fundimos en un interminable orgasmo quedando rendidos en esa cama que arropaba nuestroscuerpos cansados, nos vestimos mutuamente y al salir de alli nos despedimos con un hermoso y apasionante beso, desde aquel dia nos vimos frecuentemente manteniendo nuestra pasion intacta hasta que me tuve que mudar por razones laborales y no volvi a verla ya han pasado varios aaños de esto y todavia cuando la recuerdo puedo sentir ese perfume que tan hermosa mujer emababa.



Gracias a todos por leer y comentar