Sol, mi primita misionera (4) Llegó el pete!

Bueno, estuve con mucho trabajo y algunos problemitas personales, pero hoy decidí retomar esto ya que les prometí algo que no estaba cumpliendo y lo mío no es la política. Igualmente voy a tratar de ser breve y dos veces bueno.
Luego de haber tenido varias experiencias sexuales con mi primita, habitante temporal de mi casa lo que más quería era sentir sus dulces labios sobre mi miembro y ella no me daba el gusto.
Sol se sentía insegura con miedo a hacerlo mal, hacerme doler y yo tratando de convencerla que la práctica hace a la petera experta…
Como ella quería hacerlo en un jacuzzi nos fuimos a garchar a un telo aprovechando que terminé temprano de trabajar, después de un hermoso polvo en la cama fuimos al jacuzzi a cumplir su fantasía, pero yo seguía pensando que me faltaba el pete y todo era parte del plan, asique antes de mojarme puse el canal porno en la tele. Después de sacarnos la calentura y que ella cumpla su fantasía me quedé mirando la tele, no pasaron ni 5 minutos cuando mostraron a una morocha bien zorra con un par de gomas muy bien hechas, chupándole la pija a un pelado (que me hacía sentir poco dotado).

-Ves primita, no es tan jodido!
-Siempre insistiendo con lo mismo Santy.
-Es que hay una sola forma para pararme.
-Ya me di cuenta.

Se ofendió un poco, pero al rato garchamos otra vez y nos fuimos a casa.

Acá empieza la historia en sí, al día siguiente, mi prima seguía buscando laburo, pero me ayudaba con algunas cosas de mi trabajo personal desde la PC de mi casa. Yo soy bastante tecnómano y me gusta tener mis archivos siempre a mano, pero no me gustan los “Discos Virtuales” tipo Dropbox, entonces dejo la compu de casa prendida y me conecto con un programa remotamente.
Le había dejado a Sol para que me haga un presupuesto de una reforma de una casa y para el laburo ella usa la misma compu, sino tiene su notebook que anda medio medio porque tiene sus años.
Pasado el medio día me conecté a la compu para ver el presupuesto y pasárselo al cliente, busqué el archivo, me lo transferí y cuando estaba por cerrar sesión vi que había una ventana del Google Chrome en incógnito. La vi y eran videos de petes. Mi mente ya estaba flasheando. Cerré rápido la sesión y volví a mi trabajo o al menos traté de volver a el.
Llegué a casa y estaba todo normal, Sol no se había percatado que me di cuenta en lo que andaba. La saludé y me fui a pegar una ducha, como casi siempre al volver del trabajo. Mientras me duchaba pensaba en como me calienta esta pendeja, estaba vestida con una calza negra y una musculosa pegadita al cuerpo. Salí con el toallón en la cintura. En mi habitación me estaba esperando Sol.

-Hola primito, hice un curso online y quiero probar a ver si aprendí algo. –Dijo mientras me sacaba el toallón y me tiraba desnudo sobre la cama.
-¿Un curso online? ¿Y qué aprendiste?
-No se si aprendí, vos me vas a decir si se algo o no.
-¡Rinda examen entonces!

Mi pija no tardó ni 2 segundos en ponerse en posición de batalla y Sol me atacó con su boca directo al cuello y empezó a bajar, evadió mi pija y empezó a besarme los muslos, a morderme suavemente hasta que después de dar varias vueltas le pasó la lenguita a mi pija mientras me miraba a los ojos, bien putita y yo estaba completamente en llamas.

-¿Querés que tela chupe primito?
-Si, por favor.
-¿Por favor qué?
-Chupame la pija primita, por favor.
-Así si primito, pero avísame cuando estés por acabar.

Empezó a meterse la pija en la boca y la chupaba realmente muy bien para ser su primera vez, la zorra debe haber visto un centenar de videos y copiaba lo que había visto, una genia total.
Se la metía en la boca, la lamía, me chupaba los huevos, me pajeaba mientras la besaba, realmente me volvía loco hasta que estaba por explotar, le avisé, pero no me largó la pija y se tragó toda la leche, yo quedé tirado en la cama con una sonrisa en el rostro que creo que todavía no se me borró.

-¿Te gustó primito?
-Me encantó Sol.
-¿Aprobé?
-Con un 10 primita, muy bien 10.

Despues de unos minutos pude retomar el control de mi cuerpo y empencé a tocarla, le saqué la calza y la tanguita y me dediqué a chuparle bien la conchita hasta que le devolví el favor.
Nos quedamos dormidos tirados en mi cama, ella aun con el torso cubierto.

Salió bien putita la primita…