Me gustaba mi preceptor de 30 años. Siempre iba provocativa para él pero no funcionaba...Hasta que un día me mandaron a dirección por contestar a la profesora. Él me pregunta que hice ahora y yo le digo lo de siempre mordiéndome el labio. De repente me apoye sobre el escritorio y le sonreí, él se quedo mirando fijamente mis pechos, nuestras miradas estaban cada ves más cerca, podíamos sentir nuestras respiraciones, de un momento a otro me aparte di la vuelta por el escritorio, y me senté sobre él, el gimió al sentir el contacto de mi feminidad con su miembro, lo bese y empezó a pasar sus manos por mi trasero, aún no podía creer lo que estaba ocurriendo, pero no me interesaba ya lo tenia a mis pies, en fin él se paro y cerró la puerta con llave, me apoyo sobre el escritorio, comenzó a sacarme la musculosa y luego me saco el brazier, empezó a masajear uno de mis pechos, mientras que el otro se lo metía a la boca, daba pequeños mordiscos mientras pasaba su mano por debajo de mi falda.
Gemí, él se mordió los labios y bajo hacia mi falda, me la quito y paso su mano por mis bragas, me las quito y comenzó a lamer mi feminidad, yo solo gemía, se alejo y comenzó a meter dos dedos dentro de mi, mientras me besaba, bajaba desde mis labios hacia mi cuello dejando leves marcas y luego mis pechos masajeándolos y llevándoselos a la boca. Dejo de meterme dos dedos dentro de mi feminidad y se los llevo a la boca.
Se separo de mi y lo di vuelta, lo deje sobre mi escritorio y me senté sobre sus caderas, mientras dabas leves saltos sobre su miembro, le iba sacando botón por botón su camisa, mientras el gemía, logre sacarle su camisa y me baje de él, le saque su pantalón y pude ver su notable erección, su miembro estaba duro. Pase mi mano por la tela fina de su boxer y él dio un gran grito, le saque su boxer y comencé a masturbar su miembro... Pero antes de que pudiera llevármelo a la boca golpearon la puerta, nos vestimos rápidamente y era un alumno, me escondí y luego que se fuera me despedí con un largo beso y me dijo "esto no termino" y me hizo una sonrisa pícara.
Gemí, él se mordió los labios y bajo hacia mi falda, me la quito y paso su mano por mis bragas, me las quito y comenzó a lamer mi feminidad, yo solo gemía, se alejo y comenzó a meter dos dedos dentro de mi, mientras me besaba, bajaba desde mis labios hacia mi cuello dejando leves marcas y luego mis pechos masajeándolos y llevándoselos a la boca. Dejo de meterme dos dedos dentro de mi feminidad y se los llevo a la boca.
Se separo de mi y lo di vuelta, lo deje sobre mi escritorio y me senté sobre sus caderas, mientras dabas leves saltos sobre su miembro, le iba sacando botón por botón su camisa, mientras el gemía, logre sacarle su camisa y me baje de él, le saque su pantalón y pude ver su notable erección, su miembro estaba duro. Pase mi mano por la tela fina de su boxer y él dio un gran grito, le saque su boxer y comencé a masturbar su miembro... Pero antes de que pudiera llevármelo a la boca golpearon la puerta, nos vestimos rápidamente y era un alumno, me escondí y luego que se fuera me despedí con un largo beso y me dijo "esto no termino" y me hizo una sonrisa pícara.
0 comentarios - Solo quedaron las ganas.