Yesica era una niña del Barrio que en buena hora había alcanzado la mayoría de edad, digo, porque ella ya de adolescente había sido dueña de una figura que nos daba para pensar en nuestra psiquis y perversión a más de uno. Tenía todo en su justa medida pero lo que más destacaba en ella era los pechos super desarrollados, le digo, yo que tuve la suerte de tenerlos, con las dos manos sostenías cómodamente uno.
Compartiamos muchos momentos en las tiendas del barrio, en las paradas del colectivo, en la calle principal de la ciudad. La que más me gustaba era cuando los Sábados a la noche yo me iba de un amigo y pasaba por la casa de ella y la veía salir en Remis al boliche; minifalda, remeras escotadas pronunciadas gracias a los corpiños gigante y resistentes, pelito lacio y suelto hasta la cintura, pintada como buen gato. Siempre yo volvía a mi casa y con un poco de culpa y morbosidad, imaginaba sin fin de situaciones en la que le terminaba llenando los pechos de leche, después de que me hacia ricas mamadas.
Por eso, el día que tocó el timbre de casa, preguntando si acá vivía alguien que sabía historia yo le dije rotundamente si. No es que no sepa historia, mi título así lo acredita, lo que si no preparo alumnos a domicilio. Ella necesitaba entrar a la facultad y si bien en las materias era buena, tenía problemas con Sociedad y Estado, así que no negué mi ayuda, además, que más linda fantasia que la del estudiante profesor y todos con edad para tenerla.
link: http://www.youtube.com/watch?v=aKNXeTvXbsY
Habia venido vestida sobriamente, una remera común, un pantalon de Jean normal, el pelo recogido en un rodete, claramente se había tomado en serio eso de aprender, no obstante, tenía algo que me enloquecía, por momentos, se ponía el lapiz en la boca y lo hacía girar...para un pajero como yo, eso era demasiado.
También de vez en cuando cuando no entendía algo, me llamaba y con su voz de queriendo obtener la respuesta porque soy buenita, me hacía preguntas sencillas que me llamaban mucho la atención, entonces, yo me acercaba miraba la fotocopias y más o menos le explicaba, mientras lo hacía ella miraba atentamente mordiéndose el labio, cosa que acompañaba con un leve movimiento de piernas. No veía sus manos sobre las mesa y ya me había empezado a caminar los ratones, empecé a pensar en que le gustaba mi voz y se tocaba disimuladamente cuando me escuchaba.
Con mucho esfuerzo volvía mi relato pero ya había perdido la atención y de a poco, sentía como la sangre se agolpaba en mi miembro. La deje resolviendo unas incógnitas y fui al baño a calmarme, cuando volví la encontré plenamente abstraida con la cabeza apoyada en la mesa, respirando entrecortado y moviendo sus piernas, me acerque sigilosamente y le toque el hombro..
-ah papi...
Contemple la escena, los pantalones desabrochados, sus manos en su vagina, efectivamente, Yesica se había adelantado en la fantasía, no obstante, freno de golpe e intento sacar la mano como si no pasaba nada, por suerte, su panza divina le trabo el intento. me acerque al oido y comencé a decirle...
-Segui tranquila, yo me voy....
Di media vuelta y me tomó la mano, comenzó a besarla, mientras que me levantaba la remera con la mano libre que se había desastascado del pantalon...sentí su flujo en mi panza...me libre de su mano y me baje los pantalones, mi pija salió dura de adentro...ella, desde su asiento comenzó a chuparla, primero la cabeza y luego descendía hasta abajo, donde hacía un leve movimiento de derecha a izquierda para volver a subir....
a medida que crecia la exitación lo hacía más rapido y yo me ponía más violento, así que en una de esas que llegó hasta abajo, la tomé del rodete y no la dejé subir...sus ojos se abrieron de par en par, sus fosas nasales instinstivamente absorvieron todo el aire y se relajo su cabeza...se había dado cuenta de que le gustaba mamar profundamente y que no era peligroso, lo repitió dos o tres veces...podría haberlo hecho más, pero yo le retiré su dulce...
con la pija bien dura, a punto de estallar, le quite la remera...un sostén deportivo tenía la dura tarea de sostener esos dos gigantes. Ahí juntitos se me presentaban...los empecé a lamer como helado, ella me sostenía la cabeza y con su manito me fue invitando a su cuello...me arrodillé para esta más cómodo....mientras seguía con el juego colé hasta tres dedos...el flujo salía descontroladamente....liberé el corpiño y dos melones cayeron, cada uno por sus caminos golpeándome el pecho....me incorporé y se prendió de mi pija....mis intensiones eran penetrarla...pero la de ella no...siguió chupando constantemente de arriba abajo, las tetas a veces aplaudían otras me castigaban las piernas.
estaba cerca, podía sentirlo, para dar el toque final, quise tomar la teta con una mano, solo logre tocarle el pezón duro...se tiro para atras y mi pija pego el latigazo......un chorro fue a las fotocopias....pero el resto se lo encauzó en el cuello....mientras se apoyaba en el respaldo...veía mi leche caer entre las tetas de yesica...
-si apruebo te entrego mi conchita.
Compartiamos muchos momentos en las tiendas del barrio, en las paradas del colectivo, en la calle principal de la ciudad. La que más me gustaba era cuando los Sábados a la noche yo me iba de un amigo y pasaba por la casa de ella y la veía salir en Remis al boliche; minifalda, remeras escotadas pronunciadas gracias a los corpiños gigante y resistentes, pelito lacio y suelto hasta la cintura, pintada como buen gato. Siempre yo volvía a mi casa y con un poco de culpa y morbosidad, imaginaba sin fin de situaciones en la que le terminaba llenando los pechos de leche, después de que me hacia ricas mamadas.
Por eso, el día que tocó el timbre de casa, preguntando si acá vivía alguien que sabía historia yo le dije rotundamente si. No es que no sepa historia, mi título así lo acredita, lo que si no preparo alumnos a domicilio. Ella necesitaba entrar a la facultad y si bien en las materias era buena, tenía problemas con Sociedad y Estado, así que no negué mi ayuda, además, que más linda fantasia que la del estudiante profesor y todos con edad para tenerla.
link: http://www.youtube.com/watch?v=aKNXeTvXbsY
Habia venido vestida sobriamente, una remera común, un pantalon de Jean normal, el pelo recogido en un rodete, claramente se había tomado en serio eso de aprender, no obstante, tenía algo que me enloquecía, por momentos, se ponía el lapiz en la boca y lo hacía girar...para un pajero como yo, eso era demasiado.
También de vez en cuando cuando no entendía algo, me llamaba y con su voz de queriendo obtener la respuesta porque soy buenita, me hacía preguntas sencillas que me llamaban mucho la atención, entonces, yo me acercaba miraba la fotocopias y más o menos le explicaba, mientras lo hacía ella miraba atentamente mordiéndose el labio, cosa que acompañaba con un leve movimiento de piernas. No veía sus manos sobre las mesa y ya me había empezado a caminar los ratones, empecé a pensar en que le gustaba mi voz y se tocaba disimuladamente cuando me escuchaba.
Con mucho esfuerzo volvía mi relato pero ya había perdido la atención y de a poco, sentía como la sangre se agolpaba en mi miembro. La deje resolviendo unas incógnitas y fui al baño a calmarme, cuando volví la encontré plenamente abstraida con la cabeza apoyada en la mesa, respirando entrecortado y moviendo sus piernas, me acerque sigilosamente y le toque el hombro..
-ah papi...
Contemple la escena, los pantalones desabrochados, sus manos en su vagina, efectivamente, Yesica se había adelantado en la fantasía, no obstante, freno de golpe e intento sacar la mano como si no pasaba nada, por suerte, su panza divina le trabo el intento. me acerque al oido y comencé a decirle...
-Segui tranquila, yo me voy....
Di media vuelta y me tomó la mano, comenzó a besarla, mientras que me levantaba la remera con la mano libre que se había desastascado del pantalon...sentí su flujo en mi panza...me libre de su mano y me baje los pantalones, mi pija salió dura de adentro...ella, desde su asiento comenzó a chuparla, primero la cabeza y luego descendía hasta abajo, donde hacía un leve movimiento de derecha a izquierda para volver a subir....
a medida que crecia la exitación lo hacía más rapido y yo me ponía más violento, así que en una de esas que llegó hasta abajo, la tomé del rodete y no la dejé subir...sus ojos se abrieron de par en par, sus fosas nasales instinstivamente absorvieron todo el aire y se relajo su cabeza...se había dado cuenta de que le gustaba mamar profundamente y que no era peligroso, lo repitió dos o tres veces...podría haberlo hecho más, pero yo le retiré su dulce...
con la pija bien dura, a punto de estallar, le quite la remera...un sostén deportivo tenía la dura tarea de sostener esos dos gigantes. Ahí juntitos se me presentaban...los empecé a lamer como helado, ella me sostenía la cabeza y con su manito me fue invitando a su cuello...me arrodillé para esta más cómodo....mientras seguía con el juego colé hasta tres dedos...el flujo salía descontroladamente....liberé el corpiño y dos melones cayeron, cada uno por sus caminos golpeándome el pecho....me incorporé y se prendió de mi pija....mis intensiones eran penetrarla...pero la de ella no...siguió chupando constantemente de arriba abajo, las tetas a veces aplaudían otras me castigaban las piernas.
estaba cerca, podía sentirlo, para dar el toque final, quise tomar la teta con una mano, solo logre tocarle el pezón duro...se tiro para atras y mi pija pego el latigazo......un chorro fue a las fotocopias....pero el resto se lo encauzó en el cuello....mientras se apoyaba en el respaldo...veía mi leche caer entre las tetas de yesica...
-si apruebo te entrego mi conchita.
5 comentarios - Yesica la tetona
Buen relato